Lalihoooo~~ Kikuppy aqui de nuevo molestando hahah. Bueno, esta historia ya llevo escribiendola unas semanas pero no habia subido ni un capitulo porque queria terminar primero otros proyectos, aunque al final no pude resistirme porque me gusto como esta quedando esta kesesese. La historia esta inspirada en la saga of Evil de Vocaloid, cada capitulo tendra el titulo de uno de los 6 videos, incluyendo "Mensaje de arrepentimiento" la pareja principal, o algo asi es YaoxKiku, pero tendra mucho Asakiku y un poco de IvanxYao. Si han visto los videos ya tienen una idea de donde terminara la historia, pero denle una oportunidad de igual manera.

Disclaimer: Hetalia NO me pertenece, es de Hidekaz-sama, si fuera mio seria 100% yaoi y habria mucho asakiku hahaha.

Advertencias: Muerte de un personaje, o dos,o mas xD les juro que me dolio mucho matarlos pero asi va la historia uwu tambien incesto o.O

Capitulo 1. Hijo de la Maldad

Un castaño de ojos color miel caminaba temeroso por los pasillos de aquel imponente castillo oriental. Iba acompañado de dos hombres de gran tamaño, los cuales vestian una armadura entera de samurai, incluyendo dos katanas amarradas a su cintura. Su aspecto solo hacia que el chico sintiera cada vez mas miedo, pues se veian con cara de pocos amigos y deseos de undir el acero de sus espadas en el pequeño cuerpo del chico. Se dirigia a una audiencia con el principe heredero, Wang Yao, el cual habia subido al trono con tan solo 17 años de edad, despues de la misteriosa muerte de su padre la cual sospechaban habia sido un asesinato. Muchos rumores se extendian en el reino sobre el inexperto principe. Se decia que era una persona despiadada y cruel, y que su diversion era ver el rostro desesperado de sus subditos. Pero Feliciano sabia que no habia persona en el mundo que pudiera ser tan inhumano y tenia la esperanza de que cuando el principe le escuchara ayudaria a su pueblo. Los guardias se detuvieron frente a una puerta dorada, que segun Feliciano creia se trataba de oro puro, no entendia como ese palacio podia albergar tantas riquezas mientras que el pueblo estaba practicamente en ruinas. Abrieron las puertas y entraron a una gran habitacion con adornos orientales de distintas tonalidades, pero los colores que predominaban eran el dorado y el rojo intenso. Frente a el, en un pequeño trono, un chico de cabello castaño oscuro y largo estaba recostado, contemplando fijamente el techo con la mirada perdida, sin interes alguno a lo que estaba a su alrededor.

-Su Alteza- dijeron los guardias mientras hacian una reverencia juntando su frente al piso. Feliciano los miro absorto y lo unico que atino a hacer fue arrodillarse junto con ellos y hacer una reverencia al principe.

-¿que es lo que quieres?- pregunto desganado el principe sin siquiera mirarlos.

-Feliciano Vargas, un campesino de un pueblo vecino bajo el mandato de nuestro reino, ha solicitado una audiencia con usted, mi señor- respondio un hombre viejo, el cual el ojimiel no habia notado desde su llegada.

-¿Y? ¿Esa es la razon por la que me levantaran tan temprano?- el caprichoso principe comenzaba a mostrarse molesto.

-Asi es su señoria- respondio el hombre, el cual no se veia muy contento con la actitud del chico.

-Entonces que hable, no tengo todo su tiempo- uno de los guardias empujo a Feliciano, haciendo que tropezara y cayera de rodillas al piso, pero decidio quedarse de esa manera para hacer su peticion.

-Su real majestad, he venido a rogarle que salve a mi pueblo, una epidemia ha hecho que nuestras cosechas queden practicamente en la nada, las enfermedades abundan, necesitamos doctores que atiendan a nuestros niños y ancianos, si no es pronto, todos moriremos- el rostro del chico era de completa desesperacion, pero intentaba que su voz sonara coherente. Wang Yao dirigio por primera vez una mirada al plebeyo, pero esta era gelida, carente de vida.

-¿Crees que eso me importa a mi?- los ojos de Feliciano se abrieron de par en par, como era posible que un hombre se comportara con tal frialdad, el principe volvio a dirigir su mirada al techo y con una sonrisa diabolica sentencio -Matenlo-

Los guardias tomaron al joven de los hombros, este comenzo a forcejear desesperado. Asi no era como debian de salir las cosas. Ludwig le habia advertido que no debia visitar al principe, pero no habia hecho caso. Era demasiado ingenuo, sabia que las cosas terminarian asi.

-Espere! No puede hacer eso! Debe salvar a mi pueblo! por favor!- gritaba con lagrimas en los ojos, mientras era arrastrado por los guardias -Se lo ruego! Tiene que salvarlos- en esos momentos nisiquiera le importaba su vida que estaba apunto de ser terminada, lo unico que deseaba era que sus hermanos estuvieran a salvo -Por favor! No deje que mueran!-

Mientras era arrastrado fuera de la habitacion, un joven de cabellos negros y mirada perdida lo contemplo con tristeza. Feliciano seguia forcejeando con todas sus fuerzas, esforzandose por escuchar el apoyo del principe, pero era imposible. El pelinegro lo siguio mirando hasta que los guardias y el chico se perdieron al girar en un pasillo. Su mirada siempre sin vida mostraba una tristeza y pesadez inigualables, pero al momento de entrar en la habitacion intento disolver toda esa angustia y cambiarla por una gentil y tierna sonrisa. El principe al verlo se levanto de su asiento y corrio a sus brazos.

-Kiiikuuuuuu- grito saltando sobre el chico y abrazandolo posesivamente. El pelinegro logro escuchar un chasquido de reproche proveniente del viejo consejero del rey.

-Su alteza, no deberia abrazar a un criado como yo en publico- dijo con respeto pero ternura en su voz.

-A mi que me importa eso, yo soy quien manda y abrazo a quien yo quiero- espeto el principe. Para despues separarse del pelinegro y mirar curioso la caja que traia en las manos -¿que es eso?- pregunto algo receloso.

-Es el traje que utilizara en el baile de esta noche, su majestad-

-Deja de llamarme su majestad o su alteza, yo soy Yao y punto, debes de llamarme Yao entendido- lo reprendio.

-¿Es una orden?- el tono del pelinegro era burlon, provocando que Yao golpeara ligeramente su cabeza.

-Tu sabes que yo nunca podria ordenarte algo Kiku, eres como mi alma gemela y no lo digo porque seamos identicos- Yao sonrio, una sonrisa la cual reservaba solo para ese chico.

-Me alaga con sus comentarios, majestad- hablo el pelinegro con modestia haciendo una ligera reverencia.

-Calla, o si no me obligaras a darte una verdadera orden- el principe se cruzo de brazos, mirando molesto al menor que contuvo una risa.

-En vez de hacer berrinches por eso porque no se prueba mejor el traje hecho especialmente para usted, el cual debera llevar en el baile de esta noche- dijo Kiku.

-Humm... esta bien, vamos a mi habitacion-

El principe sonrio tomando de la mano a Kiku y comenzando a correr fuera de la sala. Escucho la agitacion de sus consejeros y sirvientas, pero el castaño no dejo de correr. Sabia que eso molestaria lo suficiente al viejo idiota como para no dejarlo ir al baile, pero por si acaso tenia un plan de respaldo. Entro a su habitacion e introdujo al pelinegro tambien, para despues cerrar todas las puertas con llave por dentro. Asi los estupidos criados del palacio no le molestarian como siempre lo hacen. Kiku lo miraba sorprendido en silencio, pero no sin poder ocultar una ligera sonrisa ante la rebeldia del castaño. Cuando se aseguro de que cada una de las puertas estuvieran cerradas fijo su mirada al pelinegro y en sus labios se dibujo una sonrisa que alerto a Kiku.

-Ma-majestad?- el nerviosismo en su voz era evidente pero antes de que pudiera hacer algo, Yao se le lanzo encima, cayendo sobre el en la cama y comenzando a morder juguetonamente su oido. Las palidas mejillas de Kiku se tornaron de un rojo carmesi muy parecido al resto de la decoracion de la habitacion. -Detengase porfavor, Yao-sama- el principe se detuvo con aire triunfal al escuchar al pelinegro decir su nombre.

-Tengo un trabajo para ti- dijo con una media sonrisa aun acorralando el cuerpo de Kiku contra la cama.

-¿De que habla alteza?-

-Iras al baile en mi lugar- los ojos de Kiku se abrieron sorprendidos.

-Eso es imposible para mi su señoria-

-Claro que no, somos identicos, solo te pones ese estupido traje el cual me obligaran a usar y finges ser yo-

-Pero su alteza, yo soy solo un simple criado del castillo, nisiquiera merezco estar en sus aposentos, seria un delito grave hacerme pasar por usted-

-Ya te dije que nadie se dara cuenta- Yao se dio la vuelta y se acosto junto a Kiku, para fijar su mirada en el techo.

-¿Por que no desea ir, su majestad?- pregunto curioso el pelinegro.

-Habra puros viejos aburridos y apestosos, sera una tortura- el principe suspiro -Ire con solo una condicion- su sonrisa maliciosa volvio a aparecer -Tienes que acompañarme-

-Pero soy solo un criado, no tengo derecho a ir al baile-

-Si asi lo deseas iras de MI mayordomo personal, pero tienes que estar a mi lado todo el tiempo, entendido- el pelinegro suspiro, sabia que no tenia escapatoria ante los caprichos del joven rey.

-Esta bien, su alteza, hare lo que desee- el principe sonrio y se puso de pie.

-Bien, busquemos un traje lindo para ti- corrio hacia su guardaropa y comenzo a urgar entre las prendas, lanzando todos los vestuarios tras si, regandolos en la habitacion. -Usaras...- decia mientras sacaba un extraño traje de entre las ropas, era un pantalon al estilo occidental color negro, una camisa de manga larga blanca y un chaleco cafe claro. -Es un uniforme de mayordomo occidental, pontelo se vera muy elegante, aun mas que el kimono que siempre sueles utilizar- el comentario ofendio un poco al pelinegro pero no dijo nada. -Asi que sera mejor cambiarnos, una aburrida fiesta esta por comenzar pero estare junto a Kiku asi que no hay nada de que preocuparme- Kiku no pudo evitar sonreir con ternura, mientras tomaba las prendas que se veria obligado a utilizar.

Chan chan chan chaaaaan~~

Yao es un maldito, no puedo entender como hize que mataran a Feli, wuaaa me dolio tanto siendo que es de mis personajes preferidos. Y lo que le espera a mi Kiku TwT bueno bueno, me encanta el lado posesivo de Yao, siempre lo veo asi hahaha es tan "Kiku es mio, me pertenece ¬w¬ alejense de el" hahaha pero bueno. Espero no haya mucha gente que quiera matarme despues de matar al lindo veneciano. Quejas, sugerencias, amenazas de muerte son bien recibidas nwn ok, las ultimas no ewe hahaha xD