Disclaimer: hetalia no me pertenece sino a Hidekaz Himaruya
Setting: semi canon

No estoy seguro si hoy es verano o invierno, pero que importa en esta casa siempre hace frio. Hace algún tiempo yo vivía junto a mis hermanas y mis amigos pero un día se marcharon sin decir nada. Pero eso no significa que los allá dejado de ver, siempre los veo en las conferencias mundiales, aun que por alguna razón cada vez que los voy a saludar ellos me responden de forma temerosa o se ocultan de mi, la única excepción de todo esto es mi hermana menor pues soy yo quien se oculta de ella.

He tratado de hablar de esto con Yao pues es una de las pocas personas para no decir la única que al hablarme no tiempla y tartamudea, pero Yao a estado bastante ocupado con el negocio de exportación de sus productos hacia las otras naciones, que ya casi no tiene tiempo para descansar y menos para escucharme, pese que el siempre diga lo contrario, se que necesita descansar un poco se le nota en su cara, sobre todo por esas ojeras que lo hacen parecer más a sus pandas que tanto adora.

Quisiera volver en el tiempo en el que mi hogar era un lugar cálido y alegre que sin importar lo muy temible que fuera la tormenta de nieve, éramos capaces de estar juntos compartiendo lindos momentos. Pero soñar te puede llegar a costar caro, ahora cada vez que abro mis ojos solo me encuentro con una casa oscura y fría, trato de proyectar mis recuerdos en las vacías habitaciones para sentir una vez más la calidez que mas anhelo, he tratado de invitar en varias ocasiones a las otras naciones a mi hogar pero por alguna razón siempre tienen una escusa para evitar venir, al final siempre termino sentado en mi viejo sillón alado de la chimenea recordando el pasado.

Por alguna razón hoy hace mas frio, me envuelvo en mis brazos para buscando la calidez que me falta, para recordar los brazos que alguna vez me sostuvieron, para seguir viviendo esta agradable ilusión.

No puedo seguir engañándome con falsos recuerdos, finjo ignorar el por qué todos me evitan pero no puedo hacerlo por mucho tiempo, se que hice muchas cosas malas en el pasado, se que lastime a quienes trataron de brindarme su amistad pero yo no soy el único que le ha hecho daño a los demás pero si soy el único a quien evitan, no lo entiendo.

Me acurruco en este viejo sillón alado de la chimenea esperando que los gritos de mis recuerdos se detengan, tal vez algún día callaran y podre formar verdaderos recuerdo llenos de calidez donde nadie me evite y me logre aceptar sin importarle de quién soy y por los crímenes que alguna vez cometí.