U N O
La mejor navidad del mundo
DracoxHarry
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Era su primera navidad juntos, la primera navidad que pasarían juntos. No querían estar con nadie más que con el otro. Sólo querían estar ellos dos pasando tranquilamente su primera navidad. Draco rechazó la invitación de su familia de ir a pasar la navidad con ellos, mintió diciendo que estaba muy enfermo y que estaba en la enfermería esperando recuperarse. Sólo con Harry, con su Harry quería pasar la navidad.
Harry por su parte le dijo a sus amigos que para navidad Snape lo había castigado por insultarlo y como castigo lo obligó a limpiar y organizar su oficina sin magia, y destripar unos sapos muertos también sin magia; durante todas las vacaciones de navidad. Sus amigos quisieron acompañarlo y cancelar las vacaciones navideñas en Grimmauld Place con Sirius, Remus y la familia de Ron, pero Harry insistió en que vayan sin él, y hasta les dio cincuenta galleons a cada uno para que lo dejen solo y se diviertan sin pensar en él.
Nochebuena. Nueve de la noche. Harry y Draco habían ido a pasar la nochebuena y navidad a una cabaña en las afueras de Hogsmeade que Lucius había comprado a su hijo, casi en el límite con el otro pueblo. La cabaña era de madera con techo a dos aguas. En la puerta -de madera también- había una corona navideña. Era hermoso ver la cabaña en medio de un gran y majestuoso bosque nevado. Afuera hacía un frío infernal, como cinco grados bajo cero. Pero ellos dos estaban cálidos adentro de la acogedora cabaña, calentándose con el fuego que venía del hogar, Por dentro estaba todo decorado con guirnaldas navideñas, y un gran árbol de navidad en medio de la sala decorado con todo tipo de adornos.
-Nuestra primera navidad juntos. -Dijo Draco dándole un tierno beso a Harry.
-Estoy muy feliz por eso, será inolvidable. -Respondió Harry.
Harry había encargado a Dobby un delicioso pavo asado acompañado con papas al horno. Lo único que tuvo que hacer fue con un movimiento de varita poner la mesa y traer el pavo de Hogwarts hacia la cabaña.
-Ya está la cena. -Dijo Harry. -La hice yo. -Mintió, lo había preparado todo Dobby. Harry quería cocinar, pero no había tenido tiempo ya que pasó mucho tiempo inventando alguna excusa para decirle a sus amigos e intentando convencerlos de que no se quedaran.
Draco se dirigió al comedor y se sentó en una silla de brillosa madera con tapizados color bordó de terciopelo. Harry también se sentó y unos simples movimientos de varita sirvió una porción a Draco, otra para él. Sirvió un poco de vino a Draco y otro poco para él.
-Oh Harry, está deliciosa esta comida. -Dijo Draco.
-Me alegro que te guste. -Dijo Harry.
Ambos se comieron aquel delicioso pavo con papas, cuando terminaron Harry intentó levantar la mesa pero Draco lo detuvo.
-Ahora me toca a mí, sería un monstruo si no te ayudo. -Dijo el rubio mientras levantaba la mesa por Harry.
-Ahora déjame ir por el postre. -Harry se dirigió a la cocina a buscar el postre: Un pastel de chocolate relleno de helado de frutilla. Se apareció en la cocina con una bandeja de plata en la mano con el pastel encima y la colocó sobre la mesa. Luego regresó a la cocina otra vez para traer unos platitos y cucharitas. Finalmente se sentó y sirvió una rebanada a Draco y otra para él.
-¿En serio hiciste esto? -Preguntó Draco.
-Sí... ¿Qué tal está? -Dijo Harry.
-Está delicioso...
Faltaban pocos minutos para las doce.. A las doce en punto comenzaría la navidad. Cuando ambos terminaron el postre, Harry levantó con magia toda la mesa y trajo también con su varita unas copas de cristal muy finas y una botella de champagne, el mejor de toda Inglaterra. Draco ayudó a Harry a destapar la botella y mientras a servir un poco en cada copa para brindar por el comienzo de la navidad.
El reloj dio las doce en punto. Ambos tomaron sus copas y brindaron, cada uno brindó por el otro, brindaron por el amor que se tenían.
-Feliz navidad. -Dijo Harry mientras bebía champagne.
-Feliz navidad. -Dijo Draco acercándose más a Harry desde donde estaba sentado y dándole un beso.
Ambos continuaron bebiendo champagne hasta que se les terminó la botella. No estaban completamente ebrios, pero algo alcoholizados estaban.
-Oye Draco... ¿Por qué no vas al árbol de navidad? Hay un regalo especial para ti.
-¿En serio? No debiste haberte molestado, yo también te hice un regalo, está debajo del árbol.
Los dos se dirigieron al árbol de navidad. El regalo para Draco estaba envuelto en una caja blanca con dibujitos de muñecos de jengibre, a su vez estaba envuelta en papel de regalo brillante color rojo con un moño dorado. El regalo era un sweater de lana color verde musgo.
-Gracias Harry, es hermoso. -Dijo el rubio viendo su sweater.
Harry desenvolvió su regalo que estaba envuelto en una caja amarillo pastel lisa y a su vez envuelta en papel de regalo dorado con un moño azul. El regalo que Draco le había dado era una bata celeste para ponerse al salir de la cama, con unas pantuflas haciendo juego.
-Muchas gracias Draco, gracias. -Dijo Harry feliz y dándole un beso.
-Te amo Harry.
-Y yo también Draco...
-Pues... aquellas palabras tuyas tan tiernas son el mejor regalo de navidad que uno puede llegar a recibir.
Ambos comenzaron a besarse más apasionadamente. Draco atraía el cuerpo de Harry más y más cerca del suyo mientras hacía cosquillas en el cuello de Harry. Harry mientras comenzaba a besar el cuello de Draco, a besarlo suave y dulcemente. Draco deslizaba sus manos por debajo de la ropa abrigada de Harry, acariciaba su piel con gran deseo, finalmente lo despojó de toda su ropa y se le abalanzó encima comenzando a besar primero su boca, luego su cuello, después con su boca descendió más hacia su pecho, luego más y más hacia su cintura y allí se detuvo por un momento. Recorriendo todo el cuerpo de su novio con su lengua y labios. Acariciando su piel con sus manos. Pegando todo su cuerpo contra el suyo. Haciéndole sentir su gran excitación y pegándose aun más.
Harry mientras acariciaba con sus manos el cuello de Draco, acariciaba también su espalda por debajo de su ropa, acariciaba la suave y sensual piel de su espalda. Con una de sus manos mientras acariciaba y a la vez apretaba sus glúteos mientras Draco le decía que no se detenga. Harry se enderezó por un momento y muy suavemente fue quitándole la ropa a Draco, quedando también desnudo. Y comenzó a besar su cuello, su pecho, su cintura... mientras con sus manos trataba de masturbarlo. Draco sentía tanto placer que ya no podía soportarlo. Finalmente se vino encima del abdomen de Harry. Harry lo disfrutó tanto que se acercó al cuerpo Draco y comenzó a recorrer todo su cuello y hombros con su boca.
Draco hizo recostar a Harry sobre el sofá y se sentó encima de él, acariciando toda su piel con sus manos. Luego se dispuso a masturbarlo tal como Harry había hecho con él, pero sólo por un momento, luego se dispusieron uno dentro del otro y el morocho se vino dentro de Draco, y él feliz y excitado gozaba de placer. Ambos volvieron a rozar entre sí sus bocas, recorrieron cada parte de sus cuerpos con sus bocas y finalmente Draco se vino nuevamente pero esta vez dentro de Harry.
Luego de aquel momento especial, entre suaves y tiernos besos y caricias, se quedaron dormidos pegados y abrazaditos frente al fuego del hogar. Cubiertos con una frazada abrigada que Draco hizo aparecer con magia.
-Fue la mejor navidad de mi vida. -Dijo Harry a la mañana siguiente.
-Para mí también... -Dijo Draco dándole un dulce beso en la frente a Harry.
-Te amo...
-Y yo también...
Ambos habían pasado la mejor navidad de sus vidas. Era su primera navidad juntos como pareja. Llevaban juntos casi un año, aún no habían pasado su primera navidad hasta ese día. Y como primera navidad desde que comenzaron su relación... fue la mejor que habían tenido.
