Participa en la actividad del grupo de 'Zona Hero'.
Hacía tanto que no lo abrazaba…
Que no lo sentía.
Y tan rápido como llegó a sus brazos… se fue.
Observa a su alrededor, intentando encontrarlo, pero no logra hacerlo. Comienza a desesperarse, ¿qué ocurrió? ¿En qué momento? ¿Cómo? ¿Qué pasó?
—Estoy muerto…
Escucha.
Y le grita, preguntando dónde está.
Pidiéndole que salga, que deje verlo… porque ya no quiere estar lejos.
Pero no aparece.
—Estoy muerto, Bakugo.
Pero no es verdad, sólo era una enfermedad, sólo era una mentira… ¡no era verdad! La alarma en su celular suena, hay un nombre extraño… y un recordatorio.
Tomar. Medicamento.
¿Pero de qué?
—Bakugo…
Debe tomarlo.
No sabe por qué, pero conoce el camino.
Y sí, lo hace.
Lo ingiere.
Y siente un vacío…
Porque Aoyama sigue sin aparecer.
Vuelve a buscar, sin parar, hasta que cae la noche. Ha dejado pasar tres alarmas, cada una con un nombre diferente de algo que cree, es más medicina. Pero no, no quiere tomar nada. Él necesita verlo de nuevo, ¿por qué debería de ingerir algo que le prohíbe verlo una vez más?
—Bakugo… estoy muerto. Vete… por favor…
Pero no puede.
—No te hagas más daño.
No puede.
Lo sabe, lo recuerda.
Él ya no existe.
Aoyama Yuuga murió en un accidente hacía cinco meses.
Pero él lo veía… así que no estaba muerto ¿verdad?
Los medicamentos le ayudan…
Pero lo alejan de él.
