Los personajes de Saint Seiya pertenecen al gran Maestro Kurumada. Cualquier correccion me lo hacen saber de manera privada. Gracias Totales(Gustavo cerati).

Alistando maletas

Después de las guerras, todos los dioses resucitaron a sus caballeros, muertos en batallas.

El dios Poseidón se mostró agradecido con sus marinas por el servicio brindado en tiempos de guerra y les regalo un viaje hacia Perú. Lo que les molesto a las marinas era el hecho que Kanon viniera con ellos.

-¿Es una broma, Señor Julián? – protestó Sorrento de Siren.

-¿Ese pelele que nos engañó a todos también ira? – gritó molesto Isaac.

-¿Kanon ira? – preguntaba Thetys con corazones en vez de ojos.

-Thetys aterriza, ese tipo es un patán…-Bian la intentaba hacer reaccionar, sin éxito alguno.

-¡Silencio! – gritó furioso Julián – Entiendo que Kanon se haya aprovechado y haya querido dominar la tierra, sin embargo recuerden que también se revindico en la última guerra y se ganó el perdón de Zeus.

-Sin embargo cabe recordar que por el hemos muerto muchos de nosotros – mencionó Krishna de Krisaor.

-No solo eso, el santuario de Athena quedo hecho un desastre – protestó Eo.

-El caso es que si no va Kanon tendré que cancelar el viaje ¿Entendido? – gritó Julián a lo que los demás solo asentaron la cabeza apenados – muy bien entonces iré a arreglar mi equipaje mañana partiremos a primera hora del día, vayan alistándose chicos – agrego con una sonrisa en la boca.

Nadie estaba de acuerdo que Kanon viajara con ellos, pero porque el viaje saliera bien se aguantaron hasta lo último de decir a Kanon todas sus verdades, a excepción de Thetys, quien se encontraba en su habitación mirando la foto de ella con Kanon.

-Kanon, no tienes idea de cómo te extraño, las cosas aquí son muy diferentes desde que no estas – decía mirando la foto.

Mientras tanto, en la habitación de Bian, él estaba haciendo su maleta y preparando adicionalmente su tabla de surf (cabe indicar que en el paquete de viaje incluía las playas de Mancora). Eo sacaba su tabla de Snowboarding (para Pastoruri). Krishna, por su parte unas velas, un tapete rojo con amarillo, incienso y algunos libros de meditación. Kaysa empacaba algunas pulseras con púas de metal y discos de Nirvana. Isaac también sacaba su tabla de snowboarding y, por ultimo Sorrento ponía en su maleta su infaltable flauta.

Al día siguiente todos estaban en el aeropuerto de Atenas, esperando que viniera Kanon. Bian miraba su reloj.

-Encima además de patán, tardón – bufaba molesto.

-Tranquilo Bian, ya llegara – lo animaba Thetys.

-Thetys, entiendo que seas como mi hermana menor, hemos compartido chismes, algunas cenas y sabes que siempre estoy ahí para apoyarte. Sin embargo, con respecto a las cosas de Kanon, no estoy de acuerdo contigo – le respondió Bian rendido.

-Es cierto – agregó Eo – Julián dice que ha cambiado, sin embargo no lo creo.

En eso venia Kanon muy sonriente con su maleta en mano.

-Lo siento la tardanza – dijo Kanon con una voz agitada – lo que pasa es que el tonto de Saga se levantó tarde y él era el que me iba a trasladar al aeropuerto.

_Era de esperarse – murmuraba burlón Bian – después que su hermano le hace un favor, le llama tonto.

-¡Ya te escuche yegua aguada! – dijo Kanon molesto.

-¡Repite eso idiota! – respondió más molesto Bian.

-¡Silencio ustedes dos! – gruño Julián – creo que la única manera que se puedan llevar bien ustedes es sentándose junto con Thetys en el avión, solo que Thetys ira en la ventana.

-¿Queeeeeee? – gritaron los dos helados.

-Muy bien chicos el avión está a punto de despegar. Vayamos entrando – agregó Julián feliz.

CONTINUARA.