La vida en color amatista
Introducción
La vida, mucha veces puede ser alegre o triste, los recuerdos que formas durante ese aliento emífero son determinantes para la vida después de la muerte. Tsuzuki Asato, muchas veces siente que sigue en la vida humana… pero¿realmente es así?. Hisoka desea conocer todo aquello referente al shinigami de ojos amatistas ¿podrá tener la oportunidad? Es momento de conocer la verdad que se oculta en la vida de ese shinigami, cuyos ojos representan a la misma muerte. La verdad envuelta en la amatista que puede ser determinante para el destino de todas aquellas personas que rodean a Tsuzuki.
Prólogo de una tarde bajo la lluvia
El Meifu, es el sitio en donde llegan las almas tras dejar el mundo de los vivos. Es un sitio que está custodiado por el Gran Rey Enma, quien decide el destino final de todas las personas; pero no lo hace solo. Alrededor de él, existe un grupo de seres que se les ha concedido la oportunidad de "una segunda vida" a cambio de tomar el alma de las personas que están por abandonar la vida terrenal. Estos seres se les conocen como shinigami…
Los shinigami se dedican a llevar las almas al Meifu, junto con ello, tratan de mantener la paz en la vida de los humanos evitando que demonios y almas en pena, causen disturbios en el mundo terrenal.
Por las calles de la ciudad, camina lentamente un ser de cabellos chocolate que viste completamente de negro. No se puede apreciar con exactitud su presencia porque sus ojos se encuentran ocultos en unas gafas muy oscuras, sus manos protegidos con unos guantes y la gabardina que llega casi a sus tobillos.
En su rostro se muestra una ligera seriedad que, en ocasiones desaparecía para mostrar una sonrisa. El chico se detiene por un momento y mira los grandes edificios y los semáforos que, en determinado tiempo, cambian de color.
Con cuidado se quita sus gafas y se aprecian unos hermosos ojos de color amatista; una que otra persona lo mira porque no era común tener esa clase de color de ojos. El joven no se percata de eso porque se encuentra sumido en sus propios pensamientos.
-Es increíble que el paisaje, las personas… el mundo por completo cambie con el paso del tiempo, todo excepto el ambiente- piensa para si mismo- aunque todo cambie, el ambiente siempre persiste… esa presencia de tiempos viejos, de hechos que son influyentes para el curso de la historia del hombre, aun puedo sentirlo….
Y en sus labios se forma una ligera sonrisa de tal forma que mira hacia el cielo pensando que el día estaría soleado. No pasa mucho cuando continúa con su camino por las calles de la ciudad.
Mientras eso mismo ocurría, en el JuOhCho que se encuentra en el Meifu, un hombre de ojos zafiros camina nervioso por los pasillos del lugar. El hombre se sentía nervioso porque buscaba a alguien. Otra persona, de cabellos rubios y ojos naranja se le acerca con una sonrisa.
-Qué pasa Tatsumi? Por qué te ves nervioso?
-Ahh!!! No sabes dónde está Tsuzuki, Watari??- pregunta Tatsumi nervioso y molesto.
-Pues no, es más… ni se ha presentado hoy al trabajo.
-No puede ser!!! El jefe quiere verlo!!!!- grita Seiichiro mientras que Watari se aleja un poco de él.
-Jejejeje, ya veo…
En ese momento, ambos observan una pizarra que tenían cerca y, a ambos se les caen las gafas. Ninguno de los recordaba que era el día libre de su compañero Tsuzuki, de la misma forma, e compañero de éste también estaba libre.
-Ah kami, si Hisoka-kun no estuviese libre… creo que podría saber donde está Tsuzuki- musita Watari pensativo pero, se aleja más de Tatsumi porque éste tenía en sus manos un cuchillo de cocina.
-Como sea!!! Debemos encontrar a Tsuzuki cuanto antes!
-Pero, tanto show haces porque el jefe quiere hablar con él???
Tatsumi lo mira con ganas de apuñalarlo con el cuchillo en sus manos, Watari piensa que es mejor mantenerse callado.
-Tal parece que Muraki está haciendo de las suyas de nuevo, intenta entrar al Meifu, el jefe deseaba hablar con Tsuzuki para decirle lo que se tiene que hacer, igual para Hisoka pero bueno… creo que debemos ocuparnos de esto.
-Pues si, sabes que para Tsuzuki, sus días libres son sagrados- ríe un poco el rubio- toma en cuenta esto, de seguro que Muraki hace esto para buscar a Tsuzuki y bueno, al no verlo por aquí… seguro y no hace mucho.
Por unos momentos Tatsumi lo tuvo que pensar; era idea bastante buena aunque sentía que había alguna deficiencia. Se le hacía muy raro decir que Muraki arriesgaría mucho para ver a Tsuzuki, era mejor secuestrarlo y llevarlo a su mansión o bien, usar alguna buena excusa para atraer al shinigami de ojos amatistas.
-Veremos que pasa… no se me hace muy fiable tu idea.
-Bueno, la mayoría de las veces Tsuzuki es la causa de las acciones de Muraki.
A Seiichiro no le queda de otra que dejar de buscar por todos lados a Tsuzuki, solo piensa por su mente que se le ocurriera llamar. Watari por su lado, trataba de darle a entender que no era bueno preocuparse tanto y más porque ambos shinigami pidieron el día para salir juntos:
Unos días atrás,
Parecía que era la hora del almuerzo y varios shinigami estaban reunidos comiendo sus almuerzos. Todos ellos comían con tranquilidad hasta que Tsuzuki decide hablar un poco.
-Quiero tomarme un día, quiero vacaciones!!!- y deja su plato en la mesa de tal forma que sus compañeros lo miran raro.
-Tsuzuki, con todas tus deudas es… IMPOSIBLE eso- responde Tatsumi.
-Pides demasiado- contesta indiferente Hisoka.
Para Tsuzuki eso fue determinante para ponerse a llorar, Hisoka deseaba que la tierra se lo tragara porque le daba pena ver a ese shinigami llorón.
-Demo Hisoka, con tanto trabajo ni hemos podido salir juntos!!!- y abraza al chico, el de ojos esmeraldas se queda helado mientras que, un ligero rubor aparece en sus mejillas, ocasionando la sonrisa de los presentes.
-Ahh, es cierto, la pareja del año!!- responde emocionada Wakaba- les caería bien salir un día los dos juntos sin que nadie los moleste.
Ante esas palabras, los presentes se ríen y Tsuzuki se muestra emocionado aunque, Hisoka se separa de él de forma brusca.
-Pero hay mucho que hacer!
-Demo Hisoka-kun! T.T a mi me gusta estar contigo!!! No seas malo, será un solo día!!!!
-Iiee!!!!
El shinigami de ojos violetas pone cara de perrito a medio morir y todos miran a Hisoka, esperaban una respuesta de su parte. Éste suspira arrepentido y le contesta a Tsuzuki.
-Está bien…
-Siiii!!!!!!!!!!- y Tsuzuki lo abraza.
Hisoka Kurosaki parecía un poco impaciente, miraba a cada rato el reloj diciéndose así mismo que fue una muy mala idea el tomar el día libre. No entendía por qué exactamente Tsuzuki quería salir con él.
-Ese baka, solo piensa en la juerga.
Suspira con desesperación y estaba por levantarse de la mesa cuando… observa enfrente suyo a un hombre más alto de que él que vestía de negro. Lo más llamativo de él eran sus hermosos ojos amatistas que hechizaban a Kurosaki.
-Gomen! Me quedé viendo la nada!
-Baka, llevo aquí diez minutos… ya me iba, ahora dime¿para qué esto?.
Tsuzuki sonríe divertido ante esa pregunta, el chico piensa que se trata de una broma de mal gusto y prefiere irse. Su compañero shinigami no lo deja porque lo abraza por la espalda, ocasionando un sonrojo por parte del de ojos esmeraldas.
-Simplemente deseo que pasemos el día juntos ¿no es fantástico?
Para Hisoka no lo era tanto, debía soportar a su compañero de trabajo las veinticuatro horas del día; tomando en cuenta que, desde un tiempo atrás, salen juntos. No le veía la gracia a la acción de Tsuzuki, pues salen lo suficiente como para no decir que no tienen el tiempo suficiente para estar juntos. Kurosaki no puede decir más porque el shinigami de ojos amatistas toma su mano y se lo lleva lejos de ahí.
Durante algunos minutos, ninguno de los dos dice algo. Hisoka no se atrevía a preguntarle porque podría arruinar alguna clase de sorpresa. El chico nota algo extraño en Tsuzuki, pues no podía percibir lo que pasaba por su mente… era como si estuviese cubierta por una neblina espesa. No pasó mucho cuando ambos se encuentran en una zona muy alejada de la ciudad.
-¿A dónde me llevas Tsuzuki?- pregunta el chico desesperado por no saber nada.
-Primero que todo, quiero que me acompañes a este lugar- responde el shinigami para cargar a Hisoka y adentrarse a un lugar extraño para el chico.
El sitio era extraño porque, se trataba de un cementerio. Hisoka se queda extrañado porque no era común que ellos, los seres que llevan las almas al otro mundo, estuviesen en ese lugar y sobretodo Tsuzuki. Sin decir palabra alguna, el chico sigue los pasos de su compañero hasta llegar a una zona que estaba completamente descuidada… como si nadie pasara por ahí desde hace tiempo.
La zona estaba llena de arbustos y la hierba no había sido cortada en mucho tiempo, muchas de las tumbas estaban tan descuidadas que, se encontraban deteriorando. Lo más extraño era que, entre esas tumbas, una de ellas estaba más o menos cuidada, como si alguien la visitara seguido.
-Para qué estamos aquí?- pregunta el chico y Tsuzuki simplemente le sonríe.
-Venimos a visitar a alguien.
El chico no dice nada y sigue al de ojos amatistas hasta esa tumba, la cual se notaba que tenía mucho tiempo.
-Es la tumba de mi hermana…de Ruka.- dice de pronto mientras junta sus manos para rezar un poco.
-No tiene sentido, no sé porque debemos rezar…- musita Hisoka aunque, se sorprende al ver que Tsuzuki miraba con una ligera sonrisa en sus labios esa tumba.
Hisoka tenía tiempo que conocía a ese shinigami tan peculiar pero, en más de una ocasión se preguntaba qué tanto lo conocía. Siempre se decía así mismo que Asato Tsuzuki era una caja de sorpresas, a pesar de que conocía parte de su historia, sigue guardando secretos que, muchas veces, ninguno de los otros shinigami conoce o sabe. Le daba curiosidad ver la actitud de Asato, trataba de imaginarse un poco como era esa chica, muchas veces escuchó hablar de ella a palabras de Tsuzuki pero… nunca ha hablado sobre ella de forma tan abierta.
No pasó mucho tiempo cuando Tsuzuki terminó y mira a Hisoka, quien estaba perdido en sus pensamientos.
-Suelo visitar a mi hermana al menos una vez al año, por eso su tumba,… a pesar de ser muy vieja, trato de mantenerla cuidada.
-Entiendo, la querías mucho, verdad?- pregunta de pronto el chico.
-La verdad… si- y sonríe como suele hacerlo, ocultando la tristeza detrás de esos amatistas y Kurosaki lo mira con seriedad.
Se forma un extraño silencio en ambos, no fue hasta cuando Hisoka toma la palabra a un shinigami que parecía perdido en sus pensamientos… o, en su propio pasado.
-Solo ella está aquí?... no hay de… nadie más?...mmm no sé…tus,… padres?
-Así es, solo ella está aquí,… mi padre, murió en la guerra y nunca pude encontrar el cuerpo de mi madre.
Las palabras eran frías, poco común en Tsuzuki; generalmente toma esa actitud al hablar o mencionar algo sobre su pasado (al menos en el último tiempo). Hisoka se siente un poco mal preguntar eso porque piensa que hizo enfadar a ese hombre.
Una ves más, se presenta el silencio y más, porque ambos observan a los lejos a un conjunto de personas vestidas de negro. Parecía que se estaba presentando un entierro, lo cual ambos miran con detenimiento todo lo que ocurre.
El chico deja de mirar lo ocurrido para fijarse en la mirada oscura de Tsuzuki; sabía perfectamente que era uno de los shinigami más antiguos y por lo tanto, sabía muchas cosas. Una vez más, la curiosidad de Hisoka se hace presente porque pasaban por su mente muchas preguntas.
-Nunca había visto a Tsuzuki mirar así a la gente, estoy seguro que el ha visto muchas cosas…ha vivido mucho,…pero si es así, por qué detesta tanto este… trabajo?... a veces siento que no sé nada de él- se decía así mismo el chico de ojos esmeraldas.
El cielo comienza a nublarse a tal grado que está a punto de llover y Tsuzuki se da cuenta de ello mostrando una mirada un tanto pálida, como si le entristeciera eso.
-El tiempo pasa… pero la presencia siempre perdura- piensa para si mismo y mira que Hisoka era quien estaba perdido en sus pensamientos.
De repente, comienzan a caer algunas gotas y Tsuzuki se acerca al chico para sacarlo de ese trance, para poder irse de ahí y la lluvia no los moje demasiado.
-Es tiempo de irnos.
-…ha… hai- contesta el chico un poco aturdido de tal forma que, trata de caminar y se tropieza pero Asato lo detiene a tiempo.
Ambas miradas se cruzan, la esmeralda y la amatista en una sola… Tsuzuki simplemente le sonríe de forma tierna, haciendo sonrojar a Hisoka.
-Por qué siento que tienes dudas?- pregunta de pronto a Hisoka, éste se queda sorprendido.
-Es que… te… te veo mirar esa tumba, la tumba de tu hermana y me… me pregunto que pasó anteriormente, bueno… sobre tu vida como humano.
Cuando Tsuzuki escucha eso, se queda un poco extrañado. No era común que alguien se preguntara por la vida humana de otro shinigami. Hisoka mira hacia otro punto pensando que no debía decir eso pero, siente las manos de Asato en su rostro para que lo mirara a los ojos.
-Y por qué te preguntas eso?
-… no sé, curiosidad- contesta de pronto el chico.
Esas palabras hacen sonreír al shinigami, cierra un momento sus ojos para pensar un poco las cosas y mira a Hisoka. El chico una vez más se siente avergonzado y se sorprende al sentir los labios de ese shinigami cerca de los suyos.
-Está bien, te contaré lo que quieras… pero, vayamos a un lugar diferente, ya nos estamos mojando- dice divertido Tsuzuki.
-Ah…. Ha… hai… AHH AHHCHU!- estornuda Hisoka, Asato se ríe un poco para después quitarse la gabardina y se la da al chico.
-NO sería bueno que te resfríes.
-Estamos muertos! No nos enfermamos!- contesta Hisoka molesto.
De esa forma, los dos se van de ahí a un lugar más cómodo, un sitio donde pudieran hablar con calma. No tardan en llegar a una cafetería algo antigua porque la lluvia se hacía cada vez más intensa y no deseaban mojarse más. Hisoka observa el lugar y nota que en las paredes había fotografías de años anteriores.
-Creo que aquí estaremos bien, este sitio ya no es tan concurrido como antes.
-Nani? A qué te refieres con eso Tsuzuki?- pregunta el chico tratando de deducir que, antiguamente Tsuzuki había estado ahí.
Una señorita se acerca a ellos para hacer el pedido y ambos piden un café, aunque Tsuzuki pide un pastel de chocolate mientras que, Hisoka suspira diciendo hasta cuándo dejaría de ser tan glotón.
Al cabo de unos cuantos minutos, Tsuzuki posa su mirada en él fijamente, se estaba preparando para hablar porque, recordar todo era un poco complicado por los años que han transcurrido.
-Bueno Hisoka, espero que no cambies de parecer… lo que te contaré, no es algo que siempre haga. Te seré sincero, eres el primero con el que me atrevo a hablar de esto- musita el shinigami ligeramente serio.
Por un lado, se le hacía extraño eso, Hisoka no entendía por qué de pronto su compañero decidió platicarle algo tan complicado para cualquier shinigami: la vida terrenal. De otra forma, desde el interior del chico, era algo excepcional porque, podría conocerlo un poco más. Al mismo tiempo, entender un poco más a ese shinigami tan extraño, tan fuerte… tan hermoso y único.
Y comienza a hablar, Tsuzuki junta sus manos y mira a Hisoka mientras le cuenta ese oscuro pasado que lo transformó en el ser que es en el presente. Lo que ninguno de ellos se percata era que, desde el fondo de ese lugar, había alguien más que los conocía perfectamente. Los ojos plateados de ese hombre miraban con toda atención a Tsuzuki sobretodo, parecía que, también estaba interesado en conocer un poco más a su más grande ambición. Simplemente sonríe un poco.
Fin del prólogo
Y luego de mucho tiempo…. Bunny Saito está de regreso!!!! Y en esta ocasión con una historia un poco diferente a lo que fue Lust for Blood.
En esta ocasión me centraré en la obra de Yoko Matsushita como tal, es decir, no será un mundo alternativo sino que, un fic tomando datos del anime y del manga sin generar cambio alguno. Como leyeron en el prólogo, Tsuzuki le contará a Hisoka su vida, tanto la terrenal como sus primeros años siendo shinigami.
Creo que muchos ya sabemos la vida de Tsuzuki pero, quiero plasmar en esta historia una visión propia, claro, tomando los elementos que plantea Matsushita-sensei. De esta forma, quiero avisar de antemano que, Hisoka Tatsumi y Watari (también Muraki) no aparecerán mucho en esta historia. Ellos aparecieron en el prólogo porque se trataba de una situación común. A partir del siguiente capítulo no aparecerán, estarán en su lugar otros personajes que (desde el punto de vista de mi visión), fueron de gran importancia en la vida de Tsuzuki, así que no se espanten si por ahí tiene otro amorío o no sé XD; aunque es posible que haya alguna que otra sorpresa con respecto a los personajes comunes de Yami no Matsuei.
Otra cosa que es importante que mencione, esta historia tendrá algún que otro spolier (con respecto a la vida de Tsu), tanto del manga como del anime. En algunos casos se enfocará más al manga y bueno, en caso de ser necesario (y ustedes lo pidan o lo preguntan) daré las explicaciones necesarias, sobretodo con la parte de los shikigami cuando llegue ahí. Esto lo hago porque n.nUU se que hay algunas personas que no han tenido la oportunidad de leer el manga y bueno, así las animo un poco para que se acerquen a él.
Creo que es todo por ahora, nos vemos en la siguiente actualización de esta historia y bueno… espero que sea de su agrado!!!. Prometo que tendrá de todo, aunque sabemos que la vida de este shinigami no fue muy agradable que se diga u.u….así que, me gustaría conocer su opinión! muchas gracias por acercarse a esta historia!!!!
Con mucho cariño,
Bunny Saito n.n