Naruto no me pertenece, yo solo uso sus personajes
Capítulo 1
"El plan de Madara"
Era un gran día, y cierta kunoichi de pelo rosa y ojos verdes regresaba de una misión no muy complicada a Konoha.
Sakura Haruno, alumna de la gondaime Tsunade, ya contaba con 15 años, y con los retos que se le proponían, ya era una muchacha fuerte y más segura de si misma, aunque eso cambiara un poco después de que cierto chico de pelo y ojos negros apareciera de nuevo en su vida, ciertamente, solo la gondaime sabía los motivos por los cuales, sasuke había regresado de nuevo a la aldea, ese chico seguía siendo un misterio para ella y para el resto de sus fans, puesto que aunque mitad de las chicas de la aldea iban tras él, no les hacía caso. Al menos, a Sakura ya no la trataba tan mal, solo hablaban cuando era necesario, de forma cortante y distante, pero se toleraban. Su relación con Naruto, era la misma de siempre, peleándose por cualquier cosa y compitiendo a ver quién era el mejor. En conclusión, ellos no habían cambiado mucho: Naruto, tan chistoso como siempre; Sasuke, frío e indiferente; y Sakura, igual de sentimental y sensible, menos cuando está en misiones o en el hospital para separar los sentimientos del trabajo.
La kunoichi, seguía saltando de rama en rama a gran velocidad para poder llegar cuanto antes a casa, le quedaba un gran tramo por recorrer, tal vez un día o dos más y estaría en Konoha. La misión no era nada complicada, solo tenía que ir a una aldea a curar a los aldeanos de un simple virus, no tardó ni medio día en acabar con la enfermedad.
La joven, paró en seco, cuando sintió que un cúmulo de chakra se le acercaba y le cortaba el paso por delante, dio media vuelta, y se vió rodeada por más chakra. Empezaba a asustarse aunque no permitiría que el enemigo lo notase, pero no pudo evitar sorprenderse y ahogar un grito cuando vió que el chakra había desaparecido y en su lugar se encontraban cuatro akatsukis con su típica capa negra de nubes rojas y sus respectivos sombreros.
Se acercaron a ella y la atraparon con más chakra, la dejaron inconsciente en cuestión de segundos, aunque ella trató de liberarse, no pudo resistirse a un poder tan fuerte, no es que fuera débil, es que eran el poder de cuatro contra uno.
El akatsuki más cercano a ella la tomó, y les habló a sus compañeros:
-Que suerte tuvimos de encontrarla aquí, y sin protección, esperaba encontrarme a todo el equipo siete.
- Vámonos, llevémosla a la base cuanto antes.-Dijo uno
- ¿Y a esto se le llama kunoichi? ¡pero si casi no ha puesto resistencia!-comentó otro con burla.
Los akatsuki partieron hacia la base, y, no muy lejos de allí, Uchiha Madara, maldecía una y otra vez a la aldea a la que pertenecía, konoha.
Pein, observaba los movimientos de Madara con expresión indiferente, hasta que algo llamó su atención, cuatro akatsukis traían a una kunoichi de pelo rosa de la aldea de konoha, vió como dejaban a la muchacha en el suelo y se marchaban a entrenar.
-¿y esa kunoichi?-Preguntó por fin después de unos segundos.
- Mi plan para vengarme de konoha, aunque no lo parezca, esta muchacha es de gran importancia para la aldea, es una gran médico sin contar que es como una hija para la gondaime y como una hermana para naruto, y ¡ah! Si, también una amiga de Sasuke.
-¿Y tu venganza consiste solo en matar a esta kunoichi?-volvió a preguntar Pein desconcertado por una venganza tan piadosa.
-Primero de nada, no, esto solo es el principio de mi plan, digamos que es como un aviso antes del ataque, y segunda, ¿quién te dijo que la voy a matar?-contestó Madara con una sonrisa siniestra.-Voy a usarla como conejillo de indias en nuestro querido proyecto.
Pein se sorprendió por la respuesta y dirigió una mirada a la pelirrosa tirada en el suelo, compadeció a la muchacha, no le gustaría estar en su lugar.
Sakura despertó, no veía muy bien, pero notó como estaba atada de pies y manos a una plataforma y oía un extraño zumbido contínuo.
Escucho como alguien decía:
-¡Añadan chakra!
Y lo siguiente que notó fue que ella gritaba de dolor, luego, silencio.
Los akatsukis miraban la plataforma ahora vacía donde se encontraba antes la muchacha. Algunos con lástima y otros con curiosidad, ¿Qué le había sucedido a la joven pelirrosa? Se preguntaban, hasta que alguien por fin rompió el silencio:
-¿Qué ha ocurrido, escapó?
-Ha funcionado…-contestó pein sorprendido, en voz baja, puesto que él sabía lo que allí había ocurrido.
Habían probado con animales, y lo único que lograban era chamuscarlos con la extraña plataforma.
Madara y Pein no lo creían, después de años de pruebas y sacrificios por fin lo lograban, y es que hace años, akatsuki encontró una extraña plataforma que al añadirle una gran cantidad de chakra freía a cualquiera que estaba encima de la extraña plataforma. Madara la estudió bien y recopiló información, descubrió que para nada la plataforma servía para "freir", como ellos pensaban, si no que era una puerta a otra dimensión de la cual no se sabía mucho. También descubrió que había otra forma de entrar en esa dimensión sin obtener a cambio dolor, si añadías chakra a ciertos collares fabricados del mismo material que el de la plataforma, según las escrituras, deberías teletransportarte inmediatamente a ese mundo desconocido, y del mundo desconocido al suyo. Eses collares, se encontraban, para su desgracia en el museo de Konoha, pobres ilusos, que pensaban que solo era arte, aunque cuando destruyeran la aldea ya habría tiempo de hacerse con ellos.
Nadie sabía con seguridad si la pelirrosa había sobrevivido al viaje y en el caso de que lograra llegar, si sería peligroso estar allí, sinceramente, no les importaba, era una persona más de los cientos y cientos que ellos habían hecho desaparecer.
Fin del capítulo uno.
Hola ¿Qué tal me quedó? Espero comentarios, soy novata en esto de la escritura, nunca he publicado nada y me gustaría saber si la historia gusta y si quereis que la continúe, acepto cualquier comentario.
