ACLARACIÓN: COMO DIRÍA JOS BLACK, ESTE ES UN FIC "EXPERIMENTAL"

TODOS LOS PERSONAJES ESTÁN FUERA DE ORDEN, Y EN UNIVERSO ALTERNO. NO CREO QUE HAYA ROMANCE, PERO SÍ SEXO. (YA ADIVINO SUS SONRISAS, PERVERTIDAS!) DE MANERA QUE SI LES GUSTA EL CANON, O BUSCAN UN DRAMIONE, ACÁ NO LO ENCONTRARÁN. LO PENSÉ COMO UN ONE SHOT, PERO MI LOCA IMAGINACIÓN COMENZO A CORRER MÁS RÁPIDO DE LO QUE YO ESPERABA, Y LA HISTORIA EMPEZÓ A CRECER.

DEJENME SUS OPINIONES, Y HASTA PUEDEN DARME IDEAS, POR QUE ES LA PRIMERA VEZ QUE SUBO UN FIC SIN TENER MÁS DE LA MITAD DE LA HISTORIA ESCRITA, ASÍ QUE PARA MÍ, SERÁ TODO UN DESAFÍO!

CARTELERA DE ANUNCIOS (JA,JA,JA A A, ): DOS RECOMENDACIONES; "UN HUECO EN MI ALMA" DE JOS BLACK, Y "VERTE DESPUÉS DE LA LUNA LLENA" DE -PER-DI-BLES!

Y AHORA, CON USTEDES...

"LEYENDA"

Capitulo 1

ALGÚN LUGAR DE INGLATERRA- AÑO 1000.

En el borde del acantilado, se aprecia una silueta.

Aunque una vieja y gastada capa oculta su figura casi en su totalidad, se adivina una mujer. La capucha que vela su rostro, deja escapar hebras de su cabello, largo, sedoso, castaño.

Los pensamientos que ocupan su mente, son tan irascibles como el mar que se agita allí, en la amplia negrura de la noche.

Tiene que tomar una decisión, rápido. Sabe que ellos vienen, y que no tendrán piedad…

Y ella acabaría allí, por que no tendría el valor para destruirlos; no sería capaz de invocar sus poderes para protegerse, porque sembraría la muerte y la destrucción sobre toda esa gente que la acompaña desde que tiene memoria.

Dibuja un pentagrama en el piso y se sitúa en el centro. Invoca el poder de la luz, alza sus manos y su mirada al cielo y comienza a murmurar un antiguo conjuro.

Los escucha llegar. Una turba donde ella reconoce a muchos amigos, conocidos, gente que la ha visto crecer, avanza llena de odio; pero al verla se paralizan. Solo él, el del cabello rojo, trata de hacerlos retroceder, intenta una débil defensa de la joven. Pero nadie lo escucha, es sabido por todos, que él la ha amado en silencio desde que eran apenas unos niños… Lair no puede ocultar su temor, no quiere que ella resulte dañada, pero tampoco puede hacer mucho por ayudarla, y la gran contradicción en que incurre lo llena de rabia e impotencia.

Ella solo le sonríe desde su círculo de fuego, más bella que nunca; y todos se sienten culpables. ¿Cómo puede ser que la joven Candace sea una bruja? De seguro, hay un error…pero ellos, los Señores de Las Sombras lo aseguran; y nunca se equivocan. Nadie se atrevería a contradecirlos.

La joven alza su vista una vez más, y entonces, un rayo de luz cruza el cielo, haciendo que todos se sobresalten, y cuando vuelven la mirada al punto en que la joven se encuentra, notan que el sitio está vacío, y en el centro, reposa una rosa blanca...

.

LONDRES- ÉPOCA ACTUAL.

Otra vez ese sueño.

Últimamente se repite con más frecuencia. ¿Qué significará? La joven aterrada, la muchedumbre que se acerca amenazante, el amor que adivina en el joven pelirrojo, esa luz en el cielo; que le da serenidad, la rosa blanca… Sin variaciones, el sueño se repite, y casi siempre ella siente la angustia del joven, la paz que flota en el aire cuando aparece la rosa, y si bien, no comprende de que pueda tratarse; desearía por lo menos poder ver la cara de la joven, ya que siempre está oculta tras la capucha.

Mira el reloj, y se lanza en carrera contra el tiempo. Ducha, desayuno rápido, el transporte, y solo llega unos minutos tarde a su trabajo.

Su jefe la mira despectivo, pero ella lo ignora y saluda amigable, como todos los días.

-Buenos días, señor Malfoy.- Él la mira de arriba abajo, pero al fin, sonríe.

-¿Otra vez tarde, Granger? Si sigues así, voy a descontarte los minutos que le debes a la galería…Si por lo menos me dijeras que te desveló un hombre…Pero ya sé que eso no ocurrió. ¿O me equivoco?-

-¡Ya te dije mil veces que no te metas en mi vida! Perdón. –Ella lo besa sonriente, y hace un gesto con las manos, indicándole que no le teme.-No va a volver a suceder, pero últimamente, no sé que pasa, tuve otra vez ese sueño, y parece que solo puedo despertar después de haber aparecido la rosa…-

-A lo mejor es un mensaje subliminal de alguna florería…-él ríe, y después de despeinarla con ambas manos, la abraza. Se conocieron en la escuela de arte, él al principio se había comportado como un latoso y arrogante, y ella vivía remedándolo, pero con el correr del tiempo, se hicieron muy amigos, tanto, que cuando terminaron la carrera, y él le propuso trabajar juntos, ella no lo dudó. Sólo que siempre le decía bromeando, que él era el jefe, ya que la mayor parte de la inversión había corrido por su cuenta.

-¡Basta Draco! Ya te dije mil veces que odio que hagas eso. Dime, ¿qué novedades hay?-

-¡Trabajo! Solo piensas en trabajo. Tenemos que ir a ver una colección a Dover. ¿Podríamos hacerlo el fin de semana? Así de paso, te despejas un poco. A ver si dejas atrás ese sueño. Solo debe ser un poco de stress, casi no sales de esta galería, no tienes vida social, ni un novio que te alegre la vida.- él alza una ceja significativamente. Ella vive dedicada a la galería, y nada ni nadie la distrae. Por supuesto que tuvo un par de relaciones, pero en cuanto las cosas comienzan a ponerse serias, ella huye, y tampoco se toma el tiempo para distraerse, o divertirse; en cambio él, hace todo lo contrario. Si bien la galería es algo importante en su vida, nunca podría dejar su vida social atrás solo por dedicarse al trabajo, y es común que tres o cuatro señoritas llamen cada día preguntando por él. En esos casos, siempre es ella quién se hace cargo de la situación, y siempre sabe que decirle a cada una de las ocasionales conquistas.

-Claro, tendría que hacer como tú, y tener un ejercito de hombres dando vueltas alrededor mío, solo para complacerte, ¿no?-

-Bueno, no tanto; ya sabes que mi encanto es único, pero podrías intentarlo, no te vendría mal. Entonces, ¿a Dover el viernes?-

-Me gusta la idea. Cerramos acá, y emprendemos viaje, pasamos la noche en alguna bonita posada, el sábado nos ocupamos de la colección, y nos queda parte del domingo para descansar, y a la tarde, regresamos. ¿Te parece bien?-

-Completamente de acuerdo. Tú te ocupas de las reservas, ahora debo irme, nos vemos más tarde.- Y sale apurado, dejándola riendo, este Draco es siempre el mismo. Muy bueno para organizar, pero después se tiene que ocupar ella de todos los detalles.

Cuando consigue al fin comunicarse con la posada que tenía en mente, tiene una sensación de deja vú, pero sabe que eso es imposible, ella nunca estuvo en ese lugar.

Sin embargo, algo raro sucede cuando le da su apellido a la señorita que le toma la reserva.

-¿Granger? ¿Dijo Granger?-

-Sí, dije Granger, cual es el problema?-

-No, no hay problema alguno, creí que había entendido mal, sepa disculparme.-

Los dos días que la separan del viernes pasan rápido, y cuando se da cuenta, Draco está apremiándola para qué cierren de una vez; no quiere conducir de noche, y no piensa cederle a ella el control de su coche.

El viaje transcurre sin contratiempos, los dos bromean y hacen conjeturas de lo que pueden encontrar. Les hablaron de unas joyas, una colección bastante grande de cuadros, y un par de objetos que quizás les interesen.

Cuando llegan a la posada, ella siente una sensación muy rara; como de familiaridad; y esto en cierta forma, la pone nerviosa. Draco está haciendo el check-in, y ella se acerca cuando nota que él discute con la encargada.

-G-R-A-N-G-E-R. Sí, Granger; ¿me puede decir qué es lo que no entiende? Si tanto le disgusta Granger, ponga Hermione Malfoy, y terminamos el tema.-

-No, no se trata de que a mí no me guste; pero será mejor que ponga Malfoy… ¿Ustedes no son de aquí, no?-

-Por supuesto que no. Vinimos por el fin de semana. ¿Terminó? ¿Podrá decirnos cuál es nuestra habitación, y podré al fin darme un baño?-Ella le tironea de la manga, pero el joven la tranquiliza con un gesto y la joven se dedica a observar el hall donde se encuentran. Es una sala amplia y acogedora, con una gran chimenea que domina la estancia, y un par de sillones y mesitas diseminados de manera de lograr un cálido ambiente. Solo cuando ella levanta la vista, lo ve.

Sobre la chimenea, un cuadro de gran tamaño impone su presencia. Y en él, una mujer de capa observa la lejanía desde un acantilado, mientras una horda armada con palos y antorchas se acerca por el fondo.

-¡Draco! ¡Tienes que ver esto!- El nombrado se acerca, todavía con el fastidio pintado en la cara, esa empleada sí que lo sacó de quicio.

-¿Qué sucede, preciosa?- Pero ella está como en trance, con la vista clavada en el cuadro.-¡Hey! Acá Draco llamando…- y apoya su mano en el hombro de su amiga.-La pintura es buena, pero no creo que sea para tanto, Herms.-

-Es la mujer de mi sueño. No. Es mi sueño.- y lo mira angustiada.


¿QUÉ LES PARECIÓ?

SALUDOS "EXPERIMENTALES"!

TILDITA