NOTA: SAINT SEIYA NO ME PERTENESE, todos los derechos son del señor Kurumada, yo solo los hago sufrir un rato xD


Nunca creí estar más ilusionado en mi vida.

Veo el paisaje de la autopista y comienzo a pensar en todo lo que me espera a partir de hoy. Aunque básicamente he inspirado estas palabras a acorde con la música que escucho en este momento.

¿Quién llegaría a pensar que un chico como yo, tranquilo, hogareño y con dificultad para hacer amigos está involucrado con alguien completamente distinto? Si bien había pensado que este viaje había sido una muy mala idea…

… ahora lo confirmo al ver al chico rubio de ojos jade que duerme placenteramente en el asiento a mi lado. Aunque sus ronquidos no me quitan el buen humor al tratar de redactar en mi fiel compañera de viaje todos los hermosos paisajes que estos azulados ojos pueden observar. Empezando desde los paisajes rocosos, matizados con grandes toques en arena y verde; con el cielo en tonos azul – grisáceo y las Cumulonimbos surcando como si de caballos salvajes se tratara y ser testigo de cómo los rayos del sol luchan para sobresalir y radiar con luz nuevamente. Todo mientras desciendes lentamente por la montaña más alta para luego ver el infinito desierto que estera paciente a tu llegada.

Creo que hubiera aceptado de estar del lado de la ventanilla para poder apreciar mejor los verdes valles a las faldas del cerro y no tendría la necesidad de estar viendo sobre el hombro de mi querido compañero de viaje.

En cuanto a mi decisión de tomar este viaje en cuenta… es fácil, mi mejor amigo…

Toda esta locura es gracias al tipo que ronca a mi lado.

Todo comenzó hace tres meses atrás, cuando regresaba del trabajo medio adolorido por haber empujado un carro lleno de latas, lo primero que note al llegar a la entrada de la casa es que en el buzón había una carta con la dirección de mi casa en la india, cuando en mi vida había recibido una desde que decidí cambiar mi ritmo de vida. Lo que me temí era realmente cierto. La carta confirmaba mis sospechas en cuanto al deceso de algún miembro de la familia… en este caso fueron tres… no daré meas detalles, aun trato de sacar eso de la cabeza.

Ese fue el inicio de la racha de mala suerte en mi joven vida.

A la casi edad de veintitrés años tuve una racha de infortunios catastróficamente significativa, primero llego esa dichosa carta, dos semanas después me despiden del trabajo sin justificación aparente, en las siguientes tres semanas los que habían sobrevivido al accidente al fin dieron su brazo a torcer y decidieron dar marcha para siempre, cuatro semanas después mi pareja me engaña en mis narices, no conformes con eso, mi fiel mascota muere atropellado y para finalizar con broche de oro… me quede completamente solo, ni un supuesto amigo para ayudarme a confrontar con todo lo que ocurrió. Bueno o eso creí.

Era la mañana de un típico lunes, tenía que ingeniármelas para poder llegar a tiempo a la primer hora de filosofía, mientras que en mi mente trataba de lidiar con algún plan maniaco para poder poner fin a mi racha de mala suerte (no es que sea supersticioso pero las circunstancias así lo meritaron).

Caminaba distraídamente por la explanada del campus, no puse atención en el camino hasta que me estampe de lleno con lo que creí que era un poste de luz y caí sin remedio sobre mis rodillas.

- ¿estás bien? – esa voz me pareció familiar por algún motivo

Cuando levante la mirada, frente a mi estaba un chico de piel morena, cabellos dorados, ojos como si fueran relucientes jades y una sonrisa de diamantes que era inconfundible…

- ¿Shaka? – sus ojos se abrieron de par en par - ¿realmente eres tú? Han pasado más de ocho años desde que nos vimos la última vez…

- ¿Aiolia? ¿eres tú? – me sorprendí de verle, hace tanto tiempo para ser honestos años en los que no había sabido nada de él, desde que se mudó con su hermano mayor Aiolos a alguna parte de creta – cuanto tiempo ha pasado desde entonces…

No pude evitar dibujar una sonrisa en mis labios, el chico de piel morena me da una mano para ponerme de pie, observe el reloj de mi móvil y me resigne a dar por perdida esta clase. Regrese mi mirada a Aiolia, no podía dejar de contemplar lo mucho que cambio en todo este tiempo.

- ¿tienes alguna clase libre? – pregunto sereno

- En este momento… tengo tiempo de sobra – le regrese la sonrisa

- Que bien, vamos a la cafetería tengo mucho que contarte amigo – su rostro mostraba la confianza con la que lo recuerdo, orgulloso y siempre de buen humor, me paso un brazo por el hombro y comenzamos a caminar.

Pasaron tres semanas más, ahora que el me confirmo que regreso a Atenas para terminar su carrera en la universidad me siento más tranquilo de saber que alguien es repelente a la mala suerte que tuve las semanas pasadas; me contó que él y su hermano decidieron regresar a la universidad en Atenas porque en creta no había completas las carreras de ambos. Aiolos está estudiando la maestría en Derecho y Aiolia estudia Comunicaciones.

Una noche, estaba en casa de Aiolia, estudiábamos para uno de los exámenes, entre pláticas y bromas salió el tema.

- Y si nos vamos de trotamundos por un tiempo – La propuesta me tomo por sorpresa – lo que digo es que deberíamos de tomarnos un tiempo, descansar de nuestros deberes, conocer el mundo, adentrarnos a la aventura, anda Shaka, eso sería maravilloso…

- Suena bien, ¿pero cómo sobreviviremos?

- Eso es fácil, tengo ahorros de hace más de seis años, y me imagino que tú también, luego podríamos trabajar en los lugares a donde lleguemos y así mantenernos, será una gran aventura….

Realmente aun no creo que me convenciera de tirar todo al demonio y comenzar con esta locura. Lo único que tengo que agregar es que fue la mejor decisión de mi vida.


* Serie de historias Cortas de Shaka y Aiolia, posteriormente con forme avance la historia se unirán mas personajes... dejen en los comentarios a quien les gustaría que se encontraran en el siguiente capitulo, eso me ayudaría mucho.

**Digamos que tenia que escribir esto, se me ocurrió cuando salí de viaje la semana pasada, espero que esa de su agrado... en cuanto a las otras historias... aun sigo tratando de des bloquearme...