La Muerte de Yuuno Scrya

Por Alex Manson.

Disclaimer: Ninguno de los personajes de Nanoha así como su historia me pertenecen.

— A, claro tómense su tiempo –dijo sarcásticamente, sacudiendo las manos al aire para dar énfasis a sus palabras- ¡si el clima del desierto es tan genial, nos podemos quedar aquí todo el día!

— ¿En serio? Que amable de su parte patrón.

— ¡Por supuesto que no! acabemos con esto rápido. Pero con cuidado, no queremos que pase otro incidente como el de Jurasick park- Muy a su pesar, Yuuno se sacudió con un escalofrío. —No tiene caso hablar de lo fue, anda Pablo a trabajar ve y dile a todos que quiero verlos en 5 minutos, corre muchacho.

Yuuno Scrya contemplo la figura delgada y coja de Pablo salir de su pequeña tienda de dormir. La habían motado con todo lo necesario para un pasar una excavación de dos meses. Pero para el cuarto mes la desesperación era más que notoria en todo el equipo, se hablaba de rumores de motín y deserción. Cuatro meses y no habían encontrado absolutamente nada, ¡Nada! Y su aquelarre ya estaba empezando a considerar practicar el canibalismo

Una vez mas su trabajo lo había llevado a una tierra hostil. Las ráfagas de aire del desierto le quemaban la garganta y tenia arena en todos lados. Era un lugar horrible, parecido al infierno. ¿Cuál es el olor del desierto, Yuuno? Derrota, el desierto huele a derrota.

Derrota y presupuesto mal gastado y era el dinero la parte mas delicada y complicada de todo el asunto.

— Hice cosas horribles y degradantes para conseguir esos fondos y ahora ¿todo terminara así? Esto no es justo, pero sinceramente cuando mi vida ha sido justa-se quejaba en un tono abatido sentando en el interior de su tienda.

Cosas horribles y degradantes ¿con cual empezó todo exactamente? O si, ya recuerdo fue en ese evento de caridad a favor de… ¿Niños discapacitados? ¿El desempleo? Creo que fue niños desempleados. Todos los peces gordos y forrados va a esa clase de eventos pero yo tenia la mente puesta sobre la billetera de uno en particular, Walt Cullent, un emprendedor inversionista con un gusto particular por la historia y la antropología.

— Como pescar con dinamita ¿no?-Yuuno, había divagado tanto que no se dio cuenta el momento exacto en que salio de su tienda hacia el abrazador sol de desierto, pero estaba tan perdido en sus pensamientos que no le importo, así como no le importo hablar solo.

—Pero no fue tan fácil ¿verdad? Estaba ese detalle, siempre hay un detalle y lo recuerdo como si hubiera sido ayer.

Claro que había un detalle, Walt tiene justos mas amplios por decirlo de alguna manera, gay. Por lo que a mi respectaba solo tenía dos opciones.

a) Le explicaba a Walt de manera clara, concisa y convincente las razones por las su financiamiento seria una buena inversión así como prometerle gran parte del reconocimiento de "su" excavación.

b) Conseguir un acompañante y pretender que estamos en una relación formal y gay.

— Oye, ferret-boy deja de jalarme, suelta mi brazo, agh dime de nuevo ¿por que estoy haciendo esto?

—Estas comprando mi silencio por supuesto, Chrono.

— ¿Tu silencio?

—Si, MI Silencio ¿recuerdas ese viaje a las Vegas? ¡Aun tengo los certificados de matrimonio!

— Ya te dije, tome una cerveza de mas ¡No significa nada! lo juro yo amo a, Amy…

— Shh ahí esta Walt, pretende que me amas.

— No voy a hacer tal cosa, es un insulto a mi masculinidad

—Me sorprendes, Chrono una cosa tan diminuta como esto no debería suponer ningún inconveniente si de verdad estuvieras seguro de tu sexualidad, así que sea hombre y agarre me una nalga.

—Ah, pero al final hasta tuvimos que besarnos ¡Maldito seas, Chrono tu y tus nefastas habilidades actorales!

Sin habérselo propuesto, Yuuno estaba acostando sobre la arena haciendo una pataleta bajo la mirada de sus subalternos que lo miraba confundidos y hasta con desagrado.

— Te lo dije, el patrón esta chalado-comento uno de ellos.

— Olvida eso, es puñal y ambicioso, cerdo- Respondió otro.

— ¿Puñal? ¿El patrón es hombre? No lo sabía-Comento otro incrédulo.

Cansado de esas miserables actitudes, Yuuno Scrya se levanto del suelo sacudiéndose la arena de los pantalones, guardo entonces las manos en los bolsillos y pasó la mirada sobre todas esas caras que había llegado a odiar los últimos 4 meses.

—Bien muchachos no les voy a mentir, estamos en un lío grave- giro su cabeza a la izquierda y escupió sobre la arena donde se formo un punto oscuro y una vez mas percibió que (el desierto huele a derrota) el calor era tan agobiante como las miradas puestas en el – y creo que somos los únicos responsables. Hicimos un mal trabajo desde el principio, pero no es razón para desanimarnos, creo que con un poco de esfuerzo bien podemos llegar a una solución….

— Corta el rollo, ¡Cabron! Esto es toda tú culpa.-Grito uno de los ayudantes bastante cabreado.

— No hay necesidad de usar malas palabras- se apresuro a contestar Yuuno antes de que las cosas se salieran de control- tal vez exagere un poco, no escomo si no hubiéramos quedado sin comida, aun tenemos algunas galletas saladas y mostaza.

— ¿Galletas saldas? Que eso no nos dará mucha sed, seria problemático para nuestras reservas de agua- comento el mismo ayudante al mismo tiempo que el resto del equipo asentía con la cabeza.

Yuuno saco las manos de sus bolsillos llamando nuevamente al orden.

— ¿Cuales reservas?, si toda se acabo ayer y yo… mierda.

— ¿No tenemos agua? ¡¡Vamos a morir!!

— ¡Estamos todos condenados!

— Y es toda su culpa- señalo Pablo el tipo delgado y cojo que Yuuno contrato para hacer las diligencias.

—Vamos, Pablo no se así.-Replico, Yuuno usando el mismo tono amable con el que le pido ayuda a Nanoha la primera vez que la vio- Estoy seguro que hallaremos una solución. Por favor conserven la calma y yo… ¡Hey! ¿Adonde van todos? ¡Vuelvan!

Las exigencias de Yuuno eran completamente inútiles, mientras le hablaba a las espaldas de su aquelarre caminado hacia adentro en el desierto.

— ¿No piensan enserio que se pueden irse así como si nada? ¿Pues saben que? ¡Que les den! Buena suerte tratando de sobrevivir al desierto. ¡Yo teletransporte a todos aquí!- Yuuno, rubio, malhumorado, y verdaderamente mal perdedor empezó "delicadamente" a recordarles que tan importante era para ellos.

—Así que ¿aun queremos irnos? Creo desde el fondo de mi corazón que estarán perfectamente bien -entre cerraba los ojos mientras los despedía con un batir de mano, la sonrisa de su rostro era traviesa cerca de malévola tiraba por los suelos toda la fachada de "buena suerte".

Admitirlo era duro, pero era la pura verdad. Necesitaban a Yuuno, no importaba cuanto lo odiaran su supervivencia estaba íntimamente ligada a la suya, seguro que entre ellos había uno o tal vez dos mago capaz de llevar acabo una teletrasportación exitosa, pero llevar a todo el equipo era un asunto mucho mas complicado, mas aun ¿podría confiar en que después de salir de ahí, tendría la fuerza para regresar por el resto? (y quisiera)

Resignados dedicaron miradas enojadas a Yuuno por haberlos metido en tan terrible circunstancias. Mientras el calor inclemente del desierto estaba más que dispuestos a derretirlos.

Definitivamente el desierto huele a derrota.

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Pasando esa pequeña crisis de deserción, Yuuno tenía que pensar rápido, sus hombres estaban cada vez más sensibles debido a la deshidratación. No pasaría mucho tiempo antes de que abandonaran sus comportamientos civilizados y optaran por un motín violento.

Mirando directamente hacia la infinita y abrumadora arena Yuuno meditaba sentado en una roca con las manos entre las piernas.

—Necesito un milagro-Dijo solemne.

Lastima que no soy muy religioso ¿Qué puedo hacer?

Saco de su mochila tres gruesos libros con las portadas agrietadas por el tiempo, no les dedico una sola mirada antes de ponerlos en el piso. Había realizado este encantamiento muchas veces en la privacidad de su tienda sin arrojar ningún nuevo resultado. Pero ocupaba una pista, cual sea que le diera una idea de la dirección que debía tomar ahora, esas ruinas estaba en algún lugar cercano

Los libros se elevaron ante el, cubiertos por unos luminosos círculos verdes, uniendo los círculos estaba una cadena del mismo color que la luz. El encantamiento servia para pasar información subjetiva de los libros hacia la cabeza de Yuuno, buscando algo que tal vez haya pasado por alto.

¡No me jodas! ¿Es enserio? Esta tan cerca, ¿como no lo había visto? Ya no puedo esperar. Solo espera hasta que los chicos le sepan.

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— Este es mi plan-comento Pablo al resto del equipo- Esperamos a que este dormido los amarramos y le damos de palazos en la cabeza hasta que nos saque de aquí.

El aquelarre estaba reunido bajo los escasos espacios de sombra que lograban con dos toldos instalados legos de la tienda del patrón, planeando que hacer a continuación.

"Nos meteríamos en problemas si hacemos eso" comento uno.

"Solo si sobrevive" respondió otro.

"Entonces hay que asegurarse de que no suceda"

"¿Pero que pasaría si se defiende? Escuche decir que en verdad es un tipo muy duro, algo de que es capaz de hacer cosas que todo un equipo no puede"-dijo otro mas con un dejo de temor en la voz.

—Si como no, sabe buscar libros y eso es todo- Aclaro Pablo con desden- Espero que ninguno tenga miedo de ser golpeado por una enciclopedia.

Yuuno apareció precisamente en el momento en que su compañía desidia su destino con no muy buenas intenciones. Sus pasos silenciados por la arena llevaban un andar eufórico.

— ¡Reúnanse niños, por que hoy cenaremos en el infierno!- No fue su comentario extraño lo que asusto a su aquelarre, tampoco el que los haya tomado por sorpresa, fue mas el tono demencial que tenia su voz sumado a la poción en que estaba parado. Manos en la cadera y el cabello agitado por el aire del caliente del desierto que de repente ya no parecía tan amenazador en comparación.

— Espera ¿que carajos fue lo que dijo?

— ¡Lo sabia, va a matarnos a todos!

— No, no lo hará, no puede-aun que incluso Pablo no estaba muy convencido.

Había estado trabajando para Yuuno Scrya alrededor de 4 meses, y sabia muy bien que por debajo de esas sonrisa dulce y confiable, había algo bastante perturbador en el. No importa si en las video conferencias que sostenida con Walt, Yuuno se mostraba tan encantador y afable, debajo de ese exterior se encontraba una persona completamente diferente. Como si alguien levantara una piedra y viera a los insectos que viven debajo.

Y eso era jodidamente asqueroso.

Segundos después todos fueron absorbidos por una luz verde creada por otro de eso desagradables círculos teletrasportadores que Yuuno suele hacer y arrojados a otro punto que, para ser sincero no tenia mucha diferencia del anterior.

— Oh, mi espalda me esta matando, pero por otro lado como este trunco realmente nunca me sale bien supongo que es una bonita tradición, o yeah tradición.

Tendido en la arena y quejándose de su espala Yuuno Scrya contemplaba una lluvia de hombres y aparatos caer del cielo. Pablo callo justo a su lado.

— Hey, Pablo ¿Buen aterrizaje no?

— No siento mis piernas.

— No te preocupes, Pablo como de todas formas eres cojo apenas y notaras la diferencia.

— ¡Es usted un hombrecillo horrible patrón!

Ambos hombres se levantaron de la inagotable arena del desierto sacudiéndosela de los pantalones cuando Pablo cayó en la cuenta de algo.

— Patrón dejeme preguntarle algo. Si podía transportarnos a todos desde el principio "Algo que por cierto aun no puedo creer" ¿Cómo es que pensaba matarnos de hambre haya atrás?

—Elemental Pablo, Ante la posibilidad de la muerte los humanos aceptan cualquier alternativa, no solo eso, desearan hacer cualquier cosa de manera gustosa. "¿No me crees? Solo pregúntale a los judíos y sus campos de concentración"

— ¡Es usted un hombrecillo horrible patrón! –repitió Pablo indignado.

Yuuno solo se rió y miro al cielo. Increíblemente lucia años más joven, asumiendo que las preocupaciones lo hayan envejecidos.

— Basta de charlas, Pablo ¿Por qué no caminas hacia allá y me dices que vez?

— Si Patrón –Respondió Pablo y hizo lo que Yuuno indicaba. ¡Dios mío! Es un hoyo enorme ¿es esto lo que estábamos buscando?

— Si que lo es.-repuso Yuuno con una sonrisa de satisfacción cuando se sitúo al lado de Pablo- ahora ni siquiera tenemos que cavar, bastante bien ¿no?

Rápidamente el aquelarre se acerco al hoyo y se dispuso a preparar el equipo, cuando llego el momento de decender vieron por primera vez la campilla.

Una estructura de mármol tallada toscamente de apariencia circular sin ninguna atención extra a los detalles. Era una vieja capilla, pero con una apariencia de haber ganado la pelea con el tiempo y quedar suspendía en una era que ya pasó, Yuuno dudo que alguna vez se haya visto mejor que ahora. Cuatro esculturas de ángeles con sendas lanzas estaban colocadas a sus costados, y en el tope encima del arco de la entrada se encontraba apostada otra estatua con la forma de un cráneo de algún animal con cuernos. La cuenca de sus ojos era oscura, como un abismo, los hombres contemplaron eso ojos por un tiempo antes de darse cuenta de que habían sido hipnotizados por unos momentos.

— No lo se patrón, esto no me gusta, tengo un mal presentimiento sobre todo esto.-se quejo Pablo en tono remilgado.

No solo era un mal presentimiento, Pablo estaba completamente aterrado por una razón que solo sus más primitivos instintos podían explicar. Solo apartar la vista de eso ojos le costo una enorme fuerza de voluntad.

— Y además –Continuo Pablo encogido de ante la mirada de eso ojos hechos de piedra pero definitivamente no muertos — Esta ese olor, es como si alguien hubiera tirado un bote de basura en las entrañas de un gato muerto en un día caluroso de verano.

Yuuno le volteo a ver con una expresión condescendiente.

— ¿Que no podías simplemente decir que huele mal? No, tenías que hacer toda una analogía sobre gatos muertos. Esta capilla ha estado aquí por un par de muchos años ¿A que se supone que debe oler? A rosas no, eso es seguro

— Como sea, no pienso entrar ahí es peligroso.

— ¿Alguien mas tiene un ataque de pánico?- Sus ojos verdes se llenaron de frustración cuando su aquelarre respondió afirmativamente con movimientos de cabeza. ¡Bien!

Yuuno se adelanto a uno metros de la entrada y miro fijamente a la cráneo con cuernos, los cuencas hechas de granito no tenia el mismo efecto en el que en los demás. A uno metros de distancia su equipo le mira con una expectativa de que el cráneo le zampara la cabeza y así todo terminara para irse por fin de ese condenado lugar.

— ¿Eres peligroso? –le pregunto al cráneo.

Y una voz cargada con un aroma más fétido que antes respondió "NO"

— ¡Ya dijo la calaca! Éntrenle – Ordeno Yuuno felizmente.

— ¡Se ha vuelto loco, esa cosa hablo! ¡Es una enorme cabeza de piedra con cuerno y hablo!, esto no esta bien. Vamos, Patrón –Suplico Pablo, aferrando la manga de Yuuno y tirando de el.

— Ahh a ustedes no se les tiene contentos con nada ¿verdad? Acaba de decir que no es peligroso.- se tomo un momento para volver a poner sus manos dentro de los bolsillos y sonreír de nuevo lleno de optimismo — Entremos ¿Qué es lo peor que puede pasar?

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— Es tan raro que me invites a comer, sin embargo es una linda sorpresa.

— Lamentablemente no puedo invitarla a casa, realmente no puedo cocinar nada.- Arf rió por lo bajo y agrego — ¡La ultima vez queme hasta el cereal!

El pequeño pero acogedor restaurante que escogió Arf para llevara comer Lindy tenia dos de las cualidades preferidas de Arf, carne jugosa bien cocina a la parrita y por sobre todo, era barato.

—Hablando de casas ¿Qué tal te ha ido? ¿T e estas diviertes viviendo con Yuuno-san?

Estaban sentadas en una pequeña mesita cubierta con un mantel a cuadros, dispuesta en un rinconcito de humilde restaurad. Algo acogedor y privado

— Uh, Yuuni tiene muchos defectos, constantemente olvida pagar los servicios "o no tiene dinero" es desordenado y por lo general termino recogiendo y limpiado todo sin su ayuda. Pero es cierto que desde que vivo con el ningún día ha sido aburrido.-Lindy le observaba con las manos cruzadas bajo la barbilla sonriendo— Enserio, Yuuni es bastante entretenido.

—Estoy segura de que así es, sobre todo por la cara que pones cuando lo dices-Lindy se inclino sobre la mesa y rodeo a Arf con los brazos riendo.

— ¿Eh?, Lindy, ¿Oka-san? – Arf se quedo sorprendida con medio pedazo de carne en la boca.

— Lo siento Arf, a pasado un tiempo desde la última vez que vi tu loli form, y creo que me deje llevar- Lindy froto su cabeza con cariño, Arf solo rió nerviosa —Tengo entendido que Yuuno-san actualmente esta en un expedición arqueológica, ¿no te sientes un poco sola? Si es así, puedes venir a "casa" y quedarte unos días.

Arf suspiro regocijándose un poco mas en ese abrazo antes de separase.

— No creo que eso sea posible-contesto la pequeña chica lobo—Por que estoy esperando.

— ¿Esperando?— Lindy parpadeo sorprendida. ¿Esperando, que?

"Y ahora, noticias de ultimo momento, en el sector 22 el desierto Arkmand el mas extenso del mundo se a suscitado un accidente: Una expedición que era llevada con fines antropológicas a terminado abruptamente…

Arf miraba el televisor del pequeño restaurad, mientras el anfitrión del programa de noticias hablaba ella permanecía con la mirada impávida y con una sonrisa de medio lado que Lindy no pudo descifrar. "esperando eso" murmuro.

"El grupo fue encontrado en una aldea local después de caminar cuarenta kilómetros por el desierto, afortunadamente están a salvo, aparte de la deshidratación ninguno presenta daño alguno…."

— Oh, gracias a Dios, ¿No te da gusto Arf?- Arf levanto la mano pidiendo silencio, su vista seguía clavada en el televisor.

"Lamentablemente, el jefe de la expedición Yuuno Scrya quedo atrapado en el derrumbe de una ruina: Tenemos el Testimonio de uno de los sobrevivientes del aquelarre. Adelante señor Pablo.

—No, pues yo se lo dije al patrón, rayos si se lo dijimos todos, pero el estaba terco- la pantalla ahora mostraba a un joven de pelo oscuro y flaco como una hoja de papel.

— ¿Qué le dijeron señor Pablo?

—Pues que no debíamos entrar, pero el estaba terco, ¡Terco te dijo! Nos obligo a entrar a esa maldita cosa que apestaba a rayos y después, madres, todo se vino abajo. Tengo un golpe en la cabeza que aun no deja se sangrar, esa piedras eran enormes.

—Debió ser un golpe duro perder a su patrón de esa manera, todos aquí en el estudio los acompañamos en este duro momento y esperamos lo mejor, que el grupo de rescate tenga éxito.-Continuo el anfitrión con su clásico discurso hipócrita.

— No, pero si eso no fue lo mas duro-continuo Pablo casi histérico— lo peor es que antes de que lo aplastaran las rocas, ¡me robo la cartera el mamon!- El corresponsal carraspeo ligeramente y dio corte al enlace con Pablo.

— Arf, yo…- antes de pudiera continuar Arf se limpio serenamente la boca con una servilleta y salto de su asiento, dirigiéndose a paso tranquilo hacia la puerta — ¿A dónde vas?-quiso saber Lindy.

Arf se volteo al llegar a la puerta sonriendo y alzando el pulgar.

— A sacar a un huron del hoyo ¿A dónde mas?-dicho esto partió sin mirar atrás.

Buena suerte, Arf, solo por eso voy a ignorar el hecho de que me dejas sola para pagar la cuenta.

Yuuno en ningún lugar: Bad to the bones.

Es realmente sorprendente lo que una persona como yo tiene que pasar, no todos lo días una montaña de rocas y escombros te cae en sima, excepto si eres yo. Mi maltratado cuerpo quedo a merced se de este piso inmundo que olía a puro azufre y calaba de lo caliente que es. Te lo dijo amigo, si no es por vaciar dos botellas de whisky Jack Daniels, despertar en el piso no vale la pena. ¿Y donde rayos estoy de todas formas?

Lo ultimo que recuerdo a estar corriendo detrás de ese cojo bastardo de Pablo, y de que luego todo se vino abajo. ¡Te maldigo Pablo! A ti y a tu veloz y coja pierna. Me alegra que por lo menos, le robe su cartera al mamon.

— Veamos que tenemos aquí-Yuuno se levanto del piso y miro a su alrededor— Gritos agudos de hombre, calor endemoniado, pestilente y penetrante aroma. Me lo imaginaba, estoy en un baño publico, probablemente en Texas ¿me pregunto si George Michael esta cerca?

—No exactamente -Dijo una voz a su espalda— Bienvenido al infierno, Yuuno Scrya, por razones prácticas puedes llamarme Satán o Diablo según te parezca y desde ahora, soy el dueño indiscutible de tu alma inmortal.

Cabello castaño sedoso, ojos azules e infatiles, piel clara y cuidada. OK, tal vez tenga un par de cuernos en la cabeza, cola larga, puntiaguda y diminutas alas de vampiro pero aun así reconocería ese rostro cualquier día de la semana. Me ha acosado en mis pesadillas por largo rato.

— ¡Dios mio! ¿Hayate? ¿Tú eres el diablo?-casi se le cae la boca al piso.

—Por favor, te algo de sentido común, no decimos Dios por aquí. Es de muy mala educación.

La joven se tapo los oídos al mismo tiempo que flotaba incomoda, asiendo una mueca de disgusto. Su cola adopto un amenazador movimiento pendular.

En definitiva, si la vida un cruel ¿por que iba ser diferente la muerte?.

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Bueno, en Yuuno Scryas Blog, en el sexto capitulo Yuuno hace mención a que Hayate es el diablo. Esta historia es la razón detrás de ese comentario y el principio de mi pequeña comedia metafísica, ironica y todo lo que conlleva la muerte. Acepto la critica y se que el primer capitulo no es tan gracioso. Nos vemos después.