EL OCASO DE UNA ESTRELLA
Autor: PPBKAI
Disclamer: los personajes de esta serie no me pertenecen....ya no se que tipo de disclamer poner después de tantos fics.
Summary: una belleza destructiva no solo acaba con todo lo que esta a su alrededor, si no también con su portador. Kai lo vivirá en carne propia y pagará un precio muy alto.
CAPITULO 1: Amanecer.
A veces un don se puede convertir en nuestra condena. En mi caso, por ejemplo, no supe manejarlo de forma adecuada y me llevó a la perdición.
Cuando el mundo te lo da todo es muy fácil perder la cabeza y olvidar que también se es humano. Pero cuando el mismo mundo que te lo dio todo te lo quita es cuando sientes un dolor que no sabes como manejar por que nunca piensas que puedas vivir algo así
Desgraciadamente comprendí todo demasiado tarde y ya no tengo vuelta atrás. Soy una porquería y no tengo remedio pero... finalmente desapareceré. La gente llorará por un tiempo pero al final se olvidarán de mi, igual que como ya lo hicieron antes, pero ahora no me dolerá por que estaré en un lugar muy lejano, donde me corresponde: ente las nubes, al lado de un dios.
Poka!
SUPER FLASH BACK
En una linda casa rusa corre por los pasillos un hermoso niño de cabellera bicolor, tiene 8 años, pero todo el mundo lo quiere, es tan hermoso que dan ganas de cuidarlo y abrazarlo. Como sus padres se dan cuenta que es mas bello de lo que debería, pensaron que lo mejor era que lo dieran clases adicionales de arte. Si además de lindo e inteligente era culto y gracioso, a ese niño se le abrirían las puertas del mundo.
Lo primero que hicieron fue meterlo a clases de música donde el profesor inmediatamente detectó que ese niño tenía un talento especial para el solfeo.
Comenzaron a trabajar mas duro sobre esta área viendo en tiempo record como es que el pequeño lograba entonar complicadas melodías sin cometer un solo error.
En la escuela de artes rápidamente se hizo popular tanto por su característica belleza, como por su inigualable don vocal.
En los festivales siempre era la estrella y la gente siempre le pedía que cantaba.
A la muerte de sus padres, le cambió mucho el carácter, se hizo duro e inexpresivo. Afortunadamente debido a su talento, la escuela de música le dio una beca completa con lo que tuvo que ir a vivir al lugar.
El tiempo fue pasando sin darse cuenta y el pequeño Kai pronto se convirtió en un atractivo adolescente. Como se aburría solo tomando clases de canto, también se metió a clases de danza (de todos los tipos) lo cual le dio un cuerpo envidiable, pintura, escultura y escritura lo hicieron culto, pero ni las artes lograron devolverle la dulzura a su corazón.
Como era de esperarse, un colegio mas prestigiado lo jaló para que continuara su preparación con ellos, el aprovechó la oportunidad y se fue con ellos.
En aquella academia, conoció a la directora, una mujer de expresión dura y un tanto amargada por la vida, se llamaba Carlota. Desde el momento en que Kai llegó le dejó en claro las estrictas normas de la academia, las cuales eran mas estrictas para el por ser becario completo, entiéndase, mantenido.
El joven bicolor no puso mucha atención, estaba acostumbrado al trato estricto, además de que sabía que son tu talento pronto se ganaría un lugar. La señora Carlota lo condujo a lo que sería su habitación la cual compartiría con otro joven que estaba de medio interno y de momento estaba de vacaciones, pero en un par de semanas regresaría.
Con su pequeña maleta se instaló en la cama disponible, le agradó l lugar, era muy callado y solo se escuchaba el mecer de los árboles de afuera.
De momento ese día no tendría clases para que descansara así que decidió ir a conocer el campus. El lugar era mucho mas grande que su anterior academia, tenía hermosos jardines, los salones muy bien equipados y los comedores cómodos.
Al siguiente día la señora Carlota le entregó lo que sería su horario y lo llevó a conocer a su profesor de canto. Se trataba de un hombre ya muy entrado en años con semblante severo. Lo recorrió de arriba abajo como poniendo en duda sus cualidades así que le hizo una prueba. Kai no sabía que estaba ante el profesor mas temido de todo el colegio tanto por su carácter, su disciplina y sus exagerados métodos de corrección.
-A ver jovencito- se sienta en su piano- Concierto para una voz.
-Esa es una melodía vulgar- objetó el chico siendo mirado con sorpresa tanto por el profesor como por la directora.
-No te estoy preguntando si quieres cantarla, solo te dije hazlo ¿O.K?
-Hm, está bien.
El profesor sabía que era una pieza muy complicada, sobre todo para un adolescente a quien le esta cambiando la voz. Una vez que Kai le indicó su nota comenzó a cantar la canción que no tiene letra, solo es un desafío para el diafragma. Los 2 adultos se quedaron boquiabiertos con su calidad vocal, es incluso conmovedor verlo parado junto a la ventana, apoyando su mano en el vidrio y encarando al exterior con sus ojos cerrados.
Cuando terminó de cantar se giró a ver a sus evaluadores que seguían pasmados ante el talento que habían descubierto. El inexpresivo profesor estaba tan sorprendido que exclamó
-Felicidades jovencito, estuvo bien
-Gracias.- contestó seco.
En seguida se pusieron los 3 a revisar lo que sería el plan de trabajo que constaba de agotadoras horas de ensayo 4 veces a la semana. Luego la directora lo llevó con su profesor de danza clásica, esta era una materia básica, así que no podía tomar otra clase de danza hasta que no acreditara cuando menos 8 meses con el. Le hicieron examen de posiciones las cuales tomaba sin mayor dificultad y con su estilizado físico lucía de maravilla.
De nuevo se anotó un 10 con el profesor de danza quien soltó el halago de:
-Tiene una columna perfecta.
Después pasaron al comedor donde todos los alumnos se lo quedaban viendo como bicho raro.
-¿Ese es el nuevo?
-Si
-No le veo nada especial
Pues fue trasladado ayer y ¡tiene beca completa!
-¡No lo creo!
-Debe ser alguien con talento
-Ya veremos.
A Kai no le importaba en lo mas mínimo los comentarios, se limitó a tomar lo sanos alimentos que le sirvieron. Al caer la tarde se retiró a su habitación, ya el otro día empezaría de verdad con sus clases.
Esa misma tarde, la directora llamó al antiguo colegio de Kai para agradecer que le hubieran mandado a un chico con tanto talento, pero lo hicieron la advertencia de lo difícil de su carácter.
Se ahí en adelante comenzaron sus clases formales inmediatamente destacándose entre todos los demás pero la Señorita Carlota lo observaba sintiendo pena de ver lo retraído que era y la falta de interés de hacer amigos. Pudo haber sido mas indiferente con el pero algo la hacía quererlo proteger.
Comenzó a demostrarle cierto interés pero a su fría manera lo cual le llamó la atención a Kai, no era la típica señora que le hablaba con dulzura, ella era seca, hasta déspota se le podía llamar pero eso hacía que el no se fastidiara.
A las 2 semanas cuando descansaba de las pesadas clases tocaron a la puerta 2 veces y abrieron, Kai prestó atención a quien había llegado. Se trataba de un chico pelirrojo con una maleta al hombro que con rostro impasible le anunció
-Este también es mi cuarto, no toques mis cosas
-Ni quien las quiera- respondió el bicolor- además, primeo saluda maleducado
-Primero hay que dejar las cosas en claro- entra y se acomoda en su cama- me llamo Yuriy Ivanov ¿y tu?
-Kai Hiwatari
-Espero que sea un placer conocerte
-Lo mismo digo
Sin hablar mas el pelirrojo comenzó a desempacar y a meter las cosas en los cajones del mueble que le correspondía. Una vez que terminó se recostó en su colchón e hizo un poco de platica con el invitado, no es que le interesara, pero si iban a prácticamente vivir juntos debe saber de quien se trataba.
-¿Cuál es tu área?- preguntó directo
-De todo- contestó Kai con sus manos en la nuca viendo al techo, la misma posición la tenía el taheño
-¿De todo? No te creo, en algo te debes especializar mas
-Canto, es lo que mas me gusta
-Oh, yo también amo la música, soy violinista... oí que tienes beca completa y que el maestro de canto te felicitó, debes ser bueno
-Algo...¿Cuánto llevas aquí?- al igual que Yu quiere saber con quien vivirá
-3 años, pero llevo 8 tocando el violín
-he oído que eres bueno... lo dijo la señorita Carlota
-¿Eso dijo de mi? Vaya que halago, ella es mas fría que un témpano
-¿Qué edad tienes?
-15 ¿Y tu?
-Igual
Después de eso permanecieron callados pero de cierta manera se agradaron, odiaban a la gente que era parlanchina, ellos en cambio se encerraban en su mundo y dejaban que todo rodara.
Sin querer en ese ausentismo mental, pasaron los meses y llegó el invierno. Para ese entonces Kai le había agarrado afecto a la fría Señorita Carlota quien se preocupaba por el, y a veces lo regañaba por su desinterés, era casi como una madre. A pesar del carácter duro de Kai, era un jovencito solo y de manera inconsciente reclamaba atención y se sentía bien que alguien se tomara la molestia de corregirlo, eso evitaba que se sintiera como un mueble de la academia.
Para la directora, Kai era un chico desamparado, no le daba lástima, si no que en el descargaba su amargura de que ella nunca pudo ser madre y le hubiera gustado tener un hijo como el.
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Estaba iniciando el mes de octubre y se hizo el anuncio: ese diciembre, al igual que todos lo años, la academia presentaría una obra con sus alumnos avanzados pero TODA la academia participaría.
Los alumnos estaba emocionados, esa presentación anual siempre era en grande, iban las familias y los alumnos avanzados tenían la oportunidad de volverse profesionales.
Para ese año se prepararía "El fantasma de la opera" obra de historia sencilla pero que sin duda requiere de un arduo trabajo. Se comenzaron a buscar a los protagonistas, ya tenían a Raoul, a Christine y al demás elenco, pero faltaba el fantasma.
Había un chico avanzado que era muy bueno y el se quedó. Durante los ensayos a Kai le tocó estar en el coro y hacer un par de pequeñas apariciones con el ballet. Todo iba bien pero al momento de cantar el tema principal como que algo faltaba.
-No, no, no – regañaba el profesor de canto- desde arriba otra vez
-Un descanso- objetó "el fantasma"
-No está usted de vacaciones, no quiere cantar retírese
-No, lo haré de nuevo.
Otra vez, la cancioncita que ya tenía mareados a todos por que no salía, Yuriy que estaba en la orquesta ya le dolían los dedos, el brazo y el oído de ensayar. El problema con el joven es que si cantaba a toda potencia no actuaba y si actuaba su voz bajaba de calidad. Los profesores de canto y teatro ya se tiraban al piso hasta que el profesor de Kai ordenó cansado.
-Hiwatari, inténtalo tu- todos lo voltearon a ver
-Profesor- intervino el de teatro- el es un novato, no lleva ni un año aquí, además no sabemos si actúa
-Exacto, no sabemos, hay que darle la oportunidad. ¡Hiwatari!
Un tanto descontrolado Kai subió al escenario ante la expectante mirada de todos. Este solo volteó a ver a Yuriy quien se encogió de hombros, el también tenía curiosidad de escucharlo, había oído que era bueno, pero jamás lo vio ensayar.
-Ya te sabes la canción, desde arriba.
-O.K- afinó su garganta
La chica que interpretaba a Christine lo miró incrédula, ella tenía 20 y el 15 dudaba que hiciera bien un papel tan fuerte pero siguiendo las instrucciones comenzó a cantar. Lo hacía muy bien y cuando le tocó entrar a Kai todos pusieron especial atención.
Con gallardía se plantó en el escenario y comenzó su interpretación sorprendiendo a todos. Actuaba y cantaba como un profesional y no parecía un chico de 15 años, si no se veía mas adulto. Yuriy sentía que las notas de su violín fluían de manera suave al acompañar a esa potente voz que se intensificaba con el fondo musical. Esto animó mucho a la chica y comenzaron a cantar embelesando a todos los espectadores, cuando terminó el profesor anunció:
-Hiwatari te quedas. Nabokov se va.
-Pero profesor- objetó el rechazado
-Ya dije, tu no das la talla- el chico mostrando profesionalismo se retiró, pero la humillación de ser cambiado por un novato no la iba a pasar por alto.
Los ensayos eran extenuantes, Kai tuvo que trabajar duro para combinar actuación y canto. De inmediato se llenó de fans quienes se ponían atentas a las partes en las que le tocaba salir al bicolor. Durante los ensayos tuvo oportunidad de ir conociendo mejor a su compañero de cuarto y comenzaron a formar un lazo mas estrecho de amistad.
En los descansos se iban a un apartado rincón a beber agua y desde ahí se divertían viendo el alboroto que se hacía tras las bambalinas de una obra.
En uno de esos días había una escena que no salía bien, cuando el fantasma secuestra a Christine y bailan de manera sensual
-No Hiwatari- regañó el profesor de teatro- se debe ver pasión, sensualidad, eres muy frío con ella. Otra vez.
De nuevo la escena pero faltaba ese fuego. Ella tenía problemas, lo veía como a un hermanito pequeño y mas que pasión le daba ternura.
-¿Qué pasa con ustedes?- de nuevo el regaño- necesito que se concentren. Piensen en alguien que les guste. Kai ¿No te gusta alguna chica?- todas sus fans se sonrojaron al ver como Kai repasaba su vista a todas. Ahora que lo pensaba, no se había fijado en ninguna
-si, puede ser- solo dijo eso para que no lo molestaran. Las chicas gritaron de emoción y Kai suprimió una mueca de fastidio.
Yuriy que miraba todo esto con atención no pudo evitar comenzar a reír. Conocía bien a Kai y sabía que había dicho una enorme mentira.
Mejoró la actuación pero había que trabajar mas en esa sensualidad. Dieron por terminado el ensayo, Yuriy se adelantó a su dormitorio, Kai debía todavía acomodar varias cosas, ya casi todos se habían ido solo quedaban los profesores de canto y teatro, Kai ya iba de salida pero se recargó en una pared a abrocharse los zapatos y sin querer comenzó a escuchar la conversación.
-Hiwatari es muy bueno pero le falta... algo- dijo el de teatro.
-Como tu lo dijiste, sensualidad, no podemos exigirle tanto a un chiquillo como el, solo tiene 15 años, qué va a saber un puberto de sensualidad y erotismo
-O del amor.
-Exacto, es muy retraído. A pesar de que le gusta a varias chicas el no se fija en ninguna
-Dicen que su pasado fue duro.
-Además, está en edad difícil. Ya conocerá a su Dulcinea
-Pues ojalá que sea antes de la presentación.
Los profesores echaron a reír y se retiraron. Kai se quedó muy pensativo, en realidad nunca se había sentido atraído por alguien y eso era extraño, un chico de 15 años se enamora cada media hora. Tal vez estaba muy concentrado en sus clases, además ¿Qué tenía que ver el que conociera el amor con la actuación? Nada, solo debía practicar mas, estaba acostumbrado a se el mejor y una tonta obra de teatro escolar no sería un obtáculo.
Decidido a mejorar regresó con paso firme a su habitación y encontró a Yuriy recostado en su cama leyendo un libro.
-Ayúdame a ensayar
-¿Queeee? No, yo ya estoy muy cansado, tu también ya ensayaste todo el día, además, como en qué te puedo ayudar
-Haz la parte de Christine- respondió de manera seca
-No que flojera ya no quiero hacer nada- volvió a su lectura
-Hazlo- ordenó Kai quitándole el libro de la mano y mirándolo de manera desafiante
-Esta bien- con pesadez se sienta en su lugar- dame el guión, pero ni creas que cante
-Yo tampoco cantaré, solo quiero marcar los movientos
-Bien ahí voy- respira hondo- oh! ¿qué lugar es este?
-No, quiero que te levantes y actúes conmigo
-Vete al demonio
-Es un pequeño favor, no lloriquées como niña- lo mira de forma amenazante
-Bueno, solo por que estoy de buenas.
Se levantó de su lugar y comenzó a decir sus líneas, Kai hacía lo suyo pero con la frialdad de Yuriy era difícil. Llegaron a la parte donde el fantasma debía tomar a Christine por la cintura, jalarla hacia el y casi besarla. Sin pensarlo, el bicolor jala a Yuriy y lo pegó a su cuerpo. Se miraron a los ojos, como sorprendidos, nunca habían observado sus rostros con detenimiento, Yuriy era hermoso con los ojos mas cautivantes del planeta y labios color de fresa. Kai con un rostro que reflejaba supremacía y mirada intimidante.
Sus cuerpos estaban haciendo contacto, compartiendo su calor. Poco a poco Kai comenzó a acercar sus labios a los de Yu pero sin quitarse la vista de encima. Un sonrojo comenzó a subir por sus mejillas lo cual hizo que el pelirrojo explotara
-Olvídalo Kai- se quitó del lugar- ya estoy cansado- trataba de calmarse
-Solo una vez mas- a pesar de que su corazón latía con fuerza quería ver de nuevo de cerca esos bellos ojos azules.
-No
-Vamos- le jala del brazo hasta levantarlo de la cama y lo atrapa en un fuerte abrazo.
De nuevo estan muy cerca, esta vez un poco mas que antes, de nuevo un calor se apodera de sus cuerpos pero es agradable. Sentimientos encontrados embriagan sus mentes, desean separarse, no les gusta ese nervio incontrolable, pero también quieren sentirse cerca.
Con todo y el tono rosado de sus mejillas, Kai se acercó de nuevo a los labios de Yuriy apretando mas su abrazo. El taheño se afianzó a sus hombros y apretó un poco las yemas de sus dedos. Cuando ya tenía muy cerca al bicolor cerró sus ojos de manera inconsciente y entre abrió los labios. Kai continuó avanzado cerrando también sus ojos. Sintió la respiración ajena rozarle su nariz, se detuvo un segundo, sabía que a menos de 3 milímetros rosaría esos labios que lo esperaban. Armándose de valor hizo contacto sintiendo un cosquilleo en su espalda.
No sabían exactamente que hacer, era el primer beso de ambos, solo se acariciaron los labios sin que sus lenguas intervinieran, no estaban listos para eso. Se mantuvieron así por espacio de un minuto, disfrutándose, saboreando esa extraña caricia desconocida. Luego se separaron y se miraron a los ojos, no sabían que decir o qué hacer, solo sintieron algo de pena.
-Kai, estoy cansado
-Yo también, creo que es mejor terminar
-Si- por alguna razón no querían separarse
-Gracias Yu- hablo suave erizándole la piel al taheño
-No hay de que.
Se soltaron de su agarre y cada uno se fue a su cama. Aún no bajaban el bochorno de sus mejillas. Cubiertos por las cobijas y dándose la espalda era imposible conciliar el sueño. Una y otra vez recordaban ese contacto tan estremecedor, Kai se preguntaba si esa era la sensualidad de la que hablaba el profesor, no tenía la respuesta, pero sabía que su cuerpo tenía una temperatura muy elevada.
A la mañana siguiente no hablaron, esquivaban sus miradas pero de todos modos se fueron juntos al ensayo. Cuando vino la parte que habían ensayado el día anterior, Kai tomó a la chica como lo hizo con Yuriy, de una forma segura y determinante, miraba sus ojos e imaginaba aquellos tan azules. Una atmósfera sensual se comenzó a sentir, los profesores no podían creer que de la noche a la mañana aquello estaba funcionando y Yuriy miraba sorprendido con su violín la gallardía de Kai, ahora comprendía el por qué de lo de anoche, nadie podía resistirse a un hombre, como Kai.
PPBKAI continuará...................
wiiiiiiii, he aqui mi fic número 27 de mi laaarga carrera como escritora demente. Espero recibir reviews suyos ya sea con halagos o guayabazos. Recuerden que todo lo que hago es con amor a todos ustedes, gracias por darme felicidad.
Los veo dentro de 3 semanas con el capitulo núnero 2....MUAK
