LIBERTAD

CAP 1

"Memorias"

-Piensas estar observando el horizonte todo el día? Te aseguro que por mucho que lo sigas mirando, este no va a cambiar… sale el sol, se pone el sol… ya superalo…

Diego rodó los ojos intentando conservar la paciencia. A pesar de que sabía que su amigo Manfred no tenía malas intenciones, su intento de animarlo o de para variar, hacerlo mover del mismo sitio donde había estado estancado por tanto tiempo solamente comenzaba a irritarlo… y eso que él no era de carácter tan voluble como el enorme mamut! Quizás si se dejaba llevar a veces con Sid… pero quien no se desesperaba con este y sus tonterías?

En realidad eran muchas cosas las que estaban sucediendo y no se sentía ni siquiera con las fuerzas como para explicárselo al mamut, por muy amigos que fuesen. Especialmente ahora que el otro estaba concentrado en crías a su hiperactiva hija que era experta en causarles migrañas no solo a sus progenitores sino al resto de los que la rodeaban, como por ejemplo él cuando intentaba usarlo de consejero o alguna clase de confidente.

Él ya no era adolescente como para estar en esas cosas!

Y tal vez eso era parte del problema.

Últimamente había estado soñando con tiempos pasados, situaciones muy remotas que iban mucho mas allá del tiempo, a una edad en la que él fuese joven y terminase casi arrastrado a pertenece a una manada que no conocía y cuyo líder de inmediato lo había tomado para sí, forzándole a aceptar cada decisión y orden que este diera y convenciéndolo de que solamente su voz y su camino eran los correctos para todos los de su raza

Pero ya no podía mas

No creía continuar aguantando que la presencia de Soto se hiciese mas clara con el pasar de los días y que ahora tuviese miedo de cada sombra que parecía rugirle y gritarle que en realidad no había muerto, que estaba por ahí en alguna parte solamente esperando a recuperarse por completo para ir tras él y hacerle pagar por todos esos años en que tuviese que haber pasado penurias para completar su venganza contra los tres amigos.

Afortunadamente… y si es que algo así ocurría, Shira ya no estaba a su lado.

Habían pasado un buen tiempo juntos y había creído que podría haber realmente algo mas y que finalmente podría hacer una familia con ella pero…

Existían cosas que nunca se irían y que formaban parte de él. No podía engañarse. Incluso en la muerte aún le pertenecía a Soto y probablemente esa era mucho mejor venganza que simplemente hacer acto de presencia y matarlo con sus garras.

No tenía remedio

-Diego… otra vez estás soñado despierto…

-Si… soñando despierto- dijo de pronto el dientes de sable parpadeando para luego, ver de lado a su amigo- qué era lo que decías Manny?

-Que dejes de quemarte las pestañas observando el atardecer y regreses a casa- gruñó el elefante respirando profundo- que ya va acercándose la hora de la cena y no aprendimos a tolerar tus comidas caníbales solo para que las dejes ahí produciendo moscas… sabes que Ellie detesta que esas cosas estén rondando alrededor de donde duerme Morita…

-Si, claro… la carne y la cena, por supuesto…

Dijo el tigre tallándose la frente con las garras antes de darse la vuelta para seguir al mamut que comenzaba a avanzar con lentitud de regreso a la zona donde tenían su hogar en común; Diego avanzó con lentitud por detrás de su amigo pero aún así en su mente se mantenía con claridad el último sueño que había tenido, con Soto saltando sobre él desde una roca cercana y apretándole contra el suelo para luego mostrarle las imágenes de sus amigos destrozados por sus garras.

El dolor era insoportable en aquellos momentos y despertaba sudando y con el pelaje en punta

A ese paso, dejaría de dormir en absoluto

-Diego…

-Ya voy, ya voy- suspiró el felino antes de dar un último vistazo hacia atrás y luego, continuar su camino hasta divisar las luces de las fogatas producidas por el perezoso

Quizas… si se esforzaba, esa noche no tendría que soñar mas con él.

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En alguna parte de aquella zona, en el ingreso al territorio donde vivían tantos animales en conjunto una sombra se deslizaba por debajo de los árboles y las rocas con un pensamiento fijo y el brillo de los ojos dejando ver la decisión en obtener aquello que se le había ordenado

Aunque en parte, la decisión de tomar aquella misión venía causada por otros asuntos

"Ve por él… quiero saber donde vive, quién está a su lado y cuáles son sus puntos débiles porque es seguro, que ahora los tenga"

Por supuesto. Los dientes de sable no se suponía que tuvieran estos pero ahora que el felino tenía familia seguramente ya se había fabricado de varios puntos de fractura que con facilidad podrían hacer tronar uno por uno hasta dejarlo completamente desprotegido; o al menos esa era la idea que tenía la criatura que le había enviado por delante para revisar el terreno y comenzar a aprender los habitos de vida de todos aquellos

Pero en realidad sus intenciones eran muy, muy distintas

Quería volver a verlo. Quería asegurarse de que en verdad se encontrase bien y que aquellos rumores que hubiese escuchado hacia tiempo no fueran solo eso.

Que el tigre dientes de sable de pelaje dorado había abierto su corazón, había ganado su libertad y que finalmente tenía una familia a la cuál le importaba y que les importaba; que era feliz e incluso sonreía y hacía bromas o jugaba con otros a pesar de conservar aquel fiero orgullo que lo había caracterizado como uno de los mejores cazadores que la manada hubiese haber podido dar jamás en todos sus años de unidad.

Que había logrado… hacer amigos

Que todos eran capaces de dar la vida por los demás y que había aprendido la importancia de confiar.

Tantas cosas…

La figura se detuvo y sonrió un poco, descansando el cuerpo unos momentos sobre una roca cercana intentando figurarse en qué sitio de aquel pequeño paraíso podía encontrarse el otro felino… cuando su oreja se movió al detectar un sonido extraño y apenas había tenido tiempo de voltear cuando una sombra muchísimo mas grande le había cubierto, sin darle tiempo ni siquiera de gritar o de quejarse al respecto.

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