En un universo alterno Ritsuka es transferido de colegio y comienza estudios en un prestigioso colegio de la capital nipona. Con un temperamento irascible en ocasiones, es una persona sincera que no duda en decir lo que piensa sin importarle si eso conlleva a lastimar los sentimientos de la otra persona.
En el mismo colegio estudia Agatsuma Soubi, un muchacho guapo, inteligente y desinteresado en casi todo menos en lo que a su club se refería. Huyendo de uno de sus más terribles recuerdos conocerá a una persona que lo hará cambiar su manera de ver las cosas y esa misma persona la llevará a recordar lo que creyó haber olvidado en su momento.
Sus historias se entrelazarán de una manera algo fuera de lo común y que terceros tratarán de impedir cueste lo que les cueste.
Chapter 3 up!! En este capítulo Soubi hace su entrada magistral al igual que Seimei. Éste está un poco cambiado y eso hace que Ritsuka se pregunte el porque. Además hace que Ritsuka experimente cosas que el menor jamás había experimentado...
Aclaraciones del capitulo:
Que más digo? Ah! bueno para evitar confusiones: conversaciones, pensamientos, explicaciones de todo lo demás xD y como ya tengo sueño pues les dejo con el...
DISCLAIMER: Loveless no es mío, ni lo fue ni lo será, no importa cuantas veces lo desee es 99,9 posible que nunca sea mio pero como soñar es permitido yo tomé prestados los personajes que creó Yun Kouga en el 2003 (creo q fue ese año no recuerdo, además ya deberían publicar los capítulos que faltan del vol 9 xq estoy en ascuas). se aclara garganta bueno volviendo al tema del fic. Loveless no es mío pero "La Balanza" si lo es
En fin, no los molesto más y los dejo que lean y enjoy!
- Go... gomen nasai - decía una jovencita de cabellos rosados - fue mi culpa
- Iie, daijoubu - respondía un chico de cabello negro -
Ambos se encontraban en uno de los pasillos de la escuela en la que cursaban estudios y el pelinegro había tropezado con la chica sin querer haciendo que los libros de la chica cayeran estrepitosamente en el suelo mientras los demás estudiantes pasaban a su lado y se reían por la escena que presenciaban.
- Go... gomen nasai - repitió la pelirosado haciendo una reverencia -
- Despreocúpate. Yo también fui el culpable al no fijarme por donde venía caminando. Aquí tienes - decía mientras le entregaba sus libros a la chica - Tengamos más cuidado la próxima vez ne?
- Hai! - La joven se quedó prendada de aquella bella sonrisa que le regaló el guapo muchacho de cabello negro y ojos violeta - ¿Quién será? - Se preguntaba la joven mientras veía como el muchacho salía del colegio - Parece que no estudia aquí porque aún tenemos clases y ya se está yendo suspiro es tan lindo. Me encantó su sonrisa
- Ohayo!
- Ohayo gozaisamu!
- Niños hoy tenemos un nuevo estudiante, tratenlo bien, no sean malo con él por favor y... - la profesora fue interrumpida por el abrir repentino de la puerta del salón - Ah! aquí está el susodicho.
Un joven de estatura mediana, pelo negro y ojos violeta irrumpió en el salón caminando elegantemente hacía donde se encontraba Shinomome-sensei. Las chicas del salón lo siguieron con la mirada todo el camino desde la puerta hasta que llegó al lado de la sensei, embobadas por el porte del joven, su elegancia al andar y su vestimenta. El muchacho vestía jeans de color negro y suerter un tanto ajustado de cuello alto igualmente de color negro. Las chicas seguían suspirando por el recien llegado y la mayoría de los chicos lo veían con recelo porque se estaba levantando a las chamas del salón sin siquiera haber dicho una sola palabra. Al parecer no iba a tener mucha popularidad entre los hombres del salón
- Ohayo gozaimasu! Watashi wa Aoyagi Ritsuka desu. - Se presentó el joven dislumbrando a las muchachas con una espectacular sonrisa colgate -
- Ohayo! - repitieron al unísono los demás estudiantes y las chicas murmuraban por lo bajo el nombre del muchacho -
- Te puedes sentar en aquel sitio que esta desocupado Aoyagi-kun - señaló la sensei hacía una de las mesas cercanas a uno de las dos ventanas del salón del clases.
- Hai! Arigato Shinomome-sensei
Una vez sentado, Ritsuka pudo visualizar mejor el aula en el que ahora se encontraba, a las chamas que no dejaban de lanzarse miradas y risitas nerviosas, a los chamos que lo veían con cara de pocos amigos y sobretodo a la vista espectacular que tenía del patio principal a través de la ventana. Perfecto para momentos de aburrimiento - pensó el muchacho mientras se acomodaba mejor en su silla y trataba de poner atención a lo que decía la sensei.
- ¡No puede ser! Es... es... es el chamo de la semana pasada. El que tropezó conmigo... hizo que se me ensuciara el trabajo de psicología pero eso no importa su sonrisa colgate fue espectacular y fue solo para mí y ahora va a estudiar conmigo... No entro en este planeta por la felicidad tan grande que me embarga. Soy feliz, las aves cantan, el sol brilla, los niños juegan, el cielo está despejado, todo es bello, los elefantes vuelan, el color rosado reina en el universo, los políticos dejaron de existir, se acabó la guerra y ahora todos escuchan jmusic, también...
- Hawatari-san por favor deja de bailar por el medio del salón y siéntate de una vez para que podamos comenzar la clase de hoy
- Ha-- hai Shinomome-sensei. Gomen ne. - Decía la pelirosa mientras se sentaba en su silla y medio salón se partía de la risa pero en silencio para que no los regañaran. La chica había reconocido a su principe violeta y se embriagó de felicidad. Ella, de cabello rosado, alta y muy desarrollada para su edad, respondía al nombre de Hawatari Yuiko. Ahora en lugar de la felicidad que la invadió hacía un momento, ahora estaba invadida de pies a cabeza por la más grande verguenza de su vida. Pateó el piso un poco diciendole Trágame tierra pero no funcionó.
Estaba acostumbrado a la actitud que tomaban las mujeres cuando estaba cerca e inclusive la actitud que tomaban los hombres porque lo veían como la competencia y las mujeres el próximo trofeo por el que había que pelear. En ocasiones le daba risa toda aquella situación y en otras ocasiones se aburría de ella. Todo era cuestión de su estado de ánimo, era muy cambiante y eso a veces era peligroso. El nuevo. Todo dependía de su estado de ánimo... ¿Quería ser el estudiante ejemplar que es envidia de todos o quería ser el centro de atención y la popularidad? Por suerte existen las balanzas. Todo en su justa medida. Una vez más... Todo dependía de su estado de ánimo.
End of chapter 1. So? Les gustó? Espero que sí. Puse a Ritsuka vestido de negro porque de acuerdo a mi persona: un hombre se ve es-pec-ta-cu-lar vestido de negro :9 y no coloqué a Risuka tan bajito tampoco, pero esos son toques técnicos que iré diciendo en el próximo capítulo. Como estoy de vacaciones espero poder subirlo rápido ok? Bueno no tengo mucho que decir más que... tengo sueño y voy a dormir. Buenas noches. Nos leemos 3
