Esta historia se baso en una serie media viejita, por decir, se llamaba "Young Americans", solo tome una parte como ejemplo, la relación de Hamilton y Jake (Jaquelin), aprovechando el nuevo corte de Emma, va ser muy fácil imaginarse la historia. Me encanto, lastima que solo 8 episodios tuvo.
Solamente tomo prestado los personajes de J. K Rowling y de la serie Young Americans, para una simple recreación, ya que admiro su trabajo.
Nuestro Secreto.
Capitulo Nº1: Conociéndonos
Un curso de verano, ¿Quién lo toma?, pues yo, siendo hijo del Decano y Profesora del Instituto Hogwarts para Varones, lo tenia que tomar, pero no soy el único, la mayoría de los hijos de Familia Poderosas y Ricas de Inglaterra, lo tomaban, era como una costumbre. Se encontraba en el pequeño pueblo de Castle Combe, un lugar aparado de las grandes ciudades, un paraíso a la vista, probablemente unos de los pueblos mas famosos del Reino Unido, que era dueño una interesante historia, donde abundaba las buenas costumbres, gente sencilla y de buen tratar; un lugar donde los niños de mama están lejos del trageteo de Londres y otras ciudades, donde… cito palabras de mi padre "Las jóvenes mentes puedan prepararse para el mañana" ¡si claro!, mejor dicho donde vinieran a estar lejos de sus padres y poder ligarse a las chicas de la Academia Beauxbatons del otro lado del Lago ByBrook.
¡Oh si el adorable verano donde nada mas que remo, literatura y hormonas locas!, sip este era el año en donde yo seria parte de ello, al fin había cumplido 15 años. Aunque no podría dormir en los dormitorios en los findes de semanas como los demás, por que tenia que estar en el ala de los profesores, con mis padres, iba ser un verano de lo más bueno. Y estaba listo para disfrutarlo, participar del torneo anual de Remo, y ligarme a muchas niñas, del Colegio como las del pueblo. Seria genial.
-¡Ronald Levántate…!-Molly Weasley toco lo mas fuerte posible la puerta de su hijo mas chico, este era el año en donde él ingresaría al Instituto Hogwarts, estaba realmente emocionada al respecto, ella era la profesora que impartía Literatura Moderna, ella amaba su profesión, pero mas cuando lo hacia por aquellos 3 meses, donde solo había ese paisaje y jóvenes que realmente atendiendo a sus palabras, lejos de las cosas materiales.
Este año, luego de que todos sus otros hijos, el más joven, el Benjamín, irían a Hogwarts. Y también su princesa a Beauxbatons, su pequeña niña de 14 años empezaba los cimientos de su vida futura.
-Ohooo mama déjame dormir…-un chico de 15 años, pelirrojo se destapo un poco de las sabanas azules que lo cubrían, era bueno decir que estaba bastante molesto, por la luz solar que se colaba por su ventana y se estampaba de lleno en su cara pecosa, parpadeo varias veces, sus ojos azules le dolieron un poco por la claridad, de a poco vio a su madre parada enfrente de su cama, ¡¿Cómo osaba levantarlo temprano en día de verano?
-Ron se te olvidado que hoy empiezas el Instituto hijo…-su madre puso sus manos en sus cintura y sus brazos quedaron en posición de jarra.
-¡Ohh si! Ya me levanto…-hoy era el día de su comienzo en Hogwarts, era mejor levantarse, a ver quienes llegaban este año, entre ellos estaría su mejor amigo Harry.
-Estaremos en la cocina esperándote hijo, date prisa que hay que dejar a Ginny también.
Ron se desperezo y se levanto, abrió la puerta de su armario, la imagen del espejo de la puerta dejo ver a un chico alto, esbelto, con torso formado, grandes brazos, piernas fornidas, gracias a la tradición de la familia de practicar Remo, con cabellos de color rojo con algunos que otros de color naranja.
Él era el menor de 5 hermanos varones, todos ellos ya habían pasado por el Instituto, bueno los gemelos les faltaba un año, pero se habían revolucionado y decidido ir por Europa, en un viaje de mochileros con sus amigos, antes de empezar su ultimo año de secundario, sus padres se opusieron , pero de alguna manera lo lograron, eso significaba que este año, que era su turno, por suerte Fred y George no estaría allí para hacer su vida imposible, la única que estaría cerca seria su hermana menor que estaría del otro lado del lago.
Se vistió, estaba tranquilamente fresco aquel día de verano, ya había pasado 2 días desde que empezó la estación. Los shorts negros reglamentarios del uniforme y la remera gris con el escudo del Instituto, con los cuatro símbolos de ella, Grynffidor, Ravenclaw, Hufflepuff y Slytherin, él todavía no estaba seguro a cual ala del Instituto quedaría, ya que aquello se sometería a sorteo, por alguna extraña coincidencia todos los miembros de su familia quedaron en Grynffidor, era como una tradición, y él también quería serlo.
Bajo a la cocina, su casa era realmente grande, para él era algo exagerado, ya que casi pocos quedaron en aquella casa, era una tradicional mansión inglesa, con muchas habitaciones, todas decoradas por un estilo clásico ingles, para él "muy a la antigua", pero su madre lo decoro, así que tenia que taparse la boca, las únicas cosas modernas eran las que tenían sus hermanos y él, en sus habitaciones, mas la tele plasma de la sala de entretenimiento de su padre, ¡y claro que la conciba!, lugar donde su madre hacia uso de los aparatos para que le ayudaran hacer ricas comidas. Él amaba comer, y mucho mas si su madre lo preparaba.
-¡Oye tontin!... ¡tierra llamando a Ronnn….!-Ginny creía que su hermano se iba a dar contra una pared algún de estos por ser tan despistado, él tenia la costumbre de quedarse pensado y no compartir sus pensamientos, era simplemente ido. Pero muy en el fondo ella sabia que lo iba extrañar, ya que era el primer verano que ambos estaría por así decirlo separados, tampoco no era tan grande la distancia entre su Academia y la de él, pero no estarían ellos solos, buscando que hacer mientras que sus padres estaban en el Instituto, este verano era diferente, este año cada uno iba por su lado, y ella le apenaba un poco, ya que eso también significaba que estaría lejos de…
-¡Hola Familia!-un chico pelinegro con gafas redondas entraba por la puerta trasera de la cocina, entraba Harry Potter, un chico alto, no tanto como Ron, pero alto, esbelto y muy fornido, ya que él al igual que su amigo de toda la vida, practicaba Remo, él vivía con su madre a dos casas de allí, pero ella ahora estaba de viaje (como siempre).
Fue instantáneo las mejillas de la pequeña pelirroja se colorearon, ninguno de los chicos se dieron cuenta.
-Hola compañero, ¿estas listo?-dijo el pelirrojo, agarrando el ultimo panqué que había en su plato, se colgó la mochila, se metió el panqué en la boca-Nos vemos enana… que tengas un buen...gomi-enfroff-dijo tratando de masticar y hablar a mismo tiempo, pasando su mano por el cabello de su hermana.
-¡Ron, bruto!-se quejo Ginny, ella no había comido mas desde que Harry había llegado, y aquello no ayudaba a su estado de vergüenza, Harry provocaba muchas cosas en Ginny.
-Nos vemos Gin, espero que te guste la Academia-dijo simplemente el pelinegro y salio antes que su amigo al patio.
-¡¿Hijo no quieren que les alcance?-dijo Molly, ella justo había entrado en la cocina, llevaba un pantalón de lino blanco y camisa clara, le sentaba bien a la Señora Weasley, en sus manos estaba el maletín y su cartera dispuesta a ir a llevar a sus hijos al comienzo de su verano, era una señora que tenia unos quilos de sobra pero era muy bonita, tenia el cabello corto, enrulado de color pelirrojo, una fina cara, al igual que su hija y ambas compartían los mismos colores de ojos.
-Naaah deja mama, iremos caminado. ¡Nos vemos allí!-dijo Ron saliendo finalmente al patio, realmente no quería llegar al Instituto con su madre, quería experimentar aquello como cualquiera.
Una vez fuera de su casa, del complejo de las pocas granes casonas que había en aquella zona despejada de Castle Combe, la cual estaba escondida por un gran número de árboles frondosos y senderos, donde lo único que se podía admirar era el verde pasaje. El pelirrojo iba muy callado, pero a su amigo no le importa sabia que él era así, Ron iba mirando el cielo azul, aquel día era especial lo podía sentir, mas allá de empezar el Instituto, algo había que lo hacia diferente, todavía no lo sabia, por ello lo iba a esperar con los brazos abiertos, mirando el claro cielo, él adorada caminar por el bosque siempre le había relajado, y si estaba acompañado con el tenue viento, que alborotaba sus cabellos y le daban una calida sensación en el cuerpo, mejor.
Harry, iba a lado del pelirrojo absorto en sus propios pensamientos, estaba muy contento por empezar este curso, mas allá de muchas cosas, este trimestre conocería a muchas personas que le ayudarían en su futuro, haría muchos amigos, y si estaba con Ron, no podía pedir mas. Ya que el pelirrojo y su familia, era como la suya; su madre, Lily no estaba muy de seguido en casa a causa de su atrajeado trabajo, ella era Manager de muchas estrellas de cine y teatro, y por ello estaba constantemente de viaje en viaje. Harry no la culpaba y tampoco le reclamaba nada, ya que él sabía que su madre adoraba su trabajo, pero a veces pensaba que no pasaban mucho tiempo juntos, pero siempre podía contar con los Weasley. De su padre sabe poco y nada, no sabia el por que de sus padres no estaban juntos, nunca alcanzo a preguntarle a su madre, por que ella siempre evadía el tema, lo único que comparta con su padre era el nombre, James, pero sabia que lo extrañaba.
-¿Crees que me tocara Grynffidor?-Ron le había sacado de sus pensamientos, claro su amigo estaba muy preocupado por aquello, él, Harry todavía no llegaba a entender como era que todos los miembros de los Weasley, llegaron estar en la misma "Casa".
-No lo se, es realmente cuestión de suerte ¿no lo crees?
-Si, lo se... pero y si no quedo…
-Ron estaremos en el mismo Instituto, haremos todo juntos, solo será para dormir entre la semana, ¿o no?
-Mmm… si tienes razón-el pelirrojo no estaba muy convencido, pero igual le incomodaba, no quería defraudar a su padre.
-Si… solo espero que estemos en el mismo ala, así podremos jugar ajedrez y joder juntos…-dijo Harry, tratando de animar a su amigo, ambos iban caminando tranquilamente por el camino de piedras que llevaba a Hogwarts.
-Si… pero este verano, tenemos que hacer mas que eso…
-¿Y como que?-a Ron se le dibujo una sonrisa maliciosa.
-Las chicas.
-Oh si… este tiene que ser EL verano Ron, imagínate las preciosuras que ingresaran a la Academia Beauxbatons, con sus cortisimos shorts celestes y sus ceñidas remeras blancas…-al pelinegro las hormonas le empezaron a revolucionar, mas cuando su mente torcida de 15 años, le mostró a una chica oriental con cabellos largos negros.
-¡Oye que mi hermanita entra este año!...
-¿Quien dijo que estoy pensado en Gin?-por una milésima de segundo se le apareció la imagen de la hermana de su amigo, con los mismos shorts y remera, y a decir verdad no le desagrado la imagen, pero se le fue, al pensar que le haría su amigo si supiera que él se había imaginado a su hermanita-estaba pensado en Cho…
-¿Jajaja y que te hace pensar que ella te dará pelota?-si le decían soñador a él, Harry le ganaba-ella es un año mas grande que tu…
-¿Y con eso que? ¿Acaso no puedo tener una oportunidad con ella?-dijo Harry algo ofendido.
-Claro que si, cuando ella deje al tonto de su novio…
-Si Cedrig…
Ron vio que a su amigo se le había bajado la moral, Harry estaba obsesionado con la chica Cho, desde que la vio nadando en el lago, el verano pasado. Harry sabia todo de ella, Ron no quería saber como, pero su amigo sabia todo de ella, pero lo único que le faltaba era… bueno… hablarle y que Cho sepa que Harry existía.
-Bueno cambiando de tema, ¿sabes quienes vienen de la Escuela este año?
-Mmm Dean, Seamus, Nev, Justin, según me dijeron antes de terminar las clases… también los idiotas de Nott y Malfoy…
-¡No!, ¿aquí tampoco nos libramos de ellos…? pero haremos la nuestra, como siempre…-dijo Harry mirando a su amigo, sabia que Ron no quería al rubio, Draco Malfoy siempre se metía con ellos, porque supuestamente era mas rico que ellos y que sus padres casi eran de realeza y por ello el resto era escoria, según el criterio de Malfoy, un menudo boludo y creído, niño de pecho, en opinión de Harry y Ron.
Las sombras de los árboles dibujaban figuras extrañas en sus remeras y le proporcionaban aquella frescura que le hacia frente al calor que estaba abalanzado en el lugar, los amigos siguieron hablando tranquilamente de trivialidades, hasta llegar a los bordes de lo que era un gran complejo.
Con 5 alas y de dos pisos se imponía el complejo, en el ala principal, la que se veía en la cima de cerro verde, se podía leer en lo alto un gran cartel que decía "Instituto Hogwarts para Varones", si caminaban un poco mas, se veía las siguientes extensiones o alas del lugar, con grandes ventanales blancos, el lugar estaba hecho con ladrillos, que ahora ya eran viejos, dando la pinta de ser un lugar señorial, los helechos había hecho sus caminos por las paredes del lugar, pero en cada una de ellas, de las Alas, se podía distinguir los carteles con los nombres de las "Casas o Alas" del Instituto, que eran Grynffidor, Ravenclaw, Hufflepuff o Slytherin, en honor a los creadores del establecimiento, que ya llevaba varios siglos enseñando a las jóvenes mentes, que terminaban siendo reconocidos en el mundo.
Hogwarts era un lugar muy respetado, las personas sabían que los chicos que iban a él, terminaban siendo políticos, doctores, ingenieros, bancarios, sabían que aquel lugar de enseñanza veraniega, era un lugar de conexión entre las muchas familias poderosas inglesas, lugar donde los hijos de estos se formaban, al igual que alguna vez lo hicieron sus padres.
-Bueno, estamos aquí… ¿preparado?-dijo Ron girándose en dirección de su amigo, con el asistir de este los dos fueron subiendo el cerro hasta llegar a la entrada del Instituto, el pelirrojo se armo de valor, agarrando las correas de su mochila, contento por empezar esta experiencia. Dentro de su mochila llevaba su ipod, su cámara y su gorra favorita, que perteneció a su abuelo, solo lo esencial para él, ya que las demás cosas como su computadora, ropas y stereo, ya estarían allí, esperando ser colocadas en su nuevo hogar, por lo menos por los próximos 3 meses.
Ron miro hacia atrás, el lago ByBrook, se imponía en aquel verde paisaje, admiro como los rayos del sol se estrellaban sobre la superficie del lago, pintando el agua y formando graciosas figurillas, en el muelle que entraba hasta una parte del agua, había varios chicos sentados hablando, remojando los pies, algunos de los viejos alumnos ya estaban en el agua jugando, nadando y otros ya estaba en las embarcaciones, practicando Remo. Era el lugar perfecto, tres meses de aquello.
-¡Hey al fin están aquí!-un chico con cabello cortó color arena, llegaba corriendo de adentro, se notaba que estaba muy contento, saludando con un abrazo a los chicos.
-¡Seamus no nos vemos hace semana, tampoco fue tanto!-dijo cómicamente el pelirrojo, luego que su amigo le había soltado.
-¿Cómo has estado?-Harry siempre fue mas formal que Ron, iban entrando, por un gran pasillo, las paredes eran de madera, pintadas de marrón oscuro, en las cuales había muchas fotos de antiguos alumnos, profesores, figuras famosas quienes habían asistido a Hogwarts, llegando al Salón principal se encontraron con varios chicos y en el centro se encontraba un hombre pelirrojo con gafas, apoyado en uno de los escritorios, era el Decano, Arthur Weasley, el padre de Ron.
-Dean y Nev están por allá-dijo en un susurro Seamus, ya que parecía que ellos tres eran los últimos en llegar, y por la mirada del Señor Weasley le dio a su hijo menor, así lo parecía.
-Gracias por honrándoos con su presencian señores-Arthur era un hombre correcto y muy centrado, eso no quitaba que no dejara que los chicos se divirtieran ya que parte del curso, dejaría que se divirtieran siempre que respetaran la fina línea que hay entro lo debido y lo indebido.
Pero era un caso aparte con sus hijos, por ello muchas a veces le costaba entender a su hijo menor, parecía que éste era muy diferente a sus otros hijos, todos tenían sus formas de ser y tenia un temperamento especial, pero todos ellos siempre fueron centrados, ordenados y muy honrados, hasta los gemelos, por ello al final les había dejado tener su viaje de mochileros, ellos iba a ser grandes empresarios,… pero Ron, él era distinto, como que siempre andaba en la luna, leyendo, escuchando música, sacando fotos, el pelirrojo tenia otras prioridades, prioridades que estaban lejos de las de Arthur.
-Lo siento Decano Weasley-dijo Harry, ya que su amigo solo miro con ojos tristes a su padre, había asuntos no resueltos entre padre e hijo; era mejor que encuentren lugar, lo hallaron cerca de sus otros amigos, los cuales estaban apoyados en unos de los libreros del Salón.
-Bueno ahora que están todos los de primer año, empecemos con el sorteo, este año solo son 20, por ello Irán 5 por cada casa, "las Casas", como ustedes las llaman, ya que en realidad son alas del Instituto, son: Grynffidor, Ravenclaw, Hufflepuff o Slytherin, cada una en honor a los fundadores del Instituto, recuerden que aquí, sus mentes serán preparadas para el futuro, nosotros somos un grupo selecto de personas quienes les enseñaremos el arte del buen leer, de la presentación, de la disciplina, de la elección. No soy un tipo duro ni cerrado-Ron suspiró-pero quiero que se me respete, ¿Cómo lo harán? Respetando las normas del Instituto, sin más, procederemos al Sorteo.
No tomo mucho tiempo, resultando que los chicos quedaron en Grynffidor, él padre de Ron quedo muy gratificado al saber que su ultimo hijo varón, iba a estar en la misma Ala que él y sus demás hijos.
-Esperen me confundí…-dijo extrañado el Señor Weasley, mirado sus papeles-al parecer son 21, ¿se encuentra Hermes Granger?-silencio, todos se miraron, no había señales de ese Hermes-… bueno cuando llegue, díganle que vaya a mi despacho, y allí le asignare habitación.
Sin decir una palabra mas el Señor Weasley salio del Salón, los alumnos empezaron a dispersarse, a hablar los unos a los otros, hasta que escucharon un griterío afuera, los de los otros años estaban corriendo por el cerro, quitándose las ropas y quedando solamente en calzoncillos, quedando atrás las demás cosas, todos gritando y corriendo, saliendo de quien sabe donde llagaban las chicas de la Academia, imitando a los chicos quedándose en paños menores o algunas ya en bikinis.
-¡ ¿Qué es eso?-pregunto un chico muy asombrado, con cara redonda y cabellos negros.
-Es la tradicional chapotera de Hogwarts-dijo Ron maliciosamente. Los chicos estaban admirados por las chicas, que tranquilamente estaban en interiores con los chicos jugando en el agua.
-¡Que estamos esperando!-dijo uno muy emocionado por la idea de nadar entre muchas chicas. Fue un clic todos enloquecieron se miraron entre si, salieron gritando hacia afuera dejando remeras, y demás prendas por el lugar, corriendo por la colina, en dirección al bullicio, solo uno de ellos, quedo mirando recostado por la puerta. Ron sabia cual era la tradición de los alumnos mayores de Hogwarts, que era secuestrar a los de primer año y llevarlos al centro de la ciudad en calzones y dejarlos volver caminando al campus, tras 5 hermanos en aquel lugar, él tenia conocimientos sobre muchas cosas, mas que ningún otro de allí, y accidentalmente se había olvidado de decirle a Harry sobre aquello. Él solo quería que su amigo disfrute de todos los placeres del Instituto.
Camino tranquilamente hacia el lugar donde estaban sus cosas, las fue subiendo por las escaleras, hacia el piso superior, recorrió el corredor, hasta llegar a la ultima habitación, la cual compartiría con Harry, Neville, Seamus y Dean compartirían otra, la que estaba a lado de la suya. Simplemente era grandiosa, el empapelado de la habitación era de color bordo, uno de los colores característicos de Grynffidor. Había dos camas, una cerca del gran ventanal, daba a la parte de adelante del Instituto a la vista del lago.
Lo lamentaba por Harry, pero él había llegado primero y tomo la mejor cama, hizo unos cuantos viajes hasta tener todo lo que era de él, no fue tan mal amigo, también trajo las de Harry. La laptop la coloco en su escritorio que estaba cerca de su cama, sus libros en sus repisas, una que otra foto familiar en el pinchero, y por ultimo su ropa, abrió el lado que le tocaba del armario y simplemente la tiro allí.
-Bueno termine… fue fácil…-fue hasta su cama y busco entre su mochila y la encontró, su cámara, se sentó el pequeño sofá que estaba contra la ventana y con ayuda de su cámara, puso zoom y empezó a ver quienes eran las bellas chicas que estaban en el lago, todavía no era seguro que bajara, era seguro que algunos del ultimo año estarían dando vueltas por ahí, sus amigos no estaba, seguramente que ya fueron secuestrados. Con el zoom dirigió su cámara al camino que llevaba a la entrada de los autos, en aquel momento llegaba una gran moto negra, con un chico vestido de negro, con una campera de cuero y anteojos negros.
-Que buena maquina-enfoco su cámara en la cara del recién llegado, no podía distinguir sus ojos, ya que estaban escondidos por los anteojos, pero la buena calidad del aparato, distinguió que tenia pequeñas pequitas sobre su nariz, la cual era pequeña y fina, raro para un chico, bajo la cámara y vio que era pequeño, se notaba que algunos no se desarrollaban tarde. Se dio vuelta y se dispuso a salir de su habitación, su nueva habitación.
Estaba tan aterrada cuando llegue al Instituto, Hogwarts era solo para varones, si lo sabia, por ello estaba allí, era parte de mi plan, pero aquí estaba, asustada pero segura, tenia que esconder mi moto, no quería que me la confisquen, busque un lugar y vi un deposito, mientras que buscara un lugar mejor la dejaría allí. Una moto estaba claramente fuera de las reglas del Instituto, pero como a ella nadie la vigilaba, estaba acostumbrada hacer vista gorda con las reglas.
Hermione era una chica menuda, espalda chica, cintura acentuada, cabellos castaños oscuros, que alguna vez fueron largo y enrulados, ya que ahora su pelo estaba corto, muy corto, pero le gustaba su nueva aparecía, aparecía que fue planeada para entrar en el Instituto Hogwarts para Varones, sabia que tenia que usar una faja para esconder sus pechos, no eran pequeños, pero tampoco grandes, eran medianos, y con la ayuda de la faja, su pecho quedaba casi plano, tendría que usar remeras grandes, pero le serviría. Estaba dispuesta a engañar a todos en aquel lugar, el Instituto era reconocido por su gran enseñanza y ella estaba tentada a conocerla, por ello estaba allí, bueno una pequeña parte.
Entró por la puerta principal, esto no era nada parecido a su Londres, era un paraíso, solo verde, árboles, naturaleza y el lago, ¡el lago! era hermoso, simplemente un lugar escondido de la civilización, donde ella se podía refugiar de las frivolidades de su mundo. Perfecto para pasar su verano.
Siguió su camino, sabia que llegaba tarde, pero lo había hecho apropósito para poder guardar su moto, tenia que encontrar al Decano Weasley, un chico le dijo donde era, toco la puerta.
-¿Si?
-Disculpe Decano Weasley soy Hermes Granger…
-Oh si, señor Granger pase.
-Lo siento por haber llegado tarde…-tenia que fingir un poco la vos, hacerla sonar un poco ronca y listo, era un hombre hecho y derecho, bueno no sabia si derecho o hecho, pero al menos lo aparentaba, al juzgar por lo que el Señor Weasley no se muto a su aparecía.
-No es problema, bienvenido a Hogwarts… bueno hablemos en que "casa" quedara… estuve mirando y solo una habitación queda libre, justamente una que mis hijos la dejaron libre, por que no cursan este verano. Tiene dos camas pero ya ordenare que la saquen, ¿o al menos que quiera que le asigne un compañero?
-Nooo eso este bien-plena privacidad eso le gustaba. Después de todo, tenia que ser un poco ella mismo, ¿no?
-Muy bien, la Ala de Grynffidor, es la que esta a lado de esta, hacia su derecha, así que salga por el pasillo y ya vera por donde ir, sus cosas ¿ya están aquí?
-Si señor…-simplemente fácil, pedir plata al abogado de su madre y mandas por correo todas sus pertenecías, el tipo ni fijo donde mandaba el dinero y las cosas, eso demostraba que si se ponía a bailar el cha-cha-cha en pleno centro londinense, su madre ni se enteraría.
-Bueno que disfrute su verano Señor Granger-le entrego un papel donde decía el número de habitación que era suya.
-Gracias Decano.
Salio victoriosa de su primera prueba, mejor no le podía ir, así que tomo su mochila y una caja pequeña, de donde estaba su montón de cosas y fue al encuentro de su nueva Casa.
Subió las escaleras, busco entre las distintas puertas, nadie andaba por ahí, según vio todos estaban en el lago pasándose de lo mas lindo en el agua con las chicas pomposas de Beauxbatons, ella no le encontraba la gracia a ser preparada como señorita de la alta sociedad para el día de mañana, ¿Qué enseñarían allí?, a como servir el te a sus esposos, nooo eso no era para ella, por ello estaba en Hogwarts. Tampoco le apetecía ir al lago ahora, había mucha gente allí, y si por un descuido la descubrían en su primer día, nop era mejor acomodar tranquila sus cosas.
Busco entre las puertas, era casi una de las ultimas, el numero 22, el loco, ella estaba loca por hacer esto, pero bueno, no hay que lamentar.
Entro, era espaciosa, tenía dos camas, su decorado era bordo, tenía un escritorio grande con dos sillas, ¡que raro!, un gran armario, repisas…, era simplemente grandiosa. Le gusto mucho el ventanal, daba a la parte trasera del Instituto. La parte de atrás de Hogwarts daba a un gran espacio verde, hasta el borde del bosque, donde se perdía la vegetación, a los costados estaban los caminos bordeados, las canchas de fútbol, algunos bancos de mármol para reposar, era el paraíso para ella.
Mirando su nueva habitación, no se había dado cuenta que un chico pelirrojo estaba parado en el portal de ella.
-Hola-Hermione se llevo un gran susto, su corazón dio un brinco, estaba muy susceptible.
-¿No sabes tocar?-Ron se extraño por la contestación de aquel chico, si que era pequeño, menudo, pero quien era él para juzgar, si hacia dos años era igual que aquel chico.
-Lo siento… ¿puedo?-exagero un poco con los gestos al entrar.
-Si... si claro…
-Tú debes ser Hermes, ¿no?
-¿Cómo lo sabes?-tenía que bajar el nivel de paranoia.
-Por que no estuviste en el sorteo, y el Decano dijo que faltaba uno, y ese eres tú, ¿no?
-Oh si, yo soy Hermes Granger-Hermione fue a estrecharle la mano.
-Yo soy Ron Weasley.
-¿Eres hijo del Decano?-el pelirrojo asistió, era raro que no le llamara papa, peri quien era ella para juzgar.
-Oye…
-Mmm-el chico castaño empezó a acomodar las cosas de la caja, mientras que Ron se sentaba en una de las sillas del escritorio.
-¿Es tuya la moto esa?
-Sip…
-Sabes que las motos no se permiten en la escuela, ¿no?
-No se permiten muchas cosas aquí-dijo con doble sentido la castaña.
-Si, ya… pero la tienen que guardar en un lugar si no quieres que la confisquen.
-¿Y alguien lo va a decir?-a ella no le pareció que el chico pelirrojo sea un nene de papa.
-No, solo digo que tienes que hacerte amigo de alguien que tenga contactos dentro del Instituto, alguien que quisiera que le prestes alguna vez una vuelta.
-Oh ¿y tu eres ese alguien?
-Si, ese soy yo-Hermione sonrió, le cayo bien el chico, el pelirrojo le devolvió la sonrisa, era muy lindos sus dientes.
-Bueno déjamelo pensarlo…-dijo el castaño, pasando a lado del chico.
-¿A dónde vas?
-A buscar mis otras cosas-dijo Hermes, Ron se levanto y fue detrás de el.
-Te ayudo.
-Gracias… y dime según tu padre esta era la habitación de tus hermanos…
-Ah si… Fred y George, ellos no viene este año…
-Oh ¿Por qué?
-Están de vieja por Europa con amigos…
-Que interesante-a ella también le gustaría hacer alguna vez aquello, pero no se animaba a ser tan descabellada para obtener la atención de Jean.
-Si, así que tu tomaste su cuarto, eres afortunado, estarás solo…
-Mmm si, me gusta tener mi privacidad-iban por las escaleras, era simpático Ron, muy tranquilo y no parecía un de esos engreídos que se tuvo que cruzar en la vida.
-Oh… yo comparto el cuarto pero no me importa lo hago con mi mejor amigo….
-Ah si ¿y donde esta él ahora?-llegaron a las cajas cada uno agarrando una, se dieron vuelta y emprendieron camino de nuevo a los cuartos.
-Jejeje seguramente en calzones en el pueblo…
-¡¿Qué?-eso descajo a Hermione, paró su andar por las escaleras.
-Es que es una tradición de los de último año aquí, con 5 hermanos que alguna vez pasaron por aquí, uno ya sabe esas cosas…
-Por eso estas aquí solo…-ahora lo entendía, era raro que no este pavoneando como los demás chicos allí afuera con las chicas.
-¿Qué prefieres estar en el pueblo?, mostrando tus atributos a las personas, no gracias no quiero que ninguna chica me vea en un momento vergonzosos-Hermione se equivoco, si era como los demás chicos. Pero se lo pensó mejor, por suerte había llegado tarde, sino se hubiera visto arrastrada por los chicos, y quien sabe que hubiera pasado.
-¿Y no le dijiste nada tu amigo?-eso si que era traición, ¿como dejaba que su supuesto mejor amigo pasar por aquello?
-Jejeje si admito que estuvo mal, pero Harry tiene que experimentar todo del Instituto, tu te salvaste por llegar tarde o sino yo estaría solo aquí, Hermes-la chica no dijo nada, sabia que el pelirrojo probablemente tuviera razón.
-Mmm si lo se…-fueron llevando todas sus caja, por ser tan ordenada, sabia en que cajas había cosas femeninas y en cuales no, así que solamente había abierto las que tenían "cosas de hombres", admitía que se había divertido mucho comprando calzones, ropa de chico y zapatillas, quería crear una imagen buena para Hermes, pero nadie le había dijo lo incomodo que era llevar calzones debajo de los pantalones de algodón, no era una experiencia placentera.
-Bueno veo que han sacado la otra cama, es oficial es tu nueva habitación, Hermes te dejo para que desempaques tranquilo, si necesitas algo, nuestra habitación es la ultima, nos vemos después…
-Si Ron, gracias por ayudar…
-No es nada-el pelirrojo saludo con la mano y salio de la vista de Hermione, ésta fue hacia su puerta, viendo como su nuevo compañero se perdía en su cuarto, luego cerro su propia puerta-Eso… eso fue… interesante-le pareció simpático el chico, divertido y muy distendido… hasta lindo, ¡nooo a no pensar en eso!, que le arruinaría el plan. Pero admitió que le gusto encontrarse con él, esperaba que se hagan amigos.
Así fue como Ron y Hermes se conocieron en aquel comienzo de curso, este verano iba ser de lo mas extraño, lleno sorpresas, pero mas que nada de secretos.
Se que tengo otras dos historias dando vueltas, pero esta se me presento de sopetón y me encanto, me quede loca por saber todo sobre ella, y empecé a imaginarme millones de situaciones para Ron y Hermione, y realmente nunca me había imaginado a Emma con pelo corto, pero paso y fue un punto mas a mi favor, así que espero que sepan entender el equilibrio que voy hacer con las historias, además de haber otra en proceso. Por ello solo les pido paciencia, y sin más que disfruten de esta historia.
Maria Esperanza (Mary Hope)
(*)En realidad, es el Río ByBrook, pero quise acortar las distancias.
