Konnichiwa!

Ayer estaba desvelada y se me ocurrió esta historia. Es un poco…de acuerdo…es bastante triste; pero es lo que me vino en el momento.

La única advertencia que puedo hacerles, es que contiene escenas deprimentes (como todo este capítulo). Y no es Yuuram, sino Wolfyuu.

Este primer capítulo es bastante corto; sólo sirve de introducción a la verdadera historia. Espero la disfruten y nos vemos al final.

Disclaimer: KKM no me pertenece, ni ninguno de sus personajes.


Capítulo 1: Perdiendo la esperanza.

Entre todas las maneras en las que, imaginé, terminaríamos separados; ésta nunca incluyó.

Aquellos humanos, a los que tanto defendiste; esos nobles sentimientos, a los que te aferraste; son los causantes de que estés hoy así.

Han pasado veinte años y he cambiado bastante; aunque mi cuerpo haya envejecido sólo tres. Ahora mi cabello es más largo y lo llevo recogido en una cola de caballo. Soy un poco más alto y mi espalda se ha ensanchado.

Como nunca más abriste tus ojos, los diez nobles se reunieron. He sido nombrado el nuevo Maou.

Siempre que te veo postrado en ese ataúd, sin cubierta alguna; tu cuerpo congelado y tu rostro igual que antaño; creo que todavía estás vivo, a pesar de que todos digan lo contrario.

He ordenado que sigan manteniéndote en animación suspendida. Nada le ocurrirá a tu cuerpo, mientras sea el rey. Así que puedes tomarte tu tiempo para despertar.

Desde el principio, siempre ha sido así. Desde que perdiste la conciencia en la primera batalla, de muchas otras que vinieron. Todos los días, vengo a visitarte, a esta habitación llena de flores; me quedo horas mirando tu rostro, esperando que reacciones. Ellos dicen que no lo harás, que no me engañe; me desalientan. Sólo yo sigo creyendo en mí mismo. Sólo yo sigo creyendo…en ti.

-Yuuri… -su cuerpo se estremeció.

Un año. Ése fue el tiempo que Gisela y Annisina, mantuvieron su fe. Son dos mujeres calculadoras, atadas a la ciencia y los hechos verídicos; pero yo sé que existen los milagros. Cuando estabas aquí, eras uno andante.

Año y medio, Aniue y Yozak. Ambos te estimaban y te guardaban un profundo respeto; mas el deber de proteger al nuevo Maou, les importó más, y decidieron olvidarte.

Dos años, mi Madre y Greta. Nuestra hija había caído en un pozo depresivo; tú no estabas y yo tampoco. Sé que fue mi culpa, pero no podía darle la vida de antes. Hace tiempo que la felicidad no golpea a mi puerta. Para Madre, fue como perder dos hijos. Entendió que no podían seguir así, y convenció a Greta y a sí misma, de que debían salir adelante. Para ellas, te habías ido.

Günter fue el siguiente en desistir. Él te adoraba, pero creía que, en donde quiera que estuvieras, tu deseo sería ver feliz a tus seres queridos. Para poder conseguirlo, tardó cuatro años.

A los cinco años, Shouri, junto a tu padre, madre y todos los de La Tierra; habían reconocido tu partida.

Pasaron otros quince años más. Los únicos que seguíamos confiando en tu deseo de vivir, éramos Conrad, Ulrike, su Alteza, Shinou-hecka y yo. Siempre creí que eso, sólo se debía a que Ulrike, todavía, podía verte en su esfera. Mis sospechas se confirmaron hace un mes. La potente luz que indicaba tu presencia, está desapareciendo. Ulrike, el Gran Sabio y el rey original, me dieron su pésame. Conrad no quiere…mejor dicho, no puede hablarme. Cada vez que me mira –y ahora, puedo contar con los dedos de la mano, las ocasiones en las que lo hace-, parece que fuera a romper en llanto.

Todo está mal.

-¿Por qué no respondes, Yuuri?

He sufrido tanto, y al final siempre vuelvo a recaer…

-¿Por qué no me miras?

en esa misma duda, que me atormenta noche y día.

-¿Por qué no despiertas?

Sigo creyendo que, algún día…

-¿Por qué no me dices, cuándo piensas regresar?

desde dónde sea que estés…

-Vuelve, Yuuri…

me escucharás.

-Te extraño.


¿Han visto? Lo de que el capítulo era cortito, no lo dije en broma.

Entonces…¿Qué les pareció? Ojalá les haya gustado. Si es así, estaría más que agradecida de que dejen reviews.

Ahora, me despido.

Arigatto. Shiko.