Amazonas salvaje
Iniciar desde cero
Toda la familia y sus amigos, emprendieron un largo viaje, para encontrar el clan oculto de los guacamayos azules, fue un recorrido largo y peligroso, bueno solo para Blu.
Al llegar se encontraron con la existencia del clan, Blu también se llevó su sorpresa, encontró a su suegro, Eduardo quien no le agrado que él tuviese relaciones con los humanos y al amigo de la infancia de Perla, Roberto, un gran ejemplar de guacamayo, que dejaba atrás a Blu, en todos los aspectos físicos, llenándolo de celos.
La presión de todos y del líder del clan, aislaron a Blu, dejándolo solo con el afecto de su familia.
-Vamos, Blu no te desanimes- Dijo Perla para animar a Blu –Solo necesitas un poco de tiempo, para adaptarte-volvió a comentarle mientras ponía una ala en su espalda.
-Necesito un respiro, iré a dar una vuelta por los alrededores-dijo Blu en respuesta al comentario de Perla.
Emprendió el vuelo, al rato llego cerca de unas cataratas, al mismo instante que freno el vuelo empezó a dialogar, consigo mismo.
-Siempre, siempre, que algo hago bueno para ella, me pasa algo malo a mí, el padre de Perla me odia, todo el clan me odia y aparece este tal Roberto, con enorme atractivo, como el espécimen ideal, ya estoy harto de todo esto-decía Blu en voz alta mientras caminaba sin sentido de un lado para el otro "Hasta creo que la selva me odia" argumentando nuevamente.
-veo que no tienes un buen día- dijo una voz misteriosa.
-No solo eso, todo el tiempo que estoy aquí, siempre es igual, todos me odian- dijo Blu en respuesta.
-Menuda suerte, te odian y con ganas- Dijo la voz misteriosa a Blu.
Paso un corto tiempo hasta que Blu se diera cuenta de quien estaba charlando con él.
-Espera, ¿Quién eres, donde estás?-Pregunto Blu un poco asustado.
-Yo, soy un simple observador, y estoy por todas partes, por aquí, por allá, en cualquier lado- le respondió la voz misteriosa "Descuida no te preocupes, yo no soy nada a lo que puedas temer"
-Miedo, yo, te informo que yo sé todo respecto a la selva-decía Blu de manera pausada.
-Por cierto, veo que estas en mucho conflicto, escuche todo lo que estabas diciendo anteriormente y tengo una solución- volvió a comentarle la voz misteriosa.
-Y, ¿en qué podrías ayudarme?- pregunto otra vez Blu.
-Mira tú, implementas mucho tus conocimientos de ciencia, siempre andas calculando probabilidades, peligros, y es tanto lo que haces, que simplemente te vez como una patética ave domesticada, y eso no les cae bien a tus, amigos, en particular- le dijo la voz misteriosa a Blu, mientras este buscaba con desesperación con la mirada a la misteriosa voz.
-¿entonces qué es lo que debo hacer?- pregunto Blu.
-yo, seré tu mentor, aprenderás todo lo que debes saber realmente, tu aprenderás a sobrevivir a base de tus instintos, te volveré un ejemplar a seguir, iniciaras desde cero y resurgirás como todo un ganador- le comento la voz misteriosa.
- Ja, instintos naturales he- dijo Blu mientras recordó la cruda escena, cuando Julio lo lanzo.
- Bueno, si no quieres mi apoyo, ve a gritar a otra parte, no me dejas descansar- Comento la voz misteriosa al oír la respuesta de Blu.
-No, espera, si deseo aprender, quiero ser salvaje, sobrevivir de mis propios, instintos- dijo Blu respondiendo apresurado.
-Muy bien joven aprendiz ¿dime tu nombre?- pregunto la voz misteriosa
-Mi nombre es Blu, ¡Tyler Blu Gunderson!- respondió Blu
-Muy bien Blu comenzaras mañana temprano aquí, por cierto esto es secreto no le digas a nadie- le dijo la voz misteriosa a Blu.
-secreto, temprano, ya entendí- dijo Blu.
Al momento vio que ya se hacía tarde y decidió regresar al nido, con ansias de que ya sea el día siguiente para iniciar su entrenamiento. Al llegar al nido no dijo nada respecto a lo que paso.
Tomo un mango que encontró y empezó a comerlo rápidamente. Perla y los niños se asombraron de que hiciera eso, ya que Blu nunca había hecho eso.
-¿Blu, te sientes bien?-pregunto Perla "si papa ¿te sientes bien?" agregaron los niños.
-sí, me siento excelente, mejor que antes- respondió Blu con la boca medio llena. "Mañana es el gran día, debo de estar preparado" decia Blu en su pensamiento.
-Bueno niños, vallan a dormir, dejen a su padre descansar- dijo Perla mientras los retiraba de ahí.
Ya descansando en el nido, Perla comento medio dormía a Blu: "Has estado actuando muy raro desde que volviste ¿paso algo?".
-No… nada en especial- le respondió Blu en voz baja.
Después de esa pequeña charla los dos se durmieron, pero no sabían que de lejos observaba alguien.
-Esto es humillante, como puede mi hija estar comprometida con un total incompetente- dijo Eduardo.
-Cálmate Eduardo, él es un buen chico- Le comento Tía Mimi- solo dale tiempo, se está adaptando- volvió a comentarle mientras lo miraba fijamente.
-Recuerda, él estuvo con humanos, fue la mascota de uno no se merece estar aquí- respondió en voz baja para no despertar a nadie.
- No todos son lo que aparentan ser, no lo juzgues por su portada, conócelo bien, él es inteligente, honesto, salvo a tu hija, dale tiempo es lo único que te pido- dijo Mimi a Eduardo mientras este se tranquilizaba un poco.
-Le daré 2 semanas para que demuestre que sirve para algo, eso es todo- Le respondió Eduardo.
Sera el tiempo suficiente para que Blu demuestre su valía, solo le queda esperar.
