Hola, el capitulo de debut es gracias al cumpleaños de Shu, fue ayer pero aun asi, nunca estarde para celebrarlo -creo-

Muchas gracias a LOLITA GOTICA, Guest (En Busca de papa), shirayuki-hime, jesyuchiha,anusin.

Disfrutenlo!

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De ninguna manera quería estar en el lugar, ya le era suficiente el no poder dormir lo que quería, como para tener que estar ahora en una estúpida obra, donde para acabar era el protagonista. Y maldijo en voz baja –porque en voz alta ya lo había hecho – de cuando en su Instituto se les ocurrió hacerla con participación de todos en el lugar, y por desgracia no se pudo salvar.

No es como si no pudiera hacerlo, memorizarse los diálogos y escenas, era como aprenderse las canciones que tanto le gustaban, si no tuviera que dejar su sueño de lado lo más seguro es que estaría feliz, pero nadie le podía conceder ese mínimo favor.

-¿Esta listo Sakamaki-sama?- le hablo una de las jóvenes encargadas del vestuario.

Solo asintió con la cabeza, después de todo, su mente estaba más ocupada en no saltar sobre la chica por ser una débil humana que se permitía el toquetearlo Debería esconder sus… ansias, pensó al ver como de su nariz bajaba un hilo rojizo, sangre, olor demasiado característico. La castaña continuaba alisando el pañuelo que a su parecer estaba bien como para que ella viniera. Hace mucho tiempo, el usaba ropa de ese estilo, así que un simple disfraz no era problema para él.

-En cinco minutos sale a escena Sakamaki-sama, recuerde que debe encontrarse con Komori-san- le indico a un pelinegro que a diferencia, parecía un demonio "Como si no lo fuera ya" pensó.

Porque si, nada mejor que haber sacado ambos un papel principal. Luchando por el amor de lo que Yui interpretaba. "La vida no podía quererlo más"

-De acuerdo, pero por favor, ¿podría dejar mi traje en paz?- Reiji no era tan cortes como él creía, Shu tampoco lo era, pero era gastar saliva en las humanas o humanos.

Antes de darse cuenta, se escucho la música de fondo, inundado por completo el auditorio, donde muchos padres observaban la obra en escena, y también alumnos de otros institutos, porque su escuela no podía ser normal, y guardando a los alumnos más poderosos y famosos, a su reputación debía honrar. Aun que le costara admitirlo, para ser solo humanos, la escenografía era perfecta y prácticamente, podrías sentirte en el lugar que trataban de representar.

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Se apreciaba un bosque, con piedras de gran tamaño, mientras parecía ser algo así como un lago en medio del lugar, se escuchaba una música lenta, pero que parecía ser pronunciada con las ramas de los árboles y animales silvestres –que obviamente no había – en medio de todo apareció un resplandor que cegó tan solo unos instantes al público, y al disiparse la luz apareció en medio de la escena, una joven rubia.

Yui había sido elegida como personaje principal femenino, lucía una blusa de tirantes y cuello de tortuga unas mangas que empezaban un poco antes de los codos hasta llegar a todos sus dedos de forma amplia con cortes irregulares, llevaba un short blanco con medias que llegaban casi al inicio del short, pero dejaba ver la piel de esta, aunque por lo blanca podía confundirse con botines del mismo color, unas hermosas alas detrás de ella, con una diadema que parecía de plumas. Era un ángel –en la obra y realmente –

-¿Dónde estoy? ¡Hay alguien aquí!-grito la joven, dejando a más de un espectador encantado, no solo el vestuario, su voz.

-¿Qué hace una sierva del cielo, por aquí?-le pregunto saliendo Reiji con lo que parecía ser una capa sobre sus hombros, la camisa, frac, llevaba una bufanda a los costados con una cruz invertida, botas y pantalón. En negro pro completo.

-Mi nombre es Mitsuki, ¿Qué es este lugar? Estaba allá arriba, pero me he perdido, ¿podrías ayudarme?- le pregunto la joven mientras sonreía.

-Mmmm… Es la tierra, deberías irte cuanto antes, ¿No te dijeron que este lugar es peligroso para un ángel? Mas si es uno como tu-sonrió, las pocas veces que las personas vieron sonreír a Reiji, tuvieron que ir a un psicólogo.

-¿Cómo salgo de este lugar?-le volvió a preguntar, viendo para todos lados, confundida

-Ves el sendero, síguelo y llegaras al pueblo-le indico con una sonrisa misteriosa, mientras desaparecía de su vista, dejando solo una pluma de negro.

-Si quieres mi ayuda solo llámame- y con aquel susurro desapareció de la vista de la joven.

La joven ángel siguió el camino por el sendero, solo era un camino, de rocas, pero le era bastante extraño ver algo como eso, mientras más caminaba empezaba a ver seres como lo ella, más o menos, les faltaban alas, pero aparte de eso, todo era normal. Algo asustado choco contra alguien, pidió una disculpa rápida aunque el chico no le prestó demasiada atención, mientras daba la vuelta, se encontró con un muro. Por lo que confundida se dejo caer.

Llevaba horas vagando, primero por el bosque, después por cómo le había dicho aquel chico, un pueblo, estaba asustada, nadie le ayudaba a encontrar a quien buscaba. Estaba asustada, desesperada por llegar, y esas simples acciones como frotarse los ojos le eran suficientes al público como para saberlo.

-Disculpa, ¿estás bien?-sus ojos rosas se elevaron hasta toparse con los azules de quien le hablaba.

Por un instante ambos se detuvieron, no solo porque lo dictaba el libreto, sino mas bien, desde el momento en que se conocieron, se vieron a los ojos y acabaron hipnotizados, así como ahora, Shu lentamente acerco su mano hasta la de Yui que acepto con rapidez, recibiendo ayuda para levantarse. En ese momento, sin saberlo, al ver esos hermosos ojos, el lamentable ángel se enamoro.

-Muchas gracias, estoy perdida, y no sé donde estoy-suspiro la rubia con gesto abatido, notando aun sus manos unidas, se sonrojo.

-No te preocupes, puedes venir conmigo, por cierto mi nombre es Akira, ¿y el tuyo?-

-Soy Mitsuki, es un placer Akira-san-sonrió un poco dejando su preocupación de lado, solo por breves instantes.

-Qué bonito nombre, tienes que ponerte esto, te harán algo si te ven vestida así-le tendió una capa de color negro, y se la coloco encima, le cubría todo el cuerpo.

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-Se que no es mucho, pero aquí vivo, espero te agrade Mitsuki-el interior era relativamente sencillo, era la primera vez que ella veía algo como eso. Así que suponía, estaba bien.

-No te preocupes, es bastante grande, me agrada, se siente acogedor. Tu eres muy amable- le dijo con una sonrisa mientras veía, todo con extremo cuidado.

-¡Akira-chan! Estuve esperándote todo este tiempo, aun faltan cosas por arreglar-una chica de cabello verde se mostraba, sus ojos eran de color rosa, y sonreía demasiado, sin percatarse de la rubia.

-Sakura, me estas ahogando, ella es Mitsuki, espero te agrade, la encontré perdida-le explico el chico a Sakura.

-Mucho gusto Mitsuki, mi nombre es Sakura-le extendió una mano aunque su cara no expresaba amabilidad.

-No te agrado-pronuncio inconscientemente la chica mientras veía los rosados ojos, se parecían pero eran diferentes.

-¿Cómo dices eso? Te acabo de conocer, eres demasiado desconfiada-le replico al ver como el chico las miraba con una ceja arqueada. Yui negó con la cabeza

-No, tusojos están fríos, vacios. Son… egoístas- le explico aun con la mirada pérdida. Ser un ángel le ayudaba a reconocer esas cosas

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Después de ese primer encuentro, las cosas sin duda no habían mejorado, porque para la desgracia del joven ángel, Shu –en la obra –estaba comprometido con Sakura, por lo que su amor se veía frustrado. Era triste saberlo, pero a pesar de eso. En el cielo, se le enseño a no ser egoísta, por eso si él era feliz ella lo sería también.

-Mitsuki, te advertí que algo como esto iba a pasar-le dijo el chico de cabello negro que ya había visto antes.

-Disculpa pero no se tu nombre- respondió con nerviosismo

-No es importante, te advertí que los humanos eran demasiado egoístas. Nada de esto te ayudara-le dijo con una sonrisa

-¿A qué te refieres?-le pregunto tomando la defensiva, mientras buscaba el compartimiento de su daga.

-A que, se que amas a ese humano, pero él se casara. Si lo quieres solo para ti, simplemente debes darle esta manzana, y se enamorara de ti-le extendió una manzana con un brillante color rojo, tal vez demasiado.

La joven dubitativa, veía el fruto con extremo cuidado. Era un demonio, era demasiado obvio, por lo que asustada, retrocedieron tan solo unos pasos. Ella conocía esa manzana. Mejor conocida en su hogar como el fruto prohibido. Aquel que mando a Adán y Eva fuera del paraíso. Sin duda, nunca lo tomaría.

-No hare algo como eso, vete de una vez con tus sucias jugarretas, sino quieres que termine contigo-le enseño la daga fuera de su estuche, mientras que le veía con suspicacia.

El demonio tal vez se había marchado, pero ella, de alguna manera sabía que no podría librarse tan rápido del mismo. Solo constaba de esperar a ver qué sucia treta podía usar para cautivarla, y lograr que pecara

-Mitsuki, ¿con quién hablas?-le pregunto Akira por el otro lado.

-Pasa Akira-san, estaba hablando sola, no te preocupes-le dijo con una sonrisa mientras dejaba que su sombría actitud desapareciera.

-*Mitsuki, tu lo quieres solo para ti, ¿Por qué no aceptas la propuesta? ¿Qué daño podría hacerte?-

-Akira-san, ¿Por qué estás aquí?-trato de ignorar a aquella persistente voz

-Quería venir a decirte, que quiero que seas la madrina de Sakura para la boda, será dentro de pocos días-le respondió este con una sonrisa. Sin saber que la joven afligida acepto por obligación, no por deseo de hacerlo.

Todos en el publico, incluso los actores, sintieron de pronto la misma tristeza que Yui, que al quedarse sola solo se dejo caer al suelo, llorando en silencio, abrazando su cuerpo, mientras que el frio de la soledad le tocaba como su compañero. Sabía que como ángel, podría hacer que Shu se enamorara de ella…

Pero entonces no sería ella, serian sus poderes, y eso no lo deseaba…

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-¿Hiciste tu trabajo?-le hablo un chico pelirrojo con los ojos verdes (Ayato) escudriñando al otro en la sala.

-Claro, estaba descansando, ¿para qué me llamabas?-le pregunto con fastidio al otro (Reiji)

-Tienes un nuevo trabajo, en una semana debes reclamar el alma de Akira Fujimoto- le dijo mientras lograba que el peli negro sonriera

-Interesante…-

Fue lo que pronuncio, para retirarse del lugar, este juego se había vuelto más interesante de lo que de por sí ya era.

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*Yo se que quieres, lo quieres para ti. Acéptalo, no serás feliz si él está con alguien más*

-Déjame en paz, yo decidiré, si lo soy o no-

*Llama a aquel demonio, de seguro aun quiere ese acuerdo contigo, ¿Qué más da? Si el de allá no te protegió, tal vez el de abajo si lo haga*

Sin necesidad de tomar la pluma, apareció Reiji en una bola de humo, con una sonrisa nuevamente enigmática.

-Buenos días Mitsuki, veo que estas de muy buen humor-le indico al ver el maquillaje algo corrido

-Cállate, ¿Qué es lo que quieres ahora?-

-¿Yo? Solo mírate las manos, estabas por invocarme, esta vez no vengo a ofrecerte el fruto, comienza a pudrirse… igual que tu corazón-

-…-

-Está bien, seré rápido. Vine a reclamar el alma de Akira, así que vine con otro trato-

Sus defensas bajaron. En primer lugar ella había sido mandada para reclamar el alma de Akira, se termino enamorando pero aun así, ¿Por qué venia un demonio? Debería aceptar, si conseguía que Akira fuese feliz, y viviera también.

-Su pecado fue enamorar a un ángel, hasta el punto de llevarlo a corromperse. Si le besas en el momento en que morirá, sobrevivirá…-y sonrió sin poder evitarlo, mientras paseaba su mano por la blanca mejilla.

-¿y que mas?-le pregunto con temor, esto no le gustaba.

-Tú alma no se salvara, y en su lugar iras a donde debería ir Akira, ¿aceptas?-le tendió la mano mientras en su mano contraria le extendía el fruto prohibido.

-Acepto-tomo la mano, así como también el fruto de color verdoso. Estaba podrido tal vez aquel demonio estaba en lo correcto.

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La hora de celebración llego, muchos invitados estaba ahí presenciando con alegría como su familia estaba por casarse, la joven rubia estaba al principio, y no porque quisiera ver el espectáculo en primera plana. Sino por el hecho de que si lo conseguía, le salvaría.

-Si alguien está en contra de este matrimonio que hable ahora o calle para siempre- hablo el padre, Yui mordió su labio, tentada, pero no lo hizo.

Desvió su mirada al ver como Akira y Sakura se besaba. Sin darse cuenta por muchas cosas, al principio de aquella celebración llego otro personaje. Un joven vestido parecido a Yui con el mismo color blanco entro, resaltando sus ojos rojos de entre todo él, pues su cabello rosa casi blanco se perdía con su vestuario y piel.

Levanto su mano hasta donde se señalaba el corazón de Akira (Shu) sin previo aviso para nadie le disparo. En ese instante Yui fue capaz de percatarse del sido del disparo, y con terror giro su vista hasta el agresor. Era su mejor amigo, Sora quien le disparaba. Pudo ver como este pronunciaba…

-Lo siento, EL me lo ordeno-y desapareció como llego. Se sentía culpable, y aunque amaba al ángel amiga, ya nada podía hacer.

-¿¡Akira! Estas bien?!-le gritaba la joven Sakura zarandeando a Shu, que parecía inconsciente –apunto de dormirse mejor dicho-

-Sakura, sé que no te gustara, pero es lo que puedo hacer para salvarlo-le beso con ternura, apenas un roce, para después sentir un calor y soltar el cuerpo lo suficiente para que sus miradas se volvieron a cruzar como aquella vez. E igualmente, al cruzar sus miradas el lamentable humano se enamoro

-¿Mitsuki? ¿Qué te ocurre?-le pregunto pues su estado se veía deplorable.

-No te preocupes Akira, ¿estás bien?-le pregunto, ignorando su propio dolor.

-Si, pero, ¿Qué te está pasando?-le indico asustado abrazando a la joven que sentía como sus alas quemaban. Tiñéndose de negro.

-Tenía que pasar. Quería salvarte, y si me pecado contra Dios seria pagado con mi muerte lo haría- y se dejo caer en aquellos fuertes brazos que con temor le sujetaban

-Mitsuki, por favor no, te amo. No me dejes- le replico con dolor en su voz, estaba histérico. Realmente sentía que la perdía.

-Ansié tanto por escucharlo, yo también te amo Akira, y por eso quiero que vivas- al decirlo sus ojos se cerraron para no abrirse de nuevo.

-¡Mitsuki!-lo único que quedo en sus manos sobre la chica fue una pluma blanca.

Ella desapareció, aquel ángel caído con las alas arrebatadas. Aun caído en el fondo de la tierra.

Un voto de unión que entrelaza su encuentro. Cargan con un imperdonable pecado. Cuando la fruta prohibida se ha podrido. Un ciclo repetido hasta el día que se encuentren otra vez.

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El público no espero demasiado, con entusiasmo comenzaron a aplaudir, la obra les había llegado al corazón, como si esa situación ya la hubieran vivido. Les sorprendió lo bueno de las actuaciones, con felicidad los chicos actores, agradecieron y conforme su papel, salieron de aquel escenario perdiéndose entre los telones.

-¿Qué te pareció la obra Shu-san?- le dijo la rubia con cariño.

-Estuvo muy bien, te veías hermosa- le dijo mientras recargaba su cuerpo sobre el de la rubia.

-Me alegro de que te haiga gustado. Por cierto. Feliz cumpleaños- le dijo mientras depositaba un suave beso sobre los labios del otro. Agradecido abrazo a la joven.

Cuando era más pequeño, prácticamente un niño, el veía las celebraciones con entusiasmo, y conforme fue creciendo, se dio cuenta que las de este tipo era insignificante, en demasiados aspectos, pero eso no le quitaba la alegría que veía en la mirada rosada al celebrarla, después de todo, en algún momento fue una humana.

-¿Lo recordaste?- se hizo el desentendido, mientras tomaba el cuerpo de Yui abrazándose a él, reteniéndolo con fuerza.

De alguna manera la historia se le hacía conocida. Pero no del todo, y aunque así fuera, haría sacrificio tras sacrificio con tal de estar con ella. La mejor celebración en toda su vida.

-¿Dónde está mi regalo?- le pregunto como si fuera un pequeño niño con una ligera y casi imperceptible sonrisa.

-Te lo daré más tarde- y beso de nuevo los labios, mientras la joven sonrojada se despedía dispuesta a ir con sus compañeros de la obra, la celebración seria pronto.

Tal vez, como en la historia algo parecido les sucedía, después de todo eran vampiros, y antes de eso, Yui fue una humana que le entrego su corazón a una criatura del mal. Pero aun pro todos los tormentos, si su pequeña rubia estaba con el nada le pasaría.

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Lose un capitulo corto,y creo yo falto de romance, pero espero les hubiera agradado de cualquier forma. Para ser sincera, subire capitulos pero no estoy muy segura de la fecha exacta. de cualquie manera espero les haiga gustado.

Dejen un review si fue asi.