¡Hola! He decidido, empezar un Three-shot de mi pareja preferida y de mi Manga/Anime Preferido. Gracias a Haibara14 conozco esta gran serie que amo. Espero que os guste!

El comienzo

17:39, 25 de Julio, Osaka.

¡Akemi! ¿Te importaría bajar al sótano? Se me olvidó coger el ventilador. - dijo una voz femenina, que parecía ocupada, desde la cocina de la casa.

¡Claro Mamá! - dijo Akemi, que se encontraba viendo un show del famoso detective Mouri Kogoro.

Akemi, era una chica de más o menos unos diecisiete años de edad. Tenía el pelo largo y rizado, de color chocolate. Tenía la cara redonda, y utilizaba unas grandes gafas. Muchos decían que era una chica que causaba furor en su clase, debido a su gran belleza. Era de estatura media, y solía llevar un lazo rojo en el pelo, a modo de diadema. No era una chica muy lista, pero tampoco era una vaga.

La chica salió de su casa y se encaminó hacia el sótano como su madre la había indicado. Entró al sótano y se encontró con una inmensa oscuridad.

Valla, ahora me toca buscar el interruptor de la luz. Estuvo dando tumbos por todo el espacio que pudo hasta que encontró el interruptor.

Ah, por fin, aquí estás. A ver donde está el ventilador.. - dijo Akemi mientras miraba de un lado a otro en el sótano. Cuando lo encontró su cara se iluminó, hacía mucho calor, pero el sótano de su casa siempre era muy frío. Se encaminó hacía él, y lo cogió. Cuando se fue a dar la vuelta quiso gritar al ver un hombre ahí, pero tuvo que ahogar el grito ya que pronto se vio envuelta en un sueño causado por seguramente cloroformo.

...

¿Dónde estará Akemi? Hace más de media hora que la mandé por el ventilador. - dijo su madre preocupada.

La madre, se encaminó como mismo había hecho su hija media hora antes. Cuando vio que en su sótano, no había nada más que la simple luz encendida, lo único que se le ocurrió hacer fue, gritar.

11:15, 2 de Agosto, Osaka.

¿Entonces Hattori no sabe que vengo? - preguntó por enésima vez Ran.

No, solo me pidió ayuda por un caso especial en que se vio envuelto. Pero como seguramente esté Kazuha te pregunté que si quería venir conmigo, como unas vacaciones. - contestó Shinichi.

Ah... - dijo Ran.

Los dos chicos siguieron dando vueltas por todo el aeropuerto hasta dar con un chico de piel morena, con gafas y ojos de color verdeazulado.

¡Hattori! - gritó Shinichi.

El aludido levantó la cabeza para ver de donde provenían los gritos de alguien que le llamaba. Éste se sorprendió debido a que solo esperaba una persona. Al llegar junto a él esas dos personas, se dieron cuenta de que este estaba paralizado y lo único que movía era los ojos, y lo hacia para ir de Ran a Shinichi, y de Shinichi a Ran. El detective del Este pasó la mano por delante de la cara del otro detective y este entonces sacudió la cabeza y empezó a hablar.

¡Ran! ¡Cuanto tiempo! ¿Cómo tú por Osaka? Sí lo se traigo al monstruo. - dijo Heiji entre risas. - ¿Shinichi podemos hablar un momento?

Eh.. no, creo que es hora de irse a casa. - dijo Shinichi con la mano en la nuca y una sonrisa de 'Yo no he roto nunca un plato'

No te preocupes, Sakata aun no ha llegado. - dijo el detective del Oeste

¿Sakata? Eso significa qué... - dijo Shinichi.

Exacto. Iremos en coche patrulla. - dijo con una sonrisa triunfal el otro chico.

¿Y Kazuha? - preguntó Ran

Pues como cierto detective no me dijo que vendrías, no traje a Kazuha. - dijo Heiji mirando inquisitoriamente a Shinichi.

Ah.. - dijo entristecida Ran.

Pero no te preocupes, ahora cuando venga Sakata podemos pasar por su casa y la ves. - dijo sonriente Heiji.

¡Ah! Sí eso sería genial. ¡Voy a llamarla! - dijo Ran

¡NO! No la llames. - dijo Heiji mientras le quitaba el teléfono a Ran

¿Por qué? ¿Qué pasa Heiji? - dijo una asustada Ran

Es más divertido así. - dijo el aludido mientras le ofrecía su móvil.

Ah.. - dijo extrañanada Ran.

¿Bueno de que ca...? - intentó decir Shinichi pero se vio cortado por alguien que gritó detrás suya.

¡Señorito Hattori! - gritó Sakata

Ah, Sakata. Ya estás aquí. Bueno, entonces ya podemos irnos. - dijo Heiji que mientras empezaban a ir hacia el coche se aproximó hacia la oreja del otro detective adolescente. - Luego a solas te lo cuento, sígueme la corriente. - a lo que el otro asintió levemente

Bueno, aquí está el coche, pueden dejar las maletas en el maletero. - dijo Sakata entrando en la parte delantera del coche.

Shinichi, ¿me ayudas a subir mi maleta por favor? -dijo Ran con carita de niña buena.

Claro. - dijo Shinichi embobado, pero cuando fue a coger la maleta... - ¡Pero Ran! ¿Qué llevas aquí dentro? ¿Un muerto?

No.. Todo lo necesario para nuestra estancia en Osaka. - contestó Ran con su dulzura característica.

Dentro del coche se oía a Heiji riéndose. Cuando Shinichi metió las dos maletas en el maletero, lo cerró y se subieron en él.

¿A dónde habían pensado ir Heiji? ¿A la casa Hattori? - dijo Sakata mientras salíamos del aeropuerto.

No, lo siento Sakata. ¿Podríamos desviarnos hacía la casa de Kazuha? Y por dios, déjame de llamar de usted, ¡somos amigos! - dijo Heiji.

Ah, perdone. Quiero decir, perdona. Y claro que podremos ir a casa de la Señorita Toyama. - respondió Sakata.

Pues vallamos. De seguro que el monstruito se sorprende. - dijo Heiji por lo bajini.

...

RINGGGGGG.

¡Ya vaaa! - se oyó decir a una voz femenina dentro de la casa.

Pronto una chica de estatura media, y pelo recogido en una coleta alta con un lazo.

¡RAN! - dijo la chica mientras se echaba a sus brazos y comenzaba a apretarla. - ¿Qué haces aquí? ¿Cómo estás?

¡Bien, bien! Pero déjame de apretar que me quedo sin aire. - dijo Ran casi sin aire.

Ay, lo siento. - dijo Kazuha mientras le hacía una reverencia. La chica se giró y miró a su amigo de la infancia. - ¡HEIJI! ¡IDIOTA! ¿cómo no me has dicho que vendrían? ¡No tengo nada preparado!

¿¡A quién le dices Idiota, Monstruo?! - dijo el Aludido

¡Eh! ¡YO NO SOY UN MONSTRUO! - se defendió Kazuha

¿No crees que deberíamos meternos? - preguntó Ran a Shinichi

No, mejor.. déjales a ellos. No queremos salir perdiendo. - dijo Shinichi.

¡Y que sepas que si Ran se va a quedar en alguna casa de Osaka, será en la mía! - dijo Kazuha enfadada. - ¡BAKA!

Pues vale. Lo siento Ran, el MONSTRUO te quiere acaparar. - dijo Heiji, queriendo pinchar más a Kazuha.

¿A sí? - preguntó Kazuha, pero no dio tiempo de responder a Heiji, ya que antes le hizo una llave de Aikido.

¡Kazuha! - dijo Heiji quejándose.

Te lo has ganado. - dijo Kazuha, pero Shinichi tosió. - ¡Shinichi! Perdona por no saludarte. ¿Cómo te encuentras?

Ah, yo. Bien, bien. - respondió.

¿Qué tal si pasáis a tomar un té frió? Hace mucho calor. - dijo Kazuha.

Si, creo que tenemos tiempo. - dijo Heiji. - Sakata, ¿no te importa verdad?

¡Sakata! Buenas tardes, perdona mi despiste. - dijo una sonrojada Kazuha, que se había asomada por detrás de Heiji.

No se preocupe señorita Toyama. Y no Heiji, no pasará nada. Llámeme cuando quiera ir a su casa. - respondió alegremente Sakata. - ¡Adiós chicos!

¿Bueno? ¿Entramos? - dijo una sonriente Kazuha.

Deja de intentar parecer una buena anfitriona. - dijo el detective del Oeste

¡Baka! - gritó la aludida mientras les abría la puerta de la sala a los otros tres.

¿De qué queréis el té? - preguntó Kazuha.

El té de limón, es el que mejor te sale. - dijo Heiji sin pensar, lo que le causó un leve sonrojo en la cara de Kazuha, cosa que no pasó desapercibida por su amiga Ran.

¡Te ayudo! - dijo ésta levantándose y corriendo hacia ella.

Las chicas se dirigieron hacia la cocina a prepara el té.

¿Qué tal todo Ran? - dijo Kazuha mientras buscaba la cajita del té en el armario de la cocina que estaba encima de la encimera.

Pues bien, entrenando, y cómo no, metida en los casos de Shinichi. ¿Dónde tienes la tetera? - dijo ésta alegremente.

En ese armario. - dijo señalando uno que se encontraba al lado de la puerta. - Y con.. ¿Kudo? - preguntó Kazuhaya había encontrado la cajita y ahora estaba buscando las bolsitas de té.

Pues.. como siempre, de un caso a otro. - dijo apenada, poniendo agua en la tetera. - ¿Y tú con Hattori? - preguntó ésta ahora, eso provocó un leve sonrojo en las mejillas.

Pues igual que tú, solo que yo entre caso y caso, meto una pelea. - dijo la chica aún sonrojada poniendo las bolsitas en el agua y removiendo.

Ya.. Como siempre, lo único que hacen es estar metidos en sus casos. - dijo la de Tokyo.

Sí, tú lo has dicho, Ran. - dijo la otra mientras buscaba los vasos para el té

Y después de eso, se empezaron a reír juntas.

¿Y como es que habéis venido a Osaka? Heiji no me dijo nada. - preguntó la de Osaka.

Pues la verdad no lo se. Pero seguro que por algún caso, por que Shinichi, fue el que me dijo de venir, dijo que así podríamos vernos. - contestó la otra.

¿Crees que algún día dejaremos de vernos envueltas en los casos de estos dos? - preguntó con la cara agachada Kazuha, mientras colocaba cuatro vasos y la tetera en una bandeja.

¿Sinceramente? - dijo Ran.

Claro. - contestó Kazuha.

Pues, no lo sé. Pero espero que sí. - contestó a la vez Ran.

Son de lo peor. - dijo Kazuha causando risa en su amiga, y en ella después. - Espera llamaré a mi padre y a mi madre a ver si puedes quedarte. - dijo haciendo que la otra asintiese.

Las chicas hizo lo que había dicho y volvió, con la cara agachada.

¿Y bien? - preguntó la de Tokyo

Pues... ¡Me dejan! - gritó la de Osaka saltando.

¡Sí! - gritó a la vez la otra abrazándola.

...

Heiji, dímelo sin rodeos. ¿Por qué me has traído aquí? - dijo el detective del este.

Pues.. es qué... estoy preocupado, por un caso. - dijo el otro chico.

Cuéntamelo. - dijo Shinichi algo ilusionado.

No quiero contártelo aquí, no quiero preocupar a ninguna de las dos chicas. - dijo el otro.

¿Por qué? - preguntó Shinichi.

Pues por que.. - intentó decir Heiji pero fue cortado por las chicas.

¡Aquí traemos el rico Té! - dijo en tono melodioso Kazuha.

¡Sí! - dijo Heiji. - Hacía mucho que no me preparabas té. Por lo menos desde que estabas enamorada de mí. - dijo éste.

¡Yo nunca he estado enamorada de ti! - gritó Kazuha tan efusivamente que tiró uno de los vasos al suelo rompiéndose en mil pedazos por todo el suelo de la sala. - ¡Ay dios! Lo siento de verdad, que vergüenza...

No te preocupes Kazu... - dijo Ran cariñosamente. - Tranquila, lo limpiaremos. ¿Dónde están las cosas?

Vale. Iré al sótan. - intentó decir Kazuha pero esta vez quien interrumpió fue Heiji.

¡NO! - gritó el de Osaka, asustando a los demás. - Kazuha, iré yo al sótano a por ellas, después de todo fui yo quien lo provocó. - dijo Heiji mientras se levantaba y con sumo cuidado se dirija hacia la puerta de la casa.

Minutos después aparecía Heiji con el aspirador, y se disponía a limpiar la sala de la casa.

Gracias Heiji. - dijo Kazuha, causando un sonrojo en las mejillas del aludido, más no se le notó por el color oscuro de su piel.

D-D-De nada, Kazu. - contestó sin dejar de mirar la aspiradora. Cuando terminó su tarea, fue al sótano, dejó el aspirador, y volvió a la sala.

Ya hemos repuesto el vaso, ¿Quién quiere té? - dijo Ran amablemente.

Los dos chicos levantaron la mano, entonces Kazuha cogió la tetera, y procedió a servir con gran habilidad en los cuatro vasos. Mientras esta servia, su amigo de la infancia, no podía parar de mirarla, estaba asustado por ella. No quería perderla, después de todo era su primer amor. Aun podía recordar esa niña cantando mal aquella canción en el templo de Kyoto. Ella no lo sabía pero junto con Ran, ésta en menor medida, podrían estar en peligro.

¡Heiji! - gritó Kazuha mientras pasaba una mano por encima de su cara. - ¿Es que no ves que te están llamando al móvil?

¿Eh? Claro, Claro, el móvil. ¿Sí? Ah Sakata, ¿Ya? ¿Tan tarde es? ¡Vale! Te esperamos. Sayonara. - dijo el de Osaka. - Lo siento chicas, Sakata tiene que venir ya a por nosotros. ¿No os importa verdad?

No claro, así tenemos más tiempo para nosotras. - dijo Ran.

¿Pero de verdad piensas quedarte con esta loca? - preguntó Heiji.

Pues claro que sí. - dijo Kazuha mientras le sacaba la lengua a su amigo. - Shinichi. Gracias por traer a Ran, la echaba muchísimo de menos. - dijo Kazuha.

¿De nada? - el aludido estaba algo extrañado, el comportamiento que a veces tenían los de Osaka, le trastornaba bastante.

Pronto llegó Sakata, y los chicos se despidieron de ellas, no sin antes bajar del coche la pesada maleta de Ran, y por supuesto, dejarla en la habitación de Kazuha. Las chicas ya cenadas, se fueron a la habitación de Kazuha.

Lo siento Ran.. Como mi querido amigo Heiji, no me había dicho nada, no he podido prepararte una cama, y tendremos que dormir juntas. Espero que eso no sea un inconveniente. - dijo Kazuha con algo de miedo, su amiga era muy amable y dulce, pero nunca se sabia como iba a reaccionar.

¡No te preocupes! - dijo su amiga con una sonrisa.

Por cierto.. ¿Por que crees que Heiji ha actuado así esta tarde? - dijo Kazuha.

No lo sé. Son detectives, no intentes buscarle una explicación a todo hacen. - contestó su amiga.

Ya.. Bueno, creo que es hora de ir a dormir ¿No? ¿Qué te parece si mañana vamos de compras? - dijo Kazuha con alegría.

¡Claro! Que duermas bien Kazu. - contestó Ran.

Igualmente. - terminó Kazuha.

...

Hattori, creo que ya es hora de que me expliques de que va todo esto. - dijo Shinichi. - ¿Qué narices te pasaba hoy?

Tiene que ver con el caso, Kudo. - dijo su amigo sin ningun tono especifico de voz.

Pues cuéntame el maldito caso que te tiene así. - contestó Shinichi.

Pero antes es mejor que cenemos, creo que mi madre ha preparado Takoyaki. - respondió Heiji.

No no, Heiji, tu no te vas hasta que me expliques esto. - dijo Shinichi.

Vale.. Últimamente, han secuestrado a muchas chicas de rasgos similares, en nuestra zona. - dijo Heiji

¿Qué rasgos son esos? - preguntó Shinichi, y al ver que su amigo no respondía habló. - Los de Kazuha, ¿Verdad?

Sí. Chicas, de nuestra edad, todas con algún tipo de recogido con lazos. Todas castañas y de estatura media. Dos casos de nuestro instituto, el más reciente, Akemi Tegishahara, y Kaede Uchida. La primera con un lazo rojo como diadema, la segunda.. un lazo a modo de coleta. Todas bajaron al sótano a por cualquier cosa, y aparecen varios días después muertas. Por supuesto, ella no sabe nada, no quiero alarmarla. ´- dijo Heiji algo asustado.

Tranquilo, no le diré nada. ¿Tienes alguna pista? - preguntó Shinichi.

No.. solo una, el asesino y secuestrador utiliza cloroformo. - respondió Heiji.

Es un buen comienzo. - dijo Shinichi.


Espero que os haya gustado, y que me dejéis Reviews, los contestaré al final del capítulo. Un beso!