Capitulo 1: Conociendo

El sol salía en una bella y resplandeciente mañana, los pájaros cantaban su dulce melodía mañanera, el roció de las flores daba la impresión de que la noche anterior había llovido. Una hermosa chica de cabellos violáceos dormía plácidamente en su cama. Su semblante era tranquilo y muy sereno, su respiración era casi inexistente debido a su profundo estado de sueño, y sus parpados estaban cerrados en profunda tranquilidad, hasta que…

- Rachel despierta ya, llegaras tarde otra vez- Gritaba a todo pulmón Ángela la madre de Rachel. Ángela era una mujer muy hermosa, de cabello negro y piel pálida igual que Rachel. Aunque Rachel se teñía el cabello de color violeta, cosa que alteraba bastante los nervios de su madre.

- Ya voy mamá…- Grito Rachel entre dormida y despierta, muy enojada pues ella no era fanática de madrugar. Luego de unos segundos más metida en la cama, Rachel se levantó y se metió a la ducha.

- Date prisa, le diré a Víctor que tenga el coche listo, adiós preciosa te amo.- Grito la dulce Ángela antes de salir de su lujosa mansión. Ángela era una de las diseñadoras de interiores más reconocida en la ciudad de Jump City, así que su posición social era bastante elevada. Desde que el padre de Rachel fue descubierto en sus negocios turbios y fue obligado a hacerle una visita de cuarenta años a la prisión de Nueva York ciudad donde cometió la mayor cantidad de estafas, Ángela tuvo que salir adelante con su hija, pues todo esto ocurrió cuando Rachel tenía nueve años de edad.

- Si mamá, también te amo.- Respondió la chica. Ya habían pasado diez años desde aquella tragedia que marco su infancia. Rachel asistía a una de las mejores universidades de Jump City con sus amigas Karen y Kori quien era hija de la mejor diseñadora de modas de Jump City, y también era la mejor amiga de Ángela la madre de Rachel. Es por este motivo que Rachel y Korianne eran casi como hermanas, pues se conocían desde que tenían uso de razón y ambas eran hijas únicas, así que actuaban y se defendían como hermanas. La linda chica salió del baño rápidamente para colocarse la ropa que escogió para ese día. Nada muy complicado una simple blusa negra de manguillos y escote en "V" unos jeans ajustados de color azul y unas zapatillas del mismo color que la camisa. Luego de colocarse la ropa se colocó frente al espejo para peinar su cabello con el secador, tenía el cabello cortó y liso así que esas dos virtudes le permitía secarlo rápidamente. Pero por más rápido que su cabello se secara ella otra vez llegaría tarde a su clase.

- Maldición, no volveré a lavar mi cabello en la mañana…- Le decía Rachel a su reflejo, acomodándolo con toda la rapidez de la que fue capaz. La chica usaba muy poco maquillaje, solo delineo sus ojos con negro y coloco un poco de brillo en sus labios. Tomo su mochila bastante costosa y con la marca exclusiva de la mejor diseñadora de Jump City o sea Kira, la madre de su mejor amiga y su casi tía. La chica salió corriendo de su habitación, se deslizo por el pasador de las escaleras y aterrizo como toda la profesional que era. Luego corrió hacia su coche.

- Víctor, no es necesario que conduzcas, yo puedo sola- Le repitió Rachel por milésima vez a su moreno, joven y muy apuesto chofer.

- Vamos, Srta. No haga mi trabajo más complicado, su madre…- Víctor no termino su frase pues Rachel lo interrumpió.

- Mi madre dijo que tuvieras mi coche listo, no que me llevaras a la universidad como si yo fuera una adolecente de quince años…- Le puntualizo Rachel con autoridad y el joven le sonría como todas las mañanas, se subió al coche y le hizo una señal para que ella subiera.

- No querrá llegar tarde Srta. Rachel ¿o sí?- Dijo el chofer desde adentro del coche con una sonrisa triunfadora.

- Víctor- Dijo Rachel con voz quejumbrosa haciendo un puchero y luego de entender que no conseguiría doblegar el moreno se subió en el asiento del pasajero.- Y deja de llamarme Srta. Cualquiera que te escuchara pensaría que eres un caballero.- Dijo Rachel de brazos cruzados, mientras Víctor reía a carcajadas y arrancaba el coche.

- Me gusta molestarte Rae, y no voy a dejar que arruines este auto último modelo, por un berrinche. Así que cuando este seguro de que dominas el volante, te dejare manejarlo.- Respondió el moreno con una sincera sonrisa que Rachel le respondió con una bastante hipócrita. Lo que desato una gran carcajada en el chico.

- ¿Y cuando según tú, estaré lista? – Pregunto la chica enojada.

- Cuando dejes de pasar por alto las señales de tránsito, y sobre todo cuando dejes de poner en peligro a los peatones- Resolvió Víctor recordando cuando Rachel estaba en su clase de manejo con él, y casi asesina una anciana que cruzaba la calle por pasar por alto una señal de tránsito.

- ¡Oh! Por Dios Víctor solo fue un accidente, además no pasó nada.- Rachel sí que era una chica insistente, debería estar estudiando leyes, según el criterio de Víctor.

- Claro que no pasó nada, pero no precisamente gracias a ti- Respondió el chico, recordando toda la maniobra que tuvo que hacer para salvar la anciana de las garras de Rachel.

- Si, si, lo que digas…- Dijo Rachel bajando del coche para llegar al frente de la universidad donde la esperaban sus dos mejores amigas, Karen y Kori. Karen estaba perdidamente enamorada de Víctor y cada vez que el dejaba a Rachel en la universidad ella cruzaba una que otra mirada con él. Pero nada importante.

- ¡Oh! Rachel…- Dijo Karen como todas las mañanas y Kori la comenzó a imitar.

- Rachel tu chofer es tan, tan pero tan hermoso, por favor preséntamelo alguna vez.- Dijo Kori pretendiendo la voz de Karen.

- ¡Oh! Por Dios, yo nunca diría semejante cursilería, yo diría algo como: Rachel tu chofer es tan caliente y esta tan bueno que estas siendo muy egoísta al tenerlo para ti sola.- Soltó Karen y todas explotaron en carcajadas.

- Creo que sí, Víctor es bastante guapo, pero ni se acerca a mi estilo, así que es todo tuyo Karen, la verdad es que les doy mi más sentido pésame, tanto por él, como por ti, ambos son unos dementes. – Rachel quedo pensativa unos segundos- Pensándolo bien hasta hacen una bonita pareja.- Dijo por ultimo haciendo que Karen y Kori comenzaran a reír nuevamente.

- ¿Entonces que estoy esperando?- Dijo Karen con un tono bromista y las tres continuaron su camino. Pues Rachel mágicamente había llegado temprano.

Karen era una chica morena, de hermosos ojos verde olivo y largo cabello negro y rizado. Poseía un hermoso y muy atlético cuerpo. La chica era una belleza exótica al igual que sus dos amigas. Las tres eran muy peculiares y muy diferentes. Kori y Rachel conocieron a Karen en la escuela a los 13 años y desde entonces se volvieron inseparables, todo lo hacían juntas incluso escogieron la misma universidad. Karen era una chica de muy fuerte personalidad y carácter. A veces era algo peleonera. Pero era la mejor amiga que se podía tener al igual que las otras dos, pero es mejor que no sea tu enemiga. Karen a pesar de tener un carácter muy complicado y duro de roer, "una vez la conoces es una dulzura", como siempre decía Kori. Las chicas le decían abeja pues siempre quería ser la numero uno en todo lo que hacía al igual que una abeja reina. Era la mejor en deporte en la universidad y estaba becada en ella por ser la mejor boxeadora femenina de Jump City. La morena era de clase media, así que no tenía para pagar semejante universidad, como Kori y Rachel, pero el deporte la ayudo a entrar. Aunque tampoco pasaba necesidades ya que sus padres tenían suficiente para subsistir. Karen estudiaba criminología en el área de forense, pues la chica se interesaba mucho en la criminalidad que iba creciendo cada vez más.

- Chicas ya me tengo que ir, porque la profesora nos solicitó diez minutos antes. Las amo espero que tengan un hermoso y espectacular día.- Recito la dulce Kori, a lo que ambas chicas asintieron y le dedicaron una sonrisa.

Korianne era una chica de hermoso y largo cabello rojo fuego – también teñido al igual que Rachel- y hermosos ojos del color de las esmeraldas. También poseía un hermoso y raro tono de piel bronceado, que hacía ver sus ojos y su cabello fuera de lo común. La chica tenía un cuerpo esbelto y la personalidad más encantadora y dulce del universo. Kori era la más optimista de sus amigas, la más alegre y la más efusiva, igual de extrovertida que Karen, pero no tan altanera. Siempre demostraba sus sentimientos y casi nunca estaba triste. Sus amigas la apodaban Star, porque iluminaba todo a su paso como una brillante y potente estrella. Kori era hija única al igual que las otras dos chicas. Su madre era la reina de la moda, por tanto su hija siempre estaba vestida como una reina, cosa que intentaron con Rachel pero esta no lo permitió. A diferencia de Rachel la madre de Kori estaba felizmente casada con el padre de la misma. Ellos eran la familia perfecta, su padre era un gran empresario y su madre una gran diseñadora de modas, por lo tanto la chica era de clase alta al igual que Rachel. Kori estudiaba pedagogía, pues a la chica se le daba excelente el arte de enseñar y más aún si se trataba de niños.

- Bueno abeja, nos vemos luego ya es hora- Dijo Rachel terminando una exquisita platica que estaba teniendo con Karen sobre Víctor. Ambas se fueron a sus respectivos salones.

Rachel era una chica de piel pálida como el papel y con los ojos de un extraño color azul que iba llegando a violeta. Su cabello fue largo hasta que llego a la universidad y lo corto. Aunque siempre lo tuvo teñido de violeta haciendo juego con sus ojos. Rachel tenía un cuerpo envidiable por todas menos por ella, quien no se sentía cómoda con las miradas que le dedicaban algunos chicos. Rachel siempre fue una chica muy callada y analítica, en menos de cinco minutos podía saber cómo era una persona tan solo con mirarla y por esto la gente pensaba que ella era una bruja, cosa que hacía que Kori explotara en carcajadas. Rachel era de pensamientos muy radicales y escalofriantes en ocasiones, cosa que llevo a sus amigas a apodarla Raven, debido a la oscuridad que este animal representa. La extraña chica era todo lo contrario a su amiga Kori, pues esta era muy callada, inexpresiva y algo pesimista en ocasiones. También podía llegar a ser bastante sarcástica y odiosa, pero muy sincera. Aunque la chica en el fondo tenía un buen corazón, no dejaba entrar a cualquiera en él. Razón por la cual no era santa de la devoción de varias personas. A Karen le sucedía lo mismo pero debido a sus aires de superioridad en algunos aspectos. Kori era otra historia, la hermosa pelirroja se llevaba bien con todo el mundo. Pero sus verdaderas amigas eran Rachel y Karen. Rachel estudiaba Literatura, pues anhelaba llegar a ser una gran escritora.

Cada una de las chicas era la mejor en lo que estudiaba….

Pero las tres tenían un talento escondido que solo disfrutaban y conocían ellas…


Bueno,se me paso esta idea por la mente y no la pude ignorar... es un concepto nuevo para mi, eso de incluir canciones en un fic... pero se me hace interesante poner canciones en medio de una historia. Por tanto esto no sera un Song-Fic, sino un fic que incluira algunas canciones.

Bueno espero que les guste este cap. y si les gusto pues Reviews! :)