Apenas pasaba de medio día y toda la mañana había entrenado en el salón del dojo, como era su costumbre desde que vivía en ese lugar. Ni siquiera estaba consciente de cuando empezó a vivir de aquella manera, sólo sabía que las circunstancias le habían empujado lentamente a ello y honestamente, no había puesto resistencia, pues la situación era perfecta... al menos al inicio.

Suspiró mientras descansaba mirando a ese gran árbol en el patio.

El mismo árbol que había sido testigo de muchas aventuras junto a sus amigos en el pasado, pero que también guardaba algunos secretos y muchas peleas, más de las que quisiera admitir.

Y a pesar de que los recuerdos llegaban por montones, parecía que nunca había pensado tanto en el futuro como en esos últimos días ¿o meses? No tenía muy claro el paso del tiempo. Sólo sabía que habían pasado más de un par de meses desde la última vez que lo vio, ahí mismo, cuando él ignoraba felizmente lo que sucedería la mañana siguiente.

-Rei…-Escuchó una voz preocupada.- Te saltaste la comida otra vez…

No estaba seguro de si era una llamada de atención o sólo una expresión más de preocupación.

-Lo siento, no tengo apetito…

-Tú nunca tienes apetito.- Murmuró el rubio en claro signo de reproche.- ¿Sigues pensando en eso?

Por supuesto, Rei sabía de que hablaba.

-No hay forma de que no piense en eso… o en él.- Gruñó, el tema le ponía realmente de malas.-Pero aunque le dé mil vueltas en mi cabeza, aún no tengo una respuesta.

Recordaba como había pasado de la confusión a la tristeza, después a la incertidumbre y finalmente al enojo, donde se encontraba ahora. Porque cuando pierdes a la persona que amas es difícil saber que no puedes estar más con él -o ella-, es sumamente doloroso. Y Rei pudo haber llorado en tantas ocasiones y aun así no traerlo de vuelta. Triste y desesperado, pero más que nada confundido, porque lo que más le hacía rabiar era saber que se había ido por decisión propia, sin decir a dónde o cuándo volvería.

En cierta forma, no le sorprendía. Kai tenía esa costumbre de desaparecer un tiempo y volver. Desde que estuvieron juntos en los Blade Breakers era quien más veces les abandonó sin decir una palabra… pero a pesar de su silencio y reserva, siempre volvía. Y era algo en lo que confiaban, sobre todo él. Sus desapariciones -porque no podía llamarlos de otra forma- no duraban tanto tiempo, y aunque no daba explicaciones siempre regresaba, sin dudas, a los brazos de Rei.

Pero habían pasado casi 5 meses y nadie sabía nada.

Sus amigos desesperados contactaron a Yuriy quien sólo escribió de vuelta "él está bien", no dijo nada más, pero si el pelirrojo sabía de él, sólo podía significar que se encontraba en Rusia.

-Rei… Creo que debemos ir a Rus…

-¿Porqué? -Preguntó cortante. Aunque no era algo que no hubiera pensado antes.

En algún momento de paranoia llegó a pensar que quizá estaba recluido en algún lugar contra su voluntad, pero después, una foto que recibieron en la BBA gracias a Boris, le hiso darse cuenta de que estaba entrenando en un centro de Beyblade junto a los otros rusos.

No parecía exactamente que estuviera ahí contra su voluntad.

-Por qué si él no se comunica con nosotros…

-Él tiene forma de hacerlo.- Respondió firmemente, poniéndose de pie y asegurando la banda en su frente.- Si él no habla con nosotros es porque no desea hacerlo.

Caminó hacia adentro del dojo y se preparó para seguir entrenando.

Al menos de esa forma podía darle un propósito a la rabia que sentía. Esas ganas de mandarlo al demonio, justo como él lo estaba haciendo, reprimiendo el impulso de irse de ahí para que cuando volviera no lo encontrara y sintiera esa incertidumbre también. Hacerle saber que no le tenía por seguro.

Gruñó al momento que hacía un movimiento de combate combinado y la habitación retumbó cuando pisó con fuerza la duela de madera.

-Pffff.-Respiró fuertemente, todavía frustrado.

-¿Rei?- Escuchó desde la puerta unos segundos después. Era Takao.- Nos asustaste, creo que entrenas muy duro…

-Disculpa Takao.- Respondió limpiando el sudor de su frente.- Iré a darme un baño…

Estaba a punto de caminar hacia el chico cuando vio a una persona detrás del peliazul e inmediatamente se congeló en lugar.

-Alguien…- Empezó a decir nervioso el de la gorra.- Alguien regresó… y bueno…. Los dejamos solos.

Apenas había salido de la habitación cuando dejó ver de quien se trataba. El chino había levantado la mirada y se encontró con esos ojos amatistas mirándole con esa frialdad característica.

-Kai…- Dijo casi en un suspiro, pero tres segundos después la fiereza regresó a su mirada.- ¿Qué haces aquí?

El ruso sonrió.

-No esperaba esa reacción.- Dijo caminando hacia él con paso decidido.- Considerando la última vez que nos vimos.

Rei le devolvió una mirada mortal, observando cada movimiento del chico con detenimiento.

-¿Es que no vas a saludarme? – Llevó su mano a la barbilla del chico.

No recordaba que Kai fuera tan cínico, quizá era influencia de aquellos rusos con quienes de seguro había pasado todos esos meses.

-La vez pasada estabas tan feliz de verme otra vez.- Antes de que se acercara más, Rei sujetó la mano con un poco más de fuerza de lo normal, deteniéndolo bruscamente.

-¿Cómo puedes decir eso sin sentir ni un poco de culpa?

-¿Cómo sabes que no siento culpa?

Rei le miró detenidamente, todo en él era tan familiar, sus ojos, su cabello, sus labios, todo era exactamente igual a como recordaba, parecía que no había pasado ni un día desde la última vez que se habían visto…

-Estuviste en Rusia ¿no es cierto?

Contrario a lo que creía, Kai sonrió.

-¿Cómo lo sabes?

Pero Rei estaba harto, esa actitud sacada de quien sabe dónde le enfermaba. Lo tomó bruscamente de la bufanda llevándolo cerca de su rostro.

-¿Crees que voy a aguantar esto, Kai?- Dijo procurando que se notara toda la rabia que sentía.- ¿Crees que puedes ir y venir a cómo te plazca sin decirme una palabra sobre a donde irás o cuando volverás?

Kai le devolvía le sostenía la mirada también, ninguno parpadeaba, sólo parecía que intentaban perforar la mente del otro con sus miradas.

-Pensé que tú más que nadie entendería.

Con furia y sin soltarle, Rei gritó frustrado. Si hubiera estado cerca de una de las paredes, la habría golpeado con fuerza.

-¿Entender qué Kai? ¿Qué eres un idiota sin corazón que cree que puede desaparecer sin decir nada mas? ¿Entender que no te importan para nada los sentimientos de las otras personas?

-Supongo que esa es tu forma de ver las cosas, pero tú también eras un espíritu libre...

-¿Espíritu libre? -Dijo con un poco de ironía en su voz.- ¿Eso es lo que eres ahora?

-Tú eras quien iba a donde quería sin decir ni dar explicaciones…

-Eso fue antes de unirme a los Blade Breakers.- Murmuró.- Antes de estar contigo…

-Yo no te he pedido que dejes de hacerlo…

Aquello le cayó como balde de agua fría, tenía razón, Kai nunca le había pedido dejarlo todo por él... simplemente pensó que, al estar juntos, el sentido común haría su trabajo. Le dolía pensar que esos sentimientos no eran lo suficientemente fuertes para hacerle dejar de sentir la necesidad de desaparecer de la noche a la mañana, así como había sucedido con él. No porque sintiera que no podía o debía, simplemente porque el amor que sentía por el ruso era más grande que la necesidad de aventura. Y creía que aquello era suficiente para Kai como lo era para él...

Se equivocó.

-Eres un idiota.- Dijo soltándolo. -Ya no tienes que preocuparte por darme explicaciones.

-¿Qué significa eso Rei?

-Que a partir de ahora puedes ir y venir cuando te plazca, pero ya no esperes saber nada más de mí.

-0-

-0-

-0-

NO HE MUERTOOOOOOOOOO

Dios! He estado planeando este fic por unos meses, la verdad…. La verdaaaaaaad el siguiente fic sería uno que llevo -literal- un año escribiendo y que todavía no termino, pero como es un fic realmente complicado XD y yo soy una simplona, me da miedo empezar a publicarlo y al final resolver una cosa totalmente distinta, así que hasta que esté terminado y resuelto lo publicaré… Ojalá el fandom siga vivo hasta entonces.

Otra de las razones por las que quería publicar un fic KaiRei -si me dieron en "Seguir autor" probablemente notaron que mis últimos veinte mil fics han sido de algo llamado Haikyuu- es porque necesito emocionarme otra vez con esta pareja y vivir y respirar KaiRei por un evento/cosplay que muero por hacer en un evento de noviembre.

En fin! No sé si haya gente por aquí todavía xD hay temporadas donde siento el fandom como… vivo! Y otras donde no se si seguimos vivas todas ;A; pero me alegra volver a escribir sobre esta pareja -The ultimate OTP-, se siento bonito.

*corazones*