Disclaimer: Naruto es propiedad de Masashi Kishimoto.


Este Drabble fue escrito para el reto: "Reto tu ingenio" en el grupo de Facebook "Escritoras y lectoras de FanFics". Escogí la tabla de "emociones" y este es el drabble del reto número tres: Arrepentimiento.


¿Perdón?

By Isi–san.

La pelirroja estaba acostada boca abajo en la rama gruesa de un árbol en el Bosque de la Muerte. Jugaba con un pedazo astillado de madera flojo del tronco mientras tenía el ceño fruncido y la boca levemente arrugada.

—¡Ah! ¡Estúpido pedazo de madera! —Gritó una vez despegó completamente la madera astillada del árbol, rompiéndola por la mitad. Gracias a eso su distracción momentánea se había acabado.

Se levantó, furiosa pisó fuerte la rama y se lanzó de ahí para caer de pie al suelo del bosque. Caminó mientras murmuraba cosas y pateaba piedras, ramas u otros objetos que estuvieran en su camino de regreso a la aldea.

—Minato, Minato, Minato. —Susurró con el ceño aún más fruncido.

Kushina estuvo recordando buena parte del día cómo Minato la había rescatado de unos ninja de Kumogakure quienes planeaban secuestrarla el día anterior y no podía sacarse la imagen del rubio sosteniéndola en sus brazos. Negaría el resto de su vida que se sonrojó levemente en ese momento, sin embargo, no dejaría de agradecer que él descubriera el rastro de sus cabellos pues realmente llegó a creer, conforme se acercaban más a los límites del País del Fuego, que nadie la encontraría y jamás volvería a Konoha.

Y cuando imaginaba su rescate otras escenas aparecían en su cabeza:

Kushina atacando a Minato por haber defendido a Fugaku en una de sus peleas.

Kushina jalándole el cabello a Minato para hacerlo molestar.

Kushina pateando a Minato por ser tan tranquilo.

Kushina sacándole la lengua a Minato cuando él llegaba antes en una de sus carreras a Ichiraku.

Kushina llamando "tonta niña debilucha" a Minato.

Y mientras más pensaba, más se daba cuenta que quizá había sido un poco grosera con Minato a lo largo de los años.

Y aún así él se había portado muy bien al ir en su rescate.

Ella lo había tratado como perro de la calle durante años, más que todo por la actitud tranquila que siempre tenía, y él venía a salvarla demostrándole que era mejor persona que ella. Y para rematar, ya no lo veía tan afeminado.

Quizá debía disculparse con él… Jamás —se dijo inmediatamente— Ya le agradecí, no tengo que decirle nada más.

Pero ella seguía sintiéndose mal, quería hacer algo para callar a su consciencia y sentir que había enmendado los errores del pasado. La pregunta era: ¿cómo?

Y en un momento una brillante idea cruzó su cabeza. Invitar a Minato a comer ramen no estaría nada mal, le dolería en la cartera pero estaba dispuesta a pagar el ramen de alguien más sólo por esa vez.

Aunque él y su caballerosidad arraigada no permitirían que Kushina, una mujer, pagara su comida. Ella bufó ante ese pensamiento.

Acto seguido, sonrió con un poco de maldad. Lo convencería así fuera a punta de golpes. Todo con tal de sacarse la terrible sensación de arrepentimiento que no la había dejado en paz todo el día.


Yo cada vez vengo con ideas más y más extrañas. Lalalá. De nuevo, tenía que expresar el arrepentimiento y me salió con un poco de ese humor extraño propio de mí.

¡Muchas gracias por leer!

Salu2!~~

Isi–san.