Fanfic: "Quisiera…"
Cáp.: "Estándares"
Shaman King y todos sus personajes pertenecen a sus respectivos autores.
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Advertencia:
Intento Yaoi-shonen ai Horo Horo x Ren Tao.
O lo que es lo mismo
relación Hombre x Hombre.
Mi primer fanfic de Shaman King.
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"Dialogo."
'pensamiento'.
Frases o citas.
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Para
los grisáceos días de aquellos años dejados en
el olvido, la remembranza de aventuras pasadas quedaba con un deje de
nostalgia en el lugar más recóndito del corazón.
No
es que tratara en vano de contener la sonrisa al momento de ver
aquella silueta dibujársele en la mente, lo que le costaba
reconocer en esos momentos era la forma en que su rostro le forzaba a
mostrarse afable, su actitud tendía por una prolongada
amabilidad para con todo personaje con quien cruzare la mirada.
"Ren, el desayuno pronto estará listo, ve a ducharte." La serenidad en aquellas palabras sacó abruptamente de sus pensamientos al poseedor de los ámbares ilusionados.
"Buenos días hermana. Ahora mismo lo haré." La peculiar cortesía le obligo más por los estándares de casa a hacerle una leve reverencia antes de retirarse.
Un día mas del incesante invierno decembrino, aquella temporada en la que las personas se reúnen para intercambiar abrazos, buenos deseos que curiosamente se contrasta con lo monótono de los colores y las formas naturales. Hojas caídas, hierba quemada por las heladas y suicidios por doquier.
'Aunque él no diga nada, esta muy feliz en esta navidad' La joven hermana de Tao, entro en la cocina para disponer los preparativos del gran comedor.
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La gotas rebosantes de jubilo rozaban la piel del felino muchacho, el cual por mas intentos truncados que hacia para apartar a ese ser de su mente solo conseguía frustrar su estándar establecido. '¡No, yo no puedo pensar así. Si tal vez fuera en otro lugar y otro momento, no, no, no. Mujer y hombre, hombre y mujer.' Recriminaba para si.
"Horo."
Sentir un palpitar incesante llegar a su corazón, el estomago dándole vuelcos al intentar pronunciar el nombre de aquel, que en las penumbras de la fantasía nocturna anhelaba volver a ver… sentir tan cerca de si, con otro sentido claro, pero al fin de todo lo había aceptado
"Horo…él."
Implacable el tiempo le obligo a retomar su placentero regaderazo, froto con tal suavidad su pálida piel, que pareciera el jabón victima de celos por demás.
"Otro aburrido fin de semana…mas ahora no puedo, aunque quisiera."
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Al paso de los meses, Tao esperaba mitigar por completo aquel sentimiento aun latente, mas para sorpresa de su herida voluntad, no pudo erradicar por completo esa…'Despreciable sensación'.
La
primavera llego de improvisto antes de lo habitual, mariposas, aves y
hasta su hermana parecían conspirar en su contra, pues se
paseaban de aquí para allá con… 'Alguien mas'
en un gesto de absoluto desinterés miro a las fastidiosas
palomas que se posaron en la ventana del chino; por simple cansancio
voluntario permitió que siguieran con lo suyo.
Abrió
los ojos como platos al ver que se trataba no de palomo y paloma, si
no de palomo y palomo.
"Que tan perdidos estamos en este mundo
que hasta los animales hacen eso." Dijo para si mismo
reprendiendo a su prematura mente 'Esto no pasa siempre, ni al
cualquiera ¡es una señal Ren!'.
"Una
señal, Ren, una señal." Se dijo en un entrecortado
suspiro.
Ciertamente había logrado gran parte de sus
caprichos desde aquel incomodo día en que se encontró a
Yoh Asakura, pero sabia que esto estaba en contra de sus propios
principios y deseos racionales.
Como temía, la perilla fue
girada una y otra vez, solo espero a poder vislumbrar al causante de
sus temores al momento.
"Ren, buenos días, tienes una llamada telefónica."
"Ah eres tu, hermana, gracias." Respondió profundamente aliviado y tal vez solo tal vez un tanto desconsolado.
"¿Qué le pasa?" pregunto para si la hija mayor de los Tao, puesto que el menor se retiro a responder la solicitud.
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"Si, diga." Resoplo al auricular.
"Huhuhu Ren ¿Cómo has estado, amigo?"
"Yoh…" La voz se le helo por unos momentos. "¿Qué quieres?"
"Saludarte Ren, es que hace mucho que no hablábamos, y bueno hoy me escape del entrenamiento de Anna, huhuhu por eso estoy aquí."
"Ya veo, si es verdad, pero Yoh, si Anna llega a enterase ella te matara." Dejo escapar una leve sonrisa.
"Tranquilo Tao, tranquilo, deja que la paz del universo fluya y mejor dime ¿Cuando nos visitas?"
"Pues creo que iré a tu próximo funeral, haha, no se cuando me inviten." Se motivaba con amigos de verdad como solo Asakura lo era.
"No seas así, sabes que eres bienvenido en todo momento."
"Gracias."
"YOH ASAKURA…ESTO NO SE VA A QUEDAR ASI." Escucho acercarse a la rubia, temor de todos los shamanes.
"Ren, te espero, hasta luego." Apenas Asakura hubo pronunciado estas débiles palabras la comunicación se corto, para perplejidad de Ren, que dejo su mente volar hasta llegar a las más crueles torturas de as que seria victima su amigo.
"Pobre Yoh, como no la estará pasando, realmente me necesita."…'Al menos para que no sufra solo'.
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Con aquella convicción 'ayudar a Yoh a salir de ese circulo vicioso en el que Asakura sufre mientras Kyoyama maltrata' comenzó una mas de sus extrañas travesías.
El típico viaje en tren se convirtió en una lucha constante por seguir reprimiendo su 'Despreciable sensación' para con Horo Horo.
Si el dueño de los ojos azules como el cielo en las montañas también era dueño de su insomnio y más grandes temores. Estaba incitado a verlo.
Una serie de sucesos indescriptibles le custodiaron a lo largo de su trayecto, una pareja de muchachos que no dejaban de tomarse las manos. La música ¿romántica? y las dudas de su compañero de viaje, un niño de apenas unos cinco años.
"¿Por qué esos muchachos se abrazan?" Al escuchar esto Tao sintió ruborizarse hasta la punta de su cabello. '¿Cómo un niño tan pequeño hace ese tipo de preguntas, ¿En que pervertido mundo vivimos?'.
"¿Por qué, señor, ¿Por qué?" Sentir la presión a la que el infante le sometía, no tuvo otro remedio que decir como era su estilo la más pura verdad.
"Por que son gays." Respondió cruzando los brazos. 'Así este mocoso dejara de molestar'.
"¿Que es gay, señor ¿Qué es, ¿Qué es?" Oh por los grandes espíritus que es lo que había hecho.
"Es que…son….pues por que se quieren mucho." dijo al fin de su titubeo.
"Ah, ya. ¿Y son hermanos?" volvió a interrogar el infante
"Puede ser o son muy buenos amigos. Puedes preguntarles." Una amplia sonrisa chantajista se dibujo en sus labios. 'muy bien, eres tan inteligente Ren Tao'.
"No, gracias." El mundo entero cayo sobre los pesado hombros del chino, cuanto tiempo podría seguir soportando las prematuras preguntas de aquel niño que hacia parecer las casualidades unas verdaderas causalidades.
'Señales' suspiro de aliviado al ver que la madre llegaba por su hijo.
"Adiós señor." Agito entusiastamente su pequeño brazo.
"Adiós." Sonrió de alivio.
Sin duda esto era el colmo, todo esto pasarle justo a él, Ren Tao, él Ren que siempre esta a la orden de la etiqueta, el que dirán y la buena reputación.
"¿Ir a casa de Yoh?.. ¿Horo Horo estará invitado también?"El deseo vehemente que tanto intenta borrar, erradicar de si, es cada vez más fuerte y constante como las pulsaciones en su corazón.
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Por: Asia Black Mizuhara (As-NeKon)
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Gracias por leer.
