-¡Amelia te estoy diciendo que es peligroso!

-¡No me importa,yo quiero hacerlo!

El joven rubio de ojos azul se se llevo la mano a la nuca,cerrando los ojos y suspirando
profundamente,aquella chica empezaba ha agotar su paciencia.

-Aún no tienes la suficiente preparación para dar la vuelta al mundo en avión...

-¿Que no la tengo...? -la chica,indignada le dio la espalda- idiota...tsk...

-Oh vamos no te enfades...si siempre te he apoyado en todo,pero es que el Electra no creo
que vaya a aguantar...

-¿Que tiene de malo mi avión? -alzó una ceja,algo molesta por el comentario del chico.

-S-si no le pasa nada...p-pero...

La chica sonrió,era evidente el de ojos azules temia por que le pasará algo,siendo a demás
quien le metió pajaritos en la cabeza a la muchacha diciendo que sería genial dar la
vuelta al mundo en avión,sabiendo que ella,cuando se proponia algo,era capaz de todo.

-Alfred...please...ten confianza en mi,no pasará nada~

-P-pero...-soltó un suspiro- esta bien...

Amelia riendo,se abalanzo sobre el rubio,abrazandole,con tanta fuerza que casi dejó a
Alfred sin aire.

-Ya,ya que me ahogas...ugh...

-Uy...-le soltó de inmediato- sorry,¿de verdad me dejas hacer la travesía? -le miró esperando
que la respuesta fuera un sí

-¡Pues no!
-¡Pero me habías dicho qu-!

-¡Era broma! te lo has tragado~ -rió el americano,sin compasión por la joven.

-¡Ahora te vas ha enterar!

La joven sin pensárselo dos veces se tiró encima del rubio,haciendo que este se cayera al
suelo y le empezó ha hacer cosquillas.

-¿Que,volverás ha hacerme alguna broma de ese tipo~?

-¡No,no! ¡Me rindo me rindo! -dijo entre risas- ¡para,para!

Amelia dejó ir una pequeña risa,acto seguido se levanto de encima del chico,poniendose en
pie de un salto

-Entonces empezaré a prepararlo todo,la semana que viene despego -le sonrió con dulzura-
¿sí?

-Esta bien,pero déjame que te ayude,¿en tendido?

-Como tu quieras~ -La chica extendió su brazo para ayudar al rubio,aún tirado en el
suelo.

-De acuerdo -le tomó la mano y se levanto,acto seguido le quito el casco de aviador a
la joven y le dio un pequeño beso en la cabeza.

-V-vale...-sin poder evitarlo,sus mejillas empezaron a volverse rosadas,por aquel repentino
beso.
-¡Venga vamos!

Alfred le tomó de nuevo la mano,echando a correr y la chica tras de él riendo.
A la semana,cuando ya tenian el avión apunto,el equipaje listo,una mulitud de gente
para verla despegar y a la muchacha dando saltos de alegrí se preguntaba se había
hecho bien accediendo a que saliera hacia tan peligrosa travesía,no sabía,si al ultimo
momento retiraría su respuesta,pero aunque lo hiciera,sería iútil,de sobras sabía que
Amelia salfría si o si.
La chica ya se había montado en el avión cuando Alfred se quiso dar centa,estaba a punto
de arrancar motores.

-Amelia...
-¿Yes...? -ladeo la cabeza- ¿que ocurre?

El chico se acerco a ella,subiéndose en el avión,y le dio un pequeño beso en los
labios,pillando a la chica por sorpresa.

-Ten cuidado...please...

-¡C-Claro que tendré cuidado! -una gran sonrisa se dibujo en sus rostro- ¡cuando vuelva
tenemos que celebrar la gran hazaña que estoy a punto de realizar!

-¡Por supuesto~! -le sonrió de la misma manera- ¡Serás la primera aviadora en cruzara el
Atlántico!

-Si...¿te acuerdas de la primera vez que probé un avión y lo que te dije?
-Como no...-rió para si mismo-

-Tan pronto como despegamos sabía que tendría que volar de ahora en adelante - dijeron
a la vez.

-Digamos que...fui picada por el gusanillo de la aviación~ -le sonrió- bueno...tendría que
empezar mi viaje ya Alfred...

-¿Cuantas veces tendré que decirte que para ti soy Al y ya esta?

-Bueno,pues Al~ -rió- Cuídate~

-Lo mismo te digo~

Amelia encendió motores,el chico se bajo del avión y se echo a tras,mirándola fijamente.
Cuando la chica despego,el americano simplemente se dedico a perseguir el avión hasta
que lo perdió de vista y le grito mientras agitaba los brazos para despedirla.

-¡Amelia Earhart,buen viaje!

Amelia partió de Los Ángeles hacia Florida el 21 de mayo de 1937.
El 1 de junio salieron de Miami, y su primer destino fue San Juan, Puerto Rico, de ahí
bordeó Sur América con rumbo a África y el Mar Rojo. Desde allí realizó un vuelo inédito
en la historia de la aviación,hacia Karachi en Pakistá és se dirigió rumbo a
Calcuta el 17 de sus destinos fueron Rangún,Bangkok,Singapur
y Bandung.

En Bandung en la isla de Indonesia ocurrieron algunos percances inesperados para ella.
Hubo retraso por el mal tiempo y a la aeronave se le realizaron reparaciones.
Pero lo más grave fue que Amelia enfermó de disentería. Partio de allí el 27 de junio hacia
Darwin en Australia, donde mandó parte del equipaje de regreso por que no serían necesarios —según ella—
en lo que restaba del viaje.

Mientras todo esto pasaba,Alfred de dejaba de leer una de las cartas que le envió Amelia.

Por favor debes saber que soy consciente de los peligros,quiero hacerlo porque lo deseo.
Las mujeres deben intentar hacer cosas como lo han hecho los hombres.
Cuando ellos fallaron sus intentos deben ser un reto para otros»

El chico estaba de los nervios,¡No tendría que haberla dejado
hacer semejante acto!,la culpa de que estuviera así era solo suya por haberle dado
permiso.

-Soy un idiota...si no la hubiera dejado...si no la hubiera dejado ahora estaría aquí,sin
ningún problema,junto a mi... -dijo mientras una lágrima caía sobre el papel.

La chica Llegó a Lae,Papúa Nueva Guinea el 29 de junio con 35.405 kilómetros volados y 11.265 por recorrer.
En ese lugar se comunicó con el Herald Tribune.
Partió a las 0:00 el 2 de ía pes al avión 2.000 galones de combustible
para 20 ó 21 horas de vuelo, pero la situación atmosférica no era la más favorable
pues estaba nuboso y con lluvias intermitentes.
En lo restante mantendría comunicación con el guardacosta estadounidense Itasca.
A las 7:20 reportó su posición a 232 kilómetros al suroeste de las Islas Nukumanu.
A las 8:00 hizo su último contacto de radio con Lae donde se les comunicó que el avión volaba en curso a la Isla Howland
a 3.657 metros de embargo no se supo el rumbo que siguia tras alcanzar Nukumanu.
Después hubo algunas transmisiones cortas al Itasca, pero no pudo averiguarse su posición porque
los mensajes eran demasiado breves.
A las 19:30 se recibió el siguiente reporte:

«KHAQQ llamando al estar encima de ustedes,pero no los veo...El combustible se está agotando...»
A las 20:14 el guardacosta recibió el último mensaje dando su posición;
hacia las 21:30 determinaron que el avión pudo haberse estrellado en el mar.

Cuando Alfred se enteró de esto,rápidamente mando todo lo que estaba en sus manos para poder encontrarla,hablo con el presidente Franklin autorizando la búsqueda con 9 barcos y 66 aviones,una operación que costo de 4 millones de dólares.
Alrededor del 18 de julio el rastreo fue abandonado en el área de Howland,pero Alfred nunca se rindió en
encontrarla.
Aún sabiendo que ya era inútil...

En su honor en un faro fue construido en 1938 en la isla el cual el de ojos azules cada 24 de Julio,
el cumpleaños de la chica,iba allí y ponía a los pies del faro un gran ramo de flores.

Desde entonces Alfred solía llevar puesta una chaqueta de aviador,en honor a Amelia Earhart.