Buscando a Olivia
1ª Parte

Olivia abre los ojos, se da cuenta que no está en el despacho de Peter, no es nada parecido. Recuerda que le estaba confesando todo lo que había hecho y las razones de por qué necesitaba ocultarlo, y recuerda también como de confusa se sintió al saber todo aquello, su cabeza estaba a punto de estallar y de pronto, dejó de oír la voz de Peter, estaba sola. Miró a su alrededor y todo había cambiado, ya no se encontraba en aquella oficina, sino en el apartamento de la Otra.

- "¿Cómo ha podido ocurrir?" Se pregunta aterrada "No puede estar pasando otra vez"

Tiene que salir de allí lo más rápido que pueda, encontrar la forma de volver a su mundo. Pero algo ocurre con su cuerpo, siente como si no pudiese moverse con libertad, mira hacia abajo y descubre que ¡Esta embarazada! Su confusión aumenta ¿Qué le está pasando? ¿Es acaso un sueño? No, no puede ser, todo es muy real, siente el frío que entra por la ventana, siente como algo se mueve en su interior, una patada y siente nauseas. Se mira al espejo y no ve su reflejo, si no el de la otra Olivia

- "¿qué ha pasado?" se vuelve a preguntar. De repente oye como alguien está intentando entrar en el apartamento. No sabe qué hacer, tiene que esconderse. Demasiado tarde, Walternativo entra y la saluda con una gran sonrisa, lleva una bolsa que deja en la mesa

- ¿Qué tal estas hoy? – Pregunta el Secretario – te traigo comida. ¿Has tomado ya tus medicinas? – Olivia no sabe que contestar, se siente abrumada. Tener a su lado a Walternativo le hace revivir todo lo que le hizo sufrir durante su cautiverio y apenas puede decir nada. – Veo que hoy no tienes ganas de hablar. No me extraña. Siento que no puedas disfrutar de un embarazo normal, pero necesitamos a tu hijo para que Peter vuelva. Ya hablamos de esto Olivia

- Si…si – acierta a decir ella

- No te preocupes, todo está controlado. Deberías aceptar el venir a vivir al Departamento de Defensa, allí estarías mejor

- Pre…prefiero estar aquí – Contesta Olivia, quizás su alternativa tendría una buena razón para no aceptar.

- Pronto tendrás a tu hijo en brazos, y seguro que Peter estará aquí para conocerle y para estar contigo ¿No te parece estupendo?

- Si… lo estoy deseando

- Por supuesto que si - responde Walternativo sonriendo – Peter debe de echarte de menos y seguro que está deseando volver a verte, pero esa gente debe estar impidiendo que os reunáis. Vuestro hijo le motivará aún más para volver a tu lado. Te ama, Olivia, y quiere estar contigo… Bien… me tengo que ir, debo volver al Departamento de Defensa. Si necesitas algo, sólo tienes que llamar o avisar al equipo de seguridad, ya sabes que están en el apartamento de al lado – dice mientras le da un beso en la frente – todos vamos a ser muy felices, ya verás.

Olivia se queda sola, aún más angustiada que antes. Todo es demasiado real para ser un sueño. No puede entender como ha pasado, pero comprende que está ocupando el cuerpo de la Otra, que se encuentra en su cabeza y que está viviendo su vida. Y saber que está embarazada, que está esperando un hijo de Peter, le hace sentir todo aquello que la torturó cuando regreso y que le hizo dudar de si misma y de los demás.

"Peter va a ser padre" – se repite - "Y quieren atraerle con ello" – Tiene que salir de allí, encontrar la forma de volver a casa. No quiere permanecer en ese apartamento durante mucho tiempo más, esa no es su vida. Y por lo que le ha parecido entender, Walternativo está experimentando con ella, y a pesar de sus palabras no confía en que esta Olivia pueda sobrevivir al parto o al mismo Secretario.

Tiene que escapar, pero sabe que hay agentes en el apartamento vecino, y tiene que evitarlos. Si pudiese escapar por la ventana, pero en su estado eso sería algo complicado, no tiene la agilidad suficiente como para ir saltando de ventana en ventana.

Decide salir por la misma puerta, intentará hacer el menor ruido posible, y si sus guardaespaldas se enteran ya inventará alguna excusa, pero hará lo posible para evitarlo.

Con cuidado abre la puerta y de la misma forma la cierra, sin llegar a encajarla. No parece haber movimiento en ninguno de los apartamentos, quizás ha tenido suerte. Piensa que quizás en la calle también haya un coche de vigilancia, y recuerda la puerta de servicio de su edificio, se trata del mismo lugar, así que también existirá aquí.

Con cautela, sale al exterior, no hay coches aparcados, de todas formas estará atenta. Mientras camina por la calle, aterida de frío, agotada por el peso que lleva, sin saber dónde ir, piensa en cómo ha llegado hasta esa situación, y tiene esperanza de volver a casa, a su cuerpo, de la misma forma en que llegó, aunque no sabe que tiene que hacer para conseguirlo.

Piensa en esos últimos momentos, lo feliz que se encontraba con Peter y lo traicionada que se sintió cuando lo comprendió todo, y ahora sabe que todo le da lo mismo, sólo quiere volver con él y sentir como la rodea con sus brazos. Se encuentra más perdida de lo que creía, no sabe qué hacer, considera llamar a su madre, es decir a la de la Otra, pero lo más seguro es que la tengan controlada. Decide entonces quitarse el intercomunicador de la oreja y tirarlo, una posibilidad menos para encontrarla. Se acerca a una cabina y marca un número, aún recuerda el teléfono de Henry, seguro que él no estará vigilado.

- ¡Vaya sorpresa! ¿Cómo que estás aquí? ¿Es que no pudiste volver a casa?

- Lo hice, si… pero no sé qué ha ocurrido ahora. Tienes que ayudarme Henry. Por favor.

- Bien, dime dónde estás. Iré a recogerte

- en el barrio chino…

Pasada una media hora, Henry aparece con su taxi. Olivia se acomoda en el asiento de pasajero y sonríe agradecida

- Estas… estas embarazada ¡y de mucho! Pero si no hace ni 5 meses desde la última vez que te vi.

- No soy yo… es ella, mi alternativa… han hecho algo con ella para atraer a Peter

- No entiendo nada de lo que me estás diciendo

- Ni yo misma me lo creo, pero es cierto…

- ¿Y qué hacemos ahora? ¿Le pido a mi primo otra vez el barco? ¿Te ocurre algo?...