Yujuu... Buenoo primero que todoo los personajes no me pertenecen:( lamentablemente.. heheh!:p
pero stoii segura de q algun diaa los tendre!! muaahaha (se vale soñar).

Bueno.. no soi muy buena dando introducciones asi q pasen y lean:D...

CAPITULO I.

- Mamá, ¿tiene que ser hoy? – preguntó una linda chica de cabellos castaños ondulados y brillantes ojos verdes.

-Si Sakura, tu primo llega hoy de Hong Kong y sí, tienes que estar acá para recibirlo – La hermosa mujer de cabellos negros y ojos celestes ignoraba las pataletas que estaba formando su hija.

-. Nadeshiko, hoy tengo que salir con Tomoyo por favor – seguía insistiendo Sakura

-No, tienes que recibir a Shaoran y es todo, ahora anda a la escuela amor – Sakura roló los ojos, tomó su mochila besó a su madre de mala gana y salió de la casa.

Sakura caminaba con su peor cara. Le parecía demasiado mala idea la de su madre, ¿Por qué tenía ella que conocer a su primito precisamente a las 7:30pm? ¿Por qué cuando ella tenía que salir con Haku (su novio)? ¿Por qué? ¿Por qué?

Esas cosas siempre tenían que sucederle a ella, justo cuando Haku, su amor de toda la vida, la invitaba a su primera salida de novios venía un imbécil y lo estropeaba todo.

"Te odio Shaoran Li" repetía una y otra vez dentro de su mente. ¿Qué le diría a Haku?, no le parecería nada divertido que dijera algo como Mi primo desconocido viene de Hong Kong a las 7:30 p.m. y lo tengo que ir a conocer, lo siento amor. Para la próxima salimos si hay suerte.

La mataría, estaba segura. Nada de lo que dijera sería capaz de calmar la rabia que sentiría Haku cuando ella le dijera que no podría ir.

"Eres un idiota primito, idiota. Espero que se te retrase el vuelo. Que se cancele el vuelo" pensaba Sakura a la vez que pensaba en que le diría a Haku.

-Hola Sak, ¿Cómo estás? – Sakura se encontró con Tomoyo, su mejor amiga de la infancia. Pordría decirse que lla era todo lo que Sakura no. Era hermosa, su cabello negro-azulado llegaba hasta su cintura, ojos azules preciosos, un cuerpo que según Sakura jamás tendría. Además aparte de sus grandiosas características físicas, Tomoyo era inteligente, amable, divertida, alegre – Pareces de mal humor.

-Sí, lo estoy – dijo sin ocultarlo.

-¿Qué es lo que pasa? – preguntó Tomoyo con una de sus típicas sonrisas, que hacían que Sakura se calmara.

-¿Qué pasa? – sé preguntó a su misma la ojiverde – ¡resulta que hoy llega de China un primo que ni conozco! – Sakura se respondía a sí misma – supe de su miserable existencia hace días y aún así tengo que cancelar mis planes con Haku porque tengo que recibirlo. ¿Te parece justo?

-Realmente no… - respondió Tomoyo con sinceridad – pero el no tiene la culpa, ¿no crees?

-Sí, si la tiene. Haku no perdonara que cancele nuestra primera salida de novios – Sakura estaba triste y a punto de llorar, Tomoyo lo sabía. Estaba tratando de retener las lágrimas – tu sabes cuanto costó que el me hiciera caso – su voz se volvía imperceptible

-Sak, linda. Si el te quiere no te dejará por eso, lo entenderá y sino, no vale la pena – Tomoyo abrazó a su amiga – Venga no te entristezcas por eso.

Las dos amigas se dirigieron hasta el aula, cuando llegaron notaron que el profesor aún no había llegado así que ambas buscaron sus asientos.

Podríamos decir que Tomoyo no soportaba a Haku, siempre había pensado que era un arrogante y un ególatra pero bueno, también sabía que su amiga de verdad lo quería y no le gustaba ni un poquito la idea de que ella se entristeciera solo porque a ella le caía mal.

Para Tomoyo Haku era el típico niño lindo pero mimado, de cabello rubio y de ojos de un profundo negro. Su cuerpo atlético lo hacía parecer atractivo pero su escasa inteligencia y su vacío cerebro lo hacía ver como lo que realmente era, un tonto. Un físico muy lindo para alguien muy estúpido, según Tomoyo.

A ella quien le parecía lindo era Eriol, de cabello negro-azulado, ojos turquesas, atlético, fuerte, amable, interesante, inteligente. Solamente Sakura conocía su secreto, su amor por Eriol.

El chico conocía a Sakura y a Tomoyo desde hacía unos meses y se llevaban bastante bien. De cualquier manera, se llevaba mejor con Sakura, según él era porque ella era como la hermanita pequeña que no tenía, era dulce, ingenua, inocente. Cada vez que decía eso a Tomoyo se le borraba la sonrisa, a el no le interesaba ella ni un poquito.

A los pocos minutos llegó el profesor de psicología, un hombre de cabello café y ojos del mismo color. Era muy amable.

La clase fue bastante tranquila, como todos los días sin que pasara nada especial. Luego llegó la hora de matemáticas y finalmente el receso, al fin podría hablar con Haku.

En matemáticas Sakura se pasó la clase mirando por la ventana, lanzándole maldiciones a su primo y rogando porque a Haku no le importara, y es que quizás para otra pareja no fuese mucho problema pero, para Sakura, que no se consideraba ni lo suficientemente buena o bonita para Haku o para alguien si que era un problema, suponía que esa era la única oportunidad que tenía para salir con el chico.

RIIIIIIIIIIIIIIIN, un sonido agudo llegó a los oídos de Sakura, a su cerebro de inmediato llegó la noticia de que ya era el receso. Fue una de las primeras en levantarse del pupitre y dirigirse hacia la puerta, antes de salir miró a su amiga dispuesta a esperarla pero esta le indicó con una señal con la mano que no se preocupara.

La castaña caminó lo más rápido que pudo hasta llegar a la cafetería. Lo primero que buscó fue a Haku, en algún lugar de allí.

-Hola linda – escuchó una voz a su espalda, el chico había llegado a ella – ¿ a donde quieres ir hoy? –preguntó

-Quería hablar contigo de eso –dijo Sakura mientras sus mejillas se sonrosaban

-¿Qué sucede? Espero que no vayas a cancelar la cita

-Mi primo viene de Hong Kong y tengo que recibirlo –dijo tratando de disculparse – ¿podemos salir mañana? – suspiró.

-Bueno – Haku respondió con voz fría – como quieras – le dio un beso en la mejilla y se alejó.

Sakura se encontraba tan triste, Haku estaba enojado con ella por culpa de un prima invisible, porque eso era Shaoran.

"Bien, por lo menos no ha terminado conmigo" pensó la castaña mientras se sentaba en una mesa vacía.

Al poco tiempo llegó Tomoyo seguida por Eiol, ambos chicos se sentaron junto a la castaña.

-Sak, ¿Qué te dijo Haku? – preguntó Eriol

-¿Cómo…

-Yo le conté, espero que no te importe – terminó de responder Tomoyo

-No, para nada – dijo Sakura sonriendo – está enfadado, pero por lo menos no me corto – rió de su propio chiste

-Lástima – dijo Eriol con una de sus típicas sonrisas

-Hey – Sakura lo golpeó en el hombro – no seas tan odioso

-El me cae mal – dijo el ojiazul

-Lo sé, pero le quiero – Eriol suspiró resignado

-Te apoyaremos pero sabes lo que pienso de él – Sakura sonrió a Tomoyo y le susurró un gracias.

Luego llegó una señora que pedía la orden, los tres pidieron tan solo unas coca-colas y hablaron de temas triviales.

Cuando terminó el receso, los tres chicos caminaron de nuevo hasta el aula. Sakura intentó despedirse de Haku pero este había desaparecido.

La castaña le daba la razón sobre su enfado, a pesar de que ni Tomoyo ni Eriol estaban de acuerdo.

El día podía denominarse como "aburrido". Las últimas clases fueron física, química y literatura. Tomoyo y Eriol escucharon atentamente la clase mientras Sakura formaba parte del grupo de alumnos que se quedaron dormidos en esta.

"¿Por qué hoy?, ¿Por qué a las 7:30? ¿Por qué?" y sí, la castaña aún no podía superar el hecho de que su primo tuviese que llegar a las 7:30 p.m. precisamente, hora en la que se suponía que iba a salir con Haku.

Con cuidado de que no la vieran sacó el celular.

De:Sakura

Para: Haku(L)

Hola Haku.. estas bravo?

Saku3.

Bien, lo sabía. Estaba segura de que su lindo novio estaba bien enfadado, llevaba toda la semana diciéndole que tenía ganas de salir con ella y cuando llega ese esperado día. Puff, todo se daña a causa de un primo extraño y desconocido del cual apenas y se sabía el nombre.

El celular emitió y leve biiip, que aunque fue bastante bajo fue suficiente para el oído de Tomoyo, quien de inmediato volteó a ver a Sakura.

De: Haku(L)

Para: Sakura

Estaba algo enojado pro no importa, ya qde para salr

Cn Hannah, da igual

A Sakura le dieron ganas de estrellar el celular contra el piso, de enterrar su cabeza en el suelo. Gracias a su primito, Haku estaba saliendo con Hannah, la que era una chica preciosa, de ojos celestes, piel de porcelana, cuerpo de modelo. Era hermosa, según Sakura y montones de chicos de la escuela.

"Va a terminar conmigo, lo sé" pensó la castaña.

De: Sakura

Para: Haku(L)

Cn hannah? Y dics q ya no imxta?

Qiers trminar cnmigo..:S?

Bien, quizás no fue lo mejor hacer esa pregunta, llevaban tan solo una mísera semana de novios y sería fatal que gracias a su… "directa" preguntita el rompiera con ella.

Sakura miraba el celular esperando la respuesta del chico, que por cierto no llegaba.

Pasaron 30 segundos y ella comenzaba a desesperarse.

"Porque no me responde…" sí, era nerviosa y estaba desesperada por escuchar la respuesta.

Y BEEP, al fin llegaba. Su lindo celular le indicaba con ese muy leve sonidito que le llegaba un mensaje de Haku pero, Sakura dudaba si realmente quería leerlo. Al fin se dignó a hacerlo.

De: Haku(L)

Para: Sakura

No loc Sak.. mira hagams algo

Para compensar lo que hiciste vale?

Necesito q vngas a mi apartamnto mñn sin falta!

No tdo el mndo sale conmigo Sak, aprovechalo ok?

Yo salgo hoy con Hannah y tu cn tu primo todo bn

Odio los celos. Tngo q studiar xau!

"No lo sé", esa frasecita daba vueltas en la cabeza de Sakura, se sentía mareada, ¿no lo sé? Porque no mejor decir algo como "No amor para nada" pero ¿un no lo sé?

No sabía si estaba medio paranoica pero ese no lo se significaba "no estoy seguro si quiero seguir contigo". Bien, mala suerte. Prefería no haber hecho esa pregunta.

La castaña miró a Tomoyo, esta que tenía rato observándola alzó una ceja como tratando de preguntarle que sucedía.

Sakura se limitó a pasarle el celular con cuidado de que no la vieran.

La peliazul no tardó mucho en leer los mensajes y negó con la cabeza, estaba en total desacuerdo con lo que acababa de decir Haku. Sakura le dedicó una sonrisa torcida, sabía que a Tomoyo no le caía nada bien su novio.

La castaña pensaba que era su culpa, bueno, no tanto su culpa. Ese extraño y desconocido primo que llegaría a las 7:30 hora en la que se suponía que debía salir con Haku era quien tenía la verdadera y completa culpa.

Sakura desde el mismo momento en que se enteró de que el llegaría a esa hora incorrecta le había agarrado el odio. Si, aunque sonara patético y sin motivos aparentes Sakura Kinomoto odiaba a Shaoran Li.

-Bueno chicos, es todo. No hay tareas, espero que lean la novela. No me defrauden – dijo la profesora de Literatura, desde hacía una semana que les había mandado a leer "Crepúsculo" de Estephanie Meyer. Bastante buena según Sakura que lo llevaba por la mitad.

Su última clase acababa de terminar, al fin. Tenía que hablar con Haku antes de que se fuera. Se acercó a Tomoyo y a los pocos segundos Eriol se les unió.

-Sakura, es un idiota – dijo Tomoyo antes de que su amiga dijera algo – Va a salir con Hannah y aparte no está seguro de si seguir contigo. Disculpa si te duele amiga pero ese hombre no vale la pena

-Si vale Tom – dijo Sakura con una sonrisa triste adornando su cara – es mi culpa, nuestra primera salida y se cancela por culpa de un extraño

-pero eso no le da motivos para salir con otras chicas – dijo Tomoyo. Sakura estaba dispuesta a replicar pero fue Eriol quien habló primero.

-Chicas no se peleen ¿Qué pasó ahora? – dijo Eriol pasando la mirada de Sakura a Tomoyo – no te estreses linda – dijo mientras le daba un beso a Sakura en la mejilla.

-Dile a Tomoyo que te cuente, me tengo que ir – dijo Sakura devolviéndole el beso y dedicándole una sonrisa vacía, a Tomoyo también la despidió con un beso en la mejilla y le picó el ojo.

Sakura salió lo antes posible del aula, necesitaba hablar con Haku, tenía que hablar con Haku. El no se imaginaba lo mucho que a ella le dolía que el saliera con Hannah.

Sakura lo pudo ver caminando hasta un auto negro BMW, lo buscaba su chofer, tenía que apurarse.

-Haku – dijo Sakura cuando llegó hasta el, quien la miraba con cierta indiferencia.

-¿Qué? Estoy algo apurado –Tenía que decirle lo que pensaba, que no estaba de acuerdo con que saliera con Hannah, que le dijera de una vez si quería o no seguir con ella, que tenían que aclarar las cosas.

-y-yo… mañana voy a tu casa – ok, no dijo nada de lo que tenía pensado. Haku sonrió.

-Ok, como es sábados mis padres no estarán, yo te llamo – dijo él, que se despidió con un bastante fugaz beso en los labios y se fue. Ninguna mirada cariñosa, ninguna palabra linda. Nada.

Sakura respiró profundo, contuvo el aire en sus pulmones y luego de un rato lo soltó de golpe, de dedicó a caminar hasta su casa evitando pensar en su novio.

Cuando llegó a la casa, saludó a su madre con un beso en la mejilla, no estaba de ánimo para comer. Se fue directo a su habitación, tenía tantas ganas de descargarse.

Su habitación era un cuadrado color lila, la cama matrimonial con un acolchado morado de lunares negros, tenía su closet de madera en una esquina. Una peinadora de madera con un montón de cofres de plata encima, peines y cepillos a un lado, sobre este un espejo inmenso. Detrás de la puerta estaban colgadas una variedad de bufandas de colores. En la pared había una cartelera llena fotos y cartas que le habían regalado de San Valentín, envolturas de chocolates de edición limitada que hacía tiempo que habían dejado de salir. Había solo dos fotos que estaban colocadas en medio, llenas de corazones rojos de cartulina alrededor. La primera y más grande era la de un hombre de cabello castaño y ojos verdes iguales a los de ella, piel morena, con gafas, que se encontraba abrazando a una pequeña niña de alrededor 6 años, nariz redonda parecida a un botón, ojos verdes, grandes y curiosos, cabello castaño recogido en dos colitas y que con una mano abrazaba a el hombre y con la otra saludaba a la cámara. Bajo la foto había un pedacito alargadito de cartulina color lila que decía en letras negras y corridas Papá y yo.

Luego, estaba otra foto, más pequeña y llena de estrellas doradas de foami echas por ella misma. La foto mostraba a tres niños de más o menos 13 años. La primera era Sakura, con sus mejillas llenas de chocolate, luego estaba Eriol con dos ponquecitos en las manos y de tercero estaba Tomoyo con una barra de chocolate más grande que su mano derecha.

Sakura sonrió, pasó su mirada por el resto de las fotos, de su madre y ella, de sus amigos, de su padre. Fotos en el cine, la plaza pingüino, la piscina, la playa, museo, escuela, parque, mall, McDonald, Burguer King, dulcerías, fotos en todas partes.

En la parte superior derecha de la cartelera había un globo pegado, tenía dibujado unos lentes grandes y redondos, una sonrisa feliz, una cicatriz en forma de rayo y un montón de rayas negras que intentaban parecer cabello. Eriol, Tomoyo y ella habían intentado hacer a Harry Potter versión globo. Sakura estaba obsesionada con él así que ella se lo había quedado, Tomoyo tenía a Hermione. Un globo color blanco, con montones de garabatos marrones que intentaban parecer el cabello desmarañado de esta y luego unos ojos pequeños, una mueca mandona y listo. Eriol se había quedado con el globo naranja, que intentaba parecer Ron Weasley, con los ojos grandes como mostrando sorpresa, la boca tratando de parecer asustada y una pequeña arañita dibujada a un lado.

Sakura rió, era tan tonto pero divertido, le hacía sentir bien hacer todas esas locuras y estupideces con sus amigos, estaba segura de que siempre iba a contar con ellos.

"Haku", lo volvió a recordar. El era tan… diferente a lo que ella había pensado, se sentía un poco desilusionada pero aún así ella lo quería. Desde que tenía 11 años le venía gustando, lo tenía que querer.

Sakura tenía esas molestas ganas de descargarse con algo. Sobre su escritorio estaba su laptop. La prendió, abrió el Word y no dudó en comenzar a escribir.

"Sabado, 3 de abril.

No sé porque, pero estoy confundida. Tanto tiempo había pasado esperando a que Haku se dignara a mirarme y cuando lo hace no me siento como pensé que me sentiría.

Es que su personalidad es tan… diferente. No es para nada como había pensado que sería.

No existen las palabras lindas, los retos por los que esperé que tendríamos que pasar para luego terminar juntos, etc.

Quizá suene un poco tonto. Claro.

Pero es la verdad, ¿para que ocultarla? Si lo sé, tengo 17 años no soy una niña para estar pensando en historia de chiquillas pero es así, y aunque tratase de esconderlo no serviría de nada.

Soy la adolescente de 17 años más inmadura del mundo. Se por un lado que no existen los cuentos de hadas, sé que no voy a encontrar el amor, sé que no existe el "vivieron felices para siempre" ni nada de esas cosas pero, aún así por otra parte tengo una pequeña esperanza de que algún día encontraré a mi amor verdadero, si es que existe.

Tampoco estoy muy segura de encontrarlo, no soy la chica más bonita. Tengo cabello castaño hasta los hombros ondulado pero incapaz de controlarse, mis ojos verdes son… bueno no hay quejas sobre ellos. Mi cuerpo, por Dios mi cuerpo es tan… no lo sé, soy delgada y podría considerarse que alta. Cualquiera creería con esa descripción que tengo el gran cuerpo pero no, soy delgada sin cuerpo, delgada aguada, delgada sin nada lindo que mostrar.

Tomoyo se la pasa diciendo que soy bella, que mi cuerpo es fabuloso, mi cabello es suave y bla, bla, bla pero claro, lo dice ella, que es todo lo contrario a mí. Su cabello es espectacular, sus ojos, sus curvas. Todo, su personalidad. Ella es increíble.

Bien, finalmente espero poder encontrar a mi pareja ideal, sé que no es Haku, lo sé. Pero ¿y si mi pareja ideal no existe? Tengo que conformarme con Haku, sin importar lo que digan Eriol o Tomoyo.

Sakura finalizó con un suspiro, guardó el documento en una carpeta de "No tocar". Apagó la PC y caminó hasta su cama, sin pensarlo dos veces decidió dormir. Descansar, soñar y olvidar todo los problemas con Haku y con su extraño primo.

X.X.X.X.X

-Sakura despiértate – una voz la llamaba ¿Quién era? –Sakura levántate… ya tu primo llegó –la castaña hundió su cabeza aún más en la almohada y acurrucó su cuerpo a las sabanas.

Nadeshiko respiró profundo, era imposible despertar a su hija. Con una sonrisa maquiavélica en su rostro buscó el control del aire que estaba sobre el escritorio y sin dudar lo apagó, solo era cuestión de tiempo para que Sakura se despertara.

-Mamá ¿Qué hiciste? – Sakura se despertó de golpe. Bien, el plan "despertemos a Sak" había servido.

-Amor necesito que te arregles tu primo estará acá en un rato – Sakura etuvo a punto de replicar pero su madre salió del cuarto antes de que ella pudiese hablar.

-Imbécil, ¡también me despiertan por tu culpa! –la castaña cerró sus ojos y trató de controlar su estrés.

Primero caminó hasta el escritorio y prendió de nuevo el aire. Después fue hasta el baño, no tardó mucho en desvestirse y comenzar a ducharse.

-Sakura apúrate tu primo llega en cualquier momento – escuchó el grito de su madre y una sonrisita malvada se asomó en su rostro.

"Lo siento… no estaré lista para cuando llegues!" sí, su plan era tardarse mucho, mucho, mucho en el baño para no tener que verle la cara a su primito. Bueno, no era la mejor idea del mundo pero bastaría para sentirse bien con ella misma.

"Ya me lo imagino, debe ser el típico primito necio que todavía juega con carritos, ¡por Dios no quiero a un bobo como el detrás de mí! Además debe ser menor que yo, debe ser un primito chiquito de esos que te hacen perder el tiempo y que quieren que cumplas los mil caprichos del mundo.

Nadeshiko no me dijo la edad, no quiere que me espante por el hecho de que me convertiré en una niñera en poco tiempo… a parte debe ser un hablador de primera, estoy segura de que cualquier cosa que haga o diga que vayan contra Nadeshiko el las dirá, porque estoy segura de que es esa clase de primos que no tardas mucho en odiar"

Luego de una media hora dentro del baño, Sakura que ya tenía todos los dedos de las manos y de los pies bastante arrugados se decidió a salir. Buscó la toalla colgada en la pared, color blanco que a un lado decía Sakura en letras corridas negras y se envolvió con ella.

Su cabello que goteaba lo dejó suelto de modo que mojaba todo, cuando estuvo dispuesta a salir…

x.x.x.x

YUJUU..:D BUENOO ESPERO Q LES GUSTEE MI FICC..
PORFAA DEJEN REVIEWS, DIGANME SU OPINIOON BUENA, MALA..SI LES GUSTO SI LE FALTO ALGO.. HAGANMELO SABER!:p
SI KIEREN Q PASE ALGO.. HEHE!:D
VOY A TRATAR DE ACTUALIZAR LO MAS PRONTO POSIBLE...

CARLITA.:P