Casualidad

Comedia en TRES actos

Personajes

Sesshoumaru, escritor y catedrático de la Facultad de Filosofía y Letras.

Kagome, escritora aficionada y estudiante de la Facultad de Filosofía y Letras.

Shipo, niño de tres años.

INU NO TAISHO, padre de Sesshoumaru, Investigador Emérito de Facultad de Filosofía y Letras.

NARAKU, Rector de la Universidad.

Kagura, profesora de la Facultad de Filosofía y Letras.

Akitoki Houjo, estudiante y compañero de Kagome.

Época actual.

ACTO PRIMERO

Auditorio Principal de la Facultad de Filosofía y Letras. Hay una gran manta en la entrada anunciando la Ceremonia de entrega de reconocimientos a los ganadores del XXIII Concurso Literario de la Facultad de Filosofía y Letras. Hay una mesa principal con un mantel que tiene el escudo de la Universidad y de la Facultad. Sentados en ella están Naraku, en el extremo derecho, Inu no Taisho en el centro y Sesshoumaru en el extremo izquierdo. El auditorio está repleto de estudiantes y los ganadores de los primeros lugares están sentados hasta delante.

NARAKU. Sube al estrado y toma el micrófono.

Es un verdadero placer para mí presidir, en mi calidad de Rector de nuestra máxima casa de estudios, esta ceremonia de premiación. Me enorgullece ver a nuestros jóvenes entregarse en cuerpo y alma a sus carreras y verlos dar su mejor esfuerzo. Los Doctores Inu no Taisho y Sesshoumaru entregarán los premios a los ganadores de las dos categorías. Enhorabuena.

Regresa a su asiento y cede el micrófono a Sesshoumaru.

SESSHOUMARU. Se pone de pie y desde su sitio anuncia al ganador.

En la categoría de cuento infantil el primer lugar es para: ¡Kagome Higurashi! Háganos el favor subir al estrado y decirnos unas palabras.

KAGOME. Pasa a la mesa, recibe el premio de manos de Sesshoumaru con una gran sonrisa, le da la mano al Rector y al Investigador Emérito y sube al estrado.

Es un honor para mí recibir este reconocimiento tan importante. Aprecio además haberlo recibido de manos de alguien tan importante para mí. Haber leído al gran escritor Sesshoumaru ha influido mucho en mí, pero me alegra mucho haber encontrado mi propio camino y logrado mi propio estilo. Sin embargo, usted seguirá siendo mi ejemplo a seguir toda la vida, mi admiración por su obra es sincera. Agradezco a todos aquéllos que me estuvieron alentando cuando escribía, sin ellos jamás hubiera podido concretar la historia. A todos aquéllos que la leyeron, revisaron, corrigieron y criticaron: ¡Gracias!

Baja del estrado y se sienta en unas sillas que están justo al lado izquierdo de la mesa principal. El público le aplaude.

INU NO TAISHO. Desde su sitio se pone de pie.

En la categoría de cuento realista el primer lugar es para: ¡Akitoki Houjo! Felicitaciones. Por favor, diríjanos unas palabras.

HOUJO. Recibe el premio de manos del decano, saluda a los otros dos, le da la mano a Kagome y sube al estrado.

Yo pienso que para un joven escritor que apenas está en los últimos semestres de la carrera, recibir este premio es muy satisfactorio. Viene a coronar todo el esfuerzo y las noches en vela. La verdad también me alegro mucho de haber participado en una categoría diferente a la de la señorita Kagome, jamás hubiera podido competir contra ese talento y belleza.

SHIPO. Entra corriendo y llorando e interrumpe el discurso del joven.

¡Tengo hambre! Ya me aburrí, ya me quiero ir a mi casa.

KAGOME. Se pone de pie rápidamente y sin dudar lo carga. Le habla en voz baja. Houjo continúa con su discurso.

Ahorita ya casi terminamos, quédate aquí conmigo. ¿Dónde está tu mami?

SHIPO.

No tengo.

KAGOME.

¿Cómo no vas a tener? Pero ya no llores, ahorita te doy algo de comer.

Baja y toma su bolsa, saca un paquetito y le da de comer al niño, se sienta con él en las piernas.

SESSHOUMARU. La estuvo observando desde que cargó al niño.

Señorita Higurashi, la ceremonia todavía no termina. Su sitio es éste.

Le señala la silla que estaba ocupado.

KAGOME.

Lo siento.

Regresa con el niño en brazos mientras éste come feliz.

HOUJO.

Finalmente quiero agradecer a mis profesores de la Facultad, quienes me enseñaron a ser crítico y a exigirme cada vez más.

Se baja del estrado y se sienta al lado de Kagome. La concurrencia lo ovaciona.

NARAKU. Se pone de pie y sube al estrado.

Felicitaciones a los ganadores. Ustedes son el ejemplo a seguir para todos sus compañeros de los primeros semestres, demuestran que el esfuerzo y la dedicación son bien recompensados. Además de los reconocimientos otorgados, se publicarán sus cuentos en una edición especial. En un esfuerzo póstumo, fruto de la colaboración con las editoriales que nos patrocinan, tenemos un premio adicional en especia. Este vale por cinco mil pesos para comprar libros. Espero que hagan buen uso de él. No me resta más que agradecer a todos los presentes su asistencia a esta ceremonia.

Toda la gente se pone de pie y empiezan a salir.

KAGOME.

Disculpe, señor Rector, pero el pequeño se ha quedado dormido y no sé quién sea su madre. ¿No podría preguntar por el micrófono de quién es?

SESSHOUMARU.

Es mi hermano.

KAGOME.

¿Su hermano? Doctor, no sabía que tuviera un hermano tan pequeño. ¡La diferencia de edades es enorme!

INU NO TAISHO.

Así es, hay una gran diferencia de edades entre mis hijos.

KAGOME.

Cada vez me sorprendo más, no sabía que el Dr. Sesshoumaru fuese su hijo, pero ahora me explico de dónde sacó esa genialidad. Al tenerlo a usted de padre, no podría haber sido de otra manera.

NARAKU.

Ahí tiene a los familiares del niño, a quienes puede entregárselos. Me gustaría que pasara a mi oficina, señorita Higurashi.

KAGOME.

¿Ahorita?

NARAKU.

A menos que tenga otra cosa más importante que hablar con su Rector.

KAGOME.

No, de ninguna manera, pero me sorprendió.

Separa al niño de sí y lo extiende a Inu no Taisho.

SHIPO. Se despierta y llora.

¡No me sueltes! ¡No me sueltes!

SESSHOUMARU.

Como fuiste amable con él se ha encaprichado contigo. Aunque llore déjalo, de lo contrario no te soltará en horas.

KAGOME. Hace el intento de volver a entregarlo, pero el niño llora.

No puedo ser tan cruel con un niño tan pequeño.

NARAKU.

La estaré esperando en mi oficina, señorita Kagome.

Sale de escena.

SESSHOUMARU.

¿Qué piensas hacer? Ya se encapricho contigo y hagas lo que hagas no te soltará. No creo que sea bueno que hagas esperar al Rector.

KAGOME.

¿Dr. cómo puede ser así con su hermanito? No creo que sea conveniente hacerlo rabiar. Si me lo permite, trataré de hablar con él, para que se quede tranquilo cuando me vaya.

SESSHOUMARU.

Haz lo que quieras.

KAGOME.

Shipo, ya me tengo que ir.

SHIPO.

No quiero que me dejes.

KAGOME.

Pero es que tengo cosas qué hacer. Mira, si me prometes que no vas a llorar, yo también te prometo algo, lo que tú quieras.

SHIPO.

¿De verdad?

KAGOME.

Sí, de verdad, te lo prometo.

SHIPO.

Entonces llévame a mi casa.

SESSHOUMARU.

Te dije que se encaprichó contigo y que no te soltaría. Ya le prometiste algo, pero si le cumples dejarás al Rector esperándote y no creo que sea una buena carta de presentación en ningún lado. Por otra parte, si no le cumples, a mis ojos serás una mentirosa. ¿Y ahora qué piensas hacer?

KAGOME.

No pienso romper mi promesa. Estoy segura que el Rector entenderá.

SESSHOUMARU.

¿Estás diciendo que lo piensas llevar a casa aun cuando eso signifique quedar mal con tu Rector?

KAGOME.

No creo que vaya a quedar mal por no ir de inmediato a su oficina. Además no tengo idea de qué es lo que quiera. Los asuntos oficiales ya se han tratado en esta ceremonia.

SESSHOUMARU.

Allá tú.

INU NO TAISHO.

Tengo algunos asuntos pendientes que atender en la Facultad Sesshoumaru, llévalo tú a casa.

SESSHOUMARU.

Está bien. ¿Nos vamos entonces?

KAGOME.

Sí, vámonos.

Kagome se lleva cargando a Shipo y sigue a Sesshoumaru.

Telón