Disclaimer: Pokemon y su imaginario no me pertenecen, estos son netamente autoría de Game Freak inc.

ADVERTENCIA: El siguiente contenido presenta conductas homosexuales, no se recomienda la lectura a aquellos a los que dicho tema les hiere su sensibilidad, por favor leer con prudencia. Gracias


Loren siempre quiso tener un Gardevoir y nunca le importaron detalles como la naturaleza o sus estatus, para el ese tipo de cosas eran mínimas, después de todo el era un entrenador que amaba tal como fuesen sus pokemons, creyendo en ellos.
Que sucede cuando logra hacerse de un Gardevoir? Qué pasa cuando su Gallade cae bajo en elegante encanto del pokemon Hada/Psíquico?

Personajes:

Loren: Entrenador pokemon

September: Gardevoir macho

June: Gallade


A/N: Todos los pokemon de Loren están nombrados como cada mes del año, también cabe mencionar que sin darse cuenta termino atrapando puros pokemon machos, formando así su equipo de 6 y recorriendo diferentes regiones, aunque la actual historia se localiza en Teselia.

De antemano me disculpo si a alguien le molesta esto, pero nada mas lo escribí por mera diversión, ademas de que me volví a jugar pokemon Diamante y Black 3 y termine mas motivada que nunca.


Se suponía que el seria el único del tipo psíquico en el equipo que había formado su entrenador pokemon, en cambio los otros parecían estar entusiasmados con el nuevo integrante, actitud que no lograba asimilar del todo, para él era una especie de amenaza a su posición y cariño que le daba Loren, su entrenador.

Pasaron unos cuantos días antes de realizar el intercambio (ya que de esa manera obtuvo al otro pokemon su entrenador). Y fue el mismo día en que recibió al nuevo integrante en el que el entrenador se fue hacia un área verde despejada, justo a un lado de una de las rutas que salían de la población por la que pasaban, los pokemon se vieron sueltos, afuera de sus pokebolas, girándose para prestar atención a su entrenador que les estaba hablando.

-Chicos.. Les presento a September- comento emocionado el entrenador abriendo una ultraball, como con cualquiera de las pokeballs un resplandor se hizo presente y puff ante ellos estaba el tan mencionado nuevo integrante del equipo.

Para June fue toda una sorpresa, el pokemon intercambiado era Gardevoir, y se miraba hermosa, además de un tanto tímida, entonces olvido el enfado y todo lo que había estado sintiendo hasta este preciso momento. Era la más grata adición al equipo que había tenido hasta ahora (no era que despreciara a sus otros compañeros de equipo, pero una figura femenina no estaba mal del todo), aun si era un pokemon del tipo psíquico.

Las preocupaciones de Loren sobre la aceptación de Gardevoir por los otros se disiparon, en especial tras ver como June asimilaba al nuevo pokemon de buena manera. Y mientras pasaban los días September poco a poco iba interactuando con el resto, que parecían amables, independientemente de la naturaleza de cada uno, entonces fue cuando el Gallade decidió acercarse aun más a la Gardevoir...

"No deberías ir tan profundo fuera del camino buscando bayas September" - comunico el Gallade al otro pokemon. -"Para algunos pokemons es época de apareamiento" - intento hacer comprender su preocupación, y es que para June Gardevoir era su prometida o pareja con la cual, tarde o temprano tendría que procrear (no es como si el asunto realmente le disgustase )

"..." - September miro escépticamente al otro pokemon, o al menos por unos segundos antes de que su mirada se suavizara y ablandara - "Lo tendré en mente, gracias June" - respondió aun buscando alguna baya, hoy tocaba trabajo de campo, así que todos incluido su entrenador se dedicaban a buscar objetos o bayas para cosechar.

June aun siguió mirando con algo de inseguridad a Gardevoir, parecía totalmente despreocupada y aunque sabía que no era del todo frágil, estaba consciente de que un encuentro fortuito con un pokemon tipo siniestro terminaría en desastre.- "Te ayudare a buscar por aquí" - declaro el Gallade poniéndose a su lado.

September simplemente suspiro mientras asentía con la cabeza a tiempo que caminaba por entre los arbustos y se preguntaba porque June se comportaba de manera tan protectora cuando estaba cerca suyo, no es que no agradeciera la gentileza del Gallade, pero le hacía sentirse débil y mas frágil de lo que su apariencia parecía demostrar.

Y así siguieron pasando los días, uno tras otro, una batalla aquí, una captura allá, acampada al aire libre por quedarse en medio de la ruta al anochecer, en fin, el pan de cada día de los entrenadores. Loren el entrenador de June y September noto como el Gallade parecía totalmente cautivado y deslumbrado por Gardevoir, la verdad es que el mismo había sido encantado por la elegancia y belleza natural que dicho pokemon tenia, sin embargo comenzaba a preocuparse, el celo de ambos pokemons se acercaba y necesitaba buscar a alguien que pudiera ayudarle con ello. Hacia no mucho tiempo conoció a una criadora, si no mal recordaba su nombre era Ricco, ella tenía un Gardevoir y podía contactar con otro criador para encontrar otro más de la misma especie.

Desde el punto de vista de June (cuando se entero de los planes de su entrenador respecto al inminente celo de ambos), todo aquello se le hacia innecesario, para que buscar otro par de pokemons como ellos, el no necesitaba a nadie más que a September, hacia un tiempo termino por escogerle como pareja (aun si no dejo en claro aquello con Gardevoir) y estaba casi totalmente seguro que ella también preferiría quedarse con el que con cualquier otro Gallade desconocido.

Ese par de días mientras viajaban hacia la locación de Ricco, June estaba totalmente irritable, con los nervios de punta dispuesto a batallar con cuanto entrenador se les topaba (y eso que Loren intentaba evitarlos), el resto del equipo se había dado cuenta de que la idea del apareamiento impostergable tenia de tan mal humor al Gallade, mientras que Gardevoir parecía no darle mucha importancia al tema.

"Deberías intentar relajarte un poco, no le haces bien a nadie estando así" - comunico September al otro pokemon cuando se pusieron a acampar, mientras que su entrenador iba por agua y a recolectar ramitas con los 4 pokemons restantes. Aprovechando la oportunidad Gardevoir decidió que sería bueno saber exactamente lo que le pasaba al otro y los verdaderos motivos por los cuales su amigo se hallaba en ese estado de estrés.

"No puedo evitarlo, acaso no te importa que van a emparejarte con cualquier Gallade y no conmigo?" - Esta vez June estaba dejando en claro sus más sinceros sentimientos, la importancia de September para él en su vida. -"No necesito cualquier Gardevoir, solo te necesito a ti September, ahora y siempre" - declaro totalmente férreo a la otra pokemon, quien se había ruborizado mientras abría los ojos de par en par, para luego simplemente desviar la mirada y cubrirse el rostro.

Entonces la realización le golpeo al Gallade, esta era la primera vez que explicaba concretamente su sentir a Gardevoir y nunca se detuvo a contemplar la posibilidad de que September no tuviera interés en él como para ser su pareja, su compañero de por vida. Gracias a Arceus September reacciono (algo lento pero lo hizo), sacando de sus pensamientos al Gallade, Gardevoir intentaba tranquilizarse, aunque el rubor no se le iba.

"June, sería bueno que considerases la opción que Loren ha conseguido para nosotros" - Gardevoir no tenia certeza de como reaccionaria el otro pokemon, así que de manera suave y buscando sonar lo más amable que podía prosiguió justo cuando el Gallade estaba por interrumpirle- "Tu... no te has percatado aun?... Y a pesar de ello quieres que YO sea tu pareja de por vida?!"- cuestiono exclamando y posando sus rojizos ojos en los contrarios, intentando mostrarse firme, y aun así el cuerpo le temblaba de manera ligera.

"..."- Entonces era lo que había pensado, September no compartía sus sentimientos - "Lo lamento, solo pensaba en cómo me sentía yo y no me puse en tu lugar... Yo pensé que Loren te había traído con nosotros para darme una comp-.." -Y Gardevoir le interrumpió tomándole repentinamente de las manos de manera firme.

"Soy un Gardevoir macho June, no es como si pudiera dar a luz a un huevo tuyo o de cualquier otro Gallade" - Necesitaba decirlo, dejarle en claro lo que era, aun si sentía cosas bastante fuertes por el otro pokemon psíquico, que también era macho (Loren sin darse cuenta habita terminado con un equipo de puros pokemon macho).

La confesión azoto a June como una coletuda sorpresa de un Gyarados en su cara, Gardevoir a quien había escogido como compañera de por vida, su pareja verdadera era un pokemon MACHO, la sangre se le fue a los pies poniéndose algo pálido (aunque ni se notaba). Inmediatamente se puso totalmente rojo, había estado ansiando pasar su primer celo junto a September, y es que claro Loren nunca menciono que el Gardevoir que había conseguido mediante intercambio era uno masculino, y el simplemente se había contentado pensando de cajo que seguramente September tenía sexo femenino.

"June..."- llamo algo desanimado y dolido el Gardevoir al ver la reacción del otro pokemon, aunque de antemano se imagino que así reaccionaria el otro al saber su género verdadero. September suspiro largamente mirando al suelo, debido a las atenciones que el Gallade se tomaba con el había comenzado a gustarle, pero no a tal punto de que no había retorno. Y repentinamente se asusto al sentir las manos del otro pokemon en sus hombros, para luego ser simplemente estrechado contra June.

"No es normal pero aun así mi interior dice que no te deje September"- era un tanto humillante el haber sido engañado por la curvilínea apariencia del Gardevoir, pero los sentimientos que había desarrollado por September aun estaban ahí, frescos, cálidos y agradables. Tomaría una resolución, dejaría que el otro pokemon se apareara con una Gardevoir y el se mantendría a raya, porque para él si no era September no tenía sentido, aun por muy urgido que estuviera.

Cuando Loren regreso de haber recolectado suficientes ramas y unas que otras leñas se encontró con la extraña escena de su Gallade y Gardevoir, quienes parecían enamorados, tomados de las manos, emitiendo un aura de total amor y comprensión. El entrenador simplemente arqueo una ceja un tanto nervioso, ya que después de todo ambos pokemon eran machos, sin embargo había escuchado por ahí que en el mundo animal solían darse casos de homosexualidad, por lo que dedujo que podía también suceder en el reino pokemon.


A/N: Bueno espero que les haya gustado esta corta historia, que se ocurrió después de ver los porcentajes de probabilidades de los Gardevoir de género, y además de algunas imágenes haciendo referencia al tema de que existen Gardevoir's macho.

Si desean una continuación nada mas avisen, que encantada lo haría, también pueden dejar sugerencias en los reviews que quizás si contemple si es que cambio este oneshot en una serializacion de capítulos.