Bien, como dije, mi primer Shadouge era algo bastante triste. Esta es la versión en español de Tell me why. Está basada en la canción "Tell me why" de Three Days Grace y levemente en "Nothing's fair in love and war" de ellos mismos.

Y bueno, espero que les guste mucho este fanfic.

Disfruten la lectura.


"Oscuridad" es solamente una palabra para describir el desastre en el que estoy metido. Mi vida entera ha estado llena de obstáculos y enemigos mortales. Ser inmortal no es sinónimo de ser feliz, ni siquiera de estar en calma. He visto a mucha gente morir, especialmente por mi culpa. Pero así es como las guerras funcionan. No puedes decidir qué hacer, debes seguir órdenes, debes matar para seguir con vida cada que estás en batalla.

Hoy es uno de esos días. A pesar de que sé que soy más poderoso que los demás, jamás doy nada por sentado. Odio ser tan arrogante como el farsante azul. Algunas veces el poder y la fuerza no son la clave para ganar, necesitas estrategias. Puedo ver a las hordas de aliens acercarse a nosotros. Puedo ver a Sonic y a sus amigos alistándose para pelear. También puedo ver a Rouge a mi lado, como siempre, pensando en algo que pueda distraerla de la masacre a la que nos enfrentaremos.

— No te sobre esfuerces—dice. La miro y me sonríe—. Déjanos hacer algo, es muy aburrido si tú haces todo el trabajo.

Sonrío mientras oigo sus palabras. Asiento y corremos hacia ellos. Ataco inmediatamente, comienzo a destrozarlos. Realmente los odio. La última vez que encaramos algo similar, estuvimos muy cerca de la aniquilación total y no dejaré que destruyan este lugar.

Continúo peleando con ellos sin siquiera pensarlo. Si ellos me golpean una vez, yo los golpeo dos. Puedo sentir un hilo de sangre brotando de mi labio inferior, pero no es más que un rasguño.

De la nada, el lugar se llena de más robots y soldados. Puedo ver la nave acercarse y un disparo se estrella en mi brazo, lo que quiere decir que con quienes peleábamos eran simples peones, con los cuales planeaban cansarnos para matarnos en el siguiente ataque. Mientras atacamos, el número de heridas en nuestros cuerpos se incrementa. Sé que el líder de este ejército debe estar en algún lado, pero no puedo encontrarlo, mientras tanto, mi brazo comienza a entumecerse. Oigo los gritos de mis compañeros, sé que debo hacer algo.

¿Qué sucede, Shad?—preguntó Rouge cuando vio que había dejado caer mi vaso de agua.

Nada. Simplemente estaba… pensando—traté de decir sin hacer expresión alguna. Lo menos que necesitábamos era sembrar el pánico—. Creo que deberíamos irnos ahora—dije mientras llamaba al mesero para pagar.

Era uno de esos días en que te sientes con ganas de hacer nada. Acabábamos de terminar con nuestra misión y Rouge quería celebrar. No me gusta mucho ir a lugares concurridos, pero ella me convenció de ir, como siempre lo hace. Sin embargo, sentí una sensación extraña en mi cabeza. Era como si Black Doom fuera a regresar, pero, ya lo había matado, ¿no?

¿Tienes un mal presentimiento?—preguntó ella finalmente tomándome del brazo, yo simplemente la miré. ¿Desde cuándo era capaz de leer mi mente?

Creo que Black Doom va a regresar. O por lo menos, su ejército… puedo sentirlo—respondí y ella asintió comprendiendo lo que estaba diciendo—. Creo que deberíamos prepararnos.

Deberíamos. Espero que solamente sea un mal presentimiento. Tal vez solo necesitas descansar un poco—Rouge me miró y me sonrió. Debo admitir que sus sonrisas me hacen sentir mejor.

Desgraciadamente, tenía razón y todo se volvió un caos. Ahora, debo derrotar a estos alienígenas y hacer que todo vuelva a estar bien. Odio esta situación, que el mundo jamás se quede en paz. Pareciera que mi pasado siempre me persigue y que nunca podré escapar de él.

El silencio domina el lugar: nadie está gritando ni riendo. Debo saber por qué, no es una buena señal. Busco por todos lados y no encuentro nada. El mundo parece haberse detenido. Y como creí, encuentro a un ser que se parece a Black Doom.

— Shadow el Erizo, es la primera vez que nos encontramos, sin embargo, he oído mucho sobre ti—dice el ser con un tono arrogante—. Tuviste la oportunidad de unirte a nosotros, de gobernar sobre este planeta a nuestro lado. Pero ahora, verás cómo se destruye y morirás junto con tus queridos amigos.

No digo nada, simplemente ataco. No tengo ni el tiempo ni el humor para desperdiciarlo en una conversación inútil. Él se defiende muy bien, los ataques hacen que sienta la sangre salir de mi brazo herido. Uso diferentes estrategias y puedo ver el daño que le he causado, sé que estoy cerca de derrotarlo.

Siento poder corriendo por mis venas. Eso solo significa una cosa: hay una esmeralda del caos cerca. Le lanzo un Chaos Spear y corro a buscarla. A lo lejos, puedo ver a Rouge peleando con unos robots.

— Creí que nunca vendrías por ella—dijo sonriendo. De un salto, llegó hasta mi lado—. Toma, no digas que jamás te ayudo.

— Nunca he dicho eso—respondo no sabiendo qué quiso decir con eso.

— Olvídalo. Es hora de terminar con esto—dice ella mientras se va corriendo a seguir peleando. No parece estar muy herida, pero hay algo extraño en su comportamiento.

Y con la esmeralda en mis manos, procedo a tomar mi súper forma. El poder me hace sentir completo de nuevo, incluso, mis heridas se curan.

Hey, Shadow—dijo Sonic al entrar al departamento de Rouge. Odio cuando hace eso. Es mi tiempo libre y definitivamente no quiero verlo.

Sonic—respondí simplemente.

¿Sabes? Quiero preguntarte algo—dijo sentándose en el primer lugar cercano a mí. Lo miré fijamente y asentí—. Después de todo lo que ha pasado, ¿eres feliz?

¿Qué?

Sí. Ya sabes, eres inmortal y eso… tienes un poder "misterioso"—hizo énfasis en la palabra con sus dedos—, pero siempre estás de malas. ¿En realidad eres feliz?

¿Solo viniste a preguntarme eso?—dije levantándome de mi lugar. Él me miró un poco desconcertado.

Bueno, en parte. También vine a preguntarte si vendrás a la fiesta que Amy está preparando. Pero eso es muy aparte.

Estoy bien con mi vida, ¿de acuerdo? Y no, no iré. Sabes que no me gustan ese tipo de eventos.

Rouge sí viene—dijo tratando de llegar a algún lado.

¿Y?

¿Tú qué crees? Tienes que darte la oportunidad de amar—dijo y esbozó una gran sonrisa. Pude sentir cómo el odio corría por mis venas.

Creo que no eres la persona adecuada para hablarme de eso, además, ya te dije que no iré, incluso si ella está ahí—dije con firmeza mientras lo llevaba hacia la puerta—. Y por favor, no vuelvas a mencionar esa tontería del amor.

¡Vamos! Dale una o…—cerré la puerta en su cara. Tal vez fue un poco descortés, pero mi paciencia tiene límites.

Me senté de nuevo y miré al techo. Ella no estaba; seguramente estaba en algún lado robando joyas o mimándose. Nunca le he preguntado, eso sería meterse en su vida y habíamos prometido no hacerlo… o al menos eso era lo que yo hacía.

Después de lo que pareció una eternidad, y con la ayuda del farsante, por fin derroté a los aliens. Todos estamos heridos. Algunos murieron, aunque no estoy seguro de quién, simplemente lo escuché mencionar. Posiblemente algunos de los soldados que vinieron con nosotros, después de todo, los humanos son débiles.

Supongo que esto significará un poco de paz por un tiempo. Regresaremos a las banas rutinas de la vida: ir a misiones con Rouge y Omega, Sonic apareciéndose por el departamento mientras Amy lo persigue… lo cotidiano. Una vida tranquila. Tal vez debería ser más abierto, tratar de ser un amigo… o tal vez darle una oportunidad a mis sentimientos. Me detengo al darme cuenta de lo que estoy pensando. Sé que no debo, la vida me odia. Pero tal vez esta vez podría ser diferente.

Shadow, ¿dónde estás?—oí la voz de Rouge. Estaba en mi habitación recostado en mi cama. Pude oír como sus pasos se acercaban a la pieza. Entró en la habitación y la miré: estaba usando un vestido negro, pero no era del tipo que usa siempre, muy sensual y apretado. Más bien se veía como algo cómodo—. Oye, ¿quieres hacer algo? ¿Tal vez salir a dar la vuelta?

No realmente, gracias—murmuré y me di la vuelta. Me sentía cansado y lo último que quería era salir.

Bien, ¿te molesta si me quedo aquí contigo?—preguntó con un poco de duda. La miré de nuevo y me di cuenta de que no estaba de buen humor. Rodé de nuevo en la cama y le di unos golpecitos al colchón. Ella se acostó a mi lado y miró al techo.

¿Qué pasó? ¿Alguno de tus novios te dejó?—pregunté mientras miraba a la pared. Ella hizo un sonido que parecía un gruñido—. ¿En serio? Entonces… ¿tal vez Knuckles hizo algo que te molestó?

Debo admitir que odié todo el asunto de Knuckles. Por años, era algo constante en nuestras pláticas, pero un día, dejó de hacerlo, lo cual fue bastante bueno. De alguna forma, sentía que estaba perdiendo su tiempo con eso. Y ninguno de sus otros novios casuales fueron buenos para ella. No puedo entender realmente por qué los eligió. Sin embargo, no había entrado en otra relación desde hace mucho tiempo. Es por eso que molestarla se sentía bien. Ella era la única con quien podría hacerlo.

No, ya sabes que ya no estoy interesada en él—dijo secamente—. Simplemente no estoy de humor. Quería pasar un día relajante, eso es todo. Tal vez pudimos haber salido, pero como siempre, eres una ladilla y no quieres hacer nada conmigo.

Bien, ya estás grandecita, puedes salir tú sola.

Olvídalo, Shadow. No lo entenderías—ella suspiró—. ¿Te molesta si tomo una siesta?

No, estaba pensando en hacer lo mismo—respondí y volteé a verla, pero ella estaba justo frente a mí, ¿en qué momento se volteó? Rouge me miró a los ojos, ese par de joyas azules miraron justo dentro de mi alma—. Bueno, que duermas bien—dije finalmente y me di la vuelta, sintiendo cómo mi corazón quería salir de mi pecho.

Tú también, Shadow, tú también—susurró.

Camino por todos lados buscando a los demás. Están tratando de curar a los heridos. Busco a Rouge, pero no puedo encontrarla. Le pregunto a todos los que voy encontrando, pero ninguno sabe dónde está. Oigo un grito de la nada, es ella. Corro al lugar de donde vino el sonido y la encuentro en un charco de sangre.