Definitivamente no tiene nada que ver con el Día de San Valentín.
Hola! :3 Soy nueva en la página así que acepto cualquier crítica que me quieran lanzar.
Espero les guste y muchas gracias por leer!
Soul Eater no me pertenece. Si fuera así, y como siempre digo, Soul y Maka tendrían 15 hijos y habría escenas no aptas para menores por doquier :D
Valentine.
Soul, que se encontraba recostado cómodamente en el sofá de la sala, alzó la vista sobre el respaldo cuando escuchó un ruido chillón y fastidioso surgir de la cocina. Arqueó una ceja molesto al notar que se trataba de un empapelado envoltorio de chocolate. Y, precisamente, del último chocolate de la alacena. Sabía que él nunca era el encargado de las compras y que todas las golosinas que podía comer llegaban a su boca gracias a la consideración de su compañera. O tal vez a que su instinto sobre los dulces era menor a la gula que de ella surgía. En fin, eventualmente el albino no se merecía ese chocolate, pero su actitud de desaprobación al ver que éste estaba a punto de entrar en el proceso digestivo de una persona que no era precisamente él, lo había atacado en contra de la razón. Ese chocolate era de Maka, pero no podía resistirse a desearlo con todo su ser.
Cuando la chica tomó el exquisito material entre sus manos, sus ojos brillaron de felicidad al tiempo que su lengua recorrió instintivamente cada parte de sus labios sin pensarlo. Fue entonces cuando Soul carraspeó molesto llamando su atención y ella, con una mueca de total desinterés por cualquier pensamiento que pudiera tener su compañero, continuó guiando a la irresistible tableta hacia su entrada bucal. Tenía la vaga idea de que el único objetivo del chico era arrebatarle su dulce, pero ignoraba el que fuera capaz de levantarse del sofá y de apagar la televisión sólo para aquello, así que apartó delicadamente esa reflexión de su mente. Sin embargo, y antes de que lo notara, aquellos ojos rojos realmente cautivantes la observaban desde unos pocos centímetros de distancia, y Maka no tuvo más opción que entrar en pánico. Soul quería quitarle el chocolate.
Con un movimiento demasiado rápido, la rubia introdujo la barra en su boca y comenzó a masticarla satisfecha. Cerró los ojos para saborear su botín y se irguió de forma triunfante, entendiendo que ya no habría nada que el idiota pudiera hacer. Pero definitivamente… estaba equivocada.
Cuando el cacao ya se esparcía libremente como líquido entre su lengua y su garganta, el peliblanco le tomó la cara bruscamente y acercó sus labios a los de ella. Las mejillas de Maka ardieron por un instante, pero no la desconcentraron. Sabía lo que quería. Intentó safarse y sacudió la cabeza violentamente para evitar que sucediera, pero en algún momento acabó mareándose, y Soul logró pegar sus labios. Se introdujo rápidamente en su boca y hurgó allí, aliviado de sentir aún vivo el líquido suave y dulce que tanto anhelaba. Extrajo lo que pudo y lo deslizó por su garganta satisfecho, alejándose al fin de la pasmada chica.
Respirar, inhalar, exhalar…
Soul sonreía satisfecho mirando hacia la nada, mientras sus papilas gustativas aún saboreaban los restos del chocolate medianamente digerido.
Inhalar…
Amplió su sonrisa mostrando ahora una completamente burlona y, en cierta forma, pervertida. Maka asesinó a un Soul imaginario con su mente. Detestaba que le sonriera así.
- Soul… Asqueroso pervertido…
- Ya, no te quité todo el chocolate. Mira, si quieres puedo devolverte un poco…
Un fuerte sonido acompañado de un impresionante chichón saliendo de la nuca de Soul, surgió luego de uno de los inhumanos Maka-Chop de la técnica. La imponente enciclopedia rebotó en la cabeza del albino, causó algunas lágrimas y volvió a la mano intangente de Maka que seguía allí, aún roja en las mejillas y con un sabor muy tenue de chocolate en los labios.
El maldito logró su objetivo.