No había nada que Sam deseara más que convertirse en la esposa de Freddie Benson... pero la sorprendente noticia que recibió el día de su boda lo cambió todo. Salió corriendo de la iglesia y de la vida de su flamante marido... Después de aquello estaba convencida de que no volvería a verlo, pero cuatro años después, Sam necesitaba dinero y el multimillonario le hizo una sorprendente proposición: un millón de libras a cambio de que volviese con él... ¡y un millón más si le daba un hijo!
