La búsqueda de su destino
Sara es una chica de pelo rubio oscuro y ojos verdes que vivía en un barrio de clase media en Barcelona y que quería escapar de su casa, de su vida, de una vida rutinaria y a la vez llena de problemas con su familia. Por ello, un día decidió marcharse al lugar más lejano posible y se embarcó en un crucero que iba rumbo a Australia sin saber si volvería alguna vez a su casa, a su país.
Durante el viaje no se relacionó demasiado con el pasaje, no le interesaba confraternizar, necesitaba pensar y descubrir que hacer con su vida. Así, los días iban pasando hasta que una mañana entraron en una fuerte tormenta y el barco naufragó.
Cuando despertó, se dio cuenta que estaba en una playa, pero no sabía qué había pasado ni como había ido a parar allí, pero sí vio que junto a ella habían restos del naufragio.
Cuando se repuso un poco del shock, rebuscó entre esos restos para ver que había utilizable y tuvo suerte de encontrar algunas herramientas y unas pocas latas de conservas. Unas horas más tarde, revisó los alrededores y descubrió una fuente de agua, así que pensó "al menos podré sobrevivir un tiempo".
Pasaron unos días, y realizó un reconocimiento de la zona descubriendo que parecía estar en una pequeña isla en la que no se veía rastro de más vida humana que ella misma. Siguieron pasando los días en soledad hasta que de pronto una tarde vio unas huellas humanas en la arena que no eran las suyas. Se asustó mucho y recorrió toda la isla de nuevo sin encontrar muestra de que hubiese otro ser humano. Pero esto siguió pasando día tras día, con lo cual empezó a pensar que se estaba volviendo loca por la soledad.
A la tercera semana de permanencia en aquella pequeña isla, una mañana vio como se acercaba a donde estaba ella, un hombre alto, delgado y atractivo con un largo abrigo, que le dijo:
- Hola, soy el Doctor y estas en peligro. En esta isla hay unos seres peligrosos e invisibles y tienes que salir de aquí. Ven conmigo.
Así que Sara, sin saber muy bien porque confiaba en él, se fue con el Doctor que le llevó hasta una cabina de policía azul, que era más grande por dentro que por fuera y la sacó de aquella isla. Una vez a salvo, el Doctor le ofreció la posibilidad de viajar con él por el espacio y el tiempo. Y ella por fin descubrió que es lo que quería hacer con su vida…..
