¡Hola! Les traigo esta historia sobre Emily y Alison de PLL. Es la primera vez que escribo sobre ellas y la verdad son una pareja que me gusta mucho y que siento que no les dieron la importancia que merecian en la serie así que decidí escribir esto. Espero y les guste y si es así, recomiende esta historia.
Les dejo el link del video (trailer) de la historia: /TDMCZWCKXBI
Gracias por leer.
Nota: Si les gusta Once Upon a Time o como escribo, entren a mi perfil para leer más historias. Gracias.
Disclaimer: Los personajes de Pretty Little Liars no me pertenecen. Esta historia es solamente con fines de entretenimiento y cualquier parecido con la realidad es coincidencia.
Capítulo 1
Camine varias cuadras antes de llegar al bar y mis pies dolían como si caminara sobre vidrios. Me había puesto mis mejores zapatos de tacón y me estaba arrepintiendo bastante. Cuando por fin entre al bar, pude notar que varios chicos volteaban la vista hacia mí y rogué porque ninguno de ellos estuviera lo suficientemente borracho como para que se me acercara.
Me había mudado a la ciudad hace poco y mi única amiga en ese momento: Spencer, me había convencido de tener una cita con uno de los pasantes en el despacho de abogados de su mamá; ni siquiera recordaba su nombre, pero accedí porque no quise molestar a Spencer y además me vendría bien distraerme de todo el lio de la mudanza y el hecho de conocer a alguien más en esta ciudad.
Me senté frente a la barra sintiendo un alivio inigualable en la planta de mis pies, llame al barman y pedí un mojito, necesitaba algo refrescante. Puse mi bolso en la barra y tome mi celular para revisarlo: ningún mensaje. Eran exactamente las 9:15 de la noche y yo moría por regresar a casa, poner una película y quedarme dormida.
Le di un trago el mojito y revise el teléfono una vez más, no sé si estaba esperando un mensaje que cancelara la cita o uno que la mantuviera en pie. Mire hacía mi lado izquierdo y pude contemplar a dos chico que probablemente no tuvieran edad para estar ahí; al otro lado, a un asiento de distancia, había una chica de cabello castaño increíblemente largo, su piel era morena y vestía jeans y una blusa color negro. Cuando ella volteo hacía mí no pude quitarle la vista de enzima lo bastante rápido como para que no notara que la miraba. Ella se me quedo viendo unos segundos y después me dedico una pequeña sonrisa.
—Lo siento — Me disculpe y sentí como el calor subía a mis mejillas.
Ella negó con la cabeza y dio un trago a su bebida.
—¿Tu cita no llego? — Preguntó la chica. En verdad me sentí aliviada al ver que no le importaba el hecho de que estuve mirando su fabuloso cabello.
—Eso parece
—Pues ya somos dos… Esto me recuerda porque deje de tener citas por un tiempo.
—Ni que lo digas.
—¿Era una cita a ciegas o conocías al chico? — Preguntó ella levantando una ceja.
—Cita a ciegas — Respondí cruzando mis brazos sobre la barra — Soy nueva en la ciudad, así que mi única amiga aquí me organizo una cita, pero creo que no tuvo éxito — Reí un poco y puse un mechón de cabello detrás de mí oreja — ¿Qué me dices tú?
—Cita por internet, ya sabes de esos sitios de citas que te dicen con quién debes salir — Pude notar que se sentía apenada por su respuesta, pero en estos tiempos eso no era nada raro — La verdad no me gusta la idea pero una de mis amigas me animo a hacerlo… Yo soy más de conocer a alguien en un bar y conversar, todo en vivo y en directo.
Sonreí un poco y di un sorbo a mi bebida, por algún motivo me había puesto nerviosa y me sentía sonrojada. La chica se levantó de su asiento y se sentó a mi lado extendiendo su mano.
—Soy Emily Fields — Se presentó ella.
—Allison DiLaurentis — Tome su mano con una pequeña sonrisa.
—Es un gusto Allison, ¿Puedo invitarte un trago?
Observe mi vaso casi vacío y asentí.
—Me encantaría.
Emily sonrió, tenía una bonita sonrisa, y llamo al barman. Pidió un martini para ella y otro mojito para mí.
—¿Por qué te mudaste a Rosewood? — Preguntó ella.
—Quería estar en un lugar tranquilo, ya sabes — Me encogí de hombros.
—Bueno, creo que escogiste el lugar correcto.
—Spencer me hablo de la ciudad. Ella y yo nos conocimos en la universidad — Expliqué — Y decidí darle una oportunidad. Aplique para el puesto de maestra en la escuela y lo conseguí.
—¿Así que eres maestra? — Ella levanto una ceja y le dio un sorbo a su trago.
—Exacto… ¿Tu a que te dedicas?
—Soy dueña del Brew, la cafetería que está en el centro.
—¡Wow! Toda una empresaria — Dije levantando las cejas y ella soltó una pequeña risa.
—En realidad era de mis padres. Pero decidieron que yo me hiciera cargo de ella — Emily me miro por unos segundos sin decir nada y debo confesar que me puso bastante nerviosa — Quizá puedas pasar por ahí algún día.
—Me encantaría — Respondí con una sonrisa — Solo si tienes muffins de banana y nuez, son mis favoritos.
—Los mejores de la ciudad — Alardeo ella.
Seguimos hablando y riendo, tomamos un par de tragos más mientras platicábamos. Emily me conto que ella no había podido asistir a la universidad y por eso se había quedado en Rosewood, pero ella siempre había querido salir de viaje y recorrer el mundo.
Tome mi teléfono y me di cuenta de que era casi media noche, no quería irme pero mañana era mi primer día en el trabajo y no quería dar una mala impresión.
—Creo que debo irme — Dije ladeando la cabeza y poniendo el celular en la bolsa.
—Sí, ya es un poco tarde — Respondió Emily levantándose de su asiento — ¿Te acompaño a tu auto?
—No traje mi auto — Respondí mientras me levantaba del asiento.
Tome mi bolso y busque mi cartera para pagar por los tragos. Saque un par de billetes y los deje sobre la barra.
—Yo pago mi parte — Se apresuró a decir Emily.
—No — la detuve — Yo invito esta vez.
Emily sonrió y agacho la cabeza metiendo las manos en las bolsas traseras de su pantalón. Le sonreí y camine hacia la salida del bar, estaba pensando en quitarme los zapatos para caminar hasta el departamento pero la idea no me convenció del todo. Camine hacía la esquina esperando ver un taxi pero me rendí a los dos segundos. Las calles estaban totalmente desiertas.
—¡Allison! —Di media vuelta y vi que Emily caminaba apresuradamente hacía mí.
—¿Pasa algo? — Pregunte arrugando la frente.
—Olvide pedirte tu número — Respondió ella con una pequeña sonrisa.
Sonreí sintiendo una oleada de nervios recorrer mi cuerpo. La mire y ella sonreía y pude notar lo hermosos que sus ojos cafés eran.
—Solo si tú me das el tuyo.
El primer día en la escuela no había sido tan malo. Me había presentado a los niños y todos eran adorables. Nunca había enseñado en primer grado pero me estaba gustando.
La escuela era increíble, los maestros eran realmente amables y el ambiente era bastante relajado, lo que me parecía realmente bueno para los niños.
Estaba sentada en mi escritorio, observando como todos los niños trabajaban en algunas planas para mejorar la letra.
—Miss DiLaurentis — Levante la vista y observe a Mathew frente a mí.
Era un niño realmente tierno, tenía la tez apiñonada y los ojos cafés chocolate al igual que su cabella lacio que le llegaba a las orejas.
—¿Qué pasa Mathew?
—¿Puede ayudarme con las planas? Es que no logro hacerlo bien — El chico miro hacia el suelo y se tomó las manos.
—Claro que si — Me levante de mi silla y le tome la mano esperando que no se sintiera apenado por pedir ayuda — Vamos.
Ambos caminamos hacía su asiento y yo doble las rodillas para estar a su altura. Él tomo el lápiz y centro la mirada en el cuadernillo, tome su mano y le ayude a que escribiera las figuras exactas, como se podía ver en la imagen.
—Miss DiLaurentis.
—Dime — Solté su mano y pude notar como él aún seguía trabajando.
—Usted me agrada.
Sonreí y pase una mano por su cabello. Me recordaba al cabello de Emily.
Emily, había pensado bastante en ella durante el día y había revisado constantemente el teléfono para ver si no tenía ningún mensaje de ella. Quería volverla a ver, me hacía sentir ansiosa el hecho de no saber nada de ella, pero tampoco quería llamarle porque no sabía que decirle.
Tome el teléfono y titubeé un poco antes de escribir un nuevo mensaje. Busque el número de Emily para escribirle.
"Me la pase muy bien anoche, espero que se repita"
Mire la pantalla del celular y decidí no enviar el mensaje. No sabía porque estaba tan desesperada por saber algo de ella.
Espero les haya gustado, dejen sus comentarios y sugerencias.
