Disclaimers: Megaman, Geo Stelar y todos los personajes de Megaman Starforce son propiedad de Capcom, así como cualquier otro personaje de otro videojuego, serie de anime, manga o lo que sea que se me ocurra sacar son propiedad de sus respectivos dueños.

Información para los lectores: Esta historia esta basada en el videojuego, aunque puede que haga unas pocas referencias al anime, y esta llena de locuras, cosas imposible, apariciones espontáneas de personajes ajenos al juego y humillaciones continuas a los personajes que salen en ella así que, si no quieres que te de un paro cardíaco por ver a tus personajes favoritos humillados de manera tragi-cómica, no leas esta historia.

Aclaraciones: Las palabras en cursiva serán pensamientos o alguna palabra que desee destacar, como Battle Cards o cierta frase que el prota usa mucho.

Megamen Strikeforce: Dragon/Pegasus/Leo

Capitulo 1: El fugitivo y el "marginao". Nace un héroe

Esta historia comienza en el año 220X. La "X" es para que nadie pueda buscar ni ubicar estos hechos en una línea temporal…. No, eso era mentira, en realidad está escrita ahí porque el tipo que tenia que escribir el guión de la historia se fue de juerga la noche anterior a comenzar a hacerlo, y al día siguiente tenia una resaca tan "jodia" que puso la X para no tener que comerse la cabeza pensando un mísero número.

En fin, que eso, que en esta futurista era la humanidad ha conseguido alcanzar el súmmum de la vagancia y la ociosidad gracias a la tecnología de las ondas EM. Esta dos letras son la abreviación (sí, no les basta con tener la vida fácil que también tienen que abreviar hasta las palabras mas simples) de ondas ElectroMagnéticas… pensándolo bien yo también les diré solamente ondas EM.

A lo que iba, es que gracias a estas ondas el mundo es un lugar mejor ya que hacen que casi todas las cosas se hagan solas (sí, aún más que en nuestra época): la comida se hace solo con pulsar un botón, los coches, motos y otros vehículos terrestres flotan y no contaminan, se pueden ver otros planetas con telescopios que hasta un niño pude comprar, existen unos bichejos hechos de ondas llamados Hertz que hacen todo el trabajo desde el mundo digital (ojo, es el mudo onda ¿vale?, no lo confundáis con el digimundo)… vamos, el sueño de cualquier persona que desee una vida fácil, ecologistas incluidos, y sencilla.

Además de eso, la gente que de verdad se aprecie (no creáis que el hecho ser un mundo avanzado ha suprimido la vida social) puede entablar relaciones mas profundas entre si (No de la manera en que estáis pensando pervertidos) gracias al sistema de la "Banda-Hermano", gracias al cual cualquiera puede ser hermano de cualquiera (Sin problemas legales ni papeleo, que realista ¿no?). Gracias a este sistema, los "Hermanos" pueden compartir sus mas íntimos y profundos secretos (Por eso la gente se lo piensa 13 veces antes de elegir si volverse o no hermanos).

Sin embargo, no todo es comodidad en este avanzado mundo (Jo, ¿porque siempre hay algo que evita que la humanidad alcance la utopía perfecta?), ya que, en un mundo donde el 99.99% de las cosas son controladas por computadoras, los simples virus de ordenador (tales como los trojans o los worns esos, que te pueden joder la compu en menos de un minuto si tienes la desgracia de descargarte alguno) han evolucionado a "versiones mas avanzadas y destructivas"; al independizarse de los hackers y piratas informáticos que se pasan el día en sus sótanos; y se han adentrado, libres por el mundo onda, a buscar cualquier cosa que les de la gana para fastidiar su sistema operativo (que hace que Windows parezca un mal chiste).

Pero bueno, dejando de lado a estos minúsculos problemas con los virus de los que ya se encargara la policía o alguien más, centrémonos en lo importante: el gobierno Electopia (Algo así como el Japón del futuro) puso en marcha un costoso (y en mi opinión absurdo) proyecto con el fin de contactar con vida inteligente extraterrestre (aunque si encontraban un marciano verde enano y sin cerebro se hubieran conformado), e incluso, intentar formar Bandas-Hermano con ellos.

Para lograr este noble y casi imposible objetivo, los mejores ingenieros de la NAZA (una entidad del gobierno compuesta casi totalmente por frikis viejos y lunáticos encargada de las cosas mas importantes del país como los proyectos espaciales o traer del colegio a la hija del presidente) construyeron una imponente y muy bien equipada estación espacial a la que llamaron "Paz"…

De repente la cámara (que durante todo este largooo y aburrido rollo de explicación ha estado fija en el vacío del espacio) se centra en una gran construcción metálica…. que destaca por su pintura externa en distintos tonos de verde camuflaje, los imponentes lanzamisiles que lleva incorporados a los lados de la parte superior y la gran cantidad de rayos láseres, ametralladoras y otra clase de armas menores que lleva por toda su estructura. ¡Ah!, y además lleva el numero "EU-13666" como placa de matricula.

¡Ejem, ejem! La razón del aspecto de la estación (tan poco apropiado tanto para su nombre como para sus propósitos) fue porque el gobierno de Electopia (al no tener dinero suficiente para costearse la estación solos) no pudo encontrar otro patrocinador que las fuerzas armadas de los Estado Unidos.

¿Qué? ¿Que que tiene de interesante todo eso? Bueno, pues que resulta que un buen día (en el que todos los del centro que vigilaba la estación desde la tierra estaban viendo el futbol) la estación entera, con sus 13 tripulantes, sus sistemas de sonido surround, sus televises de plasma de 66 pulgadas y sus más de 27 millones de Zennys (La moneda universal del futuro) en armamento de alta tecnología… desaparecieron. Así, si mas, sin dejar rastro, ¡Caput!, ¡Finito!, en un segundo estaba ahí y al siguiente (antes de que los controladores pudieran ver el gol decisivo del partido que estaban disfrutando) ya no estaba en ningún lugar.

Vaya, vaya ¿Ahora si es interesante, verdad? Pues bien, nuestra historia comienza en un pueblucho abandonado de la mano de Dios, pues a todos sitios tienes que irte en autobús, llamado Sierra del Eco (que de sierra, salvo un pequeño y cutre mirador, tiene poco) en alguna hora "X "de la noche…

Se pueden ver las calles de un pequeño pueblo, eso si, con sus casas todas bien cuidadas y de un aspecto claramente futurista (ningún pueblo de nuestro tiempo sería tan limpio), todas tienen jardín y las luces encendidas (Jo, que suerte no tener que preocuparse por el derroche energético). Salvo por una escuela al fondo, un pequeño parque con una tienda cerrada con el rótulo "BIG WAVE" con grandes luces de neón encendidas y la notoria ausencia de coches no parece haber nada interesante en el pueblucho; pero, al parecer, la cámara dice lo contrario pues rápidamente se centra en la casa de la esquina inferior izquierda del pueble y nos muestra como dentro están sentados alrededor de una mesa dos personas. Uno es un hombre (De unos treinta y algo, cabello castaño oscuro, ojos azules), que lleva puesto unos pantalones a juego con su cabellos, una chaqueta azule con bordes rojos y una gorra a juego (Que le deja el cabello aplastado hacia atrás como si fuera una pizza) , tanto la chaqueta como la gorra llevan estampadas las letras "AMAKEN". La otra es una mujer de edad similar con el cabello del mismo color que el hombre, pero peinado hacia atrás y hacia arriba de una manera imposible, y sus ojos también son marrones. Además, lleva puesto una especie de camiseta larga de color púrpura con unos pantalones cortos que le llegan hasta media rodilla. En la tele encendida se pude ver que está terminando el famoso programa "Quinto Milenio".

La mujer lleva en sus manos una deliciosa taza de "Nescafé" (No me pregunten como esa $#&#% de marca de café sigue vendiéndose en un mundo tan avanzado) la cual va bebiendo de a pequeños sorbos.

-¡Ah!-exclamó la mujer mientras cerraba los ojos, clara señal de que disfrutaba (Como solo la gente subnormal puede hacerlo) de esa birria de café-¡Esto si es una buena bebida para pasar el frío!-declaró con una sonrisa.

Hope...-comenzó a decir el hombre-¿Sabes que hay muchas marcas de café mejores y que, de paso, no dejaron de fabricarse en masa hace 75 años?

¡Ay, Aaron!-le respondió la mujer con otra de sus amplias sonrisas, lo cual hacia dudar entre si o era una persona muy alegre, o tenia algún problema psicológico que la obligaba a sonreír-Deberías saber que ya no se hacen cafés tan naturales y deliciosos como este-concluyó feliz.

Bueno…-dijo el hombre, con serias dudas sobre eso-El punto es que he venido para ver que tal estabas. Ya sabes, como hoy se cumplen tres años de…

-….-la sonrisa de la mujer se apago mientras miraba su Nescafé y por un momento pareció hundirse en los recuerdos del pasado-Kelvin…-dijo con profunda melancolía.

Lo siento-se disculpo el tal Aaron sintiendo que había metido la pata-se que debe ser duro, después de todo tu nunca quisiste que formara parte de la misión en primer lugar teniendo en cuenta los peligros de….

-¡¿Por queeeeeeeeeeeee?-saltó de pronto la mujer, de una manera súper dramática y dejando que cayeran ríos de lagrimas de sus ojos asustando al pobre de Aaron Boreal (Al fin su nombre completo) y haciendo que le surgiera una enorme gota estilo animé-¡¿Porque Kelvin? ¡¿Porque tuviste que ir a esa maldita misión? ¡Te dije mil y una veces que ir al espacio en una estación mal financiada no podía traer nada bueno, pero tu dijiste que era tu deber, que nadie más podía hacerlo y todo ese rollo sentimentalista! ¡¿Por queeeeeee?-continuo con su dramático y desgarrador sufrimiento mientras el pobre Aaron intentaba calmarla.

Si prestasteis atención a todo el rollo que vuestro querido narrador (O sea, yo) os solté un poco mas arriba habréis adivinado que el esposo de Hope Stelar, Kelvin Stelar, fue uno de los desgracia… quiero decir, de los afortunados tripulantes de la estación espacial Paz, de ahí la reacción de la pobre mujer. Porque, a pesar de los innumerables esfuerzos que se habían hecho durante los 3 años siguientes a la desaparición de la estación (Revisar uno que otro satélite del siglo pasado de vez en cuando, pues a nadie le quedaba dinero que invertir en la búsqueda) lo único que habían logrado era encontrar un fragmento de la estación que se había estrellado (y que, para colmo, era una de las pocas partes de la estación libre de ningún arma), lo cual les había obligado a dar la triste noticia de que la estación espacial había estallado (Porque ere imposible que un trozo de la estación se desprendiese por otra cosa ¿verdad?) y ,encima, habían clasificado la ubicación del fragmento de la estación como "Súper secreta y confidencial".

Desde entonces, cada vez que alguien hacía la mas mínima mención de Kelvin o de la estación, la siempre sonriente Hope entraba en un estado ultra-depresivo del cual era muy difícil sacarla. Y daba la casualidad de que Aaron había sido miembro de la NAZA, al igual que Kelvin, antes de trabajar en AMAKEN, el centro de desarrollo de tecnología aeroespacial y otras tonterías menores sin importancia (Guau, como de bajo puede uno caer ¿no creen?). De hecho ambos habían sido Hermanos y eso había hecho que viniera aquel día para ver como estaba Hope, pero ahora parecía que su visita era lo único que había provocado la tristeza de la pobre mujer ese día.

-Calma, calma-le decía Aaron, o el Sr. Boreal como yo prefiero llamarle, mientras intentaba desesperadamente arreglar su metedura de pata. De pronto, como si su mente de una inteligencia más que cuestionable hubiese tenido un chispazo de su brillantez prodigiosa de antaño, se le ocurrió una brillante idea-Oye, ¿Como esta el chico?-le preguntó esperando que funcionase.

Y al parecer lo hizo, pues el rostro de la mujer volvió a ser sonriente con un cambio tan brusco que nadie hubiera dicho que había estado sufriendo intensamente hasta hace tan solo unos momentos.

-Ah, si-dijo sonriente, señal de que respondía favorablemente al cambio de tema-Bueno, esta bien de salud pero…-su rostro adquirió un matiz de preocupación mientras tanto ella como Aaron fijaban su vista en la única puerta de la casa aparte de la entrada, la de la habitación del hijo de Hope (Lo cual hace que uno se pregunte donde puñetas duerme la madre si no hay otra habitación en la casa)-Ya sabes-dijo con un pequeño suspiro-a pesar de que es muy listo, sigue sin querer ir a la escuela, teniendo en cuenta que el 5· año de primaria es una época vital para la educación, y, además, aún no tiene ningún amigo. Si sigue a este paso seguirá siendo un marginado social toda su vida y….

Lo que fuera que fuese a decir Hope, no pudo ya que, en ese momento, la puerta de la habitación se abrió y de ella salió un niño de 10 años (Aunque aparentaba unos pocos más) de cabello castaño claro (Peinado de punta de una manera más imposible que la de su madre), ojos del mismo color, pantalón corto azul, una especie de chaqueta roja con dibujos blancos en los hombros, una cara seria-aburrida, típica de un marginado sin amigos que odia la vida, y un colgante de color dorado con la forma de una especie de pata de dinosaurio triangular con tres puntas. Este amigos míos es Geo Stelar, el hijo de Hope y el protagonista principal de nuestra historia y, aunque no lo crean, su vida esta a punto de dar un cambio tan radical que parecerá sacado de una película de Hollywood.

-¡Geo, cariño!-dijo Hope con una sonrisa, al igual que Aaron que apreciaba mucho al hijo de su difun… es decir, de su desaparecido mejor amigo.

-Mama, Sr. Boreal-saludó sin muchos ánimos Geo, empezando a dirigirse hacia la salida de la casa. Sin embargo, antes de haber llegado siquiera a la mitad de su camino, el Sr. Boreal le detuvo poniéndole una mano en el hombro.

-Espera, Geo- comenzó a decir Aaron mientras sacaba algo de su bolsillo-encontraron esto en el fragmento de la estación y creo que deberías tenerlo tu, después de todo era de tu padre.

Aaron sacó de su bolsillo una especie de gafas de sol muy raras. Estas eran de un color verde transparente, con varias líneas amarillentas de forma semicircular, la parte de la sujeción era de color blanca brillante y en los bordes tenía el mismo símbolo del colgante de Geo. El chico cogió las gafas mirándolas con extrañeza y revisándolas de arriba abajo.

-¿Que son?-le preguntó al Sr. Boreal finalmente, después de haberlas revisado como un ratón que revisa un queso de dudosa procedencia.

-Eran un invento de tu padre-comenzó a explicar Aaron, feliz de que Geo mostrara curiosidad por algo (Aunque fuera por algo tan cutre como unas viejas gafas)-El las llamaba "Visualizador" porque, supuestamente, le servirían a los humanos para poder ver el mundo onda. Sin embargo, nunca pudo terminarlas pues los altos cargos de la NAZA le dijeron que era un derroche de dinero intentar ver algo que sabemos que esta bien mediante computadoras, y que nunca seria necesario ver el mundo onda en lugares que no fueran sedes del gobierno o cosas así-terminó diciendo con un suspiro.

Seguramente Aaron hubiera seguido hablando del interesante pasado del padre de Geo, pero en ese momento Hope estalló en uno de sus llantos depresivos de "¿Por qué Kelvin? ¿Por queeeeeee?" y tuvo que volver a intentar calmarla. Geo aprovechó eso para, después de decir simplemente "Me voy al sitio de siempre" largarse de la casa.

El solitario y marginado chaval recorrió las calles de Sierra del Eco en dirección a unas escaleras que estaban al lado de la escuela sin saber que, en otro lugar del espacio, alguien que cambiaría su vida huía a gran velocidad de sus perseguidores.

O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O

En algún lugar del espacio….

Sector "X". Zona "X". Cuadrante "X" (Recordáis el porqué de las "X", ¿Verdad?)

Se pude ver el vacío del espacio, con muchas estrellas de fondo, todo tan normal y aburrido como siempre… hasta que de pronto, tan rápido que nuestro cámara casi se la come de lleno, una especie de estrella fugaz azul-verdosa pasó surcando el vacío a una velocidad varias veces superior a la de la luz y, luego de dar como cinco vueltas por el mismo sitio como un ciego conduciendo un Ferrari, se ocultó detrás de un asteroide que flotaba a la deriva en el espacio, revelando una extraña sombra de la que, debido a la oscuridad espacial, no se podía distinguir mucho mas que su falta de piernas y que jadeaba como un niño que acabase de correr una maratón olímpica perseguido por Michael Jackson.

-Ah… ah…ah... ¡Maldición!-exclamó el extraño ser mientras mirando por ambos lados del meteorito. Luego sonrío ligeramente mientras recuperaba el aliento y se ponía a reír como un retrasado mental-Jajajajajajajajajajaja. Una vez más he demostrado, no solo que no hay nadie más veloz que yo, sino que puedo jugarles una broma a esos tontos en las narices mientras me persiguen y aún así no dejar que me atrapen. Pero claro, eso no es ninguna sorpresa porque yo soy el mejor, el más grande y único….

-Si ya terminaste con tu patético monólogo-dijo una voz fría y burlona sobre el ser, haciendo que este se sobresaltara y mirase hacia arriba, descubriendo a las nueve sombras de las que había estado intentando huir durante todo el día paradas justo encima del asteroide mirándole con caras burlonas-puedes empezar a rendirte tranquilamente y a suplicar mientras nos turnamos para hacerte pedazos por intentar hacerte el listo-terminó diciendo la sombra echando chispas de los ojos.

Sintiendo que se le caía el alma a los pies, el ser sabía que si no pensaba algo rápido iba a terminar echo fosfatina espacial. De pronto, como si de una iluminación divina se tratase tuvo una brillante idea y, mientras colocaba disimuladamente un pequeño aparato circular en la enorme roca les miró con burla mientras decía-¿Qué, acaso sois demasiado tontos como para aguantar una broma? ¿O es que queréis que os "adorne" un poquito más?-terminó diciendo mientras les amenazaba con… ¿Un rotulador azul?

-O sea, ¿Cómo pudiste atreverte a hacernos algo así?-dijo otra de las sombras con un acento tan pijo y chillón que hizo que el misterioso ser sintiese ganas de vomitar-Es que te juro por Cefeo que eres de los peores y mas superbajos tontos que…

-¡Cállate ya!-gritó otra de las voces, muy extraña pues sonaba doble-¿Es que no puedes ni mantenerte ni dos segundos sin decir una de tus puñeteras palabras pijas?-siguió gritándole a la segunda voz con mucha rabia.

Mientras esos dos se ponían a discutir como perro y gato y sus demás compañeros intentaban calmarlos, la sombra que había hablado al principio se giró hacia el sonriente ser y le dijo-¿Te crees muy gracioso, verdad? ¿Crees que puedes aprovechar que nos detenemos un momento a descansar luego de perseguirte por media puñetera galaxia para llenarnos el cuerpo de dibujos y palabrotas con un maldito rotulador?... ¡PUES NÓ!-bramó con rabia salvaje y mirada enloquecida- Y ahora te vas a enterar de lo que vale un peine, pues te vamos a…-se detuvo de pronto al notar la sonrisa burlona del ser-¿Qué pasa, acaso tienes algo que decir?- le pregunto con recelo.

-Pues si tengo algo que deciros-respondió mientras se alejaba unos metros del asteroide-¡Buen viaje!-dijo a la vez que volvía a convertirse en estrella fugaz y salía disparado a toda velocidad en dirección a la tierra.

-¿Pero que coñ…?-comenzó a decir la sombra antes de que una potente explosión de proporciones atómicas los mandara volando por el espacio en diferentes direcciones.

¡KABOOOM!

-¡Jajajajajajaja!-se descojonaba el ser mientras se alejaba de la explosión.

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De vuelta a la tierra…

Geo caminaba hacia las escaleras que se encontraban al lado de la escuela que lo conducirían al "lugar de siempre", o lo que es lo mismo, al sitio al que iba todas las puñeteras noches de su vida desde hace tres años (y a veces incluso también durante el día). Sin embargo, cuando estaba a punto de alcanzar el borde de las escaleras, una voz comenzó a llamarle.

-¡Eh tú!-le dijo una voz femenina con tono autoritario.

Geo se giró y vio como tres personas caminaban hacia él. La que dirigía el grupo era una chica de su edad, más o menos, rubia, con un peinado extraño formando una especie de coletas cilíndricas (que a saber como se mantenían en su lugar) y con una mirada de "Aquí se hace lo que yo diga sin discusión", llevaba puesto una especie de fusión entre vestido largo y una falda corta de un color azul con el centro blanco y una pequeña corbata roja.

El segundo era un chico bastante grande, y gordo, con una cara de mala leche que daba miedo, tenía el pelo de un color azul-verdoso, peo no se le veía bien debido al ridículo sombrero-orejeras de color naranja que llevaba en la cabeza, además d vestir un chaleco grande con los bordes marrones que tenía en el centro, o sea en el 80% de su cuerpo, una parte amarilla con un tenedor y un cuchillo cruzados (como si no fuera ya bastante obvio que le encantaba comer).

El último, que era un chico tan pequeño que un friki lo podría haber confundido con un hobbit, era flaco, usaba gafas de borde azul y tenía una mirada de autosuficiencia demasiado inadecuada para alguien como él. Usaba una camiseta de color blanca-amarillenta y unos pantaloncillos de color verde, ah, y una corbata naranja que le quedaba un poco grande.

Geo no supo porqué, pero al verlos se le vino irremediablemente a la cabeza la imagen de los tres chiflados.

-¿Tú eres Geo Stelar, verdad?-y sin darle tiempo al chico de poder contestar siguió hablando-Yo soy Luna Platz, la delegada de la clase de 5-A es decir la tuya-nuevamente, cuando Geo estuvo a punto de abrir la boca, la chica (o quizá deberíamos llamarla loro humano) siguió con su parloteo-Mira Geo, como delegada de la clase mi deber, entre otras cosas importantes que no vale la pena mencionar ahora, es obliga… quiero decir, "asegurarme" de que TODOS los alumnos acudan a clase, y resulta que tú no has ido desde que comenzó el curso-terminó, al fin, con tono mezcla de ira y reproche.

-¿Y?-preguntó con simpleza Geo, sin alterar su rostro impasible ni su tono neutro.

-¡¿Como que "y"?-preguntó, aparentemente furioso el chico gordo amenazando a Geo con un puño, provocando que nuestro prota diera un paso atrás asustado (vamos, una cosa es ser antisocial y frío y otra es no tenerle aprecio a la vida).

-Calma Bud, calma-dijo Luna, a quien a partir de ahora llamare simplemente dele, como un amo que sujeta la cadena de su perro con amenaza ante un intruso-Primero que nada deja que te presente a mis ayudantes, Geo. Este es Bud Bison-dijo con un tono de superioridad mientras señalaba al chico grandote-y este es Zack Temple-hizo lo mismo señalando al bajito. En eso Zack empieza a hablar, provocando que todos le miren.

-Mucho gusto Geo-comenzó a decir con una sonrisa mientras cerraba sus ojos con una sonrisa de superioridad (oh por Dios, ¿Quién se cree este tío? ¿El Presidente de USA?)-como ha dicho la dele, debemos encargarnos de que, a partir de ahora, siempre vayas a la escuela, así que si eres listo no te resistirás y…-se detuvo de pronto cuando, al abrir los ojos, se dio cuenta de que Geo ya no estaba-¡EH! ¡¿A dónde ha ido?

-¿Que?-dijeron la dele y Bud, girándose y notando la falta de Geo-WTF?-dijo al unísono el incordiante trío de tarados.

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Parado en el solitario y abandonado mirador conocido como "Punto Vista" (y la gente se podía haber currado un nombre un poco más original) Geo observaba las estrellas con su cara de aburrimiento típica, solo que con un pequeño atisbo de relajación. Siempre que estaba allí, el sitio desde donde mejor podía ver las estrellas en toda Sierra del Eco (y eso que el sitio apenas estaba a unos 11 metros del suelo), sentía que estaba un poco mas cerca de su desaparecido padre. Quizá de ahí viniera el inexplicable hecho de que se pusiera a hablar solo mientras miraba hacia el cielo, una clara señal de que el niño necesitaba urgentemente un amigo o, al menos, un psicólogo.

-Buenas noches papá-comenzó a decir con una ligera, pero que minúscula, sonrisa-hoy tampoco he hecho nada interesante, solo estudiar un poco en casa. ¡Ah!, se me olvidaba, el Sr. Boreal ha venido antes, estoy seguro de que te manda saludos.

Geo dejó de hablar solo un momento para poder ver la hora en su transador. Aquel sofisticado aparato futurista, una de las casi inexistentes cosas que Geo tenía en común con las personas normales, hacía las veces de teléfono, agenda personal, videoconsola, reproductor videos, sistema de formación de Banda-Hermano (aunque Geo estaba seguro de que NUNCA usaría esa función), y archivador de Battle Cards (una especie de tarjetas-armas especiales, con diferentes cantidades de daño según su precio, que la gente podía usar para machacar a los virus que intentaran joderle algún aparato electrónico). Sin embargo, Geo solo tenía el número de su madre registrado y el único otro uso que le daba al transador era almacenar sus Battle Cards (que coleccionarlas parecía ser su único hobby).´

Al ver que ya eran casi las 12 pm. (y que por lo tanto ya no se encontraría con nadie al volver a casa) estuvo a punto de irse como siempre, pero por alguna extraña razón (llamada "Argumento del Juego") sintió la necesidad de mirar a su alrededor, observando así unas flores mal cuidadas y una farola que nunca se encendía, para luego girarse y ver pasar por el cielo una especie de estrella fugaz azul.

Geo cerró sus ojos un momento para poder pedir un deseo, peo cuando lo hizo se dio cuenta de que no se le ocurría ninguno. "¿Un deseo?-pensó aún con los ojos cerrados-bueno, supongo que desearía que algo cambiara un poco en mi vida, pero eso es imposible ¿verdad?"-terminó de pensar con una risita, que provocó que el inservible visualizador que ahora llevaba sobre el pelo cayera sobre sus ojos, antes de abrirlos… y ver como la estrella fugaz estaba a tan solo dos segundos de aplastarlo.

-¡¿WTF?-fue todo lo que pudo exclamar Geo antes de cubrir su cuerpo con sus manos esperando su inevitable y trágico fin…que fue tan solo un ligero choque, como cuando chocamos en la calle contra alguien que tiene prisa por ir al baño. No obstante, el impacto bastó para hacer que Geo se diera de culo contra el duro suelo.

-¡Auch!-maldijo Geo, pero se quedo quieto cuando oyó una voz que también maldecía delante de él.

-&%$&/ ¡¿Se puede saber contra que $%&# he chocad…?-La voz dejó de maldecir de pronto, como si se hubiese dado cuenta de algo-¡Anda, pero si solo es un chaval! Y, además, me recuerda bastante a él, de hecho es casi una versión en miniatura suya y….-la misteriosa voz empezó a divagar estúpidamente mientras Geo se levantaba y, al fin, se acordaba de que podía abrir los ojos.

Lo que vio lo dejó en shock.

En primer lugar se dio cuenta de que, en algún momento mientras formulaba su "deseo", se le había caído el visualizador, de manera que ahora lo llevaba perfectamente puesto. Pero las otras cosas que estaba viendo hicieron que no prestara mucha atención a eso.

En primer lugar se fijó en que ahora podía ver, por todo el cielo hasta muy lejos en el horizonte, una especie de caminos flotantes de un color naranja-vómito muy horteras pero, aún así, alucinantes. Sin embargo, lo segundo que vio, y lo que de verdad llamaba su atención hasta el punto de hacerle pensar que quizá se había dormido mirando a las estrellas, era el ser que estaba parado frente a el y que, indudablemente para cualquiera que no fuese tarado de nacimiento, era el que le había hablado.

Tenía una cabeza metálica que recordaba a algo parecido a un perro o un lobo, pero eso era lo más normal que tenía el ser. Aparte de la cabeza, el pecho también era metálico, como una especie de armadura, pero todo el resto de su cuerpo, salvo unos brazaletes que tenia donde los humanos tenemos las muñecas, estaba hecho de una especie de energía verdosa, sus manos terminaban en garras y detrás de la cabeza tenia una especie de cresta irregular. Mientras que el color de sus ojos era de un espeluznante rojo sangre, nada acorde con la cara de subnormal que tenía en ese momento, su armadura era de varias tonalidades de azul con unas pocas partes plateadas.

Geo se quedó mudo mientras el ser seguía divariando y diciendo cosas a las que el chico no prestaba atención. Al fin, luego de estar mudo como por unos treinta segundos, Geo recuperó el habla para poder gritar.

-¡AAHHHHHHHHHH!-gritó el chico mientras se ponía de pie y retrocedía varios pasos-¡UN ALIÉNIGENA!-teniendo en cuenta que había caído como una estrella fugaz desde el espacio no hacía falta ser un genio para adivinarlo.

-¿Eh?-dijo el ser confuso cuando de pronto pareció percatarse de algo-¡¿PUEDES VERME? ¡¿Y OIRME?-ahora el alien era el sorprendido.

-Pues sí…-comenzó a decir Geo, perdiendo un poco el miedo a que el extraño ser intentara destruirle o algo así-¿Por que no habría de verte?-le pregunto con curiosidad.

-Bueno, teniendo en cuenta que estoy hecho de algo que en este mundo llaman ondas EM y que, según tenía entendido, los humanos no pueden ver pues pensaba que…-empezó a explicar el ser, pero de pronto fue interrumpido por el muchacho.

-¡¿Has dicho ondas EM?-exclamó sorprendido. Luego, miró hacia los caminos naranjas flotantes y dijo-Entonces eso debe ser el mundo onda…-empezó a comprender, incrédulo y con cara de atontado.

-¿También puedes verlo?-comenzó a preguntar el alien mientras Geo se quitaba el visualizador, miraba un momento alrededor, sonreía y se lo volvía a poner.

-Puedo gracias a esto-le respondió al alien señalando las gafas-Se llama visualizador y fue hecho para ver el mundo onda, al igual que a los seres que habitan en el. Nunca funcionó en realidad, pero parece que tú, de algún modo que no llego a comprender, has logrado terminarlo… "Y eso que solo te has estampado contra mí"-terminó la frase en su mente, mientras una gotita animé se le deslizaba por la nuca.

-¡Ah!, era por eso-exclamó la criatura azul con una sonrisa. Ya había comenzado a pensar que "el" le había mentido sobre algunas cosas que podían, o no, hacer los humanos. Luego, con una sonrisa en su cara de hiena, miró al chico a los ojos y le dijo-Es un placer conocerte, chaval, soy Omega-xis, aunque mis colegas me solo llaman Mega, y vengo del planeta FM-terminó mientras mantenía su sonrisa de subnormal.

-¿Del planeta FM?-preguntó Geo con incredulidad mirando al "alien FM", preguntándose como puñetas podía existir un planeta que se llamara igual que una frecuencia de la radio.

-Sí-dijo el alien con simpleza, pero de pronto su cara cambió a una más seria, como si de repente hubiera recordado algo-ahora no hay tiempo, escucha necesito tu ayuda. Por cierto ¿Como te llamas?

-Me llamo Geo Stelar-entonces entendió lo que había dicho Mega-¿La mía? ¿Para que?-

-Bueno, verás, jeje, es algo realmente gracioso, así que lo soltare todo de golpe-comenzó Mega con una risa nerviosa. Luego tomó el aire y dijo-A ver, para resumírtelo: yo era un poderoso guerrero del planeta FM-esto lo dijo con un tono extraño-pero cuando vi lo que el rey FM hizo a nuestro planeta vecino, el AM, o sea volarlo en pedazos sin piedad-a Geo le da un tic en el ojo- decidí largarme y en el camino me pasó algo, que ahora no pienso especificar, pero te diré que no se lo perdonare al rey nunca y volví al planeta para cantarle las cuarenta en su cara y luego volver a largarme, no sin antes robar algo valiosísimo y de vital importancia para el rey y todos los FM-ianos, así que el rey mandó a sus mejores guerreros tras de mí y me han estado siguiendo por toda la galaxia hasta que logre despistarlos en un asteroide cerca de aquí, por lo tanto, teniendo en cuenta de que podrían encontrarme y mandar un ejercito a reducirme a mí y a todo aquel que se interponga en fosfatina, necesito un lugar donde esconderme y mantenerme a salvo un tiempo-dijo todo eso casi sin respirar-Así que me ayudaras, Geo?

Silencio absoluto.

-…

-…

-…

-¿Eso es un sí?-pregunto estúpidamente el alien.

-¡Fue un placer conocerte, Omega-xis!-dijo Geo con una sonrisa histérica y con los ojos cerrados mientras se daba media vuelta, dispuesto a largarse de ahí a toda velocidad para, por mas sesiones psicológicas que le costase, intentar olvidar toda esa traumática experiencia.

Casual e irónicamente (o deberíamos decir preprogramado por los creadores del absurdo juego), en ese mismo momento ocurrieron varias cosas que se podían considerar un poquito fuera de lo normal. Primero, el suelo empezó a temblar ligeramente, haciendo que Geo casi se comiera el suelo; luego la farola que jamás se encendía empezó a brillar intensamente y a apagarse de forma intermitente y, finalmente, el pequeño y nunca utilizado tren (que algún vago subnormal había dejado colocado en aquel semi-abandonado mirador) se empezó a mover hasta bloquear las escaleras, o sea la única salida del mirador, a no ser que alguien fuese tan tonto como para saltar los casi 15 metros de altura para poder llegar hasta abajo.

-¡¿Pero que…?-comenzó a decir Geo antes de que Mega lo interrumpiera, visiblemente alarmado.

-¡Oh $%& me han encontrado!-exclamó Mega mirando nervioso al tren, pero luego parpadeó y pareció un poco más calmado-bien, solo han enviado un contingente virus, seguramente para detenerme hasta que "ellos" lleguen, sin embargo…-miró directamente a Geo-¡Escucha chaval, si quieres vivir para ver el mañana haz todo lo que te diga!-ordenó de una manera tan al mas puro estilo "superhéroe del cómic" que Geo asintió, dispuesto a obedecer al alien-¡Perfecto! ahora, ¿Tienes alguna Battle Card en blanco?-le preguntó al asustado chico.

-Si-respondió Geo sacando la susodicha tarjeta, sin preguntarse como alguien de otro planeta podía saber de las Battle Cards.

-Bien-Mega colocó sus manos sobre la Card, haciendo que esta brillara de un tenue azul. Luego buscó alrededor y, entre unas flores de un mal cuidado jardín, vio lo que buscaba-¡Genial, un agujero onda justo a tiempo!-exclamó dirigiéndose hacia allí.

-¿Un que?-preguntó Geo acercándose al extraño vórtice naranja.

-Muy bien chico, ahora quiero que digas la frase más cool que se te ocurra, algo digno de un superhéroe de película, a la vez que insertas la Card en tu transador-dijo Mega, a la vez que entraba en el aparato, sorprendiendo a Geo.

-Va-vale-tartamudeó Geo, luego comenzó a pensar "¿Una frase cool?, bueno esto se llama agujero onda y casi todo esta racionado con la ondas aéreas así que…espera ¿Y si le añado mi nombre?"

-¡Ya lo tengo!-exclamó Geo son seguridad, algo raro en él. Luego gritó con determinación una frase que, aunque aún no lo supiera, diría tantas veces que terminaría harto de ella:

¡Cambio de Onda EM!

¡Geo Stelar, En el Aire!

Mientras decía esta frase Geo insertó la Card en el transador… y eso provocó que un extraño brillo azul rodeara a Geo a la vez que Mega aparecía detrás de él y ambos acaparaban un zoom de la cámara antes de convertirse en un haz de luz azulada y salir disparados hacia el camino onda que tenían justo encima.

Cuando el brillo azul se disipó se pudo ver la silueta de Geo, aunque algo diferente pero él aún no lo notaba; el chico se sentía extraño y cuando miró sus manos pego un grito que se pudo escuchar hasta el último rincón de Electopia-¡¿WTF? (Cielos, estos personajes empiezan a abusar de esa frase) ¿Pero que %&# me ha pasado?-

-Calma Geo-dijo ¿su mano izquierda? Provocando que Geo pegara otro grito-solo nos hemos fusionado y te has convertido en una onda, a propósito buena frase esa-terminó de decir Mega, o mas bien la cabeza de Mega, que ahora era la mano izquierda de Geo.

La razón del sobresalto de Geo, como si no bastara tener la cabeza parlante de un alien en la mano, era que ahora llevaba u traje azul oscuro con partes de armadura de un azul más clareen las piernas, las muñecas y los hombros. Además, tenía un flipante casco azul con un visor rojo MUY transparente que solo le cubría media cara y dejaba libre su puntiagudo cabello, de manera que si algún personaje con al menos medio cerebro (que aparentemente no hay en este juego, pues nadie le reconoce a la primera) lo viera sería IMPOSIBLE que descubrieran su "identidad secreta".

-¿Fusionado? ¿Onda? ¡Tu no me dijiste nada de esto!-le gritó airado a su mano, algo que le hacía parecer más raro de lo que ya era.

-Vale, es cierto, pero ahora no hay tempo que discutir, tenemos algunos virus que machacar.

-¡¿Qué? ¿Pretendes que luche contra virus? ¡Estas loco, además yo no se luchar!

-Ya lo sé, pero ahora tienes mis poderes y además algún videojuego de lucha habrás jugado en tu vida del cual puedas imitar sus movimientos ¿verdad?

-Bueno, puede pero…

-¡Pues no se hable más!-gritó Mega, aparentemente eufórico por el mortal combate próximo, y comenzó a arrastrar a Geo, como si tuviera más fuerza en la mano que el chico en todo el cuerpo.

Así, Mega arrastrando al pobre Geo, el "Humano-Onda" llegó un camino onda ubicado prácticamente sobre el puente, encima del que, si eras un ser EM o tenías un visualizador, se podía ver una especie de pequeño rayo naranja. Eso era la entrada de red desde la cual se podía acceder al sistema central del tren (recuerden que en esta era el 99,99% de las cosas, hasta las casas de perro, funcionan con computadoras), si eras una onda claro, lo cual hace a uno pensar porque puñetas hacen esa especie de puertas siempre abiertas, como una invitación a los virus a entrar y joder todo el sistema, si se supone que NADIE en la tierra se pude convertir en una onda (maldita lógica absurda de los videojuegos)

-Basta Mega, no puedes obligarme a esto-casi rogaba el pobre Geo.

-Vamos chico, de todos modos necesitas mover el tren para poder salir de aquí desde el mundo real ¿verdad?

-Bueno, sí pero….

-Y para mover el tren hay que entrar y cargarse a los virus ¿verdad?

-Supongo, pero…

-Y nosotros vamos a entrar y matar a todos los virus ¿verdad?

-¡Esta bien, esta bien! ¡Lo haré pero cállate ya!-dijo un exasperado Geo mientras se convertía en una luz azul y entraba al Comp (ya se me pegó esta manía de las abreviaciones) del tren.

-Oh, a propósito, si se te acaban los puntos de vida en un combate contra los virus, desaparecerás para siempre-dijo tranquilamente Mega, como si fuera cosa de risa.

-¡¿QUE? ¡¿Y AHORA ME LO DICES?-gritó Geo como un loco, pero ya era tarde para arrepentirse pues nada mas entrar al ordenador, una zona con varias partes cuadrangulares flotando sobre un fondo celeste con dibujitos circulares, mas de 50 Metennas, unos virus pequeños y negros con forma semiesférica acompañada de un casquito amarillo con una cruz verde en el centro y una especie de picos mineros como armas (como sostenían estos picos para atacar al no tener manos era algo que ni el presentador de Quinto Milenio podría descubrir jamás), se giraron hacia el dúo fusionado mirándolos con sed de sangre (?) en sus caras.

-Matar, matar, matar, matar, matar…-empezaron a chillar los Metennas en idiomas viral, lo que traducido al nuestro significaba "Es Omega-xis, matadlo, matadlo, matadlo, matadlo….".Bueno, tampoco había mucha diferencia, quizá porque esos virus tenían menos bytes de memoria que una Game Boy Color de hace más de 200 años.

-¿Y como se supone que les derrote?-dijo Geo asustado mientras los virus se le acercaban. Estaba tan asustado que levantó el brazo de mega dispuesto a pedirle que hacer, pero entonces un rayo láser de energía surgió de la cabeza del alien y destruyó a uno de los virus.

Cuando el virus se desintegró, los ojos de Geo brillaron y algo dentro de él despertó, algo que llevaba casi tres años dormido. De repente volvía a ser el viejo Geo Stelar, aquel pequeño niño al que le encantaba jugar a los videojuegos y ver toda clase de series de televisión, aquel que jugaba con los otros niños en el parque mientras sus padres le miraban sonriendo, vamos, el Geo de antes del incidente de la estación "Paz", que de alguna manera la muerte del virus (al recordarle un juego de disparo de colección que le encantaba jugar llamado Counter-Strike 200X) había logrado hacerle volver a ser aquel chico, al menos de momento.

-¡Genial! , ¡¿Has visto como ha estallado?-exclamó eufórico mientras comenzaba a masacrar a los virus-¡Tomad esto! ¡Morid! Jajajajajaja-reía la mar de divertido mientras los pobres virus morían.

-Guau, lo haces genial…eh-de pronto Mega pareció pensativo-Sabes, necesitamos un nombre para esta forma algo así como, no se, eh ¿Blue-xis?

-¡Ni en broma!-le gritó Geo dejando claro que no estaba de acuerdo con ese nombre. Entonces se dio cuenta de que los virus se organizaban mejor y su buster ya casi no les daba-¡Hey Mega! Necesito un arma mejor-le exigió.

-¡Usa tus Battle Cards, puedes usarlo armas en el modo cambio de onda!

-¡¿Y hasta ahora no lo dices?-le preguntó airado mientras sacaba una Card y la lanzaba al aire.

Battle Card

Cañón de plasma 3

La cabeza de Mega se tragó la Battle Card e inmediatamente se transformó en una especie de increíble arma que tenía una especie de energía eléctrica recorriendo su interior, haciendo que los virus chillaran cuando Geo sonrió y disparó.

El potente disparo del imponente cañón mató a un buen número de virus y, a los que no mató, los paralizó.

-¡¿WTF? ¡¿De donde puñetas has sacado Cards tan fuertes?

-Hay muchas cosas que aún no sabes de mí, Omega-xis-dijo Geo mientras sacaba otra Card.

Battle Card

Anillo Llameante 3

Mientras el potente anillo de fuego carbonizaba a casi todos los virus que quedaban, Geo pensó en algo.

-Oye, si te las estás tragando ¿Como voy a recuperar mis Battle Cards?

-Eh…. NO querrás saberlo-dijo el alien apartando a mirada, provocando que una ENORME gota animé cayera de la cabeza de Geo.

En eso momento, algo pasó. Los virus, al ver su inminente e inevitable fin empezaron a gritar "Muerte, muerte, muerte" que esta vez significaba: "¡Es demasiado fuerte! ¡Jefe ayúdenos!". Como si acudiera a su llamado, una figura con una capucha negra apareció y observó fijamente a Geo.

-¡OMG!-gritó Mega haciendo que Geo mirara al encapuchado-¡Oh no! Es uno de los virus de más alto rango del rey FM, es….

El ser se quitó la capucha, haciendo que Geo abriera los ojos como platos. Allí parado había un ser de aspecto robótico, con un lado de su cuerpo de color rojo y el otro azul. Además, su cuerpo era asimétrico, siendo la parte roja más grande que la azul y con una especie de cerebro robótico visible.

-Yo soy Kikaider y tengo órdenes de eliminar al traidor Omega-xis y recuperar el objeto robado-dijo el ser al tiempo que hacía aparecer dos sables de energía en sus manos y se lanzaba contra Geo, mandándolo a volar y haciéndole graves daños.

-Chaval, recupérate ya-gritó Mega mientras Geo sacaba una Battle Card recuperar300 y la activaba, sin embargo Mega notó en su mirada que el guerrero de antes se había ido y el Geo cobarde y marginado había vuelto.

-¡Es demasiado fuerte!-decía Geo mientras Kikaider le atacaba repetidas veces y el apenas podía esquivarlo y bloquearle con el escudo-¡No puedo con él!

-Demasiado tarde para darse cuenta, humano-dijo el robot mientras agarraba a Geo del cuello y lo levantaba en el aire.

"Es mi fin" pensó Geo mientras dejaba de resistirse y empezaba a dejarse envolver por las sombras, pero entonces Omega-xis le gritó algo.

-¡No pierdas la esperanza Geo, piensa en lo que diría un héroe en un momento así!-eso hizo que varias frases como "Un gran poder conlleva una gran responsabilidad" o "Que la fuerza te acompañe" vinieran a la mente de Geo, pero, desplazando a las anteriores, una frase que su padre le había dicho una vez su padre llegó mente de Geo "Siempre lucha para proteger a la gente que te importa, Geo".

De algún modo inexplicable, Mega escuchó esto último y gritó:

-¡Geo, si no detienes a este loco destruirá todo el pueblo y se cargará a todo el mundo!

De pronto, las imágenes de la gente que le importaba, o sea su madre y el Sr. Boreal, siendo lastimadas por aquel ser parecieron darle un extraño poder a Geo porque obtuvo la fuerza suficiente para librarse de Kikaider y darle varios golpes con la Battle Card Puño Helado.

Cuando Kikaider retrocedió, Geo aterrizó en el suelo, con sus ojos cubierto por un ligero velo de sombras, y comenzó a sonar el tema principal de este absurdo juego: "Shooting Star"

-¡Tienes razón, Omega-xis! ¡No pedo seguir siendo débil! ¡No puedo rendirme tan fácil! ¡Porque yo (aunque cueste mucho creerlo) soy el único que puedo detener a este payaso! ¡Porque yo soy…! -se produce una pausa dramática, que Geo aprovecha para activar las Battle Cards War Sword y Long Sword al mismo tiempo, lo que, unido al tema musical y a la mística aura que ha surgido sin razón a su alrededor, le dan un aspecto súperultraarchirecontra flipante. Entonces, mientras apunta a Kikaider con ambas espadas finalmente exclama-¡Megaman!-se produce una increíble (y por supuesto ilógica) explosión azul detrás de Geo.

-¡Eh, buen nombre!-dijo Mega, a saber de donde pues en ese momento Geo tenía activadas las espadas-Tiene algo del mío y a la vez suena guay y novedoso.-siguió hablando solo el alien, mientras Geo se lanzaba contra Kikaider a súper velocidad y esquivaba sus ataques al mas puro estilo Power Rangers.

Antes de que Kikaider pudiese comprender de donde había sacado Geo aquel "Poder de superhéroe" Geo, en un movimiento de esos que solo un surrealista personaje de televisión o videojuego puede hacer, pegó un enorme salto y cortó a Kikaider perfectamente por la mitad transversal de su cuerpo, dejándolo en dos partes una roja y la otra azul sin que ninguna tuviera la más mínima parte de la otra.

-E-ES IMPO-IMPO-IMPOSIBLE-agonizó Kikaider mientras sus datos empezaban a borrarse-FALLO LETAL, E-E-EL ENEMIGO N-N-NO DEBÍA SER T-T-T-TAN FUER…-el supervirus no llegó a completar su frase pues se desvaneció sin dejar rastro.

Al ver que su jefe estaba criando malvas y que el recién nacido Megaman parecía deseoso de enviarlos con él, los virus empezaron a saltar solos del Comp. del tren, cayendo así en el vacío digital.

O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O.O

-Lo has hecho bien chico-le dijo Mega a Geo mientras ambos observaban toda Sierra del Eco desde el mirador.

-Bueno creo que fue divertido, por eso es una lástima que tengas que largart…

-¡¿Pero que dices? ¡Voy a quedarme contigo, chaval! ¡Llevaba años sin divertirme así!-exclamó eufórico el FM-iano, haciendo que Geo sudara la gota gorda. Parecía que, después de expulsionarse (que es como llamaremos a cuando Geo sale del mundo onda), el nuevo héroe Megaman había vuelto a ser el cobarde y marginado Geo Stelar-además, es muy probable que vengan los FM-ianos a buscarme.

-Razón de mas para que te vayas-le respondió Geo mientras daba media vuelta dispuesto a irse, pero…

-Hay, lo que diría Kelvin si supiera que su hijo es tan cobarde-suspiró Mega haciendo que, tal como el retorcido alien había planeado, Geo diese media vuelta, corriese hasta él y le mirase con ojos impacientes y sorprendidos.

-¡¿Sabe algo de mi padre? ¡Dímelo por favor!

-Hagamos un trato, tú me ayudas contra los FM-ianos y yo, algún día, te diré lo que sé de tu padre.

Geo se puso pensativo por unos segundos y, a pesar de lo absurdo que era arriesgar la vida luchando contra alienígenas solo para saber quien sabe cuando información no concreta sobre alguien que lleva tres años desaparecido en el espacio, le respondió:

-¡Trato hecho Mega!

-¡Entonces vamos a casa, amigo!-le respondió el alien feliz mientras entraba en el transador.

Geo parpadeó, pues que alguien (aunque ese alguien fuera una especie de perro alienígena azul) le llamara amigo le había agradado, pero decidió que ya pensaría en eso mas tarde y empezó a bajar las escaleras del mirador.

Y así, bajo la brillante luz del amanecer, el chico marginado Geo Stelar y el alien fugitivo Omega-xis se dirigen hacia una aventura increíble, llena de peligros, locuras, acción y, quizá, amistad. Pero no importa lo que el destino les depare porque el gran Megaman siempre estará ahí para evitar que el mal…

-Oh, por cierto aquí tienes tus Battle Card.

-…. sabes, creo que será mejor si nunca te pregunto como las has recuperado.

-Eh, casi mejor jeje-rió el alien con una gran gota en la cabeza

….saben, olviden lo que decía antes, este mundo está jodido.

Fin del primer capítulo

Notas del autor: Bueno gente, la verdad es que este es mi primer fic y no se si ha quedado muy bien, decídmelo vosotros, aunque espero que les haya gustado porque me esforcé mucho en escribirlo (me encanta Megaman Star Force y llevaba tiempo deseando hacer esta parodia).Así que decidme si debo continuar o si por el contrario he degradado tanto a Megaman que debería tirarme por un puente jaja, es broma.

Como sea espero vuestros reviews para decidir si seguir o no y, antes de que se me olvide, unas aclaraciones del capítulo:

Digimundo: para los que no lo sepan, es el mundo virtual de la serie Digimon.

Counter-Strike: un popular Scooter original de PC.

Kikaider: es un héroe robótico credo originalmente en un manga japonés por Shotaro Ishinomori. La razón por la que lo saqué como un supervirus jefe de tantos Metennas es porque a mí, y creo que a muchos otros, les aburre mucho la primera batalla de entrenamiento por eso quise hacerla más entretenida

Bueno, eso es todo, gracias por leer y comentad por favor.

Editado tras el capitulo 9: Bueno, queridos nuevos y viejos lectores, he visto que algunas personas me dicen que no les gusta el fic tras leerse el primer capitulo y por eso dejan de leerlo. Todos tenéis completo derecho a hacerlo, no penséis que estoy diciendo lo contrario, pero también quiero que sepáis que este fue el primer capitulo de mi primer fic, incluso yo acepto que puede ser un poco aburrido, pero no lo he cambiado para recordarme siempre como empecé con esto de escribir mi fic. Cambien deciros que he tenido muy buenos comentarios de gente que se ha animado a leer los siguientes capítulos después del 1, creo que voy mejorando a medida que avanzo, por lo cual os pido (Solo es una petición, no una obligación) que, si os animáis a hacerlo, leáis al menos un par más de capitulos antes de comentar el fic, pero eso ya queda a cuenta vuestra. Sin nada más que decir se despide vuestro humilde servidor, Lord of Fantasy27.