Nuevo fic x_x Últimamente estoy que no paro xD
En fin, hace poco me pasaron un video de un concurso llamado "El juego de tu vida" dónde la gente se humilla publicamente contestando a preguntas rebuscadas (no se cómo le puede gustar a alguien ver eso...) Pero de todas formas me pareció buena idea para un fic de comedia Matt&Mello x)
Así que así están las cosas...
Matt y Mello se han quedado sin fondos para la investigación, la unica posibilidad que tienen para conseguir más dinero es presentarse a un concurso de televisión en el que serán sometidos a una maquina de la verdad. Por lo que se verán obligados a contestar preguntas algo comprometidas *-* Y por comprometidas quiero decir... ¿pervertidas? :S
Bueno, espero que os guste :)
- ¡Máldita sea! ¿Cómo demonios hemos acabado humillandonos de este modo? - se lamentaba Mello atravesando nervioso una y otra vez la parte trasera del plató.
Le habían planchado el pelo, maquillado el rostro y puesto unas prendas de ropa ridículas de tonos demasiado coloridos para su gusto. Se pasó las manos sobre la cara tratando de quitarse la mayor parte de maquillaje posible, pues ir con ese aspecto estaba dañando su orgullo. La maquilladora, una mujer rechoncha de mejillas rosadas (según Matt lo más parecido a un pokemon que había visto en su vida) había amenazado con raparle el cabello al cero si se le pasaba por la cabeza modificar en algo los arreglos que le había hecho, pero eso a Mello le importaba bien poco. Ya se lo había dicho a Matt antes, como esa foca se atreviera a poner sus grasientos dedos sobre su cabellera probaría su pistola. (Aquí Matt había estallado a carcajadas. ¿Cómo se podía ser tan mal pensado?)
- Mells, estate quieto, te lo suplico. – pidió exasperado el pelirrojo, dirigiendole una mirada por encima de la pantalla de la gameboy a su amigo, que no dejaba de caminar de un lado a otro soltando una larga retaíla de insultos.
- No me da la puta gana. – farfulló Mello. – Todavía no entiendo como hemos terminado así, humillandonos en la jodida caja tonta por unos asquerosos billetes.
- Bueno, quizás si no te hubieras gastado tanto dinero en chocolate no nos hubieramos visto obligados a ingresar en este concurso.
Mello le dedicó una mirada asesina por lo que Matt enmudeció y volvió a prestar toda la atención en su videojuego. Fue entonces cuando un hombre joven y trajeado caminó de pronto frente a ellos y propinandole unas amistosas palmaditas en la espalda a Matt (gesto que no fue del agrado de Mello) les anució:
- En seguida comenzamos a grabar, ¿Estais nerviosos, chicos?
- Bastante. – admitió Matt tragando saliva.
- Bueno, relajaros y recordad que teneis que ser sinceros para ganar. - Y dicho esto se fue tan rápido como hubo venido, no sin antes hacerle una seña a los demás miembros del equipo para que se prepararan para empezar a grabar.
- Ya sabes, Matt. – habló Mello con autoridad – Debes decir la verdad o nos quedaremos sin el dinero.
- ¿Pero y si las preguntas son muy personales? – replicó el pelirrojo que siempre se había mostrado muy tímido a la hora de expresar sus sentimientos .
- ¡Me importa una mierda! – estalló Mello - ¡Por mi como si te preguntan si te meabas en la cama! ¡Necesitamos el PUTO dinero! Y no pienso hacer el ridiculo delante de miles de espectadores para luego marcharme con las manos vacías. ¡Mira, perro, como no ganemos juro que te reventaré a balazos!
- Está bien, está bien. – se apresuró a asentir Matt, alzando las manos en señal de inocencia.
- Todos a sus puestos. – ordenó una voz.
Y Matt y Mello fueron conducidos a dos sillas frente a unas cuantas cámaras.
- Me siento como un puñetero conejillo de indias. – musitó Mello mientras le conectaban al detector de mentiras.
A su lado, a Matt, aunque mantenía el rostro sereno, le empezaban a sudar las manos. Una joven de pelo corto irrumpió en el plató con una enorme y claramente fingida sonrisa, al mismo tiempo que alguien gritaba "Acción".
¡Buenas noches! – saludó la chica a la cámara – Soy Kiyomi Takada y esto es El Juego De La Verdad, dónde nuestros concursantes tendrán que responder a unas cuantas preguntas incómodas para conseguir llevarse un millón de libras. Aquí, los tenemos. – continuó señalando a los chicos, que tambien sonríeron nerviosa y falsamente. – Son Mail Jeevas y Mihael Keehl ¿Qué me decís, chicos? ¿Empezamos con las preguntas?
¡Síííííííí! – exclamó Matt contagiado por el entusiasmo de la presentadora. Mello se apresuró a dirijirle una mirada recriminante, y muerto de vergüenza por la reacción de su amigo, se tapó la cara con las manos.
¡CHAN CHAN CHAAAAAN! Sí soy mala, lo dejo aquí por ahora ¬3¬ Al fin y al cabo sólo es la introducción ~
¿Bueno, que me decís? ¿Lo continúo? ¿Dejo de escribir y me dedico a otra cosa? ¡Reviews, por favor! ¡Me encantan los reviews! :3
Si quereis tambien me podeis dar ideas de preguntas retorcidas y humillantes :D ¡No importa lo retorcidas y humillantes que sean xD quiero saber hasta dónde podrá soportar el orgullo de Mello por un puñado de billetes (?)! ¡Serán bien recibidas :3 así que no tengais compasión! (Oh Dios, creo que me estoy volviendo cruel owo)
