TITULO: Wet Dreams

AUTORA: Luciferius

TRADUCTORA: Lunima

NOTA: El fic no me pertenece, ni lo escribí, ni lo traduje… esta es una situación delicada.

PORFAVOR!

Leer las notas al final del capítulo!

Sueños Húmedos

"Naruto… ahh" gemí mientras me miraba con esos ojos tan gentiles. Me sonrió mientras su mano bajaba desde mi hombro hasta mi seno. Pellizcó mi pezón suavemente y la sensación que me estaba quemando fue devastadora.

"Hinata…" susurró justo cuando tomaba mi otro pezón con su boca.

"Por favor…" Hinata suplicó mientras movía sus manos en el pelo de él.

Su otra mano se encontraba debajo de la rodilla de ella, tratando de darle un mejor acceso en ella. Se encontraba completamente desnudo y su miembro rozaba la entrada de ella, deseando entrar en ella. Ambos compartían el mismo deseo. Era tan fuerte el deseo.

Quería sentirse completa, con él adentro de sí, fuerte y profundo, rozando y presionando. "Por favor Naruto" gimió mientras su mano abandonaba su rodilla y viajaba a lo largo de su pierna hasta llegar allí. La tocó y se percató de que ella estaba tan húmeda y lista para él.

Continuó succionando su seno, y con su otra mano le brindaba placer allí abajo, moviendo su mano circularmente. Ella aferró el rubio cabello con sus manos, alertándolo, alentándolo a seguir y deseando que se detuviera al mismo tiempo. Era realmente una locura. Ya estaba casi allí. Casi allí pero… lo quería dentro de sí. Realmente lo deseaba. Pero… Naruto no lo haría.

Él sabía muy bien lo que ella quería.

"Vo-voy a llegar Naruto" Hinata jadeó.

La presión en su estomagó estaba creciendo, cada vez se incrementaba más, mucho más, cada vez más…

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"Beep, Beep, Beep"- la alarma sonó.

Hinata se despertó y presionó con fuerza el botón de la alarma, haciendo que dejara de sonar. "Genial, otro sueño igual". Ella había estado experimentando una serie de sueños desde que era pequeña con un joven. Cuando era niña, sus sueños no tenían nada que ver con sexo o nada sexual. Sin embargo, este último mes, ella había estado teniendo esta clase de sueños con Naruto.

Ni siquiera conocía al susodicho. Aunque cuando era niña, ella había soñado con un niño. En sus sueños, primero lo había visto como un chico hiperactivo. Y así fue hasta que sus sueños comenzaron a tener relación, ella vio como Naruto y ella se hicieron amigos cuando tenían doce años en su sueño. Lo extraño fue que ella también tenía doce años cuando soñó esto. En la actualidad, ella tenía dieciséis años. Ella había tenido estos sueños desde que cumplió cinco años.

Nunca le había dicho a nadie acerca de estos sueños, tenía miedo que la considerasen loca o algo así. Pero, en todos sus sueños, ella veía como ella jugaba con él, o simplemente cuando ella lo observaba. Y de pronto, tres meses después en sus sueños, Naruto y Hinata eran pareja. Recordaba que ellos dos se besaban y Hinata se sonrojaba intensamente cada vez que lo hacían. Pero, ahora, era distinto, la relación había cambiado, ellos dos estaban teniendo sexo y cada vez Hinata se levantaba frustrada sexualmente.

Se sentía húmeda en esos momentos. Pero si había algo de lo cual Hinata estaba segura era que ella amaba al tal Naruto, aquel muchacho de sus sueños. Inclusive en esos momentos Hinata estaba sonrojada. Naruto era realmente guapo en sus sueños. Ella lo había "conocido" toda su vida y cada noche esperaba con ansias volver a verlo. Él era perfecto. Era fuerte, valiente e inclusive era ruidoso pero eso a ella le gustaba. Ella era tranquila y tímida. Él era guapo y tan vivo.

Hinata sonrió. Oh, bueno. No importaba si es que todas las mañanas se levanta frustrada sexualmente. Lo único que importaba era que podía verlo todas las noches en sus sueños. Esperaba que estos sueños nunca terminasen. Anhelaba ver a Naruto todos los días. Él era todo para ella. En sus sueños, él siempre la alentaba y la hacía sentirse contenta. Siempre le daba coraje con esa sonrisa suya que tenía.

Hinata se sonrojó al recordad la sonrisa de él. Naruto tenía distintas clases de sonrisas, era lo que ella había aprendido. Especialmente después de cuando hacían el amor o cuando la estaba molestando por algo. Y cuando llegaba, su cara era…parecía que estuviera sufriendo pero al mismo tiempo gozando de placer. Hinata sintió que su nariz le iba a comenzar a sangrar si seguía pensando en eso.

Necesitaba estar lista para la escuela. Después de todo, era su primer día de clases.

Hinata tenía puesto el uniforme de la escuela y estaba bajando las escaleras con la finalidad de saludar a su primo Neji y su hermana menor, Hanabi. Neji definitivamente era una persona madrugadora que amaba la brisa y el sol de las mañanas. Por lo contrario, Hanabi era una persona que amaba la noche, las estrellas y la luna, y, sobre todo, quedarse despierta hasta tarde. Ella detestaba las mañanas. Su hermana se encontraba allí parada y sus ojos se encontraban ¿cerrados?

Neji se encontraba leyendo el periódico para mantenerse al día de los negocios y del mundo. Hinata fue a buscar un bol y el cereal para desayunar.

"B-Buenos días Hanabi" saludó Hinata a la forma sonámbula de su hermana.

"Ni siquiera te molestes. No te puede oír" le dijo Neji.

"¿Y-Ya has tra-tratado Neji-ni-san?" le dijo Hinata tartamudeando.

"Sí, y ya resulté herido por cierto" replicó Neji haciendo una mueca de dolor.

Hinata soltó una risita al oír esto "Neji-ni-san de-debería saber me-mejor que nadie que no debemos mo-molestar el sueño de Hanabi" finalizó con una sonrisa.

Neji solo soltó un gruñido. Hinata sonrió.

Hinata fue al salón en el cual daban los horarios para todos los alumnos. Kakashi-sensei se encontraba allí, con sus pies sobre la mesa y leyendo su libro, el Icha-Icha Paradise. En la mesa se encontraba una pila de horarios "O-Ohayo Sensei", Hinata le sonrió.

"Yo" el saludó también con una sonrisa o lo que parecía ser una sonrisa.

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Miró a su horario y vio que su primera clase de ese día era Geometría en el salón 201. Ese salón se encontraba ubicado en el piso de arriba. Hinata se dirigió hacia ese salón pensando "Quizás hoy día pueda hacer un nuevo amigo"

Sonrió al pensar en esto. Era cierto que ella no tenía tantos amigos porque era demasiado callada lo cual era la razón por la que no les caía muy bien a las personas, debido a que por ser callada pensaban que era rara. Sus únicos amigos eran Kiba y Shino.

Kiba y Shino eran sus protectores más fieles. Ellos eran sus amigos de la infancia y ambos venían de buenas familias. Su padre había motivado esa amistad porque la familia Inuzuka y Aburame eran familias poderosas. Kiba era ruidoso y tenía mucha energía. Su mejor amigo era Akamaru, un perrito muy lindo que Hinata adoraba. Shino, sin embargo, era más tranquilo y callado. Él era realmente un genio. Pero solían haber algunas veces en que era tímido, además a él le gustaban los insectos. Los insectos no eran exactamente la cosa preferida de Hinata, pero Shino era su amigo.

Finalmente Hinata llegó a su destino. Ella entró lentamente al salón percatándose de que no había absolutamente nadie allí dentro. De seguro ella había llegado muy temprano. Se fue buscar el mapa de sitios. Lo encontró en la parte posterior del salón, y halló fácilmente su nombre, después de esto, se dirigió hacia su lugar. Sacó su MP3 y se puso a escuchar "Gimme all your love" de Nana y comenzó a dibujar.

Se le había hecho un hábito dibujar a Naruto todas las mañanas. Hubo una vez en que Kiba le preguntó a quién dibujaba. Ella le contestó que era su amigo imaginario. A lo que Kiba le respondió: "Está muy bien dotado". Hinata observó el dibujo de Naruto y entendió a lo que se refería. Lo había dibujado con el pecho desnudo y su típica sonrisa. Hinata se sonrojó instantáneamente y Kiba soltó una risa. Inclusive Shino no pudo evitar sonreírse de esto.

Hoy día, ella tenía pensado dibujarlo con el uniforme de la escuela. No supo exactamente cuánto tiempo estuvo dibujando debido a que los ojos de Naruto realmente la habían cautivado. Ella se podía imaginar que tan azules y profundos eran ellos en sus sueños. Naruto era encantador. Sus dibujos, por más que quisiese no se asemejaban a su belleza. En su dibujo, él tenía una sincera y alegre sonrisa. Él la estaba mirando con esos ojos, ellos en los que ella misma se podía ahogar.

"Es realmente perfecto" suspiró ella en voz alta.

"Ajá, sí, lo sé" dijo una voz.

Hinata saltó del susto ocasionando que todos sus papeles se dispersasen por el suelo mientras observaba aquellos ojos azules, que tantas veces había visto. Hinata no podía pensar claramente… No puede ser… él… es decir. Estaba en shock al observar al verdadero "Naruto" en persona allí a su lado.

Recogió el papel en el que estaba su dibujo. Hinata se sonrojó intensamente. "Es un buen dibujo. Y se parece mucho a mí, así que podrías decirme cuál es tu nombre?" " ¿Quién es esta psico?"

"Ano…" Hinata tartamudeó.

"Hey! Hinata!" alguien gritó desde la entrada.

"K-Kiba" Hinata se sintió tan aliviada.

"¿Eh? Mira, es tu amigo imaginario que siempre dibujas" Kiba exclamó cuando se percató de Naruto.

"¿En serio?" preguntó Naruto.

"Sips, desde que teníamos doce años todas las mañanas hace eso. Siempre me dijo que era su amigo imaginario pero nunca me dijo que era real"

"¿Oh?" Naruto sonrió. Esto está cada vez más extraño.

Hinata se agachó para recoger los papeles que había en el suelo.

"¿Que pasó?" preguntó Kiba mientras que también él se agachaba para recoger el resto de papeles.

"Digamos que la sorprendí un poco" le respondió Naruto quien estaba ayudándola a recoger los papeles. Pero en sí su razón para haberse agachado no era esa, quería saber quién era.

Todos se pararon. "Sí, Hinata es un poco temerosa"

Kiba le alcanzó el papel a ella, quien lo tomó tímidamente. Naruto también hizo lo mismo al mismo tiempo en que rozaba la mano de ella. "Hey! Hinata! También estoy en esta misma clase. Lo que significa que puedo copiarme de tus tareas" sonrió Kiba. Hinata alzó su ceja en desapruebo "Pero Kiba, deberías de dejar de copiar las tareas mías o las de Shino"

"Hey, yo también puedo copiarlas" le preguntó Naruto.

Hinata se sonrojó y no lo miró.

Kiba notó esto y preguntó: "¿Ustedes dos se conocían?" Hinata se sonrojó ante su franqueza y Naruto respondió "No, nunca antes, solo espero que nos convirtamos en buenos amigos, ¿no es verdad Hinata?"

"Entonces, es en serio, ustedes nunca antes se habían conocido"

Hinata movió su cabeza en señal negativa. "Wow, esto es tan extraño y genial. Es decir debe ser el destino o cosas así para que ella te haya dibujado."

"Supongo" contestó Naruto.

El salón comenzó a llenarse de chicos y chicas que conversaban, reían o sino leían.

Hinata se sentó mientras que Kiba y Naruto se fueron a ver el lugar donde les tocaba.

Hinata suspiró. ¿Cómo fue que esto pasó? ¿Desde cuándo estos sueños comenzaron a hacerse tan reales? Y recordó el sueño de esa mañana. Se sonrojó de nuevo. ¿Y qué tal si él tenía la misma clase de sueños que ella?

"Hey Hinata" una voz la llamó.

"Logramos sentarnos al lado tuyo"

Volteó a su derecha y su izquierda. Naruto y Kiba estaban a sus lados. No le molestaba que Kiba estuviese a su lado, pero esa persona que se parecía tanto a Naruto.

"Por cierto, soy Naruto"

"Yo soy Kiba, y ella es Hinata"

Hinata se golpeó su cabeza en la carpeta. Quería morir…

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Cuando el timbre sonó, Hinata quería salir disparada del salón. En vez de eso, ella decidió caminar rápidamente y evitar a Naruto a toda costa. Pero antes que pudiera hacerlo, alguien le agarró su muñeca y la jaló entre toda esa multitud de personas hasta una esquina apartada.

Él la empujó a la pared y se acercó pegando su cuerpo al de ella.

"¿Dime cómo me conoces?" Naruto le dijo respirando en su cara.

Él estaba agarrándo sus muñecas contra la pared al lado de sus orejas. "Dime cómo, porque deseo saber cómo conocías mi apariencia" la amenazó. Hinata se sentía a punto de llorar. Entonces, eso significaba que él no tenía los mismos sueños que ella. ¿Él no sabía que ella era su pequeña Hinata-chan?

Hinata quería llorar.

"Yo- yo-yo", no podía hablar por el miedo. No importaba que este Naruto y el Naruto de sus sueños se pareciesen. Él no era su Naruto. Este Naruto, era intimidador, asustaba, era frío y ruin. Él no era, él no la reconocía.

"No soy una a-acosadora. Ni siquiera sabía que a-alguien como tú existía"

"¿No es demasiada coincidencia que luzca igual que la persona que dibujaste?"

"No soy u-una a-acosadora. Pero sé que la persona que dibujé nunca haría esto" le dijo ella molesta por haber roto su imagen de Naruto.

"Esa persona y tú no se parecen en nada" Hinata lo miró directamente a los ojos. Ellos dos no eran la misma persona. No, para nada lo eran. El Naruto de allí la miró sorprendido por un momento pero luego sonrió. "¿Acaso estás intentando jugar conmigo? O es que… ¿realmente estás enamorada de mí?" Naruto le susurró en la oreja. Hinata se estremeció al escuchar estas palabras y su respiración en su piel.

Él se encontraba tan cerca de ella. "No, a mí me gus-gusta otra persona" Hinata tartamudeó.

"¿Oh? ¿Quién es él?" Hinata sintió que su actitud había cambiado.

"No sé, aún no lo conozco" Hinata le respondió

"¿Cómo es posible entonces?"

"¿Po-Podrías de-dejarme ir?" le dijo ella, se sentía incómoda con esa mirada y su cuerpo encima de ella.

"Por esta vez" le respondió él mientras le mordía suavemente su oreja.

Hinata se quedó fría después de que él se marchase con una sonrisa dibujada en los labios.

Naruto se marchó con una sonrisa en su rostro. Al principio se sintió halagado que ella le hubiese estado dibujando. Él no sabía que él fuera tan genial. Pero a medida que el tiempo avanzaba, llegó a pensar que era extraño y espeluznante. ¿Y si era una acosadora? Nunca sabes. La gente de allá fuera daba miedo. La chica era realmente extraña con esos ojos de color blanco y ese largo cabello.

Kiba parecía estar interesado en ella. Más que una simple amistad es lo que él quería. Sin embargo, Hinata parecía ser ignorante a esto. Ella se estaba sonrojando todo el tiempo. Su piel pálida no le ayudaba en mucho a esconder el sonrojo. Se veía tierna cada vez que se sonrojaba tenía que admitirlo. Pero ella era… extraña. Estaba halagado que ella estuviese enamorada de él pero… su corazón estaba con otra chica.

Naruto sonrió y corrió hacia sus amigos, Sasuke y Sakura. Ella era su chica ideal: Sakura Haruno. A pesar que ella fuera la enamorada de Sasuke, no le importaba. Pero él estaba contento que ella y su mejor amigo, Sasuke, estuviesen juntos.

"Hey, tonto" Sasuke lo saludó

Sakura le sonrió. Naruto les sonrió a ambos. "¿Así que finalmente te cambiaste hacia acá?" le preguntó Sakura. "Seh, finalmente podré verlos más seguido. ¿No es fantástico Sakura-chan?" dicho esto la abrazó.

"Baka!" Sakura le pegó en la cabeza.

Sasuke vio la reunión de ellos dos y soltó un suspiro "Hey! Naruto"

Naruto se levantó del suelo donde había ido a caer del golpe de Sakura "¿Si?"

"¿Quién era esa chica?" Sasuke le preguntó con una sonrisa, esperando ansiosamente que fuera la nueva novia de Naruto.

"Ah, esa chica, era una chica extraña que conocí"

"¿Uh? ¿Chica extraña? No será Hinata" Sakura preguntó. Naruto volteó a verla "¿La conoces?"

Sakura sonrió "Es una chica extraña es cierto, pero es simpática y tranquila" Sasuke hizo una mueca. "Además es la primera y más querida prima de Neji" Naruto al escuchar estas últimas palabras se quedó sorprendido. ¿Ella era prima de Neji? Cómo era posible que Neji y él hayan sido amigos desde hace cuatro años y no la haya conocido?

Tenía una imagen de sus queridas primas de Neji, Hinata y Hanabi. Él se las había imaginado tan espeluznantes como Neji se las había descrito la primera vez. Sin embargo, Neji le dijo que Hinata era la tímida y tranquila. Ella se intimidaba, se rendía fácilmente y se podría decir que era un fracaso. Pero aun así, Neji no podía cambiar eso en ello y quería que ella tomara sus propias decisiones. Empujándola y obligándola a tomar decisiones no iba a ayudar a que ella tomara sus decisiones acerca de lo que ella deseaba o lo que ella quería hacer, no?

En realidad, al hacer eso se evitaría que se cumpliese lo que Neji quería. Así que hasta que se cumpliese lo que Neji quería, él velaba por su pequeña prima. Hanabi era otro caso, ella ya era fuerte y una genio. Naruto hizo una mueca. Genial…así que tuvo que elegir a la pequeña prima de uno de mis mejores amigos.

Ahora se sentía mucho peor… Naruto se rascó su cabeza.

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Hinata se dirigió hacia el gimnasio, donde era el curso que le tocaba en la quinta hora.

Ella odiaba gimnasia. Tenía que vestir ropa adecuada para eso que enseñaba sus piernas y la camiseta que le habían otorgado era demasiado pequeña. Lo peor de todo era que cuando ella usaba el uniforme, la camiseta se le pegaba a su cuerpo, apretando sus senos y haciendo que su piel le picase.

Pero había algo que resultaba más terrorífico que enseñar sus piernas. Su maestra de gimnasia. Anko Mitarashi. Ella era bastante ruidosa y a veces bastante intimidante.

Ella suspiró, tenía que apresurarse, Anko les había dicho que en cinco minutos tenían que estar ya cambiados y afuera.

Se estaba cambiando cuando de pronto alguien le tocó el hombro "Hey, Hinata" TenTen la saludó "¿T-Ten Ten?" Hinata inquirió

"Yo también tengo esta clase de gimnasia a esta hora"

"Qué lástima que no estemos en el mismo año. Bueno nos vemos después" Ten Ten le sonrió mientras se iba.

Ten Ten era como su hermana. Era una de las mejores amigas de Neji y su compañera cuando eran niños. TenTen era una persona calmada que analizaba las situaciones pero que hacía bromas de vez en cuando. Quizás el haber estado al lado de Neji tanto tiempo era la causa por la que ella era así. TenTen era fuerte, calmada cuando era necesario estarlo, inteligente y bella. Hinata admiraba esa confidencia balanceada con esa fiabilidad y ese raro-sentido del humor.

Hinata terminó de cambiarse rápidamente. Al hacerlo se sonrojó, esta vez sus piernas realmente estaban expuestas. Esperaba que la gente no la mirara tanto. Después de todo, para muchas personas eran tan solo unas piernas pálidas. Pero aun así esto la hizo sonrojar y estar consciente.

Salió de los baños y se dirigió hacia el gimnasio. Fue hacia Anko con un sonrojo que no se le quitó de la cara. Las personas allí la estaban mirando extraño, especialmente los chicos.

Oh no!

Sus piernas estaban expuestas. ¿Acaso mostraba tanto? Hinata se tornó de un color carmesí y comenzó a jugar con sus dedos. "¿Anko-sensei, sa-sabe dó-dónde tengo que sen-sentarme?"

"Allí" le sonrió diabólicamente.

Se sentó y aun así los chicos seguían mirándole extrañamente. ¿Qué pasaba? ¿Acaso eran por sus piernas? Hinata se sonrojó al sentir las miradas rudas de los chicos sobre ella. Quería desmayarse.

"OK clase. Comencemos. Mi nombre es Anko y me llamarán así, entendido" les sonrió lo que más bien pareció ser una sonrisa malvada.

Los chicos aún seguían mirando a Hinata y no prestando atención.

Las chicas comenzaron a percatarse de esto.

Y pronto Anko también.

"Dejen de mirar el busto de Hinata y presten atención a la clase" Anko llamó su atención al escuchar la palabra busto.

"¿Mi busto?" Hinata preguntó, alzando una ceja.

Todos rieron o sonrieron al oír esto.

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Naruto ya se ahogaba. Inmediatamente despues de que Hinata salió de los vestidores, todas las miradas se posaron en ella, en su cautivador y delicioso cuerpo. Y su busto realmente era lo mejor en el. No tan solo era ese pequeño y apretado polo sino también aquel short que llevaba puesto que dejaba poco a la imaginación.

Su short… bueno era su short, que enseñaba esas piernas. Su busto rebotaba a medida que ella se sonrojaba y caminaba hacia el lugar donde estaba Anko.

"Wow! Mira ese cuerpazo!" un chico sonrió. "Desearía poder poseerla. Es un poco torpe y tímida" otro chico dijo.

Naruto sintió que su cara se tornaba de un color rojizo y no era por la vergüenza…no, era de ira. Y diablos, no sabía por qué. "¿Es Hinata Hyuuga?" una chica preguntó. "Sí, nunca imaginé que estuviese escondiendo eso debajo del uniforme escolar" otra chica comentó. "Hmpf, nunca me agradó" una celosa dijo. "A mí tampoco, es rara. Especialmente con esos ojos."

"De seguro se hizo una cirugía con tal de ganar más atención" bromeó una cruelmente.

Naruto sintió vergüenza esta vez. Estaba feliz de no ser Hinata en esos momentos.

Realmente era tentadora. E inclusive aunque le desagradara todo lo que estaban diciendo…el también deseaba poseerla. Naruto se sonrojó al pensar esto. Pero sería erróneo hacer eso, especialmente a la querida prima de Neji. Neji de seguro lo iba a matar si supiera los pensamientos que tenía en ese momento. Naruto miró a su busto. Cómo llego a ser tan grande?

Realmente Hinata hacía un buen trabajo escondiendo eso debajo del uniforme escolar. Él no había notado su figura, lo que era extraño debido a que era un hábito aprendido por su padre, Arashi y por Ero-sennin. Pero él no podía pensar en su figura en esos momentos. Ella era su acosadora, y eso era espeluznante.

Él observó cuando llegó hacia Anko y tomó asiento.

Los chicos siguieron observándola después de que tomo asiento lo que ocasionó que la maestra dijese "Dejen de mirar el busto de Hinata y presten atención"

"¿Mi busto?" Hinata preguntó alzando una ceja. Naruto se iba a ahogar. ¿No lo había notado? ¿Acaso era tan ingenua o era estúpida? O era que tan solo estaba tratando de llamar más la atención

Hinata se sonrojó de la vergüenza. "Okay, ahora los llamaré a cada uno para que entrenen"

Hinata se estremeció mientras Naruto se sentaba detrás de ella. Él tampoco se veía tan feliz. Hinata tragó en seco, recordando los eventos que habían ocurrido. Al recordar su cuerpo encima de el de ella.

"Okay, siendo el primer día de clases. Yo les asignaré el compañero de entrenamiento de todo el año" Anko dijo "Ahora quien se encuentra a su lado será su compañero(a) de entrenamiento"

Naruto se encogió como si alguien le hubiera dado una paliza. Hinata se sintió morir. "Muy bien, luego de que hayan terminado de presentarse, levántense" Todos comenzaron a levantarse. Ellos dos fueron los únicos en quedarse sentados. "Muy bien, levántense ustedes dos" Hinata se paró inmediatamente. Naruto gruño y se paró de mala gana.

Inmediatamente comenzaron a calentar sus cuerpos. Mientras Hinata daba saltos hacia atrás todos la quedaron mirando. Naruto se sintió ahogarse Inclusive desde atrás, la vista de su trasero… Oh Dios que estás en el cielo.

Por favor matéenlo ahora!

Finalmente comenzaron a entrenar.

Hinata se sintió avergonzada después de lo que pasó ese día. Ellos dos iban a comenzar a entrenar cuando… Hinata se desmayó. Hinata se sonrojó de la vergüenza al recordar a Naruto encima de ella. Era… humillante oír decir a los chicos que Naruto quería aprovecharse, ella no entendía a que se referían.

Felizmente su primer día había acabado.

Hinata caminaba a su casa acompañada de Shino y Kiba.

"Akamaru te ha extrañado" le dijo su amigo sonriéndole.

"Yo también" dijo ella tocándole la nariz a Akamaru y riéndose cuando le ladró.

"No nos hemos visto hace tiempo, ¿no?"

"No, hace dos meses exactamente" Shino precisó.

"¿Vamos a comer helado?"

Llegaron a la tienda favorita de Hinata. Era una tienda donde vendían pasteles, helados, muchas de las cosas que le encantaban a Hinata.

"Deseo esta vez, el de menta" Hinata sonrió

"Yo, el sabor oreo" Kiba sonrió.

"Yo el de vainilla" declaró Shino.

"¿Y Akamaru? ¿Cuál querrá?"

"Akamaru no podrá" Kiba declaró. Akamaru ladró. "Shino-kun, vamos por los helados"

"Una decisión sabia"

Ellos se marcharon de la tienda dejando a un Kiba gritando y un Akamaru ladrando.

Naruto observó a Hinata caminar con Kiba y aquel chico extraño. Él no sabía exactamente porque los estaba siguiendo. Solo sintió la urgencia de hacerlo. No sabía exactamente. Había algo extraño en esta chica y no le gustaba. Y mucho menos que Kiba estuviese tan cerca de ella, que la abrazara…

Y eso era lo que lo molestaba más. No sabía por qué no le gustaba eso. Y se estaba rajando los sesos para averiguar por qué. No era suya Hinata, pero sentía ganas de golpear a Kiba cuando la abrazaba. Y era fastidioso. Aggh! ¿Por qué estas emociones?!

Maldición! No le agradaba esta chica. Era culpa de ella. Sino le hubiese dibujado y llamado la atención… no tendría esa… FRUSTRACIÓN.

No le gustaba pero odiaba el hecho que… que… se sintiese TAN ATRAÍDO HACIA ELLA!

Antes, cuando cayó encima de ella, sintió ese dulce y pequeño cuerpo debajo de él. Inmediatamente se había puesto duro… era aterrador. Pero… pero su cuerpo realmente era agradable. Naruto se sonrojó al recordarlo.

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Continuara…

NOTAS:

El fic no es mío!

La autora es LUCIFERIUS

Bien, entiendo que la situación es difícil y considerada políticamente incorrecta al subir este fic, porque no tengo un permiso oficial para subirlo.

Me gustaría poder explicar la situación.

Este fic es y siempre ha sido muy especial para mí, es un fic realmente antiguo que me impulsó a escribir hace mucho tiempo. Fue escrito en inglés y traducido al español hace más de 7 años (Nótese que el padre de Naruto es un OC ya que en ese entonces no se sabía lo de Minato).

Tanto la autora como la traductora y el mismo fic desaparecieron hace tiempo, solo quedo yo, una lectora vieja con sus recuerdos…

Ahora, el Naruhina es canon y el manga ha finalizado… quería dar a conocer esta historia al mundo. Que podrá no ser la mejor escrita o redactada pero en su tiempo brillaba por su originalidad.

Por ahora no diré más, quiero saber si los lectores no se molestan por lo que estoy haciendo, en capítulos siguientes les contare más acerca de la autora, la traductora, el fic y su final… perdido para muchos, fui de las pocas afortunadas que lo vio…

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Si alguien cree que no podrá vivir sabiendo que publico algo que no es mío (aun cuando prometo aclarar quién es su verdadera autora tantas veces como sea necesario), que me lo diga por review o mp y dejare de hacerlo.

Mi intención no es apropiarme de nada y aunque tomo cualquier responsabilidad por hacer esto, preferiría solucionar las cosas de manera pacífica.

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Si, escogí este día para subir esta historia…

Feliz día de San Valentín!