Locura

Y allí estaba él, sentado en la mesa de té, a media noche, solo y sumido en sus pensamientos.

Él estaba loco, pero su locura estaba cambiando.

Antes iba y preguntaba a todo mundo "¿en que se parece un cuervo a un escritorio?"

Participaba en las guerras que se hacían en la fiesta de té, que empezaba la Libre de Marzo.

Siempre pensaba en disparates y decía cosas sin sentido.

Los colores le daban locas ideas.

Festejaba su no cumpleaños.

Y un día, todo cambio: El día en que ella apareció.

Pero ella se fue…

Ahora siempre pensaba en ella

El azul le recordaba a ella

Quería estar junto a ella

Su mundo era ella

Estaba loco por ella

El sombrerero, con un deje de melancolía en su voz, murmuró:

-…Alicia… ¿Algún día volverás?

Y se quedó sin respuesta, pero él creía firmemente que la volvería a ver, tarde o temprano. La esperaría hasta el fin de sus días, la esperaría a ella, a Alicia, su querida Alicia.