El Problema:

Ricardo Arjona.

Le doy gracias a Dios por haberte conocido. Pero hay un pequeño problema: ahora no se cómo quitarte de mi vida. Siempre sueño con que un día vendrás, y me dirás toda la verdad. Que me dirás cuánto me amas, y cuánto sientes haberme lastimado. Siempre sueño con ese momento que nunca viene.

El problema no fue hallarte.

El problema es olvidarte.

El problema no es tu ausencia.

El problema es que te espero.

No me molesta que otros te tengan. Lo que sí me molesta es que tu no les digas. Yo veo en tus ojos que me amas como yo te amo. Pero por alguna razón, oprimes esos sentimientos, y me dejas a mí sin palabras. Yo sé que quieres decirlo pero¿por qué no lo haces?

El problema no es problema.

El problema es que me duele.

EL problema no es que mientas.

El problema es que te creo.

¿Qué es lo que te hace dañarme, dejarme con el corazón en mil pedazos¿Qué no sabes que así, lo único que consigues es te ame más? Ese carácter que tienes...las decisiones que tomas. Es lo que me gusta de ti. Por eso reflexiono que no puedo obligarte a amarme, porque es justamente eso lo que me atrae. Que sin importar lo que pase alrededor tuyo, ignoras todo. Incluso a mí...

El problema no es que juegues.

El problema es que es conmigo.

Si me gustaste por ser libre,

¿quién soy yo para cambiarte?

¿Qué puedo hacer para que te des cuenta, para que me comprendas? Me encanta amarte, es lo mejor que me a pasado. ¿Pero no te has dado cuenta lo mucho que me hieres cuando me pides consejos y ayuda? Y algo que no puedo creer es que te diga "Ten confianza en ti misma. Sé que le gustaras.", por que así, a demás de ayudarte y sacarte esa sonrisa que me reconforta, me lastimo a mi mismo. ¿No ves lo que hago con tal de que seas feliz?

Si me quede queriendo solo,

¿cómo hacer para obligarte?

El problema no es quererte.

Es que tu no sientas lo mismo.

No sé qué debo hacer para alejarte de mis pensamientos, si supuestamente nunca entraste en ellos. No sé como alejarme de ti sin ser lastimado.

¿Cómo deshacerme de ti,

si no te tengo?

¿Cómo alejarme de ti,

si estas tan lejos?

¿Qué debo hacer para aliviar mis penas, sin dejarme llevar por mis instintos y besarte con las ganas que siempre tuve? No sé como le puedo encontrar una solución a algo que no tiene solución alguna, más que decirte la verdad.

¿Cómo encontrarle una pestaña

a lo que nunca tuvo ojos?

¿Cómo encontrarle plataformas

a lo que siempre fue un barranco?

¿Cómo encontrar en la alacena

los besos que no me diste?

A veces desearía que no me miraras, que no me sonrieras, que no me hablaras. Porque cada gesto tuyo me vuelve loco, me da ganas de gritar de felicidad, de gritarte "¡Te amo!". Justamente por eso yo te miro, te sonrío y te hablo. Así, cada día me enamoro más de ti.

¿Cómo deshacerme de ti,

si no te tengo?

¿Cómo alejarme de ti,

si estas tan lejos?

Es que el problema no es cambiarte.

El problema es que no quiero.

Y cuando peleo contigo...Dios, no sabes qué mal la paso. No sabes que después de cada berrinche viene una noche en vela llena de preguntas, cómo "¿Qué hice?" o "¡No puedo creer que la haya herido de esa forma!" Sí. Luego de nuestras discusiones, para mí, un segundo es una eternidad.

El problema no es que duela.

El problema es que me gusta.

El problema no es el daño.

El problema son las huellas.

Hay veces que te miro, y tan solo con esa mirada te pido que me lo digas. Que me digas que me amas, que me deseas, que yo también te vuelvo loca. Que sin importar cuánto podamos lastimarnos, nos querremos por siempre.

El problema no es lo que haces.

El problema es que lo olvido.

El problema no es que digas.

El problema es lo que callas.

¿Y cómo deshacerme de ti,

si no te tengo?

¿Cómo alejarme de ti,

si estas tan lejos?

Le doy gracias a Dios por haberte conocido. Pero hay un pequeño problema: ahora no se cómo quitarte de mi vida. Yo veo en tus ojos que me amas como yo te amo. Sé que quieres decirlo pero¿por qué no lo haces?

El problema no fue hallarte.

El problema es olvidarte.

El problema no es que mientas.

El problema es que te creo.

El problema no es cambiarte.

El problema es que no quiero.

Con gusto te diría lo que siento, pero...¿y si me rechazas? No lo soportaría. No podría vivir sabiendo que nunca te tendré.

Por favor, deja de mantenerme expectante¡dímelo! Deja de jugar conmigo. Dime que me amas.

El problema no es quererte.

Es que tu no sientas lo mismo.

El problemas no es que juegues.

El problema es que es conmigo.

Mis pensamientos fueron interrumpidos por una sonora carcajada. Era ella. Entró a la Sala Común riendo con mi hermana. Ambas se dirigían a las escaleras que llevaban a las habitaciones de las chicas.

Ya no aguantaba más. Debía confesárselo todo. Por alguna razón, sentía que esa era mi oportunidad.

¡Hermione- la llamé desde el otro lado de la Sala. Ella se volteó y me sonrió.

¿Qué pasa, Ron-

Y-yo...- tartamudeé. �¿Por qué me pongo así de nervioso¿Acaso no puedo ser menos obvio! –Yo quería...eh...quería...-

¿Qué querías- cuestionó ella riendo

Necesito hablar contigo- conseguí decir sintiendo como mis orejas se ponían coloradas.

¿Es muy importante- me preguntó Hermione mirando a Ginny –Porque nosotras íbamos a...-

¡Sí- la interrumpí. No sé de dónde demonios saqué el valor suficiente para hacer eso... –Es muy importante.-

Mi amiga suspiró, y se despidió de Ginny. Cuando la vi caminando a paso decidido hacia mí me di cuenta de lo que estaba a punto de hacer.