Hola a todos, este es un fic en el que llevo demasiado tiempo pensando, así que si es parecido o con cosas similares a otros es pura coincidencia.
Alexandergodsleyer, escribió un fic con el mismo tipo de narración que yo, pero digo en este momento que la idea principal de este fic es mía y no un plagio como todos creerán .Como él subió primero que yo la historia le debo los derechos de autor.(auque la idea es mía)
Como siempre digo RESIDENT EVIL NO ES MIO si lo fuera no estaría escribiendo esto si no que seria millonario y hubiera hecho mejores película que las asquerosidades que hicieron..
1.- Realidad y ficción
-¿Cuando debemos saber la diferencia entre realidad y ficción, o mejor dicho ¿sabemos cuando es cada cosa?
No es mucha la gente que se pone a pensar en esto, si no que es muy poca la que de verdad se lo ah preguntado, pero que sacamos con saber la respuesta cuando ni siquiera sabemos cuando estamos en la realidad verdadera.
¿Creen que esta es su verdadera realidad, ¿sabes si este es su verdadero mundo?...De que sirve saberlo si sabes que en ambas nunca vas a ser feliz.
La felicidad… es algo dinámico, quiero decir que es algo que cambia constantemente, pero ¿saben ustedes que es realmente la felicidad, quizás es mejor no saberlo… sino que sentirlo...
En mi realidad las cosas no son como a mi me gustaría que fueran, sin embargo hay cosas que me agradan como hay otras que no.
Mi casa era pequeña, pero muy confortable, allí era donde dormía y comía, la extraño mucho desde que todo comenzó…
Esto empezó un día como cualquier otro, despertándome temprano en la mañana, tomando desayuno, yendo a la escuela, en la cual no es muy grato estar a causa de mis compañeros… ¿Pero de que me sirve recordar todos esos momentos?
Alomejor es por que nunca olvidare esos días en donde estaba en mi verdadero hogar, ¿pero que estoy diciendo?
-¿Este es mi hogar?-….
-si, lo es.-
- ¿Y como puedo saber eso?-
-Tu lo deseaste ¿no?-
-¿Por qué?-
-la odiabas-
-¿Qué?-
-Tu realidad-
-¡MENTIRA!-
-Es cierto-
-No…-
Todo en mi realidad era distinto, no había que estar asustado todo el tiempo…si no fuera por ella, no estaría vivo. Pero a cambio sacrifique otras vidas, ¿Por qué?.
Bueno ahora ya no puedo arrepentir, ese fue el camino que elegí y todavía creo que elegí bien.
Como entre en esta pesadilla… todavía no me lo explico…pero así empezó todo.
El sonido del helicóptero me despertó rotundamente de mi sueño, estaba con todos los demás miembros del UBCS de UMBRELLA. No se como había llegado hasta ese helicóptero ni mucho menos el como había terminado siendo miembro de ese escuadrón kamikaze.
Pero lo que mucho menos me explicaba era el porque existía ese escuadrón en el mundo si ni siquiera había una corporación llamada UMBRELLA INC .Esa compañía era únicamente de un videojuego (mi favorito).
Mientras yo me hacia todas estas preguntas en un mar de pensamientos, los demás estaban escuchando las ordenes que uno de los superiores les daba. El tipo nos enviaba a rescatar ciudadanos dentro de la ciudad, cosa que me pareció raro así que pregunté a mi compañero de equipo que rayos pasaba.
Me sorprendí y asuste cuando supe que la ciudad estaba en crisis y en toque de queda, iba seguir preguntándole cosas pero repentinamente escuchamos la orden de saltar y comenzar la operación.
Sin pensarlo dos veces tome la cuerda y rápidamente salte del helicóptero, cayendo tácticamente en medio de la crisis y euforia de la gente que transitaba por ese lugar.
Veía como todos los otros se iban rápidamente en direcciones cruzadas, al parecer iban en equipos de a tres. Yo, como no me movía Salí corriendo rápidamente sin dirección
Aparente.
No me explicaba los que le pasaba a todos, y mucho menos el por que yo estaba hay en un sitio que no conocía y vestido como militar… Todo era un caos en mi cabeza.
Entre en un Hotel que parecía desabitado y lo estaba, así que tome cualquier llave de habitación .Subí por el ascensor y tome la primera habitación del segundo piso .
Estaba desordenada y con un olor muy desagradable, pero no importaba ya que iba a estar hay solo para descansar y aclarar mi mente.
Sentado en la cama empecé a hacer memoria de todo lo que me había sucedido antes de despertar en el helicóptero militar. Solo recordaba que me había sentado frente a la computadora y me había quedado dormido mientras que leía algo de lo de costumbre.
Eso era lo único que recordaba… pensé que esto era un sueño, ojala lo hubiera sido.
Me pellizque el brazo para comprobar si es que estaba soñando o ¿no?. Dolió mucho y al mismo tiempo me sentí un tonto por creer en esas estupideces de niño…me di cuenta que no estaba soñando, si no que estaba en otro lugar. La pregunta era ¿en donde demonios me encontraba?
Para colmo de todo ni siquiera parecía estar en mi ciudad natal o por ultimo en alguna conocida.
Para calmar mis nervios fui lentamente al baño para lavarme la cara y así refrescar mi cabeza, que ya me estaba empezando a doler por tanto pensar.
Mire al espejo y vi mi rostro, pero no era el mismo que recordaba, este se veía mas viejo como si tuviera 20 años o mas. Se notaban algunas arrugas que yo no recordaba así como también una madures que notaba en la mirada…
Mis ropas no eran las mismas que recordaba, estaba vestido con uniforme militar…Iba con pantalón verde de camuflaje, unos guantes para disparar, una polera un poco mas clara que el pantalón junto con una chaqueta negra con el signo de UMBRELLA en la espalda… ¿Qué rayos hacia hay ese símbolo?... ¿Por que estaba vestido así? … la última ropa que recordaba era mi uniforme del colegio…
A pesar de la ropa había algo que pesaba en la chaqueta y que no me había dado cuenta que estaba hay, era una cuchilla de combate de forma recta y con una punta perpendicular hacia la derecha dejando todo filo en la parte recta en la punta, además de tener un mango color plateado, era muy liviana y apta para el combate cuerpo a cuerpo.
Pero la cuchilla no era lo único que había en la chaqueta negra, en uno de los bolsillos especiales para armamento había dos granadas (de las de forma cilíndrica). No me sorprendí tanto al verlas por que ya me había hecho la idea de que era un soldado… ¿pero por que era un soldado, ¿Por qué sentía que estaba destinado a estar donde estaba?...
A pesar de que había sacado las granadas de la chaqueta igual seguía un poco pesada y estaba seguro que no era por que estaba hecha para igualar a la dureza de una contrabalas. No me equivoque había otra cosa mas, una pequeña radio negra con la frecuencia de la misma escrita al reverso.
La lancé hacia la cama para después tratar de pedir ayuda… ¿ayuda y para que?...No lo sabia pero hablar con alguien me iba a tranquilizar un poco.
En el cinturón del pantalón sentí que había unas cosas molestándome al moverme de izquierda a derecha, revise y note que tenía una pistola enfundada y unos cargadores en el otro extremo del pantalón.
Desenfunde la pistola y la revise minuciosamente.
Era una SIGPRO SP2009 con el signo de UMBRELLA en ella, como era un fanático de las armas la desmonte fácilmente para ver si estaba dañada o le faltaba algo… Era toda de plástico así que era muy fácil manejarla. Revise si tenia balas en el cargador, este estaba lleno con sus quince balas, mas otra en la cámara lista para dispararse.
Al ver de nuevo el pantalón me di cuenta que tenia dos clips mas, con quince balas también y en el pequeño bolso que llevaba en la pierna derecha tenia unas cuantas balas mas sueltas.
Además de los dos clips de pistola tenia en la bandolera, había un cargador con balas OTAN de 5,56mm , estaba al 100 de su carga. ¿Pero por que tendría yo un cargador así? … Fue precisamente en ese instante que recordé que había dejado en la puerta de la habitación mi rifle el cual sostuve todo el tiempo solo por la inercia de no saber donde mierda estaba…
Volví a sentarme en la cama, con más preocupaciones que con la calma que había ido a buscar allí…
Mire hacia la entrada y vi hay "mi" rifle M4A1, levemente inclinado y apoyado en la puerta.
Me recosté en la cama con las manos en mi nuca pensando en el porque estaba en esa maldita ciudad sin saber ni siquiera como se llamaba ni como había llegado allí.
El silencio de las calles era algo perturbador, quería dormir pero tenia un mal presentimiento si lo hacia…
De pronto se escucharon unos pasos no muy fuertes, eso solo significaba una cosa… que no estaba completamente solo como creía…
¿Quién seria la que estaba en el pasillo?...
Lo único que tenía claro que era una chica por que sus pasos no eran muy largos ni tampoco muy cortos como para ser de un niño, además de que no sonaban muy pesados como para ser de chico…
Me levante para ir a preguntar en donde diablos estaba y que estaba pasando en esta desdichada ciudad.
Deje todo sobre la cama y salí al pasillo solo con mi pantalón y la polera con las mangas arremangadas a la altura del codo.
Al levantarme me di cuenta que mi estado físico tampoco era el mismo que recordaba, yo únicamente era delgado y de contextura maceteada (o sea de hombros anchos pero de cuerpo delgado) pero ahora tenia un poco mas de musculatura en el abdomen y brazos, lo que me hizo sentirme bien conmigo mismo.
Cuando abrí la puerta un aire fétido me golpeo la cara, era tanto el hedor a putrefacción que casi vomité al instante pero me retuve, trate de mirar quien andaba a esas altas horas de la noche (eran mas o menos las cinco y media de la madrugada)…
Mire atentamente hacia el lado del ascensor y no había nada ni nadie, solo el rastro de olor putrefacto. Dirigí mí vista hacia el otro extremo del pasillo y note que había una chica de cabello largo parada dos puertas más allá. La llame pero al parecer no me escucho… La volví a llamar, pero ni siquiera reacciono de una forma a lo cual yo entendería que me había escuchado, así que decidí ir por ella para preguntarle personalmente... ¿era extraño ver a alguien en medio de la nada? Eso fue lo único que me pregunte al verla allí parada sin acción alguna.
Fui lentamente hacia su encuentro con un muy mal presentimiento de todo lo que estaba pasando…
Antes de salir de la habitación había guardado la cuchilla en la parte trasera de la bandolera de mi cintura, solo por precaución.
A cada paso que me acercaba a ella el olor a muerto y carne podrida se hacia mas fuerte.
- ¡Hey tu!-dije un poco asustado por el movimiento de lado a lado que hacia su cuerpo.
-¡Oye tu, si la chica! –volví a insistir, acercándome un poco mas.
-¿Estas bien?-pregunte quedándome quieto por un momento…
-¿Me escuchas?- volví a preguntar mientras me acercaba otro poco.
Me puse cerca de su espalda con el cuchillo listo para atacar si era necesario., pero lo único que hice fue volver a insistir.
Mientras mas me acercaba más fuerte era el olor a carne descompuesta y más ganas tenia de vomitar…
-¿Te encuestaras bien?-
-¿Te duele algo?-dije tocándole el hombro por la espalda.
-……!-
Cuando le toque el hombro para ver si estaba bien se dio vuelta rápidamente y se lanzo sobre mí, lanzando mi cuchillo a dos metro de mi posición y dejándome entre la muralla y su mutilada cara…
-¡¿Pero que demonios!-dije tratando de sacarla de encima de mi con la ayuda de mis brazos.
La tenia tomada de los hombros para que no pudiera acercarse a mi cuerpo… no podía creer lo que estaban viendo mis ojos.
La chica era un monstruo… lo que alguna vez pudo ser una hermosa chica ahora era un desperpejo humano, tenia la rostro totalmente mutilado y su largo cabello negro lograba ocultárselo un poco pero desde mi posición podía ver claramente sus ojos blancos que no demostraban alma alguna.
Su única prenda era una camisa de dormir, la cual estaba empapada de sangre pero no estaba rota.
Mientras forcejeaba con ella me di cuenta que tenia una única herida en el cuerpo y era un mordisco de "algo" lo que la había dejado en ese estado, pero no tenia tiempo de pensar que era lo que había pasado con ella, tenia que acabarla o ella me acabaría antes…
Tenia miedo… nunca había matado algo o alguien en mi vida(a excepción de insectos y cosas por el estilo)
-¿Por qué la mate?-
-Por que tenías que hacerlo-
-¿Y si no lo hubiera Hecho?-
-¿Estarías vivo?-
-Pe..pero ella…-
-Ella ya estaba muerta-
-Pero todavía reaccionaba-
-Pero solo sus acciones primarias: comer y moverse-
-¿Por qué estoy aquí, ¿Por qué?...
-Tú lo deseaste…
La batalla para con ella seguía sin tregua aparente hasta que tome la iniciativa y deje de pensar en cosas innecesarias…
Su aliento golpeaba secamente en mi cara sin dejarme respirar tranquilamente, lo que me estaba empezando a alterar innatamente.
Sin dar previo aviso la lance fuertemente contra el suelo, pero la endemoniada, no tardo mucho en incorporarse nuevamente…
-Esto no puede estar pasando…-me dije a mismo.
-Es solo mi imaginación…
-No, esto es la realidad…- dije ya habiendo dado una solución para la pregunta: en donde me encontraba
-¿Por qué estoy aquí?-
La chica se abalanzo nuevamente, pero ahora en dirección hacia mi hombro izquierdo, pero alcance a reaccionar lanzándome en dirección hacia mi arma en el suelo. La recogí y me puse en guardia rápidamente con la cuchilla apuntando hacia atrás y con el mango hacia delante.
Mi enemigo se abalanzo en contra de mi pierna derecha, pero con un salto hacia atrás esquive su ataque, viendo que había seguido de largo alcancé a conectar una patada en su nuca dejándola así plasmada en el piso. Esto no fue suficiente ya que se estaba levantando de nuevo, fui corriendo hacia ella y la volví a patear solo que ahora fue en las costillas. No contenta con eso se levanto otra vez.
-¿Por qué no te mueres de una puta vez!-dije casi al borde de la locura.
Mis manos y piernas estaban templando por el miedo y por los nervios al tamaña monstruosidad, lo único que me mantenía peleando era la adrenalina.
Ahora fui yo quien se lanzo al ataque encarando a ese monstruo que parecía una chica de mas o menos 15 años… ahora solo le esperaba descansar en paz, por que ya estaba muerta.
Al momento que se levantó ensarte la cuchilla en su cuello empujándola y acorralándola contra la muralla.
-¡MUERE MALDITA PUTA!- dije gritando como un maniático.
La zombi tomo mis manos tratando de librarse de la encrucijada en la cual la tenía pero solo lograba asustarme más y provocar más ira en mí.
-¡MUERE, MUERE, MUERE….MUEREEEE!- ya estaba al borde de la locura a causa de la alta adrenalina.
Saque el arma de su cuello y note que todavía seguía viva (por decirlo de algún modo) y comencé a darle estocadas en el pecho y el abdomen… Mi cara y mis manos estaban llenos de sangre, pero no era la mía si no que era de ella, de la que estaba siendo brutalmente acuchillada por mi…
-¿Fui yo quien la mato…?-
-¿Quien más podría haberlo hecho?-
-¿fuiste tú?-
-Yo soy tú –
-No, yo no soy así…-
-Acéptalo eres un asesino innato-
-¿Asesino? –
-Si, tú adoras matar a los demás…-
-MIENTES…-
-Amas la sangre…-
-La odio…-
-Pero no me puedes negar que te encanta verla fluir de los demás…-
-…..-
-Adoras la expresión de dolor en la cara de los demás cuando se están desangrando, ¿no?-
-¿Quien eres?-
-Soy tu-
-¿yo?-
Eso trascurría en mi cabeza mientras veía a la niña como se desangraba en el piso, su expresión de dolor me daba asco… pero al mismo tiempo me gustaba…
Regrese a la habitación dejando hay el cadáver de la chica a quien pensaba preguntar donde me encontraba… no lo pregunte pero igual lo supe, no lo quería aceptar pero todos los cabos se estaban uniendo perfectamente.
Al parecer me encontraba en un mundo alterno al mió el cual yo conocía casi tanto como el de donde venia, pero… No se me era posible encontrarle una lógica a esto ¿Cómo podía estar encerrado en un juego de video?
-¿Realmente estoy aquí?-dije con voz sonora.
Las piernas todavía me temblaban y las manos parecían un témpano por que la sangre todavía la tenía congelada. Mi adrenalina todavía estaba muy alta y me hacia estar tenso, tanto eso no era una de mis mayores preocupaciones…
-¿RESIDENT EVIL?... jajaja- reí únicamente por que ni yo mismo me lo creía
No me explicaba el por que de esta expresión pero ese era el único lugar que conocía en donde pasaban todas estas cosas.
Entré en la habitación por la cual había salido, tomé el rifle de asalto de la puerta y cerré esta con llave desde dentro, solo por precaución…
-Helicóptero militar- empecé a nombrar-UBCS-
-Una ciudad aloquecida-seguí…- zombis-
-Umbrella…-
Y algo me saco repentinamente de mis digavaciones era un calendario con la fecha de ese mismo día marcado con un plumón rojo:
-¿Qué…?-
-No pue..de ser…cierto-
Lo que vi casi me saca de mis casillas nuevamente…
-Hoy es 27 de septiembre de 1998-
Eso quería decir varias cosas, primero, que de verdad estaba metido dentro del juego video mas terrorífico de todos los tiempos, segundo, que si estaba de verdad en el video juego tenia que encontrar rápido una salida y/o helicóptero de rescate, tercero, que tenia que descartar la idea de encontrarme con Leon y Cleire por que ellos ya se habían ido de la ciudad (por que el RE2 sucede 2 días antes que el 3) , cuarto, que tenia que darme prisa si quería encontrarme con Jill, por que sin ella no creía poder sobrevivir y salir de esa maldita ciudad , y sexto, que estaba en RACCOON CITY y eso significaba que esa zombi que había matado no era la única de su especie así que tenia que estar preparado para muchos otros como ella mas unas cuantas cosas mas…
-Esto no es un sueño… pero ¿por que estoy aquí?-
-¿Como llegue?
-Por que tú quisiste…-
Mi cabeza cada vez estaba mas confundida… No sabia que tenia que hacer y menos lo que era posible de hacer, ya que este no era un videojuego en donde podía corre infinitamente, tampoco podía estar seguro que los zombis no eran lo único que estaba caminando por esa ciudad maldita…
-Tendré que escapar de alguna forma u otra- me dije
Sabiendo que si salía de esa habitación tendría que enfrentar cuanta abominación existía en esa desdichada ciudad.
Tampoco me podía quedar mucho tiempo en la habitación…
Tenía dos opciones:
-Quedarme hay hasta que alguna cosa sorprendentemente pasara, un Helicóptero o algo así pudiera sacarme de hay… Eso nunca sucedería.
- Buscar a Jill y seguir su Historia… La pregunta era ¿en donde diablos se encontraba ella en estos momentos?
Como iba a saber yo como encontrarla si no conocía la ciudad, mas que por algunos sectores que me sabia de memoria…
Que ironía, yo estaba intentando buscar la solución para salir de una ciudad que ni si quiera sabia si estaba o no en ella.
Me senté por un momento, intente tranquilizarme pero solo logre inquietarme más…
Así pasaron casi dos horas en las cuales casi logre conciliar el sueño, no lo logre, pero a cambio me calme hasta el punto de enfriar mi mente y por decirlo de algún modo "adaptarla" para lo que se venia.
Me hice la idea de que podía morir o vivir según yo lo estimara y si la suerte me acompañara…
Vi el reloj mural y me asombre por la hora, eran ya las 7:43 de la mañana.
-¡Me voy!- reafirme en voz alta.
Había empezado ya a vestirme y equiparme para salir de la habitación, pero un ruido de golpe me asusto haciendo que accionara el gatillo de mi pistola, esta se disparó en contra de la cama, note que era muy fácil de maniobrar y que su retroceso no era el que me esperaba… Me agradecí que me tocara esa pistola y no otra mas pesada, esa era la elección correcta para novatos y yo no era precisamente un profesional con las armas.
El ruido venia en dirección de la puerta, la estaban golpeando desde fuera y por como sonaba no me demostraba que era alguien que quisiera hablar conmigo…
Me asome por el ojal de esta…
Lo que vi me aterro hasta el punto de hacerme caer sentado. Todo el valor que había reunido en esas dos horas se había desecho completamente.
Lo que había tras esa puerta eran mas o menos 7 zombis tratando de tirarla, lo mas probable es que me hayan olido y vinieron a por mi. Pero yo no les iba a dejar tocarme con sus asquerosas manos.
Puse lo mas rápido que pude la cómoda que estaba cerca de la entrada, para así bloquear auque sea por un instante el avance de las criaturas. Estos estaban que tiraban la puerta así que decidí armarme de valor y tomar mis armas.
La puerta callo igual, no creía lo que veían mis ojos, la que liderada a la tropa de zombis era precisamente la chica a la cual yo había matado, o por lo menos eso creía yo.
Tan pronto como atravesó la entrada desenfunde mi SIGPRO, saque el seguro, pero al apuntar me tiritaban las manos… el miedo me corroía, tan solo el ver su desfigurado rostro mis piernas temblaban de una forma inconcebible.
La zombi estaba ahora tan cerca mió que ni siquiera tenia que estirar los brazos para alcanzar mis hombros y así morder mi desprotegido cuello.
Mi mente se nublo y no pude ni pensar lo que estaba haciendo cuando ya lo había hecho…
La inercia…
-¿Así le llamas tú?-
-Así se llama la fuerza que nos hace movernos sin que nuestro cerebro o subconsciente nos informe de lo estamos haciendo…-
-Acéptalo, tu instinto asesino fue quien te ordeno hacer lo que hiciste… -
-Puede ser…-
Sin haberlo notado había puesto el cañón de mi pistola debajo del mentón de la chica. Únicamente mis ojos veían como mi cuerpo se movía "solo", mis dedos apretaron el gatillo haciendo accionar el martillador y dejando escapar la bala de 9mm Parabellum dentro de la cabeza de la chica zombi. Esta se reventó dejándome ver todo su interior…
Todavía no me explico cuando puse la pistola debajo de rostro y mucho menos que lo me impulso a hacer lo que hice.
Los demás zombis ya habían sacado de su camino la cómoda que les deje, se acercaban lentamente…
Lo que mas me impresionaba de estos zombis era su olor, era totalmente asqueroso, casi vomité al sentir tantos olores distintos que provenían de esas criaturas. Además de su olor sus rostros eran más horripilantes de lo que recordaba en el juego…
-Esto no es un juego…- me dije a mismo
Esas cosas se acercaban más y mas, no creía poder vencerles… pero no me rendiría sin haber empezado.