3 de marzo de 2019, 3:47 pm, Central City.

Marzo iba iniciando pero, aún así hacia un frío terrible. "Sólo un loco como tu sale con tanto frío" le dijo la rubia entes de dejar el departamento en Ciudad Gótica. La chica no sabía a donde se dirigía su novio.

Era mejor así. De ese modo no querría ir con él.

Tenía qué hacer esto solo.

Tomó el Tubo Zeta y se dirigió a Central City.

Hola amigo

¿Cómo te va?

¿Cómo haz estado?

Tengo qué contarte que me enamorado

Cruzo la entrada del cementerio, sin darse cuenta de que una sombra lo seguía de cerca.

Cuando llego a la lápida que buscaba, sin atreverse a acercarse más de dos pasos, se tumbó sobre el césped mojado, en una posición de Jedi dispuesto a meditar.

-¡Hey! ¿Qué hay, amigo?- hizo una pausa- Se que no puedes oírme pero voy a tener que fingir que sí puedes. No puedo más. Tengo una confesión que hacerte.

La sombra se había detenido a una distancia segura, quedando en shock al ver el nombre escrito en la lápida. Escuchando. El héroe suspiró antes de continuar.

-Me enamore- la sombra no le veía nada de malo en ello, no entendía cual era el problema-De ella.

Y que quizás y no sea lo correcto

Pero la amo

Y que se lo recuerdo a diario

-No te enojes. Se qué esta, en cierta forma, mal. Ella era tu novia, y la amabas. Pero yo también la amo. Siempre lo he hecho. Todos estos años me calle, pero soy humano y tengo un tope. Un máximo. -La sombra quería acercarse pero no quería interrumpir.-No me odies.

Cuando la llamo

La gente nos mira raro

Es difícil

Que acepten esta relación

En esta situación tan frágil

-No me odies- repitió el chico, luego suspiro-el Equipo no se lo tomo bien. Ellos piensan que te traicionamos. No se sí sea cierto. Ellos dicen que no está bien. Que imaginemos que tu estas aquí, con nosotros. Pero han pasado tres años.

¿Pero qué puedo hacer?

El corazón no escucha

Sólo se aferra a ella y

Por ella lucha

-Es algo que no puedo evitar. No puedo forzar a mi corazón a dejar de amarla. Me aferro a ella como si fuera un naufrago y ella mi salvavidas. Porque, muy en el fondo, ambos somos náufragos y nos salvamos el uno al otro.

Yo sé que tu lo entiendes

Te juro que la cuido bien

Tu me dijiste como se le trata a una mujer

-Tu lo entiendes ¿verdad? Siempre te preocupaste por ella. Yo la cuido. Yo hago tu trabajo ahora. Después de todo, tu me enseñaste como hacerlo. Siempre me presumías haber conseguido novia antes que yo. -río- Y luego intentabas enseñarme como conquistar chicas y todo lo que conseguías era un regaño por parte de ella.

Por ti yo haría todo

Tu lo sabes

Eres mi amigo del alma

Somos carnales

-Sigues siendo mi mejor amigo. Somos hermanos. Yo hubiera dado la vida por ti si hubiera habido la oportunidad. Tu habrías hecho lo mismo por mi. -hubo una pausa, - Cuando dije que haría todo por ti nunca mentí. La prueba es que me guarde mis sentimientos hacia ella desde que me di cuenta que la querías. Incluso después de que te fuiste intente mantener la distancia. Pero fue imposible, porque, al ser mejores amigos, encontramos consuelo en el otro.

No te preocupes por ella

Que yo aquí estoy

El amor que tu le dabas a diario

Yo se lo doy

-No tienes que preocuparte por ella. Yo la cuido bien. Te lo juro. No podría fallarle a ella, porque la amo. Tanto como tu la amabas.

Yo le diré cuanto la amabas

Es la mujer perfecta

Se qué no te equivocabas

-En serio es perfecta ¿No? Ambos tenemos excelentes gustos. ¿Recuerdas aquella ocasión en que que llegue tarde? ¿Y qué tu me dijiste que compartiríamos todo? Pues al parecer compartimos el amor por la mujer perfecta también.

"Que no te importé lo que diga la gente

Ustedes rondan siempre en mi mente

Sólo hay que aceptar el presente

Y no quiero que la vayas a fallar

Como una vez yo le fallé

Solamente amigo te pido

Cuídala bien"

La sobra que lo observaba desde la distancia se quedo pasmada. Todo aquello era tan cierto. Tenía tantas ganas de acercarse. Tenía tantas cosas que decirle al chico que estaba frente a el. Pero no quería interrumpirlo.

Aquel día que te fuiste

Me tomaste de la mano

Y me dijiste que nuestra amistad

Era más que de hermanos

-¿Recuerdas ese día en que ella regreso? ¿Recuerdas que después de reclamarme y gritarme me dijiste que confiabas en mi? ¿Qué era tu mejor amigo?

Me dijiste que

La amabas demasiado

Y que dejarla

Es lo peor que te ha pasado

-Me dijiste que los meses, semanas, días, y horas que habías pasado sin ella habían sido los más largos de tu vida. Que tener que dejarla ir era lo peor que te había pasado alguna vez. Que la amabas demasiado como para dejarla sola.

Que es hermosa

Que es un ángel del cielo

Que es inigualable

Hasta el olor de su cabello

-Me confesaste que ella era tu ángel guardián personal. Tu propio ángel caído del cielo. Que ella es única, inigualable, maravillosa y fantástica.

Tienes razón

Ella es perfecta

Te querías casar con ella

Lo se es la predilecta

-Debo confesarte que también es mi ángel. Siempre fue mi mejor amiga, mi consejera y confidente. Siempre fue dulce y amable. Yo la amaba desde el momento en que la vi. Pero como después vi la conexión entre ustedes dos no me interpuse.

Me dijiste que yo la cuidara

Que no dejara que nadie la dañara

Que nadie la traicionara

-Al ver lo fácil que era morir, y al estar consciente de que ella regresaría cada vez que se lo pidiéramos tu me pediste que la cuidara si necesitábamos su ayuda otra vez. Me pediste que me encargara de ella. Porque tu no podías vivir sin ella. Nunca pensaste que el que algún día iba a llegar a faltar, eras tu.

No pienso decepcionarte

Por qué la amo demasiado

Curaré sus heridas

Allá estaré a su lado

-¿Sabes por qué no te puedo fallar? Porqué yo tampoco podría vivir sin ella. Después de que te fuiste intente no enamorame más de ella. Creo que estas consiente de qué es imposible. Simplemente terminamos así.

A los dos nos duele

Que te hayas marchado

Eso nos une más

Siempre estaré a su lado

-Buscamos consuelo en el otro y el acercamiento entre los dos provoco esto. Ella se encerraba en el apartamento. Yo me asuste porque no le abría a nadie y derribe la puerta. La encontré deshecha. Me prometí a mi mismo cuidarla y sanar todas su heridas.

Ve con Dios, amigo

Que yo la cuidare

Descansa en paz

Te extrañaré

-No te enfades. No me odies, por favor. Ambos te extrañamos. Y ella no me ama tanto como ella te amo a ti. -La sombra esperaba que algún día lo hiciera, el chico frente a la lápida río, nervioso, no sabía si todo esto que decía era para él o para su amigo-Te prometo cuidarla. Te prometo que no la voy a dañar. Y tu quédate tranquilo. Descansa en paz. Te extrañamos.

La sombra revelo su escondite, acercándose al chico para decirle lo que pensaba:

"Que no te importé lo que diga la gente

Ustedes rondan siempre en mi mente

Sólo hay que aceptar el presente

Y no quiero que la vayas a fallar

Como una vez yo le fallé

Solamente amigo te pido

Cuídala bien"

"No debo de preocuparme

Su futuro está en tus manos

Debo aceptar que no estaré

Para decirle que la amo

Ella se quedará contigo

Que no te tome de consuelo

Los bendigo mi amigo

Desde el cielo"

3 de marzo de 2019, 4:23 pm. Cementerio de Central City.

Una vez que el fantasma de Wally West término de hablar con Richard Grayson, este último se dirigió a la salida del cementerio.

Wally le había dado permiso.

Dick metió las manos en los bolsillos de su chaqueta donde sus dedos chocaron con un pequeño aro de metal helado.

Un hermoso anillo con una gran esmeralda encima.

El color favorito de cierta arquera rubia.

Quien lo recibiría horas más tarde.