hola a todos, hoy traigo esta historia que hace tiempo tenia ganas de publicar pero tuve fallos técnicos. Les recomiendo leerlo con alguna canción suave para tener el sentimiento. Los personajes le pertenecen al Tio Riordan yo solo juego con ellos
Nico Di Ángelo se sentó en el pasto, en los Campos Elíseos, bajo un frondoso árbol. Había tenido que atravesar el rio Aqueronte, el Inframundo y el rio Lete para llegar hasta ahí, pensaba que al menos se merecía un descanso.
Diviso a un grupo de Cazadoras caídas que correteaba alegremente sobre una colina, siendo perseguidas por alguien más. Cuando estuvieron más cerca Nico se levanto de golpe, impresionado por lo que estaba ante sus ojos
Ahí estaba, aquello por lo que había ido.
Ahora no le quedaba duda alguna
Era verdad... había...él había muerto.
El alma de Percy Jackson corría sobre el campo, riendo, como si nunca hubiera conocido el dolor... como si siguiera vivo
Nico luchaba por mantener los sollozos dentro de su pecho. Le parecía injusto. Annabeth, Jason, Piper, Hazel, Frank, Reyna, Leo, Quirón, Tyson, Rachel, Will, su madre… todo el Campamento Mestizo había llorado la muerte del héroe más grande, todos habían llorado, destrozados, la pérdida de Percy Jackson.
Le parecía injusto, que cuando todos sus amigos lloraban, él estaba ahí, riendo.
Percy, ¿eres feliz?
— ¡Me hacen cosquillas! —se retorció en el piso, siendo asaltado por las chicas.
Escuchar su voz, de nuevo, le había hecho contener la respiración y derramar mas lagrimas. Estaba frente a él, tan cerca y tan lejos...
Se aferro a la esperanza de verlo ahí, el único lugar donde su alma podría ir.
Una última vez, se dijo, para deshacerme de estos sentimientos, para afrontar la realidad
Pero verlo reír, tan vivo, le dolía demasiado. Tan despreocupado, como si su vida siempre hubiera estado ahí abajo. Parecía ajeno a todo lo que pasó, todo lo que vivió, como si fuese otra persona y esa vida le perteneciera a alguien totalmente ajeno a él
Percy, ¿no extrañas todo eso?
Todas esas personas que te han amado, ¿no las extrañas?
El Campamento, la brisa de los campos de fresas, el mar, el amor, la amistad, la vida... Percy... realmente, ¿no extrañas estar vivo?
Si pudieras, ¿no volverías a tu vida?
Una vida que tanto te quito, inmerso en batallas que no eran tuyas, esa vida que te arrebato la inocencia...
La vida que te hizo sufrir, casi darte por vencido
Esa vida que a sangre fría te asesino.
Percy, si pudieras, te lo suplico...
Estas mejor aquí, donde no podrán volver a alcanzarte, donde tu triste destino jamás podrá reclamarte otra vez.
Debes ser egoísta por esta ocasión.
Percy, si pudieras volver...
Por favor...
Te lo suplico...
No vuelvas
—Nunca te había visto por aquí—una sonrisa burlona y unos ojos verde mar lo observaban con curiosidad— ¿Te encuentras bien?
—Yo... no me encuentro bien— las lágrimas amenazaban con volver a salir
—Ven con nosotros, tal vez te sientas mejor
Le tendió la mano y haciendo caso omiso a lo que decía su instinto, la tomo y se puso de pie.
Una última vez, se repitió, para poder dejar de lado todo su dolor. Para poder afrontar la realidad y seguir de alguna manera con su vida
Sin soltarse del héroe caído, se perdieron juntos tras la colina
Pueden lanzarme al Tártaro si quieren, lo merezco. Pero por favor dejen sus comentarios