Disclaimer: Pondré sólo una vez el disclaimer, que me aburre mucho. A lo largo de todo este fic aparecerán gente, cosas, hechos y escenarios que reconoceréis (y en ese caso será todo de JK Rowling). Si algo aparece y no os suena de nada es que es mío.
Advertencia Problemas con el formato... he tenido que poner los diálogos a la manera inglesa. Además no me dejaba hacer ciertas cosas, como poner dos símbolos seguidos, por lo que muchas frases he tenido que modificarlas. Tampoco me dejaba poner comas delante de interrogaciones. Si encontrais cosas raras, es por eso, ok? A ver si lo arreglan de una vez. Me está sacando de quicio.
N/A ¡Os presento el fic de Amnesia! Aquí podréis leer sobre ciertos hechos ocurridos en el séptimo año de los Merodeadores (con todo lo que eso conlleva, jejje). Aún no se exactamente cuantos xapis tendràpero más o menos lo tengo todo pensado. No pretendo hacerlos muy largos, para subirlos más rápido, y los alternaré con mis otros fics empezados, que ya son muchos (lo sé... no me peguéis).
Como personaje principal tendremos a Sirius, aunque los Merodeadores no andarán muy lejos, y por supuesto Bellatrix tampoco. El caso es que este fic es una especie rara de Bella-Sirius, suavecito y eso... pero no adelantaré acontecimientos. ¡Empezad a leer!
Joanne Distte
I. La Bludger
Algunas voces comenzaban a llegarle desde lejos. Hablaban rápido, y no conseguía entenderlas. Aguzó el oído, pero sus esfuerzos no sirvieron de nada. Era todo como un murmullo ensordecedor sin pies ni cabeza.
'¿Sigue inconsciente?'
'Dejadle sitio.'
'¡Apartaos, apartaos!', exclamó una voz adulta, más autoritaria y bastante irritada.
Escuchó pasos, pero no conseguía reconocerlos. Parpadeó varias veces, pero la luz hizo que el dolor de cabeza empezase a martillear más fuerte aún su cerebro, y decidió volver a cerrarlos.
'¿Cómo esta, señora Pomfrey?', preguntó esta vez una voz femenina. Era una voz clara que sonaba bastante preocupada. Familiar, pero el enfermo no lograba situarla.
La pobre enfermera se intentaba abrir paso entre el montón de adolescentes que rodeaban la cama, inclinándose unos sobre otros y sin preocuparse por bajar la voz. La mayoría llevaban bufandas al cuello, rojas y amarillas, y varias banderas con un enorme león pintado en la tela, proclamando el equipo al que animaban. Otros, en menor número, aún vestían el uniforme y las protecciones propias de los jugadores de Quidditch.
'Ya basta. ¡Quiero que salgáis todos de aquí!', bramó la medimaga, apuntando determinante a la puerta de salida.
'Pero...'
'Todos fuera. ¡Black necesita reposo!'
Sirius Black, que por fin había logrado abrir los ojos sin que la cabeza le diese vueltas, se incorporó un poco, mirando estupefacto al grupo. Los estudiantes, protestando porque no querían irse, ni se habían dado cuenta de que su amigo había despertado.
'FUERA DE AQUÍ. ¡TODOS!'
Aún reticentes, los alumnos fueron saliendo uno a uno, mascullando entre dientes contra la enfermera y sus estrictas e incomprensibles normas.
James Potter, uno de los que iba vestido de jugador, se volvió antes de salir para mirar una última vez a la cama donde estaba su mejor amigo. Estaba preocupado, y furioso porque le echasen de la enfermería.
'¡Eh! Está...', empezó, cuando vio que Sirius lo miraba con los ojos como platos.
'¡Fuera!', chilló una última vez la señora Pomfrey, antes de cerrar la puerta en las narices de James, a quien se le escuchó soltar una palabrota.
Sirius, al ver a la enfermera volverse hacia él, respirando pesadamente y con la cara roja por el enfado, se encogió un poco en la cama, tapándose hasta la barbilla.
'¿Cómo se encuentra, señor Black?', preguntó la enfermera más calmada.
'B-bien', balbuceó.
'Tuvo una buena caída', explicó la señora Pomfrey, abriendo armarios y sacando frascos. Se acercó a la cama con varios vasos llenos por líquidos extraños, con toda la intención de que Sirius se los bebiese.'Venga, tómeselos todos.'
Sirius miró con desconfianza los líquidos, olisqueando disimuladamente el primero.
'No tengo todo el día, señor Black. Ni que fuese un crío', avisó la enfermera, lanzando una mirada reprobatoria al alumno, al ver que éste no se decidía.
Hundió la lengua en el líquido verdoso tímidamente. Sabía fatal y la apartó con una mueca de asco.
'De un trago', dijo la señora Pomfrey, avanzando hasta la puerta.
Sirius se tapó la nariz y se lo bebió, llevándose inmediatamente una mano a la boca para no vomitarlo después. Al mirar de reojo el par de vasos que aún le faltaban tuvo que hacer verdaderos esfuerzos para contener las náuseas.
'Le sentará bien', aseguró la señora Pomfrey con una sonrisa.
'Perdone ¿pero quién...?'
Pero la enfermera salió y no le dejó terminar la pregunta. Sirius la escuchó hablar con alguien al otro lado de la puerta pero, a pesar de que ésta estaba entreabierta, no distinguió ni una sola de las palabras.
Aprovechando que no podía verle ahora, recorrió con los ojos la habitación, implorando que hubiese cerca alguna maceta en la que echar los asquerosos líquidos, pero no hubo suerte. Tal vez las había quitado para que los alumnos no hiciesen precisamente lo que él pretendía hacer.
'¡Ey, Padfoot!', exclamó James, entrando de pronto en la enfermería, seguido por dos chicos de su edad.
La señora Pomfrey entrecerró los ojos, mirándolo con severidad. James se apresuró a disculparse y se dirigió a grandes zancadas hasta quedar al lado de su amigo.
Sirius pudo distinguir a los dos que le seguían, mucho más calmados. Uno, el que respondía al nombre de Remus Lupin, era muy delgado, pero su rostro agradable y sus ojos y sonrisa cálidos compensaban ese permanente apariencia de enfermedad. El otro era bajo y estaba algo relleno, y trotaba de un lado para otro, sin estarse quieto.
'¡Para ya, Wormtail, vas a marear a Padfoot!', protestó James, haciendo que el chico que detuviese de inmediato.
Sirius los miró a los tres con una expresión un tanto extraña.
'Bueno ¿y cómo estás?', lepreguntó James, dándole una palmada en el hombro.
'No tiene mala pinta', replicó Remus, mirando con curiosidad a su amigo enfermo.
'Siempre he dicho que tiene la cabeza muy dura', contestó riendo de nuevo James, pero se calló en seguida al ver que Sirius no abría la boca para contestar.
Sorprendentemente, éste los miraba boquiabierto, como si no entendiese nada.
'¿Seguro que estás bien?', preguntó bajando la voz Remus, ahora más preocupado.
'Es que aún no se ha tomado las pociones', explicó la señora Pomfrey, sin levantar la vista, pues estaba organizando un poco su mesa.
'Ya decía yo que tenías cara de tonto', repuso James, alzando uno de los dos vasos. Se lo tendió a Sirius sonriendo. '¿Y a qué esperas? Bébetelo todo.'
Pero Sirius no movió ni un músculo para coger el vaso que le tendía James. Éste se giró entonces hacia la enfermera, mosqueado.
'¿Seguro que no le pasa nada?', preguntó, señalando a Sirius con el índice.
'Le aseguro que está perfectamente y que...', empezó a decir la señora Pomfrey.
'¿Quiénes sois?'
La enfermera se calló, y todos los presentes se volvieron muy despacio para mirar al autor de la pregunta: Sirius.
'Deja la broma, Padfoot.'
'¿Qué broma? No sé quienes sois.'
'Pero cómo no vas a saber quienes... ¿le ha dado algo con efector secundarios?', recriminó James a la enfermera, que miraba boquiabierta a su paciente.
'¡Claro que no!', declaró muy ofendida y luego añadió, algo más dubitativa. 'Podría ser que tuviese un caso de amnesia...'
'Amnesia... ¿Cómo que amnesia? Sirius no puede tener amnesia'
'El señor Black se ha dado un golpe muy fuerte en la cabeza, señor Potter.'
'Más bien le han dado', corrigió entre dientes el aludido.
'No son casos muy comunes, pero son posibles. Tendré que hacer unas pruebas para ver...'
La señora Pomfrey siguió con su cháchara, explicando las pruebas que haría a Sirius, quien debía quedarse a dormir en la enfermería.
James, Remus y Peter no la escuchaban. Se miraban entre ellos y de vez en cuando miraban a Sirius, que ahora abría la boca mientras la enfermera se la examinaba con la varita.
'¿Amnesia?', repitió James como un autómata.
'Sí, señor Potter, amnesia', aseguró la medimaga. 'Creo que tenía unas curas por aquí...'
La señora Pomfrey desapareció en otra habitación que conectaba con la enfermería, dejando a los alumnos solos.
'¿Entonces no sabes quiénes somos?'
Sirius negó con la cabeza.
'Por eso lo he preguntado.'
'¿No lo sabes?'
'No.'
James respiró hondo, intercambiando una rápida mirada con Remus, que no sabía qué decir. Peter observaba todo también en silencio, al lado del licántropo.
'Si esto es una de tus bromas no tiene ninguna gracia, Sirius', dijo James, muy serio.
'No es ninguna broma.'
'¿Qué recuerdas?', interrumpió Remus, acercándose a Sirius.
Éste pensó durante unos segundos, apartándose un mechón de la cara.
'Recuerdo viento', dijo.
'Viento. ¿COMO PUEDES RECORDAR "VIENTO"?', exclamó James, desesperado.
'Recuerdo viento', repitió Sirius para reafirmarse. Estaba completamente seguro de eso. Si intenta recordar algo más sentía un espacio enorme blanco en su mente, pero el viento lo recordaba con claridad.
'Cálmate, Prongs. Puede que se refiera a la escoba. Hoy hacía mucho viento', expuso Remus, pensativo, y luego se inclinó para hablar con Sirius. 'En el partido de Quidditch de esta mañana uno de los jugadores de Slytherin-'
'¿Por qué no dices Snape? Sabes que fue él', bramó James.
'Bien, pues Snape...'
'Al que voy a matar', masculló James.
'Snape te lanzó una bludger que te dio en la cabeza y te dejó inconsciente. Caíste desde más de veinte metros de altura.'
'Lo mato, lo mato...', mascullaba James, como una letanía, apretando con fuerza los puños.
'Ah', dijo Sirius, al terminar Remus la explicación. '¿Y qué es el Quidditch?'
'¡Oh, dios!', soltó James, desplomándose en una silla al escuchar la pregunta. Peter le dio unas palmaditas en la espalda, intentando reconfortarlo.
La señora Pomfrey entró en ese momento, cargando con varios vasos. Remus fue a ayudarla y lo dejaron todo en la mesa.
'¿Más?'
'Por supuesto, señor Black. Está noche dormirá usted aquí para recuperarse, mientras intento buscar una cura. Ahora iré a hablar con el director para informarle de la situación. Mientras os quedareis vosotros con él ¿entendido? Y os prohibo que digáis ni una palabra de lo que le ocurre a nadie ¿de acuerdo?'
Los tres asintieron, y esperaron a que la medimaga hubiese salido para seguir con su conversación.
'¿No vamos a poder decir nada?', preguntó James. '¡Pero si en cuanto entremos en la Sala Común nos van a acribillar a preguntas!'
'Nos inventaremos algo', sugirió Peter, echando breves miradas a Sirius, que no se enteraba de nada.
'Simplemente tenemos que decir que pasará unos días en la enfermería, que no le ocurre nada', dijo Remus.
'¡Voy a tener que mentir a Lily! Como se entere me va a matar', gimoteó James, a lo que Peter rió y Remus esbozó una ligera sonrisa.
'Sólo tendrás que omitir parte de la verdad.'
'Como si fuese tan fácil...'
'¿Puedo saber de quién habláis?', interrumpió Sirius, cansado de sentirse ignorado.
'De Lily, mi novia', explicó escuetamente James, mirándolo sin saber muy bien como tratarle. Seguía siendo Sirius, pero... bueno, no era Sirius.
'Ah.'
'Te tienes que tomar las pociones', recordó Remus, señalando a los vasos.
Sirius puso una mueca de asco, dispuesto a retrasar esa tortura cuanto pudiese.
'Bueno... ¿y quiénes sois entonces?'
Los aludidos se miraron entre ellos, hasta que James dio un paso adelante.
'James Potter.'
'Encantado', replicó Sirius, educadamente. 'Yo soy... eh...'
'Sirius Black', le ayudó Remus, sonriendo.
'Ah, vale. Pues soy Sirius Black.'
'Yo Remus Lupin y éste Peter Pettigrew.'
Sirius los miró uno a uno, murmurando algo silenciosamente, como si intentase quedarse con sus nombres.
'¿Alguna pregunta más?', propuso James, más animado ya.
'Sí. ¿De qué nos conocemos?'
James soltó una carcajada, acercando una silla al lado de la cama y sentándose en ella. Peter se sentó a los pies de la cama, y Remus se quedó de pie, balanceándose de un pie a otro, mirando todo con mucha curiosidad.
'Pues es una historia muy larga...'
N/A: En fin, sé que este xapi no es nada del otro mundo... pero weno, pa' empezar era necesario. Ya tenemos al pobre Sirius desmemoriado. Afortunadamente sus amigos le han contado por encima su vida. Aún así, si os dais cuenta es muy manejable. No tiene ninguna idea, ningún sentimiento sobre la gente y el mundo que le rodea, mientras que los demás sí los tienen sobre él. Si os fijáis, podéis ver que este es no es el Sirius "inocentón" (o tonto perdido, según se vea ) de mis otros fics. Me he basado más en el quinto libro, donde son todos muchos más serios y arrogantes (y odiosos). Además, hay k tener en cuenta que no puedo poner a Sirius idiota si Bellatrix va a intervenir bastante. No pegaría... y Bella seguramente se lanzaría a su cuello xD Me he dado cuenta de que no pega que Snape esté en Quidditch, pero la verdad es que ese hecho no tiene la mínima importancia para la historia.
Espero que os haya gustado. Lo escribí en una tarde Es que estaba inspirada jeje. Ya me podía pasar más a menudo.
Para los que no se hayan leído "El beso de Judas" no sabrán que dije que voy a empezar a escribir éste en plan seguido, porque con el de Rec. Fot. tardo demasiado con cada xapi. Así que en RF seguiré a mi ritmo lento y subiré este a ritmo rápido, para que podais leer algo de mis prexiosos Marauders.
Dejad reviews, plis, que se necesitan opiniones. ¿Qué os ha parecido? Personalidades, forma de escribir... ¿qué esperáis de este fic¿Comedia? La habràeso no puede faltar. Necesito críticas constructivas porque si no os ha gustado el estilo del fic puedo volver reescribir el xapi 1 ahora que estoy a tiempo.
Un besazo! Joanne
