Capítulo 1 ¿Dónde Estoy?
Era un día común y corriente y Harima se centraba en poder abrir sus ojos pero el sol lo impedía que se dispuso a tomar su almohada y usarla como escudo para que el sol no hiciera daño a sus dos morenos ojos, y le dio la misma tarea a sus sedosas sábanas blancas….
(Pensamiento de harina)- aguarda pero si desde mi cuarto no se puede ver el sol por las mañanas y mis sabanas son azules y no tan sedosas, yo duermo en un catre frio, no en una cama tan suave y limpia- Harima salió de sus pensamientos solo para salir de un salto de aquella tersa pieza de fina mueblería y notar que no era ni tan siquierasu edificio departamental.
El sobresalto y sorpresa le duro poco ya que un fuerte dolor en el abdomen lo mando al suelo, donde el golpe contra el mismo y los objetos que se encontraban sobre un pequeño buro al caer,hicieron un estruendo que se pudo oír asta el piso de abajo, donde una chica de ojos y cabello de color oro se disponía a cenar.
Al escuchar el ruido, no el ruido no era importante sino de donde venía la rubia salió del comedor, con un rostro que expresaba una preocupación enorme, acompañado de un acelero en su respiración. La chica en un dos por tres llego a la ya mencionada habitación, la enorme distancia entre el comedor y la alcoba no fue impedimento para llegar primero y ver a un chico moreno tirado en el suelo con varias heridas en todo su cuerpo, pero una herida en el abdomen creo suma preocupación en la rubia, la cual se extendía desde parte del costado hasta casi el ombligo del moreno, manchando el suelo y su camisa.
La chica entra en llanto y desesperación, solo atino a gritar por ayuda, a lo que su siempre fiel sirviente llego en seguida, pero no con su ya acostumbrado smoking sino con una playera blanca y unos jeans desgastados y manchados de licor enseguida el alto hombre grito por Alfred el doctor de la familia quien corrió por el pasillo y llego en segundos.
El doctor tomo su botiquín ya un poco más calmado y se prestó a suturar la herida, el chico solo podía gritar ya que a pesar de la anestesia el dolor era insoportable. Apenas termino su tarea el medico, tomo todas sus herramientas y salió del lugar pero antes se detuvo en el marco de la puerta y volteo a mirar una escena bastante peculiar. Una chica rubia sosteniendo fuertemente una mano del moreno quien con unos ojos cubiertos por llanto de dolor apretaba fuertemente la mano de la susodicha.
Médico- mire joven no sé en qué tipo de situaciones se desenvuelva pero le pido que no preocupe de esa forma a la señorita- dijo limpiando sus antejos mirando fijamente las manos de los chicos.
Los dos personajes al darse cuenta de lo que estaban haciendo se soltaron de inmediato pero un quejido por parte del moreno hizo que la rubia lo volviera a sostener.
Médico- bueno joven lo que usted agá con su vida no me interesa; pero si mi opinión como médico es de su interés le recomiendo que no realice esfuerzos, que cuide y desinfecte constantemente esa herida y que nos veamos en dos semanas para retirar las puntadas-.
Después de dar las anteriores recomendaciones salió de la habitación, no sin antes volver a mirar con seriedad las manos de los muchachos, a lo que volvieron a soltarse pero ahora con más cuidado. No estuvieron solos ni cinco minutos para cuando un hombre de pelo rubio canoso y apariencia desordenada abrió la puerta.
Alphonse Sawachika- pero que es todo este desorden, gritos y pasos. Uno llega cansado después de un viaje de negocios y lo levantan los gritos de un hombre…- El hombre no acabo decir la frase cuando centro la vista en el chico.
La rubia de un brinco salto del sillón alado del mal herido moreno, y brinco a los brazos del hombre.
Eri – PapaCuanto tiempo cuando llegaste porque no me avísate – pero detuvo sus frases al percatarse de un aroma completamente desagradable.
Eri – Apestas a licor barato papa en donde estuviste anoche. Dijo con molestia
La chica hablaba aparentemente sola ya que su padre no separaba la vista del muchacho y viceversa. Al parecer los dos estuvieron en el mismo lugar la noche anterior. La chica solo se percató de las penetrantes miradas de los dos hombres en el momento que Nakamura el mayordomo entro ya cambiado bañando y con su acostumbrado buen aseo, el hombre llevaba en una charola dos vasos de tamaño gigante llenos de agua mineral y rebosantes de hielos, los dos antes mencionados se les hizo agua la boca y sus ojos se llenaron de deseo.
El mayordomo le ofreció un vaso a cada uno, y el par de hombres los bebieron al hilo así una vez extinta la sed de ambos el padre soltó unas palabras con un aire agresivo.
Alphonse- Bueno usted caballero me podría decir de donde conoce usted a mi hija.- dijo con un tono agresivo e interrogativo.
Harima – Soy un compañero de clase de su hija.- dijo con su típica voz retadora.
Alphonse – Pero como un hombre de su edad se le puede admitir la entrada y toma de clases en una preparatoria y aun peor la convivencia con niños de la edad de mi hija.- dijo con sorpresa y algo de enojo.
Harima- en realidad yo tengo la misma edad de su hija e incluso creo que unos meses menos que los de la princesa.- dijo con un tono calmado masticando el sobrante de hielos del vaso.
Alphonse – Pe-pe-pe-pero si usted aparenta al menos unos 22 años y mi hija apenas va a cumplir 18- Dijo el hombre con una cara de duda.
Harima – Bueno entonces usted acaba de adivinar mi edad- dijo burlonamente.
Eri veía la escena con más y más coraje pero en un intento de mantener la sana convivencia y paz en el lugar así como cuidar de la salud de Harima ya que el doctor recomendó cero esfuerzo, sabía que un golpe lo dañaría bastante, y lógicamente no podría faltarle al respeto a su amado padre. A lo que intento interrumpir
Eri – He esto disculpen- dijo con un tono de lindura y educación tratando de no interrumpir bruscamente.
Alphonse – Porfavor hija mantente al margen esta es una conversación de adultos- dijo el hombre con el tono indicado para hablarle a una niña de cinco años.
Eri se quedo petrificada por la contestación, ya que no hablaba con algún anciano magnate, hablaba con su compañero de clase. Pero por supuesto no se iba a quedar callada e intento repetir la misma acción.
Eri – He esto disculpen- dijo con un tono de lindura y educación tratando de no interrumpir nuevamente.
A lo que ahora la respuesta fue del joven barbudo.
Harima – Por favor Princesa estamos hablando no interrumpas a los adultos que te puedes llevar un regaño por parte de tu padre- dijo con el mismo tono como intentando hablar con un infante.
Eri se volvió a petrificar pero ahora aún más, ahora era su compañero quien la estaba tratando como a una niña pequeña, Eri hizo un tercer y último intento por mantener la cordura atinando a dar la misma frase en busca de una respuesta un poco más coherente.
Eri- He esto disculpen- dijo con un tono de lindura y educación tratando de no interrumpir bruscamente y ya con la paciencia bastante agotada.
Los dos hombres dieron la misma respuesta al unísono.
Alphonse, Harima- Por favor No interrumpas a los adultos- dijeron con el ya descrito tono.
La rubia se sorprendió por la respuesta, y se intentó calmar pero su esfuerzo fue en vano así que volvió a intentar interrumpir pero antes de que dijera una palabra su padre interrumpió con una frase que la saco de quicio.
Alphonse- ni interrumpas mejor baja por otro vaso igual para papi y el caballero- dijo con él ya desquiciante tono. Pero no se hubiera sentido tan cabreada de no haber sido por unas palabras de su compañero de clase.
Harima- anda se buena niña y obedece a papi- dijo con el mismo tono del anterior caballero.
La pelirrubia no podía entender él como su padre la podía tratar así en frente de uno de sus compañeros de clase.
Pero si algo en verdad no encajaba era por qué el moreno y su padre se conocían y aun más porque su padre estaba en un estado tan deplorable, así que su paciencia una vez exterminada por las palabras del joven dibujante se dio a la tarea de preguntarle a los dos que de donde se conocían, pero todo esto ya con le respectivo sarcasmo y agresividad que tanto la identificaba,n así dejando petrificados a un par de hombres que discutían sobre el aspecto y edad de cierto chico barbón.
El hombre de cabellera canosa empezó a contar la historia de lo que paso la noche anterior.
Flash back
Estaba un hombre de cabeza rapada, sentado en la barra de un bar cuando dos hombres de una edad oscilante entre los 40 años entraron por la puerta del mismo, pero sin saberlo uno de ellos tropezó con una camarera la cual empujo a un hombre que derramo su tarro de cerveza sobre el hombre de deslumbrante cabeza,
Iniciando así una pelea campal entre todos los clientes del bar, uno estuvo a punto de golpear a responsable de todo el alboroto, le hubiera propinado un buen golpe, de no haber sido de que su acompañante un hombre de bigote Victorino que logro sostener el golpe a unos centímetros del rostro del rubio, pero la alegría duro poco ya que otro hombre lo golpeo con una silla en la espalda haciéndolos formar parte de dicha revolución, entre golpes botellazos y sillas voladoras estaba un chico de barba bastante larga tomando un trago ya bastante ebrio así que para evitar pagar la cuenta aprovecho el momento para salir huyendo del lugar ya afuera se preparaba para encender su motocicleta, pero dirigió su mirada en dirección de dos hombres siendo acorralados por mas de 12 hombres con navajas y cadenas. Se acercó a la escena donde los dos hombres ya estaban cansados de pelear y se encontraban acorralados.
Pensamiento de Harima – no me incumbe me debería ir antes de que me hagan daño- pero su acción vio frenada en el momento en el que vio el rostro del rubio que por un momento le recordó a una chica rubia la cual lo sacaba de quicio, pero que cuando peor se encontraba lo supo ayudar, pero no fue razón suficiente como para entrometerse en lo que no le incumbe.
Harima se encontraba ya listo en su motocicleta así que arranco pero no sin antes dedicar una última mirada a los dos hombres que para su edad parecían dar una ferviente batalla pero eso no fue lo que llamo su atención sino que uno de esos dos hombres era Nakamura el fiel mayordomo de la familia Sawachika así que dio la vuelta y fue a ayudarles ya que a ese hombre también le debía algunos favores así que entro con una patada a el hombre más grande así formando parte de la dispareja batalla el chico era bastante bueno en el combate y acompañado de los otros dos hombres que no se quedaban atrás ya que los dos anteriormente eran marines entrenados en las artes marciales así que al parecer la pelea estaba más pareja, al grado de darse el lujo de conversar durante el trascurso de la misma.
Harima- baya parche no peleas tan mal-dijo dando un golpe que mando al suelo a uno de sus ebrios enemigos.
Nakamura- usted no se queda atrás joven Harima- dijo mientras aplicaba una llave a un enorme hombre de tés color arcilla.
Alphonse- agáchate barbón- Dijo mientras Ponía un pie sobre la ancha y fuerte espalda de Harima usándolo como banquillo para poder alcanzar a el gigante que amenazaba con golpearlo con una llave de tuercas llevándolo al piso con una tijera la cual dejo inconsciente a el ultimo del grupo de delincuentes.
Harima.- y el rubio quien es parche. Dijo mientras de limpiaba la sangre de los puños con un pedazo de la playera de alguno de sus oponentes.
Nakamura- Él es El padre...- intento decir pero fue interrumpido por –Alphonse
Alphonse- soy un amigo de Nakamura nos conocimos en la marina británica- dijo pero su frase fue interrumpida por un hombre quien con una navaja intento apuñalarle, pero Harima lo golpeo antes de que lo lograda pero el hombre ya en el suelo dio un silbido al que más de treinta hombres atendieron.
Harima- esto se va a poner bueno- dijo tronándose los nudillos.
Alphonse- no joven usted tiene que conocer sus límites es mejor que huyamos- dijo con una cara de preocupación.
Nakamura- joven por favor corramos- dijo con una preocupación solo para darse cuenta de que a su grupo faltaba Harima.
Alphonse- El muy cobarde fue el primero en huir y eso que era el que másinteresado se veía en la batalla. Dijo corriendo entre los arbustos colindantes a al bar.
Pensamiento Nakamura- hay joven futuro amo Harima acaba de derrumbar todas las esperanzas que tenía sobre usted y yo que lo creía el indicado para mi ama. Pero Fue sacado de sus pensamientos al verse nuevamente acorralado junto a su amigo Alphonse.
Alphonse- bueno Nakamura fue un placer conocerte. Dijo chocando la espalda contra la pared que se encontraba a su detrás.
Todo pintaba mal para el par de hombres, pero se dieron cuenta de una luz que estaba por detrás de sus agresores. Por un momento pensaron que eran las puertas del paraíso, pero nó era Harima que montado en su motocicleta paso a arrollar a los agresores de el par de ex marines.
Harima ¿- que esperan Suban antes de que lleguen más- dijo extendiendo la mano.
Nakamura- yo pensé que había huido joven Harima- dijo subiendo a la motocicleta.
Harima- No solo fui por mi moto Solo a un idiota se le ocurriría que huir a pie sería buena idea- dijo acelerando su vehículo pero el peso de tres hombres de la complexión de el trio era demasiado como para poder lograr una velocidad decente para una huida triunfal.
Una vez en la carretera se dieron cuenta de que tres motocicletas los perseguían así que en ese momento incluso Harima pensó que sería buena idea haber huido solo pero lo hecho esta así que solo les quedaba huir pero en un momento de lucidez se dieron cuenta que ahora eran solo tres hombres así a los tres les paso la misma idea por la cabeza.
Alphonse, Nakamura, Harima- ¡que carajos hacemos huyendo!- gritaron al unísono y con los ojos llenos de coraje.
Así Harima prosiguió a frenar dando la media vuelta con su moto y los dos hombres saltaron del vehículo corriendo cada quien en dirección de un motociclista quienes bajaron de sus respectivos caballos de acero de un puñetazo en el rostro. Pero en seguida los dos motociclistas se pusieron de pie lo que los sorprendió.
Harima por su parte bajo de su moto al tercer agresor pero el si dejándolo inconsciente, Nakamura por su parte tomo por el cuello a su respectivo agresor aplicando una presión sobre humana sobre la garganta del pobre hombre. Pero el rubio con la misma suerte ya que su respetivo oponente lo golpeo en la rodilla llevándolo al suelo así que Harima paso a darle una patada en el rostro del delincuente quien paso al concreto al parecer inconsciente un lastimado Alphonse era ayudado a levantarse por Nakamura también aparentando un cansancio evidente.
El momento de calma fue eclipsado por las luces de más motociclistas.
Harima- ¡Huyan! Tomen mi moto y aléjense- Dijo lanzando Las llaves a un agotado Nakamura.
Nakamura - Pero usted Harima- dijo alarmado viendo al joven barbudo.
Harima - Yo estaré bien además tú estás cansado y el anciano está mal herido, además sería una pena que nos atraparan a los tres por cierto parche te encargo mi moto-
Nakamura subió a la moto junto a Alphonse una vez arrancada la moto salieron a toda prisa, Harima se dedicó a verlos alejar cuando a su espalda se levantaba alguien quien lo apuñalo con una navaja e costado y parte de él abdomen.
Harima atino a dar un puñetazo en el rostro de su agresor quien quedó inconsciente, pero Harima estaba bastante mal por el ataque a traición, corrió en dirección de unos arbustos para ocultarse de aquellos que se acercaban al lugar. Pero no contaba con que detrás de esos arbustos estaba una colina por la cual rodo hasta un jardín donde lo pudo ver un ameno amanecer justo antes de perder el conocimiento.
Fin del flash back
Eri- ya con esta historia me queda claro donde se conocieron, pero ahora mi pregunta es que diablos asías en ese bar a esas horas de la noche papa.- dijo pero fue interrumpida por su padre
Alphonse- Pero Barbudo yo no recuerdo que haya sido golpeado tantas veces en la cara, es mas no recuerdo que le hayan golpeado al menos una vez en el rostro- dijo con una intriga sofocante-
Eri se sonrojo y bajo la cabeza para ocultarlo pero no sin dejar salir una frase apenas audible
Eri- por idiota No debería hablar de otra chica mientras es salvado por una chica- dijo apenas audible pero solo para los oídos de Harima.
Harima se quedó perplejo ante las palabras de la chica
Alphonse- Bueno creo que lo nuestro quedo claro pero algo no cuadra, y eso es el por qué este caballero en nuestra casa. Dijo con tono interrogativo
Eri se entristeció un poco al recordar lo sucedido esa mañana.
FLAS BACK
Eri se encontraba corriendo como todas las mañanas acompañada de su hermoso gigante de los pirineos cuando el detuvo su carrera viendo fijamente un arbusto lo que llamo la atención de la pelirrubia, quien se acercó al mismo guiada por su fiel can, cuando pudo divisar a un chico barbón de piel morena bastante mal trecho.
Eri- Hige me pregunto cuántas veces te veré en esta deplorable situación en verdad das lastima- dijo con un tono de superioridad, intentando acular una cara de tristeza ya que ella sabía que él estaba en ese estado por la partida de su amor platónico.
Harima- Si te doy lástima porque me estás viendo lárgate y déjame en paz aquí estoy bien- dijo enojado y prácticamente inconsciente por lo que no media ni consideraba alguna de sus palabras, mucho menos las recordaría.
Eri- Porque me preocupas, créeme que si no lo hicieras ni tan siquiera te hubiera mirado. Pero porque malgastas así tu vida- dijo conteniendo las lágrimas ya que ella ya conocía la respuesta de su amor platónico, pero preguntaba no por auto flagelarse sino, buscando una respuesta diferente a la que ya conocía.
Harima-Como que porque? Eres idiota o qué? Porque el amor de mi vida se fue persiguiendo a otro a un país diferente pero eso jamás lo comprenderás ya que nunca te has enamorado- dijo sin pensar y llorando.
Eri- ¡!que nunca te comprenderé! Idiota te voy a decir algo, si me he eeeenaaaaaamooooraaaadooooo- grito con todas sus fuerzas.
Eri - Y si he visto como el idiota que amo persigue a otra mientras yo le pongo mi vida entera en charola de plata. Pero que hace el muy imbécil persigue a alguien más. Dijo a la vez que salían sus lágrimas.
Harima- pero no es lo mismo al menos tu puedes ver a ese chico a quien amas, además tu eres hermosa, lista, simpática yo solo soy yo- dijo dejando salir sollozos desesperados
Eri se sonrojo por un momento ya que el había dicho que era hermosa, pero un sentimiento inundo su corazón y no era precisamente alegría, era una profunda tristeza ya que él lo había dicho pero pensando y añorando aun a Tenma así que sus sollozo fueron aún más fuertes y comenzó a golpear el rostro de Harima una y otra vez al mismo tiempo que sinceraba su corazón.
Eri- si lo veo casi diario pero solo para ver como malgasta su vida siendo nuevamente un delincuente, viendo como los últimos tres meses se ha dedicado a mandar al carajo toda su vida dejando llevar por peleas, embriagándose y llorando por alguien que jamás lo va amar como yo lo amo y que ni tan siquiera le ha hablado por tres meses después de que el hizo tanto por ella Heeee tú crees que no verla es una tortura imagínate pasar por lo que yo he idiota – dijo sin dejar de golpear al chico quien se había quedado inconsciente en algún punto del argumento de la chica.
Eri - Dime Harima Kenji como puedes ser tan cruel con migo yo que te amo tanto –dijo dejando de golpearlo y recargándose en su pecho pero con una vos inaudible.
A lo que el chico puso su mano en la cabeza de la chica, creando un sonrojo en las mejillas de la chica, después de escuchar las siguientes palabras del chico.
Harima – Recuérdame de golpear ese idiota por no darse cuenta de lo maravillosa que eres princesa - dijo con las ultimas fuerzas que le quedaban antes de caer inconsciente.
Eri vio un pequeño rayo de esperanza que le causó una grata sonrisa, la cual paso a vergüenza al ver cómo había dejado el rostro del pobre chico. Así que decidió llamar a algún sirviente de su mansión para que llevaran al chico a su casa. Así una vez siendo horas más decentes lo revisara un médico.
FIN DEL FLASH BACK
