SHIELD
Episodio 1: Primer Golpe, parte 1

Nicholas Fury estaba cansado. Acababa de pasar cuarenta y ocho horas en un laberinto mortal, lleno de trampas, espías enemigos, soldados, perros y animales que sólo querían su muerte. La ira comenzó a crecer en su corazón cuando el hombre frente a él le dijo que tan sólo había sido una prueba.
-Podría haber muerto.- dijo Fury, cruzando sus brazos.
-Pero no lo hiciste.- respondió con una sonrisa el hombre anciano frente a él. Extendió su mano. -Esa prueba era lo último que el consejo necesitaba para estar seguro. Toma mi mano y serás el Director de la agencia de seguridad más grande del planeta. Toma mi mano y el mundo dependerá de tí, Nicholas.-
Fury dudó por unos instantes, pero lentamente extendió su mano y sacudió la mano del anciano.
-Bienvenido a SHIELD...- sonrió una vez más el hombre mayor.
-Espero que haya un cheque lo suficientemente grande como para olvidarme de esta maldita prueba...- dijo Fury
-Ja, por supuesto mi buen amigo por supuesto... pero ahora ven, te enseñaré lo que será tu hogar por el resto de tu vida...- dijo el hombre poniendo una mano sobre los hombros de Fury y guiándolo hacia una puerta.
El trecho fue corto, un pasillo nomás los distanciaba del hangar. Los ojos de Fury se abrieron de par en par al ver el gigantesco Helicarrier, una mezcla de portaaviones y helicóptero, cuyo tamaño desafiaba a los estadios de fútbol más grandes. Cientos de pequeños aviones y naves entraban y salían del Helicarrier, y Fury pudo ver miles de soldados vestidos de azul.
-Cada soldado fue elegido personalmente por el consejo. Los mejores de los mejores, de más de 80 países alrededor del mundo.-
-Y seguramente para luchar contra esos países que no se quisieron unir al esfuerzo... no, Roger?- preguntó Fury
-Algo así...- sonrió el anciano.
Una rubia mujer se acercó, abrazando una carpeta entre sus brazos.
-Ah... Karla... Nicholas, quiero presentarte a Karla Sofen, la jefa de nuestra división de psiquiatría.- dijo el anciano.
-Un placer Coronel, el señor Aubrey mencionó más de una vez que deseaba que usted tomara el puesto de Director.- dijo la joven estirando su mano.
-No eres demasiado joven para ser la jefa de psiquiatría?- preguntó Fury, no intentando disimular su interés por el esbelto cuerpo de la joven, examinándola de arriba a abajo.
-Es parte de la política de SHIELD... los únicos dinosaurios estamos en el consejo...- sonrió Roger Aubrey.
-Si todos los dinosaurios fueran como usted no se hubiesen extinguido... - dijo Karla con sutilidad.
Aubrey rió -Tienes razón tienes razón... vamos Nick... el Helicarrier está a punto de despegar, para nunca más volver a tocar tierra... y no me quiero perder ese despegue...-

Tres años después...
Las miradas no cesaban de seguirla. Todos los hombres de la empresa la miraban con cada paso que daba. La voluptuosa mujer de rubios cabellos caminaba sin prestarles atención. Su pequeña minifalda rebotaba una y otra vez contra su trasero, mientras los ojos de los trabajadores, ya sean conserjes, seguridad, ejecutivos y demás, la devoraban. Debía hacer un gran esfuerzo por no sonreír. Eventualmente llego a su destino, al final del hall, al mostrador de información. Sus ojos se posaron de inmediato en la joven que atendía, cuyas miradas, si pudieran cortar, ya la hubiesen asesinado al cruzar la puerta principal. La rubia tomó en cuenta todos los detalles sobre la recepcionista. Desde sus largos cabellos castaños, recogidos en un apretado rodete detrás de su cabeza, hasta las fotos de varias estrellas masculinas de cine y musculosos modelos masculinos.
-Necesita algo?- pregunto la recepcionista, con una cara de odio y repugnancia ante la bella joven rubia frente a ella.
-Si... buenas tardes...- sonrió la joven rubia. -Necesitaría hablar con el señor Hammer, es de suma importancia.- dijo la rubia, apoyándose en el mostrador levemente, arqueando su espalda.
-Lamento informarle que el señor Hammer esta demasiado ocupado... me podría decir de parte de quien?- dijo la recepcionista, rechinando los dientes.
-Oh... realmente necesito hablar con él... acá esta mi credencial... vengo de parte del señor Fisk... - dijo la rubia, sacando una tarjeta del bolsillo superior de su apretada camisa blanca.
La recepcionista miró la tarjeta por unos instantes y luego la devolvió -Lo lamento, el señor Hammer no puede atenderla en este momento, como le dije est-- pero una voz masculina la detuvo
-Verónica...- dijo un joven vestido de traje acercándose -Tuve la suerte de escuchar la conversación mientras esperaba el ascensor...- tomo la mano de la joven rubia y la beso -Déjeme presentarme, Richard Hammer, si bien no soy el Hammer que estaba buscando tal vez pueda serle útil...- dijo con una sonrisa picara
La joven sonrió y acerco su cuerpo lentamente hacia el de Hammer -Es probable... pero me aburre hablar de negocios en un lugar tan ... - volteo levemente su mirada a la recepcionista y agrego -...publico... no tendría algún lugar mas privado donde podamos discutir las razones por las cuales me envía el señor Fisk?-
-Por supuesto por supuesto...- dijo el joven, colocando un brazo alrededor de la cintura de la joven -... y debo decir que Wilson ha tenido una gran idea en reemplazar a ese bobalicón de Dillon... y dígame querida... como debo dirigirme a usted?- pregunto mientras guiaba a la joven al ascensor.
-Oh... solo llámame Raven... y no hables de usted... me hace sentir vieja...- dijo con una sonrisa, dirigiendo su mirada a la recepcionista una vez mas, quien lanzo una mirada asesina aun superior a las anteriores. Y Raven Darkholme sonrió mientras las puertas del ascensor se cerraron detrás de ella y de Richard Hammer.

-Despacio... despacio...- susurro el joven conocido como Clint Barton en el oído de Patricia "Patsy" Walker. Sus cuerpos estaban mas que cerca, las manos de Clint guiaban las de Patricia con firmeza, pero dándoles libertad para moverse. -Sientes ahí... sientes que duro esta? Sientes la tensión del cable?- pregunto Clint, sus brazos extendidos, sujetando entre ambos el gran arco llamado Longbow.
-jejejej no me hagas reír que sino no puedo...- dijo Patsy, intentando mantener el objetivo en mira, sosteniendo la flecha y el arco, tratando de no pensar en el cuerpo de Clint pegado al suyo.
-Si quieres te dejo sola...- sonrió Clint, sabiendo la respuesta
-No... ya viste lo que paso la ultima que quise disparar un arco sola... pobre Sitwell todavía no ha vuelto a sentarse...- dijo Patsy
-Bueno entonces déjame enseñarte como yo se...- siguió Clint. -Tus ojos nunca deben estar en la flecha, o en el arco, sino en tu objetivo, no muevas nunca la cabeza ni los ojos una vez que tienes el objetivo en vista.- dijo un poco mas fuerte que su previo susurro.
-Entiendo...- dijo Patsy.
Con mucho cuidado, Clint fue removiendo sus manos, dejando sola a Patsy, que soltó la flecha ni bien sintió las manos de Clint alejarse de las de ella.
El resultado no fue impresionante, pero al menos golpeo en uno de los aros exteriores del objetivo. Patsy salto de alegría -Bien! Pude hacerlo!-
-Bueno, masomenos...- dijo Clint, removiendo sus rubios cabellos de su cara. No podía evitarlo, el joven era muy apuesto.
Patsy volteo y beso a Clint en la mejilla -Gracias... creo que ahora podré sola-
-Bueno a ver... trata de nuevo sin mi...- dijo Clint, mirando la pequeña figura de la pelirroja frente a el, mientras esta recargaba el arco. La flecha voló, y se incrusto en la pared. A mas de 20 metros del objetivo. -Volvamos a cero entonces... -dijo acercándose con una sonrisa.

-Los quiero en la cárcel y los quiero allí ayer, me oyen... ayer!- grito Nicholas Fury, su voz resonando con furia en su oficina.
Los allí reunidos no abrieron la boca. Jacques Duquesne, líder de los superagentes de SHIELD se limito a sonreír, sus pies elevados sobre el escritorio de Fury, quien miraba por una de las grandes ventanas.
El Profesor Carmody, mejor dicho, Walkabout, el gigantesco robot que transportaba al profesor hablo tras unos segundos de silencio. -Nick, debes entender, no es fácil. Hay mas de la mitad de nuestros agentes secretos trabajando en el caso, pero no han logrado encontrar su base aun. Si pudieron juntarse y crear un ejercito en secreto no será fácil encontrarlos... - dijo con tono calmo. La respuesta no fue inesperada.
-Crees que no lo sé?- escupió Fury -Esos malditos nazis... en nuestras narices crearon el maldito ejercito que llaman Hydra... y no podemos hacer un carajo para detenerlos!- vocifero con enojo.
La única mujer presente se limpió la garganta, llamando la atención de todos. La cara de Karla Sofen era apenas visible entre los largos cabellos rubios que fluían desde su cabeza. -Coronel Fury, no es justo que descargue toda esa frustración en Carmody y Jacques- se corrió los anteojos un poco mas arriba de su perfecta nariz y agrego - ya hemos hablado de como manejar las presiones, o quiere que vuelva el stress?-
-Karla, como psiquiatra no tienes par... - dijo Fury -... pero no te pedí tu maldita opinión. Estas aquí por una simple razón, para dar tu evaluación en el grupo de Jack.-
-Jacques, no Jack... ustedes los americanos siempre arruinan el francés... - suspiró el hombre de delgados bigotes negros.
Karla frunció el ceño de forma muy evidente y comenzó a hablar. - Es un grupo bastante estable por lo que he visto. Barton es bastante arrogante, y se cree el regalo de Dios para las mujeres, pero su habilidad como arquero es impresionante, es mas, creo que podría superar a Oxbow, el héroe de la Primera Línea... - dijo mirando entre sus papeles. -Walker... es algo diferente, es una gran gimnasta, y es muy ágil, y ese traje que tiene parece aumentar su nivel. Sin embargo la pobre es muy dependiente de los demás, muy insegura de sí misma, necesita a alguien firme y fuerte que la guíe, en especial un hombre. La clásica mujer sometida, no recomiendo que la envíen a una misión sola, al menos no por el momento. Drew... la agente Drew es un misterio a decir verdad. En todas las sesiones que hemos tenido no he logrado siquiera acercarme a la verdad sobre ella. Es como si jugara un juego conmigo, como una araña con su presa.- agrego
-Eso es mucho viniendo de ti Karla, creía que no había nadie que pudiera "enredarte"- dijo Walkabout, esta vez la voz sonó diferente, era obvio que el que hablaba era el Profesor Carmody y no el robot.
-Si lo sé William, pero estoy cerca de descifrarla, no se preocupen. - agrego Karla sonando segura y sonriendo. -Y Mística... Darkholme... o es una excelente mentirosa... o es la agente más leal y estable psicológicamente que tenemos.-
-Eso esta todo bien, pero sabes lo que quiero saber Sofen... hasta ahora han actuado de a dos o por separado, pero como grupo... pueden hacerlo? Pueden luchar como lo haría la Primera Línea?- pregunto Fury, volteando al fin de la ventana
Karla se mantuvo en silencio por unos segundos, mirando a Fury, y al final hablo -Creo que la respuesta a esa pregunta es obvia, Nicholas. La única forma de averiguarlo es enviándolos a una misión juntos, no?-

-Señor Hammer... hhmmm...- dijo la blonda muchacha, hundiendo sus labios en los del joven Richard Hammer, seguros en su oficina.
Richard Hammer no podía creer su suerte, la esbelta joven estaba entregada. Beso con pasión esos labios perfectos, sus manos en todo el cuerpo de la joven al mismo tiempo, y entonces sintió un pequeño pinchazo en el cuello, y la inconsciencia se apodero de él.
Raven Darkholme removió el cuerpo del joven, que había caído sobre ella, mientras las facciones de la bella rubia cambiaban, y su piel azul, ojos amarillos y cabellos rojizos resurgían. -Estúpido... todos los hombres son iguales... - dijo. Colocando al joven en el suelo con cuidado. Se puso de pie, su forma cambiando una vez más. En menos de un segundo era una copia perfecta de Richard Hammer. Se agacho una vez mas, buscando la llave de la oficina en el bolsillo del hombre. -Ahora duerme aquí mientras Mama Raven va a ver Hammer Sr... - dijo y pego una patada al inconsciente Hammer. -Eso es por tan poco caballero... - salió de la oficina con celeridad, cerrando la puerta con llave, y se dirigió hacia la oficina de Hammer.
El trecho no fue largo, y pronto se encontró ante la oficina del CEO de Roxxon, la empresa de armas más grande de la Tierra. Sin embargo, al llegar, las puertas se abrieron y Raven vio salir al viejo Hammer junto a un joven muchacho, no podía tener mas de 20 años, de rubios cabellos e inconfundible facciones.
-Mierda... - pensó Raven acercándose.
-ah! Richard, hijo! Ven... ven... - dijo Hammer al ver a su hijo acercándose por el pasillo. -déjame presentarte a Helm-- pero se detuvo cuando el joven a su lado levantó la mano y hablo por sí mismo
-Zemo, Helmut Zemo, Herr Hammer... - dijo, mirando a los ojos del hijo de su acompañante.
Raven intento su mejor sonrisa y tomo la mano de Zemo -Gutten Tag Herr Zemo... - dijo, sus ojos cruzados
Por un momento mantuvieron sus ojos inmóviles, y sus manos apretadas, y entonces sucedió. Zemo lanzo un puño hacia Richard Hammer, quien lo esquivo con facilidad y respondió con un golpe similar. Zemo bloqueo el ataque con la mano que aun sostenía la otra mano de Hammer, y pateo al joven en el estomago, enviándolo unos metros al suelo. Las facciones de Hammer se esfumaron y Raven Darkholme adquirió su forma azul una vez más.
-Si que has mejorado Herr Zemo... la ultima vez tardaste mas tiempo en darte cuenta... - dijo poniéndose de pie con facilidad. -... puedes decirme que me delato, para no equivocarme la próxima?-
-Por supuesto querida... - dijo Zemo, removiendo su saco -... decidiste meterte conmigo, ese fue tu error... - y se lanzo contra Raven, sonriendo.
-Papa Zemo debe estar orgulloso de que un pequeño como tu sea taaaaaan arrogante... - dijo Raven esquivando el ataque y propinando un codazo en la nuca del joven.
-Que demonios pasa aquí! Zemo... Richard! Dónde esta mi Richard!- grito Justin Hammer, mirando atónito a la pareja luchar -SEGURIDAD! Llamen a seguridad!- grito a sus secretarias, quienes miraban perplejas la pelea.
Ambos luchadores estaban muy bien entrenados. Las patadas de Raven rara vez conectaban, al igual que los puños de Zemo. El joven tenía un gran entrenamiento en las artes marciales. Tras varios segundos de pelea, se encontraron rodeados de guardias de seguridad apuntando con sus armas. Raven se quedo inmóvil, al igual que Zemo.
-Parece que no nos dejaran terminar esta vez... - dijo Raven con una sonrisa.
-Así parece madam... - agrego Zemo.
Hammer se movió entre los guardias, caminando hacia su cliente. -Estas bien? Si te llega a pasar algo tu padre... - dijo, pero Zemo movió una mano, silenciándolo.
-Que adorable escena, lastima que mi cubierta no duró y no pueda quedarme a ver como continua... - dijo Raven. Pego un increíble salto, posicionándose detrás de uno de los guardias de seguridad -Así que hasta luego...- agarro el brazo del joven guardia y disparo hacia los guardias del otro lado, quien instantaneamente respondieron el fuego. Zemo se arrojo al suelo, empujando a Hammer tambien, mientras los guardias se disparaban entre si.
Raven aprovecho la confusion y escapo, cambiando su forma en la de Richard Hammer una vez mas.
Tras unos minutos de incesante fuego, los guardias dejaron de disparar, y Zemo se puso de pie, subiendo a Hammer con su mano libre. Un par de guardias habian muerto. -Parece que vamos a necesitar esos operativos antes de lo pedido Herr Hammer... SHIELD ya sabe que estamos haciendo negocios...-

-Crees que estan listos?- pregunto Fury, mirando el gigantesco monitor en la pared, en el cual Clint Barton, Patsy Walker y Jacques Duquesne entrenaban luchando contra un grupo de robots.
-Seguramente...- dijo Carmody -... aunque aun no entiendo esa obsesion que tienes con tener un ejercito de superoperativos...
-El mundo esta a punto de irse al diablo Carmody... los Skrulls, Atlantis... no son nada, los heroes pueden encargarse de eso, pero Hydra? un ejercito terrorista como ese? No podran detenerlos, al menos no para siempre.- dijo Fury, encendiendo un cigarro.

-Y crees que nosotros si, con un equipo de cinco operativos con superpoderes?- dijo Carmody, el gigantesco robot Walkabout cruzo sus brazos, permaneciendo en silencio mientras su amo utilizaba su modulo de voz.
-Esperemos que si Carmody... esperemos que si...- agrego Fury con el ceño fruncido.
La voz de Walkabout sonó esta vez -Señor Fury, hay algo que no nos esta diciendo...-
Fury no hablo, tomo una carpeta y la arrojo al otro lado del escritorio. Walkabout abrió la carpeta con la etiqueta de CLASIFICADO y leyó. Por unos segundos el robot no pudo emitir sonido, y, cuando hablo, fue la voz de Carmody. -Pero... es esto posible? Esta... unión iónica?-
-No solo es posible Carmody... ya la están usando, es mas, ya lo han hecho... han logrado alterar el código genético humano con energía iónica... y por lo que vez allí sabes para que van a usar a esos superhombres...- dijo Fury.
Walkabout no respondió, solamente dejó la carpeta abierta sobre la mesa, el escudo de Hydra, una calavera con siete serpientes naciendo de ella, y la svástica nazi en su frente, estaba claro en la primer hoja...
Fury continuó hablando. - Por eso... en caso que los agentes fallen... necesitamos que termines con el proyecto X...- agregó encendiendo un cigarro y mirando por la ventana ala calma dela ciudad de New York.
-El proyecto X? No estamos listos, ni siquiera hemos conseguido borrar la memoria del sujeto, al menos no por completo...- dijo el Profesor Carmody, quien no paraba de recibir sorpresas de su jefe.
-Bueno habrá que apurarse, envié a la agente Carter a contactar a una telépata, a una tal Madame Web... con su ayuda podremos controlar a nuestra Arma X... - dijo Fury, casi con un tinte de resignación en su voz.

Continuara