¡Hola! ¿Como que últimamente me están llegando ideas para fics? Estúpida mente que no me deja tranquila (tendría que estar actualizando otras en vez de escribir nuevas, peeeeeeero, la tentación es peor...xD), no ya enserio. Hay un motivo por el cual hago esto (pueden seguir leyendo, si no, pasen a leer el fic...no voy a decir nada malo...n.n), últimamente estoy muy incomoda y no estoy pasando por un buen momento y de la nada, se me ocurrió esta historia. ¡Listo! Así de sencillo, además, me sirve para relajarme.
¡Volvamos al fic!
Ya que ando con confesiones y todo ese rollo, se me ocurrió una historia que lo protagonizase mi lindo y tierno rubio (es una pena que no haya una categoría "Tierno/Cute", si no este fic la tendría) Es un Pov Lucas hasta el final (creo que de eso se dieron cuenta,por las dudas lo escribo...xD)
Como ya saben, ningún personaje (que aparezcan aquí o en los proximos capitulos) me pertenece, son propiedades de sus respectivos creadores. Ojala fueran míos, la estaría pasando boba y nadando en una piscina.
Dejemos a un lado mis sueños frustrados...
~¡Que disfruten el capitulo!~
Quiero poder decir "Oye, ¿Tienes un momento para hablar? Quiero decirte algo importante, descuida, no te llevará tiempo. En verdad, solo quiero hablar" o quizá "Me gustaría hablar ¿Te parece bien? Es sobre algo que no me deja tranquilo, no, no te tienes que preocupar" pero, sé que no tendré el valor para afrontar esta situación. Tu pareces ser ignorante ¿Estará bien que sigas así? No estoy seguro. Quiero llamar tu atención, pero temo tu posible reacción. ¿Te enojaras si lo sabes? ¿Me odiaras? O peor aun ¿dejaras de hablarme cuando te revele este secreto que no me deja tranquilo?
¿Qué podría hacer? ¿Qué debería hacer? ¿Cuál sería la mejor opción? ¿Quedarme callado o hablarte de una vez por todas? Mi corazón late con fuerza, no quiere detenerse y eso solo lo generas tú. Eres el único que me hace sentir de esta manera.
¡No, no estoy enojado contigo! Al contrario, me siento feliz. Es algo muy bonito sentirse así. Solo verte me hace feliz. ¿Será que al estar enamorado de ti, ante mis ojos, te veo más hermoso de lo que eres? ¡Dios! Tener ese pensamiento hizo que me sonrojara. Lo siento, me apena pensar de esta manera, pero, no puedo controlarlo.
Quiero decirte lo que siento, pero, el temor vuelve a aparecer y me lo impide. Así nunca podré decírtelo; aquellas palabras que surgen de mi corazón. Aquellas palabras que expresan como me siento por ti. Solo con esas palabras, podrías entender todo lo que me haces sentir; cuando no me miras estoy muy ansioso, tú no lo notas y una parte mía terminó por acostumbrarse. ¿Qué otra cosa podría hacer? Si tú no notas mis indirectas, las cuales déjame decirte son muy directas, basta solo con mirarme; debería disculparme contigo. No tendría que sentirme de esta manera.
Lo siento. Me fue imposible enamorarme de ti. Sucedió sin más, sin que yo lo pudiese evitar. Ese sentimiento apareció, pero no lo hizo de un día para el otro. Fueron tus acciones, tus palabras, tus pequeños gestos, los que causaron esto.
¡Me he enamorado de ti!
Tú sonríes, yo me sonrojo, tú ríes divertido y dices que soy tierno. Creo que esas palabras escaparon de tus labios, porque luego te sonrojas peor que yo, mueves tus manos nerviosamente y buscas otro tema de conversación. ¿Cómo esperas que conversemos de otra cosa si dices algo lindo sobre mí? Ahora mi corazón late peor, quiere escapar y yo se lo impido.
¿Quieres que te cuente algo vergonzoso? Cuando no estamos juntos, practico frente al espejo una posible confesión. ¡Si, es verdad! Lo hago. Es más, he ideado varias formas posibles para confesarme. ¡Sí! Es verdad. Mi mente divaga e idea algún plan para que estemos juntos.
Podría ser valiente e ir para tomarte de la camisa, gritarte que me gustas y luego besar tus labios. Me avergüenzo de solo pensarlo. Podría ser dulce y explicarte con lindas y tiernas frases como me haces sentir, tú y solo tú. Aunque, tengo dudas si puedas soportarte tanta ternura junta. ¿Qué tal si soy algo extravagante, y te confieso mis sentimientos mediante un gran cartel o un grabado en la pared? Ahora que lo pienso, eso no haría feliz a Master Hand, pero, si a Crazy Hand. ¡Ya se! Te guiaré a mi lugar especial y en ese lugar yo…yo…yo…
…Yo no sé qué hacer….
Me siento nervioso. ¿Qué debo hacer? Mis mejillas se sonrojan ante la anticipación. ¡No, no más miedos! Debo tomar el valor que hay en mí y decirlo de una vez por todas. ¡Sí, eso haré! No mas miedos, no mas falsos obstáculos, no más. ¡Hoy te diré lo que siento! Debo ignorar las dudas e ir por ti.
Tomo una gran bocanada de aire, cuento hasta diez y trato de calmar mi respiración y los latidos acelerados de mi corazón. Mi estomago se siente extraño ¿Serán los nervios? Quién sabe. Mi garganta se seca, muerdo mi labio inferior y trago pesadamente. Apretó los puños ¡Estoy decidido a hacerlo!
Lo busco en la mansión, nadie parece haberte visto. Les agradezco la información, aunque me haya sido inútil, es muy ser cordial con los demás, después de todo, ellos no tienen la culpa de no saber su ubicación. Trato de recordar tu itinerario; si, es penoso, pero, para saber más de ti trato de memorizar los lugares que concurres. Si, lo sé, parece algo malo, pero, lo hago con buenas intenciones. Si sé cuando pelea Ness, puedo pedirle ayuda a la Señorita Peach y prepararle su platillo favorito, solo para hacerlo feliz; y no, hoy no tenía ninguna pelea o entrenamiento. Tal vez haya sido su día libre. Eso es bueno, es saludable tener un buen descanso y más para un luchador Veterano como Ness.
Solo me falta un lugar y esa es nuestra habitación. Suena muy bonito decir que algo es "nuestro". Me sonrojo ante ese pensamiento y corro hacia esa habitación, no tardo demasiado, por suerte me encontraba cerca. Llamo a la puerta y nadie responde ¿Acaso se habrá ido? Mordiendo mi labio inferior decido entrar; espero que Ness se encuentre aquí.
Y lo vi. Recostado en su cama y mirando hacia el techo; ¿Acaso estaría cansado? Espero que no; tímidamente, ingrese al cuarto con la mirada fija en el suelo.
―Ne-Ness…― Dije su nombre con dificultad y no tuve el valor de mirarlo a los ojos; debía calmarme…¡Debía reunir fuerzas para decírselo!
―Ah ¡Lucas!― Se sentó en la cama, mirándome con una sonrisa en el rostro. ―Que bueno verte ¿Dónde habías estado? Creí que te habías extraviado― Me reprendió; se veía preocupado y no pude evitar sentirme feliz por eso.
―Y-Yo…lo-lo siento.
―No te preocupes, solo, no vuelvas a asustarme así ¿Te parece bien?― Asentí estando de acuerdo. ―¡Ok!― Sonreí ante su entusiasmo y me digne a mirarlo. Encontrándome con sus ojos cobalto, brillando de alegría. ―Tengo hambre ¿Vamos a buscar algo para comer?
No respondí a esa pregunta, solo lamí mi labio inferior. Ness no pareció notar mi nerviosismo, se acomodó su sombrero rojo y estiró los brazos. Cuando estuvo listo, caminó despreocupadamente hacia mí con una expresión de calma en el rostro, me sonrió y se dispuso a salir del cuarto.
Esta era mi oportunidad.
―T-T-Te-Tengo algo qu-que de-decirte…es-escucha por favor― Mi mano sujeto su muñeca; sentir su piel fue malo para mí. Ahora estaba muy nervioso. ―Po-Por favor…escúchame.
―¿Luke?― Ante la mención de mi nombre solté su muñeca. ―¿Quieres hablar conmigo?
Asentí. ―S-S-S-Si no t-te molesta.
Lo vi encogerse de hombros, cerró la puerta y me guió hasta el centro de la habitación. ―Bien― Se cruzó de brazos y me miró con curiosidad. ―¿De qué quieres hablar?
―Y-Y-Yo…hace mucho…q-que…qu-quería…― Cerré mis puños bajando la mirada al suelo. ―E-E-Es que yo…
¡Podía con esto! Él me estaba dando una oportunidad…Ness me estaba dando una oportunidad para decirle lo que sentía. No podía desperdiciarla así nomas. ¡No, yo podía hacer esto!
―¡Y-Y-Yo que-quería…que-quería de-decirt-cirte! De-Decir-cirte que…― Mis manos se cerraron en puños. ―Eh…..yo….
Él me sonrió como siempre lo hacía. ―Dime Luke. ¿Qué sucede?
¿Y si no me correspondía? ¿Y si me odiaba? ¿Valdría la pena intentarlo? Tal vez, tal vez no me quiera como yo lo quiero. No podría soportar su rechazo y menos que se alejara de mí. ¿Tendría el valor suficiente para ser honesto con él por una sola vez?
Mi cuerpo se estremeció ante la idea de perderlo. ¿Qué haría si Ness, mi mejor amigo y amor platónico, se alejaba de mí para siempre? No, no podía perderlo. No a él. No quería volver a estar solo; sentía que las lágrimas amenazaban con escapar de mis ojos. Lo sentía, pero no quería llorar. No frente a él; el miedo atormentaba a mi corazón.
¿Qué debería hacer? ¿Qué deberíamos hacer los dos frente a esta situación?
―Luke, respira― Me dices con tu típica sonrisa en el rostro; ahora me siento mareado, tu cercanía no me hace bien. Solo causa estragos en mí ¿Puedes creerlo? No, creo que no; tu mano se posó en mi hombro. ―Respira un poco― Sigo tus consejos, pero mi ritmo cardíaco sigue igual. ―¿Ya estas más calmado?
No encuentro las palabras. Al estar cerca de ti me vuelvo más torpe, las palabras no aparecen. ¡No puedo vacilar! ¡Debo decirlo….sé que puedo, sé que puedo decírselo! ¡Vamos Lucas, tu puedes! Solo díselo, esas dos y simples palabras. Esas dos palabras que expresan lo que realmente sientes por él, algo más allá de la amistad.
―Ahora bien. ¿Qué querías decirme?― Pregunta con calma pero sin dejar de ser amable conmigo; sus ojos, su sonrisa, su voz y su presencia. Todo me tiene encantado.
¡Díselo! ¡Díselo! ¡Díselo! ¡Díselo! ¡Díselo!
―Eh…etto…yo…eh…uh…pues….yo….eh…tú…yo…― Comienzo a balbucear; es como si mi lengua se enredara sola; sin poder decir una frase coherente. ―E-Espera…yo…eh…la-la…verdad….eh…yo….
De repente, la puerta se abre completamente. ―¡Ness! ¡Master Hand quiere conversar contigo y…!― Vi a TL aparecer en la habitación. ―¿Uh? ¿Interrumpo algo?
―La verdad es que…
―¡N-No!― Grité cortando las palabras de Ness. Él me miró sorprendido al igual que Toon Link. ―N-No…no nos has interrumpido TL…¿V-Ve-Verdad Ness?― Sonrió nerviosamente; mi rostro esta rojo y juego con mis dedos al sentirme tan avergonzado; esto es muy vergonzoso.
―Ehhh. ¿No?― Responde en tono de duda mirándome extrañado. ―Creo que no.
―¿Ah, no? Yo pensé que si estaba interrumpiendo algo y-
―¡N-No…ya di-dije que no!― Le cubrí la boca a mi amigo y reí nerviosamente. ―N-Ness, puede-des irte…lue-luego conversaremos…
―De acuerdo― Acomodó su gorra roja. ―Nos vemos luego― Se despidió de ambos y abandonó la habitación; mi corazón no se calmaba. ¡Ya basta! No sigas ese ritmo; cerrando la puerta tras de sí.
Suspiré aliviado, sintiendo que el aire volvía a mis pulmones. Mordí mi labio inferior sin importarme el dolor que pudiera sentir, no me interesaba. El sonrojo de mis mejillas no quería desaparecer y el temor no se borraba de mí; luego de unos segundos, pude comprender la situación. Yo, estuve a punto de confesarme, pero, las palabras no salían; ahora, la decepción cayó sobre mis hombros.
Creí que…..solo por esta vez, sería capaz de decírselo…de ser honesto con Ness. Y-Y el miedo terminó venciéndome y…
―¡Mphmh!
Parpadeé al percibir ese sonido. Busque con la mirada al responsable del ruidito y al encontrarlo mi rostro no podía ser más rojo.
―¡L-Lo si-siento TL!― Quité mis manos de su boca y retrocedí asustado. ―Di-Discul-culpame…por favor― Me cubrí el rostro avergonzado; ¿Qué pensaría él de mí?; y lo vi entre los espacios de mis dedos. ―Lo-Lo la-lamento…
TL pasó su brazo por su boca. ―¡Por mis Diosas, Lucas! Creí que no podría aguantar la respiración― Ante esas palabras, me sentí peor. ―Descuida, no me sucedió nada si eso es lo que te preocupa.
Lentamente, bajé las manos. ―¿De-De verd-verdad?
―Claro― Él sonrió y me sentí mejor, o al menos un poco. ―Por cierto― Vi que en su rostro aparecía una expresión descarada; me sonrojé…¿Por qué tengo este mal presentimiento? ―¿Qué hacían tú y Ness en la habitación?
―¡Ehh! ¡No-No e-e-e-esta-tabamos ha-haciendo na-nad-nada!
―¿Estás seguro?
―¡S-S-S-S-Si!
Toon Link rió divertido. ―¡Tranquilo viejo! Solo estoy jugando― Suspiré aliviado llevando una mano hasta mi corazón. ¿Puede ser que mi corazón intente escapar de mi pecho? ―Iré a entrenar con mi yo adulto ¿Vienes?― Negué con la cabeza; no podía decir palabra alguna. ―Bien, tú te lo pierdes.
Sonreí de lado al ver el entusiasmo de mi amigo Toon Link, al ver sus grandes ojos negros rebozar de alegría con la sola mención de una batalla o entrenamiento. Recordé que esa misma mirada aparece cuando conversa con Popo; si, creo que soy uno de los pocos que se percato de ello. Aunque, creo que Ness comenzó a sospechar que sus dos amigos tienen sentimientos por el otro; pero, aún así no diré nada. Si él quiere un consejo, con gusto le ayudaré.
―¿Lucas?― Oí su voz llamándome; sacudí la cabeza. No era momento para pensar cosas así; lo mire curioso, notando como se había aproximado a la salida.
―¿S-S-S-Si?
Su mano sostuvo la perilla de la puerta. ―No diré nada con respecto a tu confesión fallida, eso tenlo por seguro― Me guiñó un ojo. ―Ten suerte para la próxima.
―¡E-E-E-Espe-pera!― Cuanto intenté detenerlo, él ya se había ido. Mire por un tiempo la entrada de mi habitación hasta que me canse.
Dejé caer mi mano, al parecer había pretendido sujetarlo por la muñeca, y con la otra rasqué nerviosamente mi mejilla teñida de carmín; al parecer, TL se dio cuenta de la situación. Y muy amablemente, me deseo suerte, luego debería darle las gracias por tenerme confianza; volví a suspirar. Me sentía cansado y con un terrible dolor en la cabeza.
Me senté en mi cama, tomé una de los muchos almohadones y con uno de ellos me cubrí el rostro queriendo que la vergüenza desapareciera. Caí de espaldas sobre los acolchados y poco a poco quité la almohada de mi rostro, pero no me deshice de ella, solo la abracé con necesidad. Mi rostro seguía rojo, los latidos de mi corazón eran muy rápidos y sentía la necesidad de calmar mi respiración.
A fin de cuentas, esto no había salido como espera. No había podido decirle a Ness sobre mis sentimientos y todo por mi propia culpa.
Bueno…aun tenía el consuelo que mañana sería otro día y eso significaba que podría tener otra oportunidad para confesarme. ¡Tengo confianza en mí mismo! Podré hacerlo…
Podré decirle a Ness lo que siento por él.
Personalmente, este proyecto me gusto, aunque, no sea fanática del romanticismo, es mas, no me gusta ¿Pueden creerlo? Es mas, sigo creyendo que escribo mal las cosas románticas...Ahh, eso no importa.
Ojala les haya gustado y espero sus comentarios, de cualquier tipo, yo solo los espero. Nos vemos luego, cuídense y les mando muchos packs de besos, chiquitos. ;D (aunque, tengo el presentimiento que nadie los quiere. Bueh, ni modo)
Atte: Canciones de Cuna.
