Hola, bueno este es mi primer proyecto, siempre me ha gustado leer los fics de la pagina y me han inspirado varias veces para escribir los míos, así que pues empezare, espero le den una oportunidad a esta novata, gracias por su atención.
Atención los personajes de katekyo hitman reborn no son de mi pertenencia, (ojala lo fueran) la historia y los oc si lo son.
De ante mano les pido disculpas por las faltas de ortografía que pudieran haber.
Atención esto va a ser tsuna x oc
CONOCIENDO SU HISTORIA.
CAPITULO 1
Todo este tiempo había vivido de la misma manera, no me importaba mucho quien sufriera mientras yo pudiera seguir con lo mio, no tengo familia, no tengo recuerdos de ellos, lo único que se de mi infancia es como vagaba por las calles desorientada, tuve las peores experiencias que una niña pudiera tener, no me quedo de otra tenia que hacerme mas fuerte que nadie, tenia que hacerlo si deseaba sobrevivir, a la edad de 8 años ya había tomado mi primera vida humana, fue difícil, realmente dude, pero sabia que si no era el seria yo, conforme paso el tiempo me volví mas fuerte, me convertí en una asesina, ese era mi trabajo, la gente venia a mi y me pagan para aniquilar a otros, al principio no me gustaba, pero después simplemente me dio igual, no necesitaba conocer a la persona solo hacer mi trabajo, siempre era igual, era un asesinato perfecto, tan limpio que daba escalosfrios.
- ¿ya tienes un nuevo trabajo?
- no, el dinero de la ultima vez, todavía no me lo e acabo- conteste mientras daba un sorbo a mi bebida.
- es una lastima, es la época donde hay muy buenos trabajos.
-mejor para los demás, siempre se quejan que los dejo en la ruina, no es mi culpa que sean tan lentos, y me den a mi los mejores trabajos.
- jaja siempre tan humilde Anika -
-me conoces bien, Albert-san - Albert-san es la primera persona en la que confié, lo conocí cuando me estaba muriendo de hambre en la ciudad, pensé que era mi fin, pero el me ayudo.
FLASHBACK
- ¿oye pequeña estas bien?- abrí un poco mis ojos, la luz del sol me lastimaba demasiado.
-hambre- fue lo único que pude decir.
- pobresilla, tranquila yo te ayudare - después perdí la conciencia. cuando desperté me encontraba en una cama recostada, me gire un poco y pude distinguir a la persona frente a mi ,era un hombre tal vez de unos 30 años o algo así - veo que ya despertaste, ¿como te sientes? - lo mire dudosa, quien era ese hombre, porque me había traído a ese lugar - no te preocupes no te haré daño, simplemente quiero ayudarte -
-... ¿quien eres?- pude al fin decir
- mi nombre es Albert, y esta es mi casa, te encontré en la ciudad te veías realmente mal, me acerque para ayudarte y fue cuando te desmayaste, por eso te traje aquí.
- ¿por que me ayudaste?
-no iba a dejar a una pequeña niña tirada y simplemente pasar de largo, ¿o si?
- la mayoría lo hacen
- entonces yo no soy como la mayoría - se levanto de la silla en la que se encontraba y me hacer una charola - adelante come un poco - examine un poco era una sopa, pan y algo de agua - no te preocupes no tiene nada, puedes comer con confianza - tome la sola y le di un sorbo, era deliciosa, no recordaba cuando había sido la ultima vez que comía algo, no dude mas y empece a devorar todo.
- gracias por la comida - dije terminandome todo
-me alegra que te haya gustado, bien ahora que estas mejor, ¿crees poder decirme algo de ti?-
- ... yo... mi nombre es Anika... tengo 7 años...-
-bien, Anika, y tu familia- cuando dijo eso agache la mirada - ¿pasa algo?
- yo... no lo recuerdo, no recuerdo nada de ellos.
-... lo siento - lagrimas empezaron a bajar por mis mejillas
-no puedo recordar nada, si al caso se mi nombre - Alberth me abrazo, era un abrazo paternal.
-no te preocupes, si quieres puedes quedarte conmigo - lo mire por un momento
-... ¿en serio?
-si, adelante
-¡gracias!- le dije mientras lo abrazaba mas fuerte - de verdad muchas gracias - después de eso empece a vivir con el, lo ayudaba con la limpieza de la casa, mientras el se iba a trabajar, normalmente se iba cuando empezaba a oscurecer, era algo extraño pero decidí no preguntar en un principio, hasta...
-... Alberth-san...
-si, ¿que pasa?
-llevo rato preguntándome, ¿como es tu trabajo?
-¿para que quieres saber?
-es que... me parece un poco extraño que salgas a trabajar cuando empieza a oscurecer y regreses cuando empieza a amanecer
- ya veo - vi como Alberth-san me miraba como dudando
-lo-lo siento, olvide lo que dije
-oye Anika, ¿quieres venir conmigo?
-eh?... esta bien
-si, a decir verdad me gustaría que supieras cual es mi trabajo... ¿entonces vienes?
-¡si!- salimos de la casa, empezamos a caminar, todavía había bastante gente por las calles, pero nosotros caminábamos en sentido contrario, conforme paso el tiempo, la gente era poca, la luz era cada vez menos, y nos adentrábamos mas a la parte oscura de la ciudad - Alberth-san. ¿a donde vamos?
-ya casi llegamos, solo... no te separes de mi
-... esta bien - entramos en lo callejones, y llegamos a una puerta de color rojo, en la parte de arriba tenia algo escrito - ¿Soul?-
-es el nombre del lugar - dijo mientras abría la puerta - vamos - entre después de el, bajamos las escaleras y poco a poco empezaba a escuchar algunas voces, llegamos a otra puerta y al abrí pude ver a una gran cantidad de gente, algunos estaban sentado, bebían, otros estaban con algunas mujeres haciendo quien sabe que cosas, en medio de todo eso había una gran pizarra, me acerque un poco, y pude ver varios carteles, en ellos había fotografías de personas y debajo de ellos decía, "recompensa" y grandes cantidades de números.
- oye mocosa quítate
-eh? - detrás de mi pude ver a un hombre realmente robusto, tenia un aura que daba miedo - lo-lo siento - dije mientras me apartaba, el hombre arranco uno de los carteles, se dirigió a la barra y se acerco a Alberth-san
- ¡hey Alberthe, quiero este trabajo!
-esta bien ya te escuche no tienes que gritar- Alberth-san saco un sello y un libro en donde anoto algunas cosas - listo toma - después de eso el hombre se dirigió a la salida
-... ¿Alberth-san?
-aquí es donde trabajo -
-si, ya veo, ¿pero que es este lugar?
-una casa de asesinos- me tomo algunos minutos procesar las palabras
-pe-perdón pero ¿una que?
-una casa de asesinos, aquí la gente viene a dar trabajos para asesinar a otros y las personas que vienen aquí los toman, yo me encargo de registra todos los trabajos- realmente era sorprenderte el simple hecho de saber que tenia esta clase de trabajo - entonces, ¿que opinas?
-... ah... bueno, no lose - que podría opinar, eran asesinos, aunque, no era un tema de importancia para mi, siempre y cuando no me involucrara - pues... supongo que esta bien.
-¿en serio?
-... si
- bueno, me alegra que al fin conozcas mi trabajo- después de aquello iba de vez en cuando con el, normalmente cunado no tenia nada que hacer, todo iba bien, hasta que casi nos fuimos a la ruina, por alguna razón el trabajo era mínimo, ya casi no iba gente a dejar o pedir trabajos, nuestro sustento económico era menos, al parecer los mejores asesinos del lugar, optaron por cambiar de sitio y nos abandonaron, provocando que la gente ya no nos diera trabajos, los pocos asesinos que quedaron eran terribles, por decir inútiles, no faltaba mucho para que nos desmoronáramos, entonces tome una decisión, Alberth-san me cuido todo este tiempo, era hora de regresar le el favor, ha escondidas empece a practicar, no tenia esa clase de conocimientos, así que tome el arma que para mi podría ser mas fácil, aunque debo admitir que también me deje llevar porque era linda, opte por unas Sai*, fue difícil al principio, pero después me fui acostumbrando, paso un año hasta que al fin llego el día.
-no lo harás
-¿por que no?
-es muy peligro, no puedo dejar que hagas esto, eres una novata, podrías morir, tienes solamente 8 años
-puedo hacerlo, sino lo haga nos iremos a la ruina
-yo me encargare de eso, tu no tienes que preocuparte
-quiero hacer, tu me has cuidado todo este tiempo, quiero regresar te las gracias
-yo no te ayude para que me lo regresaras algún día
-lose, es por eso que tengo que hacerlo, por favor, déjame ir, te prometo que regresare, te lo ruego... confía en mi - pude ver como dudo, despues dio un largo suspiro relajando sus hombros
-prométeme que regresaras a salvo
-lo prometo
-de acuerdo, saco su libro y empezó a registra - ahora que trabajaras en esto necesitas un seudónimo.
-mmm, que tal... Sai-
-¿Sai?
-si, el mismo nombre que mis armas
-de acuerdo, Sai, toma - me entrego el papel - ten cuidado
-lo haré... me voy- di media vuelta me coloque la capa negra que se confundía con mi cabello, me tape la cara, solo la mitad para abajo, dejando solo a la vista mis ojos verdes - bien, terminemos el trabajo.
Bueno ese fue el primer capitulo, los primeros dos capítulos serán para que conozcan a la protagonista mejor y después aparecerán los demás personajes, espero sus comentarios, nos leemos :D