Ok, es una nueva historia, creo que va a ser bastante corta y espero que sea de su agrado gente, quiero agradecer a mis amigas fatty rose malfoy y Kris. por ayudarme con el título y la historia n.n Gracias chicas! Por cierto va haber mucho drama... por lo que me hago cargo de la cuenta de pañuelos descartables si es que hace falta n.n
_Ambos deben morir_ decía un hombre mientras golpeaba su puño contra la mesa redonda
_ ¡deben pagar por lo que nos hicieron!_ decía otro levantando la voz
_ ¡Nos humillaron! Ellos deben morir_ un tercero coreó a sus compañeros
_Hermanos, entiendo que estén enojados y dolidos por la desgracia que sucedió con nuestro hermano, pero no podemos cambiar el pasado y debemos ser realistas… la mujer es escurridiza y demasiado inteligente y el hombre esta coronado como un jodido rey ¿Qué podemos hacer? Están fuera de nuestro alcance_ el cuarto hombre trataba de calmar la situación
La sala se inundó de voces ofendidas y fuertes que luchaban por hacerse escuchar, las figuras de la mayoría de los hombres se encontraba fuera de sus asientos haciendo ademanes eufóricos y enfadados mientras que una figura se mantenía tranquila y sentada en su asiento.
_No podemos hacer nada…_ dijo el hombre sentado, todos los demás se callaron para escucharlo_ pero, podemos hacer que ellos se encarguen el uno del otro
_Ellos nunca se matarían entre sí_ objetó uno de los hombres
_Ella nunca falla una misión y él tampoco, yo creo que es una buena idea_ dijo uno de los hombres coincidiendo con uno de sus compañeros_ de alguna forma u otra se destruirán entre sí
_ ¿Y que si ella lo mata y sigue viva? Sabemos que ella puede sobrevivir, él no tiene posibilidades en su contra
_Si lo mata cavará su propia tumba… se autodestruirá y será solo cuestión de tiempo antes que ella también muera
_ ¿A manos de quién? cientos han tratado de matarla y fracasado en el intento
_ A manos de ella misma_ sonrió sombríamente el hombre tranquilo
Ada Wong se encontraba sentada en el centro de la pequeña cama leyendo el reporte con las instrucciones sobre su próxima misión; mientras encendía el último cigarrillo del paquete terminaba de leer la última página del grueso reporte; ella soltó las hojas y dejó caer su cuerpo en la cama, la misión no era complicada más no quería hacerla, en cierta forma se encontraba cansada; el peso de los años y las almas que había robado empezaban a pesar cada vez más sobre sus hombros y ellos comenzaban a doblarse, ella se conocía, sabía que no aguantaría mucho tiempo y ciertamente no le molestaba, si Ada tuviera que hacer un balance de su vida, diría que no había sido mala, en sus primeros años como espía había disfrutado de la adrenalina de los robos, del sexo casual y del espionaje, no podía decir que disfrutó de los asesinatos, pero eran sólo parte del trato, no le gustaban pero tampoco le desagradaban, le agradaba hundirse en el placer con un hombre y no tener que lidiar con ellos y sus comentarios sobre lo bueno que había sido el sexo y sobre que seguramente todos y cada uno de ellos había sido "inolvidable" en la vida de la mujer.
Ella se preguntó si el día que muriese iría al infierno o no, seguro que sí, solía rezar como una vieja costumbre que había heredado de sus padres, no sabía si lo hacía bien o mal, sólo lo hacía como lo recordaba, no era una mujer de fe, pero pensaba que sí realmente había alguien allá arriba, no quería molestarlo aunque de seguro ya lo había hecho ¿o no? Después de todo a ella no le gustaba matar inocentes, pero a veces lo hacía, a veces debía matar inocentes que se metían en su camino, quitaba una vida o varias a cambio de dinero como si no fuese más que una comerciante más oscura que el resto; en fin no sabía qué pasaría luego de morir, pero la idea no era nada alentadora sin embargo la aceptaría como lo hacía sus errores, como lo había hecho una y mil veces cuando algún mínimo descuido la llevó a horas desagradables interrogación; si había algo que Ada Wong hacía muy bien era aceptar sus errores y las consecuencias de los mismos; y este era el momento de aceptarlos a todos, ese trabajo sería el último de todos; luego de esa misión dejaría la pistola y no volvería a tirar del gatillo.
Ada realmente había disfrutado de su trabajo, lo había amado, sabía que había nacido para ser la ladrona escarlata, la mujer de rojo, la mujer que hacía que matar fuera un arte… un arte que ella había perfeccionado desde su juventud en los duros entrenamientos y con los constantes trabajos su arte rozaba la perfección absoluta, pero con cada paso hacia la perfección que la mujer daba, también perdía una parte de sí misma, una parte de ella moría y se enterraba en lo más profundo de su alma, realmente no se lamentaba por ello, era su forma de darle un cierre total a cada trabajo, lo había hecho con Jonh y con otros cientos a los que había engañado o traicionado… pero por alguna razón sólo una parte de ella no pudo morir, no pudo irse, una parte se rehusaba a dejarla y se aferraba a la vida dentro del alma de la mujer… Leon Scott Kennedy, el hombre del que ella nunca pudo separarse, con el que nunca pudo romper el lazo, como si hubiesen estado unidos por un hilo invisible de perdición puesto en ellos por una cruel broma divina.
La última pitada del cigarrillo se adhirió a sus pulmones, ella apagó lo poco que quedaba del mismo en el improvisado cenicero que tenía a su lado, lleno de colillas y ceniza acumulada… era un hábito desagradable pero no se sentía como para dejarlo, disfrutaba el sabor casi amargo de los venenosos componentes de su pequeño y alargado placer. Ada se levantó de la cama, se estiró un poco y fue directo al cuarto de baño, vio su imagen en el espejo, tardó unos segundos en reconocerse, definitivamente ya no era la joven entusiasta que alguna vez entró a cierta academia de entrenamiento del gobierno de China, para luego separarse de su gobierno y trabajar para diferentes entidades sin importarle las actividades o los fines de sus empleadores. ¿Qué había pasado con esa joven de 18 años decidida a ayudar a su nación? Ya no estaba allí, esa niña había muerto, estaba enterrada en lo más profundo del espíritu de la propietaria de ese reflejo en el espejo, Ada suspiró y se dio cuenta que sólo era las piezas de la mujer que alguna vez fue; con el paso de los años, se había perdido a sí misma, se había destruido a sí misma.
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Bieeeen ¿que opinan? ¿que creen que va a pasar? Ideas y críticas son muy bien recibidas!. Gracias por leer n.n
