Antes que nada, se sabe perfectamente, todos los personajes le pertenecen a la gran Rumiko… que tristeza, pero deberíamos alabarla jajajaja!... En fin, he aquí una nueva historia, espero les guste y les llene el ojo, espero sus reviews si?... muchas gracias!...
"Cuando el Amor no es Correspondido."
1.- Sengoku; El lugar donde nos conocimos…
Aome Higurashi era una chica común y corriente que vivía en Tokio, tenía 23 años, hacía ya un año se había graduado en la Universidad de Tokio en la carrera de Contaduría. Tenía 6 meses trabajando en Sengoku, una empresa que pertenecía a Kikyo Miko (N/A ok, primero el nombre de la empresa es de Kikyo88 y el apellido de Kikyo está muy raro pero en algo debía utilizar el termino miko no?). Kikyo era huérfana y había heredado la empresa de sus padres como un legado, además debía mantener a su hermana Kaede.
Era otro día más de trabajo, llegó temprano como siempre junto a su amiga Sango…
-Supiste que Kikyo publicó que necesita un asistente personal?...
-Kikyo?... Asistente?...
-Sí… yo tampoco lo podía creer, Siempre se las gasta diciendo que somos una bola de inútiles y que si por ella fuera, se bastaría para manejar la empresa… ahora en busca de un asistente…
-Bueno pero, tal ves sea más como apoyo moral que laboral no?...
-Cómo sea…ojalá los pobres le tengan paciencia, ya viste como les fue a los últimos que pedían un puesto en la empresa… el caso es que nosotros tenemos que darle el primer vistazo a sus prospectos…
-Nosotros?...
-Sí, como recepcionistas nosotras decidimos a quien dejamos o no pasar…
-Ah… sigo en espera de que algún día Kikyo se dé cuenta de que no soy una recepcionista sino una contadora…
-Ejem, ejem…
-Jaja… sin ofender a la presente claro…
-Sí, sí… mejor ponte a trabajar señorita matemática que no debe tardar en llegar Kikyo…- Ambas se sentaron tras el mostrador y comenzaron a contestar las primeras llamadas que recibía la empresa… De pronto las puertas se abrieron dejando entrar a un joven de cabellos largos y negros sujetos con una coleta atrás, sin embargo, algunos cabellos rebeldes se asomaban a su rostro. Vestía un traje color gris claro con una playera blanca y una corbata azul cielo…
-Buenos días…- al parecer no había sido escuchado por Aome, pero Sango le hizo una seña para hacerlo esperar un momento, mientras ella seguía la conversación por la diadema con un licenciado. Aome atendía una llamada personal de Kikyo, así que se desocupó más rápido. Sango le hizo una seña para que lo atendiera, al parecer Aome no se había percatado de su presencia, pero cuando lo tuvo frente ella sintió como por un momento se le detenía la respiración. De inmediato se sintió atraída por él, se veía tan apuesto… y esos ojos color miel eran, inoptizantes…Inuyasha se sintió algo incómodo al darse cuenta como lo miraba y no decía ni una palabra, aunque ya estaba acostumbrado en causar ese efecto en algunas mujeres, sin embargo no presumía de ello, al contrario, muchas veces se mostraba tímido. Carraspeó un poco y volvió a saludar…
-Buenos días… vengo con la señorita Kikyo…
-Ah sí… claro…- dijo tratando de recuperar la compostura y mostrarse tranquila. Inuyasha notó como la recepcionista estaba algo nerviosa y sonrió divertido, se dio cuenta que la chica no era desagradable, era muy bonita…- La señorita Kikyo no ha llegado aun… quiere dejarle un recado?...
-Háblame de tú…
-Perdón?...
-Que me hables de tú, me haces sentir un anciano…
Aome se sonrojó y sonrió ligeramente…-Lo siento...
-Está bien… soy Inuyasha Taisho, venía por el anuncio en el periódico…- le tendió una mano en forma de saludo…
-Ah, ya veo…- le correspondió al saludo y sintió como tomaba su mano para besarla suavemente sonrojándose considerablemente…- Yo soy Aome Higurashi… la señorita aun no llega pero, no debe tardar…quieres esperarla?...
-Sí, claro… si no es molestia…
-No, claro que no… te ofrezco un café?...
-Por favor…
-Enseguida…- Salió del mostrador para preparar el café dejándose ver de cuerpo entero por el joven, quien la seguía con la mirada. Aome era muy atractiva y vestida así parecía más… Llevaba un conjunto de saco y minifalda pero era algo ceñida, era de color hueso, debajo llevaba una blusa color blanca y unos tacones del mismo color. La falda le llegaba por arriba de las rodillas y le hacían lucir la perfecta figura que tenía. Cintura pequeña pero caderas anchas y muslos anchos que llevaban a las pantorrillas congruentes… Aome se percató de cómo era admirada y esto le causó gran emoción, ya que ese hombre le causaba grandes sensaciones…
-Aquí tiene…- le tendió una taza humeante…
-Gracias…- Se miraron un momento a los ojos antes de ser interrumpidos por las puertas de la empresa que se abrían para dejar ver a Kikyo llegando trayendo tras de sí un joven de ojos azules, vestía traje y lucía una pequeña coleta al igual que dos argollas colgando de su oído izquierdo.
-Sango, Aome, algún recado?...
-Llamó su hermana Kaede, dijo que ya había llegado de su viaje…
-Esa niña… solo eso?...
-Sí señorita… bien…- Iba dispuesta a entrar a su oficina cuando su chofer la sacó de la rutina al escucharlo charlar…
-Inuyasha?...
-Miroku?...
-Hombre!... qué coincidencia!... qué haces aquí?...- Se acercó a su viejo amigo y le propinó un abrazo
-Pues ya ves… vengo a buscar trabajo…
-Aquí?... no me digas?... y de qué?...
-Asistente…- Kikyo lo notó al fin. Lo examinó de arriba abajo e interrumpió la conversación…
-Perdón pero, dijo asistente?... No me diga que viene por el anuncio del periódico?..
-Ah…sí así es… Mi nombre es Inuyasha Taisho…- le tendió la mano la cual Kikyo ignoró. Se giró hacía su chofer y le preguntó…
-Miroku, conoces a este hombre?...
-Ehm… sí señorita… fuimos juntos a la preparatoria, somos grandes amigos…
-Ya veo… Y usted, trae su currículum?...
-Sí…- recogió su mano para tomar la carpeta que llevaba con él y tendérsela a Kikyo. Esta le dio un rápido vistazo. Lo leyó asombrada por la inmensa experiencia de éste y de las grandes recomendaciones que traía consigo. No era de ella demostrar asombro por alguien más así que solo levantó la mirada…- bien, pase… lo atenderé solo porque Miroku lo recomienda…
-Gracias…- Kikyo se dio media vuelta y entró a su oficina seguida por Inuyasha quien le agradecía a Miroku.
-Suerte!...- le susurró Aome. Inuyasha la escuchó y le sonrió en agradecimiento. Después entró a la oficina.
-Miroku!... entonces lo conoces?...
-Sí… por qué?...
-No, por nada…
-Por que Aome quedó fascinada…-interrumpió Sango
-Sango!...-le reprochó Aome quien la miraba apenada con Miroku…
-Ah, ya veo…- el chico se acercó al mostrador donde se encontraba Sango…- y tú Sanguito, estás fascinada conmigo?...
-Eso quisieras…- Esos dos se traían algo aunque ninguno lo formalizara, de cualquier forma Aome se divertía al verlos discutir… Pasó más de media hora cuando la puerta de la oficina de Kikyo se abrió dejando salir a Inuyasha con expresión vencedora… En el altavoz se escuchó la voz de Kikyo pidiéndole a Sango un café. La chica se paró dispuesta a preparárselo dejando a Aome sola en el mostrador y a Inuyasha acercándose a ella.
-Y bien?... cómo te fue?...
-Pues, es algo terca verdad?...
-Dímelo a mí… llevo 6 meses tratando de hacerle entender que soy contadora y no recepcionista… pero en fin… te contrató?...- No recibió respuesta, pero Inuyasha bajó la mirada tratando de engañar a la chica…-ya veo… no te preocupes, seguro no supo apreciarte…
-Bromeas?...ME CONTRATÓ!...
-NO!.. en serio?... qué bien!...- Sin saber perfectamente porqué se levantó de su asiento dando un pequeño brinco abalanzándose sobre él tomándolo por el cuello, solo con el mostrador en medio. Inuyasha abrió los ojos en señal de sorpresa y por lo mismo no le correspondió al principio, lo que Aome notó y trató de recuperar la compostura…- Ehm… perdón… soy muy impulsiva…- Sintió como una mano de Inuyasha la tomaba por la espalda y le impedía alejarse más…
-Te agradezco el apoyo…-Estaban frente a frente a solo unos centímetros de distancia, ambos enrojecieron y podían sentir la respiración del otro. Obviamente existía química entre ellos. Aome recuperó la compostura por completo y se sentó de nuevo tras el mostrador…-No tienes que agradecerme… Bienvenido a Sengoku…
-Gracias…
-Y, cuándo empiezas a trabajar?...
-Mañana…
-Ya veo…
-Aome… quisieras ir a comer?...- Notó como la chica abría los ojos sorprendida y pensó que no sería buena idea, después de todo la acababa de conocer…-Si no quieres no… yo solo quería celebrar…
-Sí…
-Cómo?...
-Que me encantaría celebrar contigo…- La chica vio como le sonreía Inuyasha en forma de agradecimiento…
-Celebrar?... celebrar que?..-Miroku regresaba del baño…
-Contrataron a Inuyasha!...
-En verdad?... que bien Inuyasha me alegro…
-Gracias a ti…
-A mi?... no! Para nada… seguro que la señorita Kikyo dijo eso para guardar las apariencias…
-Las apariencias?...
-Sí… desde que quedó huérfana puso una barrera hacia todos los que tratan de acercarse a ella… se volvió más… especial…
-Huérfana?...- Inuyasha no pudo evitar sentirse mal, era tristeza o lástima?...y a todo esto, ¿Porqué se sentía así?...Es cierto que cuando la vio sintió algo raro, algo especial pero, ¿Qué era?...De algo estaba seguro, era algo que no había sentido nunca por otra mujer…
CONTINUARA….
Hola! Jeje les dije q escribiría algo así… Para las chicas que leían En la Eternidad, espero no me quieran matar por poner aquí a Inu con Kikyo, pero como les dije, también Inu y Aome van a tener sus cosas… jajaja…. Y para quienes lo lean, espero les haya gustado. Déjenme decirles que es algo raro que yo escriba algo entre Inu y Kikyo, más por la forma en que me identifico con Aome, pero se me metió esta idea en la cabeza y no pude sacármela, pero igual espero les guste… porque según vea respuesta lo continúo…jeje así que se aceptan todo tipo de comentarios!... muchas gracias por todo… sayonara…
KIKYO88: A ver si te gusta dopada, creo tener clara la idea… byes! Ah! Orita t hablo… byes..
