Memphis, Tennessee
A las 13:40 de un viernes, del año 1932 nació en la casa de sus padres el primer hijo del matrimonio Masen. El niño nació sano, la matrona del pueblo había acudido en ayuda de sus ayudantes a socorrer a la joven madre. Había entrado en labor de parto a la madrugada del viernes. Elizabeth Masen tenía quince años cuando se caso con el granjero Edward Masen de dieciocho años. Se mudaron a Memphis donde compraron una pequeña granja, donde se dedicaron a plantar algodón y venderlo a las fábricas de la zona. No tenían dinero pero aun así eran felices, tres meses después estaban de fiesta, Elizabeth estaba esperando su primer hijo, fue un embarazo fácil. Pero al sexto mes Elizabeth no podía trabajar mas recolectando algodón con su esposo, lo que les llevo a tener que vender la finca y mudarse a la casa de la hermana de Edward. Ese hecho había dejado una marca en Edward ya que se veía incapacitado de mantener a sus hijos, por suerte encontró un empleo en una herrería cercana y pudieron irse a vivir en un apartamento y no incordiar a su hermana Caroline.
El llanto del bebe retumbo en toda la casa. Edward que se encontraba en el salón esperando a que acabaran, se levanto y entro sin pedir permiso a ver a su esposa y a su hijo. Ahí le esperaba la matrona con su hijo en brazos.
-Es un niño señor, un varón sano y con unos buenos pulmones – anuncio la buena mujer.
Se acerco a su pequeño y lo cogio en brazos. Era calido y olía realmente bien, su color de piel era como el de su madre y su poco cabello era de un bonito color rojo, como el de su madre. En ese momento el pequeño abrió los ojos y miro fijamente a su padre, Edward tuvo un escalofrío y la piel se le puso de gallina.
-Edward, dame a mi bebe, quiero verlo – dijo Elizabeth. Se acerco a su esposa no si antes volver a ver a su hijo que seguía mirándolo fijamente.
- ¿Cómo se llamara? – pregunto una ayudante.
- Edward – contesto Elizabeth – como mi padre y como mi esposo. Ese nombre significa mucho para mí.
Elizabeth sabia que su hijo iba a ser especial e iba a tener una vida exitosa desde que supo que estaba embarazada, tuvo ese hermoso presentimiento. Cuanta razón tenia la madre del pequeño.
San Antonio, Texas 1960
-Aquí tenemos a Edward and the diamons con su nueva canción Moon Scars – presento Johnny en ese pequeño teatro de San Antonio.
Edward salio vistiendo su traje azul, junto a su guitarra y sus permanentes gafas negras. Era su vida, su pasión, su mayor droga… la música, la misma que le daría y le robaría todo.
- Hola, soy Edward y los Diamons – su voz grave y hermosa se oyo y empezo su majestuosa actuación.
HOLAAAA! Esto es una idea loca, pero en verdad me apasiona el contry, el gospel y el rock 'n' roll y espero que a las que también les guste pasen y lean Es y un Edward&Bella, y esta inspirada en la vida de Johnny Cash y tendrán cosas en común. Un beso y lean. :*
