Aquí el primer oneshot. Ambientado después del 2x05 (Cuando la rama se rompe). La canción es Let her go de Passenger. Y lo narro en primera y segunda persona desde el punto de vista de Beckett.

watch?v=RBumgq5yVrA.

Llego a casa después de haberme pasado por la morgue. El turno ya ha cambiado y mi visita ha sido a Lanie. Todavía no había realizado la autopsia a mi joven víctima y ha tenido poco que contarme.

Castle se marchó a casa desde la escena del crimen, dijo algo de cenar con Martha y Alexis. Supongo que querrá contarles que ha rechazo la oferta de escribir sobre cierto agente secreto británico y que en lugar de eso va a escribir otros tres libros sobre mí.

Lanie se ha dado cuenta de que no estaba allí con ella, que algo rondaba en mi cabeza. Aun así por una vez ha sido discreta y no me ha sometido al tercer grado. Aunque supongo que Expósito ya le habrá contado la bronca de ayer con Castle en la presentación del libro.

Hemos quedado para mañana temprano para que me de los detalles de la autopsia y sé que entonces no me libraré de sus preguntas. Lo único que espero es haber aclarado mis ideas para entonces y salir airosa de su interrogatorio.

Decido no cenar, no tengo hambre. Lo que si tengo es ganas de un baño de espuma, una copa de vino, buena música y algún capítulo de Ola de Calor. Preparó todo y mientras lo hago Castle aparece de nuevo en mis pensamientos. Recuerdo lo molesta y enfadada que estaba ayer con él. Y muy a mi pesar tengo que reconocer que no era porque quisiera escribir sobre James Bond, si no porque no iba a escribir más sobre mí.

Es cierto que llevo meses negando el que yo sea Nikki Heat, incluso se lo he negado al capitán Montgomery esta misma mañana. Pero la verdad es que si soy Nikki Heat, si soy su inspiración. Quiero pensar que soy la musa de Richard Castle, como a él le gusta llamarme. Porque Castle siempre ha sido mi escritor favorito. Porque aunque me cueste reconocerlo es un gran compañero, durante este último año me ha ayudado en infinidad de casos, además cuando esta él soy más feliz, disfruto más de mi trabajo y quiero creer que eso me hace mejor detective.

Introduzco mi cuerpo desnudo en la bañera y abro Ola de Calor por la segunda página.

"Para la extraordinaria KB y todos mis amigos de la 12"

¿Para la extraordinaria KB? "Va en serio, Kate, eres extraordinaria." Resuena en mi cabeza la voz de Castle.

-¿Y si soy tan extraordinaria, porque no me quieres, eh Rick?- Me permito expresar en voz alta en el silencio e intimidad de mi cuarto de baño. Tal vez porque tú no le dejas Kate me respondo a mí misma. Es verdad, hacía mucho que no sentía todo esto por ningún hombre. Hacía mucho que no necesitaba la sonrisa de nadie para tener un buen día, la realidad es que hacía mucho tiempo que no tenía un buen día. Pero con él es distinto. Es cierto que no le soporto. Continúa siendo un crío la mayor parte del tiempo. Pero sus ideas a veces no son tan descabelladas y muchas veces nos conducen a buenas pistas, a buenas resoluciones.

En estos dos días me he dado cuenta de que no quiero que se vaya, no todavía. No le soporto pero creo que tampoco soportaría su ausencia. Me he acostumbrado a tenerle, a sus teorías, a sus sonrisas, a sus miradas, a sus manías, a esos café que me trae. Y creo que es verdad no quiero que se vaya, no quiero volver a ser la aburrida Detective Beckett, que aunque eficaz en su trabajo, no sabe disfrutar de él.

Tal vez sea demasiado pronto para pensarlo, para reconocerlo, pero creo que le quiero. Quiero conocer más de él, quiero verle fuera de la comisaria. Quiero conocer su vida, dios, quiero que conozca la mía. Quiero ser algo más que compañeros de trabajo, quiero que sea mi amigo.

-Qué diablos Kate, lo que quieres es besarle.- me digo a mi misma.

Y aquí estoy en la bañera con su libro, nuestro libro entre mis manos, pensando que quiero besarle, pensando que le quiero. No paro de repetirme que no lo haga, que no me enamoré de él. Llevo prácticamente repitiéndomelo desde el primer día, durante más de un año. Y no ha tenido ningún resultado, aquí estoy reconociendo, lo que llevo meses negándome. Es un mujeriego, un viva la vida, un caso perdido. Pero a la vez es la persona más buena y generosa que he conocido, tal vez sea por esa inocencia de niño que trata de mantener aunque nadie lo vea.

Trato de apartar una vez más estos pensamientos. Cierro los ojos y vuelvo a abrirlos para encontrarme de bruces con el primer capítulo de Ola de Calor.

No puedo enamorarme de él, no puedo pretender querer tener algo con él. Cuando yo continúo deshecha por dentro, cuando continúo sin superar lo de mi madre después de 11 largos años, no cuando sigo sin resolver su caso. No quiero hacerle daño a nadie y menos a él, no se lo merece.

Y hoy es él día en el que me hago la promesa de tratar de resolver el asesinato de mi madre por algo más que una venganza, por algo más que hacerle justicia. Lo hago para darme la oportunidad de tener algo con Castle.

Vuelvo a reflexionar de nuevo, ¿y si él no siente lo mismo por mí?. Por dios Kate, ha renunciado a James Bond por escribir tres libros más sobre ti, ¿qué más necesitas? Se juega la vida casi a diario por seguirte en cada uno de tus casos. Te lleva un café a diario, para que tú le regales esa sonrisa matutina que solo tiene un dueño y es él.

Puede que Katherine Beckett se haya enamorado de Richard Castle, pero no más de lo que él lo está de ella, y con esto último tratas de convencerte que estáis en igualdad de condiciones, piensas que él tampoco podría estar sin ti.

Finalmente decides apartar al escritor un rato de tu mente, sabiendo que tarde o temprano volverá como cada noche. Pero ahora decides centrarte por fin en su libro. Ese que ya has leído. El mismo del que ya conoces de memoria algunos de sus párrafos.

Puede que sea verdad eso de que no se sabe lo que se tiene hasta que se pierde. Puede que eso sea lo que te ha pasado a ti durante estos días. Castle ha estado a punto de irse de comisaria, a punto de desaparecer de tu vida y no te ha gustado. Has imaginado tu día a día sin él, has recordado tu aburrida vida antes de que él llegará y has decido que no quieres volver a ella.

Seguramente todavía no estés lista. Pero empiezas a reconocer, aunque sea para ti misma, que estas enamorada de él y que no quieres que se vaya de tu vida.

Muchas gracias por leer :)