Bungou Stray Dogs y todos sus personajes son propiedad de Asagiri Kafka y Harukawa Sango.
• Autora: Tooru
• Palabras: 235
• Advertencias: Posibles faltas de ortografía y gramática, OoC no intencional
• Promtp: Muffling kink
—¡Hmmg!
Chuuya parece sonreír de lado, aunque Dazai no puede distinguir en su totalidad las expresiones ajenas. No cuando tiene los ojos llorosos y la cabeza le da vueltas.
Lo único que el castaño alcanza a distinguir en su estado, es el movimiento de los dedos de Nakahara en su interior.
(«Ese maldito enano...», piensa Dazai con el poco raciocinio que le queda.
La mordaza sobre su boca le impide jadear por un poco de aire, y su pecho arde por la falta de oxígeno en su organismo.
.
Chuuya sigue presionando sus paredes, y Dazai se remueve e intenta gritar de dolor y placer. Pero la, ahora, húmeda mordaza sobre su boca se lo impide.
Y Nakahara parece reír de manera burlesca, a lo que Dazai le dedica una mirada de odio antes de sentir otro largo dedo entrar forzadamente a su cuerpo.
Los espasmos que su cuerpo da de manera un tanto involuntaria divierten al pelirrojo que no deja de presionar en los puntos que son más sensibles.
Dazai grita, jadea y gime al sentir los expertos dígitos moverse con total libertad en su interior. Y se siente tan patético de regalarle esos vergonzosos sonidos a alguien como Chuuya.
Pero le es inevitable no sentir tanto placer cuando Nakahara sabe qué puntos tocar, y la mordaza en su boca está tan apretada que siente el sabor de la tela en sus papilas gustativas.
